domingo, 11 de agosto de 2019

El creer le puede a la duda

En Sueño Profético hablaban de creer, de no creer y de la duda. Decían:

El creer en la Palabra de Dios te quita muchas dudas que el que no cree las formas y hace duda donde no hay base para la duda. El creer te acerca a saber y no te retiras, porque pronto ves lo que el creer te decía. El creer en lo material te puede dar ganancias o retirarte del peligro. Según tu vida hagas, así estará el creer contigo.

Dijo uno:

Yo vi una vez a un hombre llegar a una venta que yo visitaba a diario por razones familiares. Fue llegar este hombre y decir estas palabras:

   –¿Si puede me contestará a la pregunta que le haga?

Soltó el ventero la jarra que llevaba y esta fue la respuesta:

   –Si su pregunta es de Paz, prepárese a oír respuesta, pero si es de ofender al que en mi casa entra y yo me siento con Él a la mesa, no siga hablando y salga por la puerta que ha entrado.

Ya siguió hablando el que creía pero tenía dudas y quería quitárselas y seguir a los Discípulos para que éstos del Maestro le hablaran, porque él digno no se encontraba por las dudas que tenía. Pero creía y buscaba. Le pidió al ventero un vaso de agua y también el favor de que el vaso no lo limpiara del último Discípulo que bebió.

Ya dijo el ventero:

   –Tú quieres quitarte las dudas porque crees y buscas. Buscas la verdad. Vente mañana, que yo pararé a ellos para que ellos te digan que con ellos te vayas. ¿Es esto lo que tú quieres?

No pudo contestar porque algo le apretaba la garganta.

Desperté, oí:
Este hombre creía, pero la duda le ponía escenas que lo atormentaban.

Decidió quitarlas buscando el sitio que el Maestro y Discípulos visitaban.

No faltó su presencia a la hora que el ventero le dijo y que ya estaban sentados los Discípulos esperando al Maestro.

Cuando lo vieron, no dio tiempo a decir palabras porque detrás iba el Maestro.

Ya, sus palabras quedaron como grano en el granero, esperando hacer servicio en otro momento.

Todos oyeron:

El creer le puede a la duda. Pero ya el creer no te hace falta, porque el Amor que por mi Padre sientes, hace que Me busques a Mí. Si el ventero no cree, no te habla así. Tienes que creer para seguir mis Pasos, y cuando te llenes de Amor de las Palabras que mi Padre dice en Mí, ya te ofende la duda. El querer a mis Discípulos ha sido Llamarme a Mí. El que mis Palabras no cree, no Me busca, y a mis Discípulos desprecia. El que cree mis Palabras no pierde mi Reino, porque olvida el creer y vive Amor Eterno”.


***

Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C7

2 comentarios:

  1. Si la creencia me abre las puertas de la Gloria ya las puedo dar por abiertas de par en par porque aquí creo yo firmemente que está la Sagrada Palabra de Dios.

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  2. No me deja el dispositivo cambiar mi usuario pero soy Lina Piñar seguidora de Anita porque en Anita hablaba Dios.

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