jueves, 31 de diciembre de 2020

Cultura del espíritu

 En Sueño Profético hablaban de inteligencia en lo material y de torpeza en lo del espíritu.

Ponían las dos culturas, y en las dos te comparaban: una, corta y sucia. La Eterna te la nombraban con limpieza y sin fin, Vida que nunca se acaba.

La Cultura del espíritu más la practica el que cultura material le falta.

En la Cultura del espíritu, la Luz Divina son las letras, y esta misma Luz te hace que leas párrafos, que luego estos pasan a tu lengua, para que Cultura otros también tengan.

Esta Luz Divina, cuando se presenta, queda sorprendido el culto de la Tierra.

Dijo uno:

El intentar pillar mentira que fuera, si esto es de Dios, ¿qué pueden pillar en estas Sentencias?

Sería mucho más fácil que la tortuga a la liebre cogiera en una carrera.

Esto es una comparación para que el culto algo entienda.

Al rudo del campo nada le compares. El lee letreros de algo que llega a su inteligencia, y verás que a Dios en todo Lo nombra.

Desperté, oí:

Lo nombra en el pedir, que lo que pide es para otro.

Lo nombra en dar las gracias cuando ve el año bueno.

Lo nombra cuando ve a los animales, cada uno alimentado de lo que nadie da cuido ni tan poco lo han sembrado.

Estos hombres, queriendo a Dios la mayoría, y muy escasos no queriéndolo, tienen siempre una oración dentro de su pensamiento:

¡Señor, manda agua!

¡Señor, pon las nubes en el Cielo!

¡Señor, detén el agua hasta que el trigo esté en el granero!

De esta petición se aprovecha el que no cree en el Cielo.

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Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C4

miércoles, 30 de diciembre de 2020

La Iluminación de Dios

En Sueño Profético decían:

Dios te ilumina si tú quieres ir por su Camino. Si tú no quieres, Él te deja en la oscuridad y aunque el hombre ponga luz, tú oscuridad verás.

La Iluminación de Dios nadie la puede mandar, y el que menos la comprenda, más lejos de Dios está.

Esta Luz te hace que veas lo que aún allí no está; y otras veces estando allí, para ti ves que no está.

Dijo uno:

La Iluminación de Dios es difícil de explicar, es algo que en ti se entra y ya te hace cambiar, pero viene la contrapartida: ¿Cómo poder explicar aquello que en ti se entra, sin palabras, sin visión y sin nada que tú puedas presentar? Esta Luz, al hombre le hace falta para creer en esta Vida que tan poco de ella hablan.

Si creyeran, buscarían sin descanso donde alguien les dijera: ¡que hay otra Vida y a mí Dios me hace verla!

Creer y no buscar, no hay quien esto lo detenga. Y ya si te dicen donde Dios da su Enseñanza para que el hombre tenga un Dios Vivo –sin contar tiempos– y no acudir, guárdate las palabras si quisieras quedar bien. Y el día que la muerte te llegue, cuenta que llegará sin aviso, día ni hora.

Desperté, oí:

La persona que Dios ilumina puede dar Luz al que quiera.

Decían, que cuando Jesús mandaba a los Discípulos les decía:

“No creed que conocen que sois mis Discípulos por las Palabras. Os conocen más por la Luz que llevan mis Palabras. Porque no os faltarán respuestas con fuerza cuando la oscuridad del espíritu del mal quiera oscurecer mis Palabras, que mi Padre dice en Mí”.

“Pedid Iluminación para que veáis siempre el cieno en el camino oscuro, y en la claridad el engaño del hipócrita y el fariseo”.

“Si lleváis Iluminación lo dirán vuestros hechos”.

Estas Palabras las dice Dios Hombre a los Discípulos y hoy las repite el Cielo.

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Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C7 

martes, 29 de diciembre de 2020

Iluminación y Guía

En Sueño Profético decían:

Por muchos que ahí quieran ir en contra del Elegido, muchos más hay Aquí, en la Gloria, que ruegan por él.

Por mucha fuerza que Dios les permita, quedarán como hoja seca en medio del vendaval, que jamás llegará al árbol.

¡Cómo no pensará el hombre, que de no ser de Aquí la Iluminación y Guía, tantos años, Esto ya estaría acabado por el saber del hombre y la maldad del pecado!

Al hombre lo frena en su interior el saber que hay Elegidos viviendo un Mando, que se ve que no es de la Tierra por la seguridad con la que mueve los pies donde ya antes le han dicho “Ve”.

Dijo uno:

Este “Ve” de Dios,

no tiene noche ni día.

Puede empezar en la noche

y terminar en el día.

O en el día hacer petición

y la noche dar alegría

de aquella continuación.

Con estas Enseñanzas, ¡cuánto mal se hubiera quitado! Y en muchos no hubiera llegado la fuerza del pecado, que cada día se está creciendo más con la defensa: “eso no es malo”.

Hablar de Dios, de su Existencia y de su Poder, es freno que hay que enseñarlo.

Desperté, oí:

A un bien,

siempre se opondrá el mal,

para derrotar lo bien hecho.

Pero si el bien es de Dios,

el hombre ya pierde el tiempo.

Paso que da el que Dios manda,

sabiéndolo o sin saberlo,

no puede quedar en fallo.

Si el Instrumento está siempre:

“Señor, yo tu Mando lo hago

entendiéndolo y no entendiéndolo.

El día que no lo entiendo,

es por mí, no por el Cielo”.

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Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C9

lunes, 28 de diciembre de 2020

¡Todo es sentir a Dios!

En Sueño Profético hablaban del Amor Divino, de la Fuerza que junta este Amor. Decían:

Este Amor, el que lo siente, tiene presente siempre a este Dios. A los pocos que este Amor sienten, los muchos que no lo sienten, les dan el nombre de “locos”.

Dos dijeron –y parecían la misma voz–:

El amor, cuando es de vida material, y es un amor sano, este amor irá creciendo al transcurso de los años, y nunca te taparás de decir: ese amor sano.

Rápido vi a una mujer con un niño en brazos, y a un hombre. Y dijo uno:

Si a esta mujer le exigiera el hombre,

que al hijo que tiene en brazos

le demostrara desprecio

y le diera malos tratos,

si a esto obedecía,

ya Dios la estaba apartando.

En cambio, si le da amor,

y siempre lo adora acunado,

a más rebose este amor,

Dios, premio le irá mandando.

Pues si esto es en la Tierra,

y Dios no manda callarlo,

¿cómo puedes tú sentir

este Amor y no expresarlo?

Ha habido grandes hombres,

y han estado enamorados

de este Dios que  mucho nombran

y pocos quieren,

y al sentir este Amor,

han cambiado sus vidas,

han cambiado sus rasgos,

han cambiado la forma

de vida que han llevado;

han pregonado en silencio

que a Dios sienten a su lado.

¡Todo es sentir a Dios!

¡Todo es que sea amor sano!

Mucho hay escrito de Teresa de Ávila, pero poco es para el Amor que ella sentía en sus Comunicaciones.

La pluma no escribe nunca lo que tú sientes, al oír de Aquí del Cielo, y quisieras que todos sintieran lo que tú estás sintiendo.

Desperté, oí:

Nadie puede callar,

cuando amor sienta en la Tierra.

Cuando sea un amor sano,

el amor que todos vean.

Cuando sea Amor de Dios,

que Dios manda que se quiera.

Pues cuando sientes Amor,

de Amor que sentía Teresa,

tú no callas este Amor,

aunque sepas que vas presa.

Si sientes como Agustín,

aunque sepas que te acechan

para reírse de ti,

Amor gritando no dejas.

Esto de sentir Amor

y quedar como cualquiera,

o no es verdad lo que sientes,

o sientes estando muerta.

¡Qué estampa la de la madre,

que quieren que amor no sienta!

Pues más fácil es callar a la madre,

aunque muriera de pena,

que callar al que Dios le hable.

El que sienta este Amor,

no calla y forma guerra.

Y el que a callar lo mande,

es pena que Amor no sienta.

¡Si sientes Amor de Dios,

no callas, como Teresa!

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Libro 2 - Meditaciones y Palabras Directas con el Padre Eterno - Tomo II - C5