martes, 27 de abril de 2010

Quitar o Achicar Sufrimiento - Libro 31 - Te Habla El Profeta - Tomo IV - Pag. 56-57-58


En Sueño Profético hablaban del tener y despreciar, y luego querer y no poder alcanzar, porque su tiempo pasó, tiempo de pinchos y clavos que hacen crucifixión. Esto es justificante que presenta todo el que Elige Dios, para que hable de su Gloria, diciendo: “Me dice Dios”, no que Dios dijo o dice. Esto es un Mando que Dios da a tu Espíritu, que es alegría y calvario, más alegría que calvario. Si piensas lo que sufre Dios, ya te olvidas del calvario y caminas sin descanso para que muchos Lo quieran y nunca oigas Culparlo, sin llevar arrepentimiento de aquél momento malo que tiene el que está sufriendo.

Dijo uno:

No hay quien tenga un sufrimiento grande, y vaya buscando sufrimientos para quitarlos o achicarlos. Que a veces, son sufrimientos que no han llegado tan altos, y da miedo el oír al que el sufrir le ha llegado.

Desperté, oí:

Decían, en el Arrobo, que buscar sufrimiento para quitarlo o achicarlo, ya era un justificante de estar Sirviéndole a Dios.

Que llegaría el momento de recibir a cambio del desprecio.

Recibir la angustia de no oír lo que, horas antes, Dios dice a un Espíritu sin cuerpo.

Dios, igual que dice: “Di que Me ves y te Mando”, igual prohíbe.

Prohíbe lo que el hombre ha despreciado.


***

2 comentarios:

  1. Si nos ponemos a pensar un poco en la vida que tuvo que pasar Ana, nos daremos cuenta que acudía al prójimo para consolarlo, ¿pero quien la consolaba a ella?
    Es una constante en los santos que no dejen de dar a los demás y que el pago sea injusticias.

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  2. Cuando tenemos una preocupación parece que no existe nada más en el mundo que nosotros mismos.El Mensaje nos dice lo contrario: ocultar tu sufrimiento y acudir a aliviar a otros.

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