miércoles, 29 de abril de 2020

¡Qué bueno es Dios!

En Sueño Profético decían en la Gloria:

¡Qué bueno es Dios!, que deja que el hombre Lo ofenda, y luego le da el Perdón y lo entra en su Gloria.

¡Qué bueno es Dios!, que siendo el Dueño de todo, espera que el hombre le dé al Prójimo, con medida, con tasa y con desprecio, las migajas que sobraron en el banquete, para que otro se alimente.

¡Qué bueno es Dios!, que administran sus Poderes sin poner primero a Dios. Sin llevar siempre en su mente: “Yo, Ministro de Dios, y lo que yo haga, ya de Él viene, tengo que hacer actuación y actuar como Él quiere”.

¡Qué bueno es Dios!, que sin querer, esto consiente.

El hombre no cree lo que es Dios. Y no piensa en la muerte, que sin remedio le llega por ser matojo de tierra que, cuando llega su tiempo, no hay cuido que lo detenga.

¡Qué bueno es Dios!, que deja que su Nombre suene en boca del pecador para ofenderlo. Y otros realzan su Nombre como pregón de vendedor, pero sin ellos querer lo que venden.

¡Qué bueno es Dios!, que no detiene la noche y claridad no se vio.

Desperté, oí:

¡Qué bueno es Dios!, que todo lo tuyo es suyo, desde la gran hacienda, hasta la respiración.

Que lo que tú te crees dueño, en un segundo lo desbarata la Ley del Cielo.

Que ni del hijo que tuviste, dando con tu sangre el crecimiento, puedes decir “soy dueño”.

Porque el Dueño estaba Aquí, está y estará por los siglos sin fin.

Por eso no hay alabanza mayor que digas en todos tus actos: “¡Qué bueno eres, Señor!”.


***

Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C4

martes, 28 de abril de 2020

Si Dios no fuera Dios, no tendría Elegidos

En Sueño Profético decían:

Si Dios no fuera Dios, no tendría Elegidos.

El hombre no se merece que Dios lo deje mirar al Cielo, por ser lugar donde está su Reino.

El Elegido es Presencia de Dios para el espíritu y para el cuerpo.

Si Dios no fuera Dios, dejaría de repetir su Existencia. Pero sería mayor condenación cuando nadie pudiera decir: “Yo veo a Dios, y me manda para que el hombre piense que lo que hizo ayer, lo hace hoy. Si no es bien hecho, que mire al Cielo, y ya mañana, con el bien que haga, el mal lo borra”.

Esta Enseñanza es la que lleva el Elegido en el peso de su carga. Dios, antes de elegir, sabe el sufrir que le aguarda, porque al ser conocido por el hombre, su presencia, o te da calma o tienes que huir de ella. Algo lleva, que ese algo te hace que pienses: “¿Será verdad? ¡Pero algo lleva…!”.

Busca un pedir, por si te diera. Pero la carga del sufrimiento, al Elegido la dejan. Por eso empieza el Mensaje diciendo: “Si Dios no fuera Dios, no tendría Elegidos”.

Dijo uno:

¡Cuánto te enseña y te aclara
el que ahí lo ves con cuerpo
y Aquí lo ven con espíritu!

Te aclara y te quita las dolencias,
y con este Mando te puede
curar la carne del mal que tengas.

Que esto es hilván que quitas
a buen traje que te pongas,
si lo comparas
con lo que hace el espíritu:
te lo limpia del pecado,
y a Dios ruega
para que seas perdonado;
te hace ver los caminos
que de Dios van apartando.

Es pozo, es torre,
es risa, es llanto;
es recadero de Dios
al hombre, para salvarlo.

Desperté, oí:

No se cansan en la Gloria de repetir,
que si Dios no fuera Dios,
no dejaría que el hombre
mirara al Cielo.   

Cuando mirara a la Tierra
y no encontrara el consuelo
para achicar un poco
sus sufrimientos.

Se han quedado
muchas cosas sin decir,
que el Elegido,
por Mando de Dios,
va dejando.

El hombre, a cambio de esto,
le abandona,
y le aumenta el sufrimiento.

Y cuando le llega a él sufrir,
le pide, pero exigiendo.

Si esto lo pensara el hombre,
pediría Perdón en silencio.

Por no quitarle sufrir
al que a Dios se está ofreciendo
para que le mande Aquí.

Dios elige a la persona
que le acompaña el sufrir
y de Dios nunca se aleja.

Porque alejarse de Dios
es algo a lo que tú
ya le has dado preferencia.


***

Libro 16 - Dios No Quiere, Permite - Tomo II - C6

lunes, 27 de abril de 2020

Yo voy al Padre, y mandaré mi Espíritu

En Sueño Profético decían:

Si Dios, en estos momentos, te da sus Palabras y te dice “cúndelas en mi Nombre, por ser Mías y tuyo el Mando”, ya, de lo que está escrito tú no puedes hacer uso, diciendo: “Dios me está mandando que escriba y enseñe lo que ya está escrito”. Unos escritos son mandados, y otros, que escribió el que amó y siguió sus Pasos. Pero Esto es que ahí Dios quiere que el hombre piense que Dios es Vivo y está con Cuerpo, que es el mismo que el hombre destroza hasta Verlo muerto.

Dios Hijo quiere que el hombre piense que es Vivo, que está el Padre y el que vio el hombre, que es el Hijo, pero es un solo Dios con tres Nombres que Él se puso.

Él dijo cuando enseñaba con su Presencia de Cuerpo y Carne:

Yo voy al Padre, y mandaré mi Espíritu”.

Ya, del que diga “Dios me habla y me dice que lo diga”, que comprueben los escritos con la vida que haga el que lo diga. Si en los escritos ves a Dios y sus hechos lo confirman con la Palabra de Dios, ya no le digas “Dios dijo”, porque aquí oyes su Voz.

Desperté, oí:

Si al que Dios elige, dándole sus Palabras, para que vaya por todo el mundo, dijera o pensara: “Señor, esto ya lo dijiste, y está escrito por el hombre, yo no lo digo”, antes de decirlo, ya se condenaba.

Al que Dios le arroba su espíritu, cuando vuelve al cuerpo, ya Dios prohíbe lecturas y palabras que estén escritas y él quiera explicarlas.

Esto sería otro camino, con buena intención o con mala.

Si tienes la carta en la mano y delante al que escribió la carta, tú ya quieres oír mejor que él te diga las palabras.

Pues piensa, oír: “Dios dijo y hoy está diciendo, aquí están sus Palabras”.

¿Cómo vas a quedar tranquilo, si tú, cuando empiezas a leer, sientes fuego con llamas?


***

Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C5

domingo, 26 de abril de 2020

El sello de Dios lo sabe el Amor

En Sueño Profético decían:

Se escandaliza el hombre de lo que hacen con el hombre, y no se escandalizan de lo que hacen con Dios.

Lucha el hombre por ser dueño de algo en la Tierra, y deja de ser dueño de un sitio que Dios le da en su Gloria.

El hombre debería despreciar en la Tierra todo lo que no llevara el sello de lo que Dios quisiera.

Que el sello de Dios lo sabe el Amor que por dentro de ti llevas.

No el amor de afuera. El amor de afuera puede que no esté por dentro, el de adentro sale por fuerza a fuera.

Este sentir no te exige, pero ya vivir no deja, y no puede dar quietud a aquel sentir que tú tengas.

El hombre sabe de todo, pero hace falta que aprenda que la muerte va consigo dentro de su misma materia.

Por eso, estos Mensajes, quiere el Cielo que se sepan, y que no queden ocultos como semilla sin siembra.

Desperté, oí:

Hablaban en la Gloria de la muerte,
con una normalidad
como el agua cae en la fuente.

En cambio no hablaban normal
que el hombre
de Dios no se acuerde.

Que no tenga en su presencia
lo que Dios manda que digan
cuando Él hace Visión
en algún cuerpo con vida.

Esto es falta de Amor
o de no creer en esta Vida.

La muerte escandaliza al hombre,
y de que no amen a Dios,
no se escandaliza el hombre.


***

Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C5

viernes, 24 de abril de 2020

Primero el espíritu y luego el cuerpo

En Sueño Profético decían:

¡Qué falta hace esta Enseñanza del espíritu, al bueno y al malo, al que ves enfermo y al que crees que está sano!

¡Qué falta hace el saber que quien manda es el espíritu, no el cuerpo!

El querer, en el cuerpo, de lo malo o de lo bueno, ya lo mandó el espíritu.

Si tú quieres Mando de Dios y a Dios Le pides con Fe y con alegría, tú retiras a los que no son de Dios. Esto es ladrón que ve que llegan guardias y tiene que huir. Esto es acción que tú detienes para que el cuerpo no la haga.

Dijo uno:

Esta Enseñanza para el espíritu, siempre el hombre la ha rechazado, y la ha rechazado más la cultura para lo temporal. Esta cultura, se aparta de Dios y ya no es cultura; es enredo, que quiere poner lo que acaba, con lo Eterno; lo que no es verdad, en frente de lo verdadero; ya a lo que podía dar abundante fruto, le ponen muralla con razones, apartando al hombre del Cielo.

Desperté, oí:

Tiene que ser enseñar al espíritu y después al cuerpo.

Que cuando el niño alargue la mano para coger el pan, ya sepa mirar al Cielo.

Que cuando diga “madre”, antes su espíritu tuvo la Enseñanza que a Dios tienes que nombrarle.

Esta Enseñanza, en su crecimiento, llega a hacerse responsable del mal que haga su cuerpo.

Confía en un Poder grande, que sabe que está en el Cielo.

Que allí hay Vida, pero no vida de cuerpo. Fue la Vida que daba vida a tu cuerpo.

Si ahora comparas cultura universitaria con este saber Eterno, ¡hazte el ingreso en los párvulos!

Que si lo haces por Dios, das testimonio de seguir lo que Dios dijo en la Tierra cuando de Hombre vivió: “Haceos niños y entraréis en mi Reino”.

Esto, ya está repetido, y por siglos y siglos se estará repitiendo.

Porque lo que Dios dijo y dice, por ser Dios, no tiene cambio.

Compadécete de aquel que creyó mejorarlo.

Pero antes di: “Señor, ¿debo de pedir por él? Y si Tú no lo ves bien, que mis ruegos queden bajos, tan bajos que Ahí no lleguen”.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C6

jueves, 23 de abril de 2020

Por el Camino de Dios, todo lo harás bien hecho

En Sueño Profético decían:

Si vas por el Camino de Dios, todo lo harás bien hecho, aunque la mayoría vea que lo que has hecho está mal hecho. Porque esta mayoría son los que le aconsejan los espíritus del Infierno, que te presentan pecado como alimento del cuerpo, diciendo: “Esto no es malo”.

Dijo uno:

Es que el hombre quiere cambiar los peligros que tiene el espíritu, por el adelanto; y dejar al espíritu, salvaje, como la fiera del campo. Si el hombre hiciera un pensar, vería que no podía tener cambio ni la vida del cuerpo ni la del espíritu. Si al cuerpo le das un golpe en una pierna, lo dejas cojo. Y si le sacas los ojos, ya no podrá ver nada. Si el adelanto aquí no puede dejar el cuerpo como estaba, ¿cómo a un espíritu que no viva la Palabra de Dios, el adelanto podrá darle entrada en la Gloria cuando muera, si no ha querido? Si está cojo, mudo y sin ver nada, aquí, el adelanto, no sirve para nada.       

Desperté, oí:
El adelanto del hombre
no puede detener la vida del espíritu
ni darle la Gloria
al que no cumple los Mandamientos.

Éstas son dos vidas,
la dos, del mismo Dueño.

La que sirve es la del espíritu,
que tu carne va diciendo:
“quiero a Dios o no Lo quiero”.

Que el hombre quite el adelanto
en lo que sirve para el Cielo.

Que pecado en adelanto,
estás en contra de este Reino.

Tienen que hacer un stop
la cultura y el talento.

Y enseñar que hay otra Vida,
donde no hace falta el cuerpo.

Que es lo que el hombre no valora,
y vive en contra del Cielo.


***

Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C9

miércoles, 22 de abril de 2020

El espíritu Dios lo envía

En Sueño Profético decían:

Todo lo que nace muere,
y todo lo que muere se termina.

El espíritu no nace,
el espíritu Dios lo envía.

Y al no nacer,
ni se muere ni termina,
queda en una eternidad.

Como el agua,
tiene vida el Sol.

Y la noche,
su vida es oscuridad.

El aire también tiene vida,
y vida da donde está.

Todo esto tiene vida
y tiene Eternidad.
Porque Eternidad
es donde hay vida
y jamás se acabará.

Dijo uno:

Cuando llega Aquí la vida
es cuando vivo se está.

Porque la vida del suelo
es la lucha terrenal.

Todo por querer quitar
las Leyes que hay en el Cielo.

Dios Creador aparta a uno,
de los cuatro,
que con Él intenta sublevación.

Desperté, oí:

En este arrobo
era la palabra Tierra
la que estabas siempre oyendo.

Ponían comparaciones
para llenar un cuaderno.

Un cuaderno y disponer
de mucho tiempo para leerlo.

Porque cada frase
te hacía analfabeto.

¡En qué escala más ridícula
dejaba la Vida del espíritu
a la vida del cuerpo!

Era pluma que vuela sola,
o ave que lleva
la pluma en el cuerpo.

Toda la lucha del hombre
es no querer entender esto.

Que el espíritu es el ave,
y la pluma es el cuerpo.
 

***

Libro 19 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo III - C7

martes, 21 de abril de 2020

Recibe y publica

No podía dormirme pensando: ¡A cuántos sitios he ido y con cuántos he hablado, para que vean que Dios es el que habla y manda que escriba!

Quedé dormida diciendo:

Señor, ¿si no Te pido el Perdón para el que pueda hacer y no hace, Te ofendo? Si no Te ofendo, Te lo pido.

En Sueño Profético decían:

Dios Hijo pidió el Perdón al Padre porque era el mismo Dios y sabía quién era el que Lo ofendía por ignorancia.

Aquí no va el Perdón, porque tú le presentas a los Doctores de la Iglesia Escritos que saben que no son de la Tierra. Y si no son de la Tierra y ellos son doctores, ven claro que estos Escritos son de Dios.

Si el Perdón pidieras, es porque ellos no serían doctores, y los Escritos serían tuyos como otra literatura cualquiera.

Desperté, oí:

Da respeto, miedo y lástima que haya tanto sufrir para cundir que hace 26 años que Dios a diario habla.

Esto ha debido mover al mundo.

Puede haber muchos casos en los que Dios hable de mil maneras. Pero a éste –presentando día a día, con sus fechas, en un sitio rudo, esta Teología–, hoy nadie puede igualarlo.

Tú recibe y publica, que silencio no verán por ser el Mando de Arriba.

El empiezo del Mensaje también ha sido dictado, y me dictan que lo escriba.


***

Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C1

lunes, 20 de abril de 2020

Consejo y tiempo

En Sueño Profético decían:

Si supieran valorar al que Dios le da su Mando y le dice “di que es Mío”, no pondrían valor más grande, porque no encontrarían nada que pudiera igualarle.

Dijo uno:

Yo oí al Maestro decir a sus Discípulos:

El que os conozca y pida consejo dando las gracias después de oíros, más cree que sois mis Discípulos”.

“El que siempre os ponga tiempo para oír el Mando que Yo os doy, sabe que él no manda en su tiempo, que el tiempo es de mi Padre, y que el tiempo obedece al Mando que dé mi Padre. Yo, siendo Dios, aunque hoy Me veáis de Hombre, también espero que mi tiempo se cumpla para volver a mi Padre, que fue de donde fui enviado. Si Yo, siendo Dios Hijo, veo bien que mi tiempo se cumpla, tiene que verlo bien el que se dice cristiano
”.

Desperté, oí:

Consejo y tiempo,
tú no lo niegues,
porque tú no eres dueño.

Y si consejo de Dios no quieres,
no hagas la señal de la Cruz,
que a Dios ofendes.

Los Discípulos llevaban
las Palabras de su Maestro.

Cuando los buscaban
y les pedían consejo,
ellos  crecían de alegría,
de ver la fuerza que llevaban por dentro.

El que era de Dios,
dejaba aparte el talento
y les pedía opinión,
como hacía el alfarero.

Un día les preguntaron
que si el quererse morir era
ofender al Cielo.

Ellos iban preparados,
y esto respondieron:

“Si tú te quieres morir,
es que no quieres al Maestro,
que se ha hecho Hombre por ti
y por todo el que quiera Quererlo”.

“Cuando Él no pise Tierra,
pídele que tú no pierdas su Reino,
y ya, siempre estarás con Él”.

Ahora, en la Tierra.
Luego, en el Cielo.


***

Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C3

domingo, 19 de abril de 2020

Hazte fuerte y rompe la envoltura que te adornan los pecados

En Sueño Profético hablaban de los espíritus que no son del Reino de Dios. Decían:

Estos espíritus, si no tienes en tu lengua o en tu pensamiento el nombre de Dios, ellos intentarán retirarte del Camino de Dios con el engaño. Le pondrán a la materia la envoltura del engaño, quitándole altura a la torre y ofreciendo el pecado, liándote los caminos que Dios ya tiene trazados.

Los espíritus contrarios a la Palabra de Dios, éstos, nunca tienen descanso.

Dijo Agustín de Mónica:

Cuando Dios me concedió el Perdón a mis pecados –esto lo digo en espíritu, con cuerpo no me atrevía a pronunciarlo–, fue cuando me di cuenta de cómo te hace el mal el engaño, de cómo te da valentía para seguir tú mismo haciéndote daño.

Una noche, cuando el sueño se negaba por no admitirlo mi conciencia, tuve que dejar la cama y, en un rincón de mi alcoba, allí, derramé mis primeras lágrimas, cuando mis oídos oían lo que en el Cielo hablaban:

“Hazte fuerte y rompe la envoltura que te adornan los pecados”.

Desperté, oí:

“Hazte fuerte”, yo sentía que esta palabra no la oía de la Tierra.

Pero me venía el pensar que esto de Dios no era.

Y otra vez me iba al rincón y las lágrimas consuelo eran.

Mucho me atormentaban los espíritus que ya vivían sin cuerpo, o los que aún en los cuerpos estaban.

“Si has cogido este camino, Agustín siempre serás. Tu nombre da resonancia, y Agustín siempre serás”.

Cuando ya pude vencer fue cuando me presentaba diciendo el mal que hice y el ofrecer que hice a Dios para que el Perdón me mandara.

Cuando mi vida la vieron, me buscaban pecadores y el abrazo era primero.

AGUSTÍN DE MÓNICA


***

Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C6

sábado, 18 de abril de 2020

Leño mojado al lado de la lumbre

En Sueño Profético vi una calle solitaria; no tenía mucha anchura; y las casas no eran altas; a 10 metros no subían. Iban unos hombres hablando de los hombres y de la vida. Subían estas palabras: “Las cosas de Dios dan Paz, no cansan y tienen sabor del Cielo; las cosas de Dios dan abrigo al espíritu como la ropa en invierno. Yo, al hombre que veo retirado de Dios, le llamo “leño mojado al lado de la lumbre”, que si se seca, ya sirve, pero si sigue mojado, no lo eches a la lumbre, porque el fuego desbarata. Esto es hombre frío, hombre que empalma las horas hablando de lo que no sirve.

Ya no se veían los hombres, tan sólo se veía una plaza con unos bancos de piedra, que su color era el tiempo que pintó a la piedra.

Siguió uno diciendo:

Estos bancos siguen vivos. Los cuerpos que se sentaron cuando el Maestro vivió de Hombre, ya están muertos. Aquí se llenaba uno de lo que manda este Cielo. Nunca cansaba el oír: “¿Donde irá hoy el Maestro?”.

Desperté, oí:
Nada de la Visión que Dios ha hecho al espíritu, existe ya como el espíritu lo ha visto. La calle, el hombre, ha querido mejorarla, y tan sólo queda ya el sitio de cuando Dios Hombre la pasaba.

Los bancos, el hombre, se los llevó, y ya no quedaron juntos.

Sólo queda lo de Dios, que el hombre tocar no puede.

Que cuando toca, fracasa en el nacer y en la muerte; en querer decir, que Dios ningún hombre Lo ha visto desde que al Cielo subió con Cuerpo y Vestiduras.

El hombre tiene fracasos, pero ninguno le llega a querer decir que Dios no es Vivo que es Muerto.

Si Dios no tuviera Vida, ese mundo sería un cementerio.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C4

viernes, 17 de abril de 2020

La prisa de la vida

En Sueño Profético decían:

Hasta que el hombre no enseñe a vivir los Mandamientos de Dios, no dejará el hombre de vivir peor que las fieras que nunca tuvieron cría. Porque la cría algo les amansa en su instinto de fiera, si no ven que vas a quitársela.

Dijo un espíritu con el Mando de Dios:

El hombre, sus inventos son para acabar antes con todo, hacerlo aprisa y destruirlo rápidamente.

Esto es comida cara, comida aprisa y saber que viene el daño.

Esto es la prisa de la vida, que el hombre le llama adelanto.

¡Si el hombre pensara que el adelanto sin Dios es adelanto en fracaso, hacer pendientes donde no existen orejas, sortijas donde no hay manos…!

Pon primero “vive con Dios”, y luego vive adelanto. Pero que éste nunca te lleve a estar de Dios retirado, aceptando leyes del hombre y las de Dios anulando.

Desperté, oí:

Dios no te dice
no al adelanto.

Lo que quiere es que vivas
contento su Mando,
sin pensar: “¡Esto pasó!
¡Yo vivo hoy el adelanto!”.

De casas ya destruidas,
que se juntaron familias
y crecieron niños en el pecado.

¿Esto también es adelanto?

Debería el hombre poner
el adelanto
para acabar la miseria.

Y que la palabra “hambriento”
fuera de siglos pasados,
cuando Dios bajó a la Tierra.


***

Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C9

jueves, 16 de abril de 2020

Dios sabe de tu tiempo

En Sueño Profético decían:

El que pueda servirle a Dios y le sirva primero al hombre, no cree en Dios. Y si cree, no Lo ama, y al no amarlo, nunca tendrá tiempo o siempre estará cansado para hacerle un servicio al que Dios Aquí le da el Mando.

El que pueda servirle a Dios y le sirva primero al hombre, cómo va a decir:

“Señor, contigo primero estoy”, cuando le llegue el momento en el que nada puede hacer el hombre.

Dijo uno:

No hay alegría más grande, que pienses:

Señor, Tú sabes de mi tiempo y mi dinero, de mis fuerzas y mi cansancio, de mis deseos de servirte cuando Tú quieras mandarme.

Señor, que yo quiera servirte y no pueda, antes de que pueda y no lo haga.

Señor, nadie me podrá entender, si como yo no Te ama.

Desperté, oí:

¡Qué cierto que el hombre
no piensa que es mejor
servir a Dios y no poder,
que poder y no hacerlo!

¡Qué cierto que Dios sabe
de tu tiempo y tu dinero!

El que quiere servir a Dios
y no puede,
ni por tiempo ni por dinero,
mira si quiere a Dios,
que prefiere así seguir,
con este sufrimiento,
antes de negarle a Dios
su tiempo y su dinero.

Si se fuera preguntando
al hombre lo que quería,
pocos no te contestarían
lo que ahora aquí dictan:

“¡Yo, dinero y buena vida!
Lo de Dios, ¿quién sabe
la verdad o la mentira?

¡Ya, después de que me muera,
no voy a disfrutar esta vida!”.

Esto serían muy pocos
los que no responderían.


***

Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C4

miércoles, 15 de abril de 2020

Si tú buscas a Dios

En Sueño Profético decían:

Si tú llamas a Dios,
Dios contesta.

Si tú buscas a Dios,
a Dios encuentras.

Y una vez que Lo encuentres,
entrégate sin exigencias,
sin poner en tu pensar los porqués.

Porque si pides porqués,
ya Le pides a Dios cuentas.

Que esto jamás lo hará uno que Lo amó,
Lo buscó y Lo encontró.

Dijo uno:

Yendo Amor delante,
pides cuentas entregándote más cada día
y olvidándote del que creas que pasa mejor la vida.

Lo que hay que tener presente
es que Dios es Amor,
Presencia Viva,
que su Perdón nunca es negado
para el que lo pida.

Y que su Reino no es del mundo
donde el pecado está suelto
y cada día está cogiendo más mando,
queriendo que vivan juntos
el ladrón y el comisario.

Y que la hembra y el varón,
para poder conocerlos,
tengan que mediar papeles
como herencia ante notario.

Esto es el avance que ha cogido
la cultura y el adelanto.

Desperté, oí:

Pon Amor primero
y después llama a Dios.

Búscalo en el Prójimo,
y Él saldrá a tu encuentro
entregándote
lo que tú tenías alto y lejos.

El hombre quiere inventar
una nueva creación.

Y anular al Dueño y Poderoso,
que es Dios.

Piensa que el Sol está en contra de la lluvia,
y la lluvia en contra del Sol.

Esto es Creación
del Dueño del Universo.

Como creo a la hembra y al varón.

Ni el sol puede hacer el papel de la lluvia,
ni la lluvia el papel del Sol.

Pues más imposible es
querer que el hombre haga
el papel de la hembra
y la hembra el del varón.

Ponle al progreso barrera
y cumple la Ley de Dios.

Que esta Ley no la dijo nadie,
que la dijo el mismo Dios.


***

Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C8

martes, 14 de abril de 2020

La mujer del comerciante

En Sueño Profético decían:

¡Qué poco trabajo cuesta hacer el bien si a Dios amas!

¡Qué poco trabajo cuesta dar palabras que dejen la confianza en que Dios nunca te abandona!

Todo es vivir Prójimo, que el hombre de él se aleja cuando ve que hace falta en la enfermedad del espíritu o en la enfermedad de la carne. Entonces pierdes amigos, en vez de amigos aumentarte.

Dijo uno:

Yo conocí a una familia que le pusieron los defectos cuando quedaron en la ruina. Tenían un comercio de tejidos y el padre lo llevaba con un hijo de 12 años, que era el que no paraba de llevar telas y hacer mandados al sitio que el padre le mandaba. Pues murió el padre y tuvieron que cerrarla. La madre tenía dos hijos más chicos y nunca en la tienda estaba. Por no ayudarle a vivir, muchas faltas le buscaban: que había vivido una vida cómoda, que los dineros poco tiempo los guardaba, que era culpable de que la tienda cerraran.

Desperté, oí:

Todos volvieron la espalda cuando la tienda cerró, y la ayuda le negaron los que decían que amaban a Dios.

Un amigo mío y yo les reuníamos un jornal y los cuatro iban saliendo, porque creíamos en Dios y sabíamos que nos estaba viendo.

Fuimos acortando el mal y dando remordimiento. Cuando la mujer nos dijo: “tengo gran enfermedad y la tengo en secreto, tan sólo lo sabe Dios cuando de noche no duermo y estoy haciendo oración”.

“Para que al día siguiente les sirva a mis hijos y antes a mi marido, que sé que ya está con Dios”.

Daba más remordimiento al que más se retiraba.

A la enfermedad le podía por los ruegos que a Dios le hacía.


***

Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C7

lunes, 13 de abril de 2020

Amor a Dios

En Sueño Profético hablaban teólogos que sus palabras hicieron que otros conocieran la Gloria cuando vivieron con cuerpo. Unos, fueron Representantes de Dios. Otros, seglares, que su Teología, dicha y practicada, hacía que a Dios buscaran. Decían:

Teólogos poniendo a Dios delante, con Amor, y después la Teología, no pueden estudiar casos pasados dejando de acudir al presente y comparando con los libros que ellos hacen sus estudios para seguir enseñando.
        
Esto puede tener perdón para el que tenga el mar por medio y no tenga barco ni barca que lo ponga en tierra. Y ya, él vería cómo llegar a este Caso, que tanto está costando que acudan y no den desprecio, como lo está dando el que a Dios representa.

Desperté, oí:

Teólogo queriendo estudiar lo que Dios dijo y no queriendo saber lo que hoy está diciendo, enfada a Dios.

El teólogo, teólogo, es Amor a Dios, no es profesión.

Que esto es lo que el hombre interpreta.

Lo mismo que en el Represente de Dios, tiene el hombre que ver a Dios en su Representante.


***

Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C8

domingo, 12 de abril de 2020

Obligación del hombre no es Caridad de Dios

En Sueño Profético hablaban de la Caridad que va de Dios. Decían:

Hay quien hace un bien sin Caridad, y ya convierte el bien en un mal.

Hay quien quiere hacer un arreglo, desarreglando aquello que estaba bien arreglado.

Y hay quien le llama Caridad a una obligación que él mismo se ha echado, que tiene que cumplirla, o leyes van castigando. Aquí no va la palabra Caridad de Dios. Obligación del hombre no es Caridad de Dios.

La Caridad de Dios puede ir en una palabra o en una comprensión; en ayuda material o en una oración. Pero siempre viendo la parte que es del agrado de Dios.

Desperté, oí:
Va grande diferencia,
en llamarle Caridad
a obligación,
a algo que hagas sin obligación
pero con protestas,
a pensar: “yo lo hago por Dios,
y yo sé que El
ya me lo tiene en cuenta.

Si yo lo hago sin esfuerzos,
ya grandes ganancias deja,
ya Dios me irá iluminando:
Caridad mal hecha,
Caridad bien hecha.

Que si la haces cogiendo sus Palabras,
es la Caridad que Aquí llega.

Y de Aquí ya manda Dios
que la Caridad no muera.

¡Que no le extrañen estas Palabras
al que este Mensaje lea!

El hombre hace Caridad,
pocas veces y con protestas.

Esto no lo hace por Dios,
es un exigir de la Tierra.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C4

sábado, 11 de abril de 2020

No hay dos Mensajes iguales

En Sueño Profético decían:

¡Cuántos espíritus sanarían y otros no llegarían a enfermarse si estos Mensajes los oyeran y los tuvieran en sus manos los hombres que pueden hacer, con facilidad, que lleguen a cultos, rudos, sanos y enfermos de carne y espíritu! Que esto llega, pero no con la aceptación de prontitud y alegría que el Cielo quiere. Es cundido por la Fuerza de Dios, pero no por el Amor del hombre a Dios.

Cuando hay Amor a Dios, éste responde y humilla a letras y dinero. El Amor a Dios es inquieto, y pone silencio o alborota al que quiere dejar la Comunicación de Dios como algo que sobra, como algo que al inteligente de hoy ya no le fuera. No le fuera por tener el máximo saber de enseñanza de la Tierra.

Desperté, oí:

Cualquier Mensaje que leas, lo ves justo y con una medida que no es del hombre.

Te habla de la muerte del cuerpo y de la vida que el cuerpo tiene y de que lo eterno es el espíritu.

Con estos dos personajes se acaba la vida del hombre.

No hay dos Mensajes iguales.

¡No ve el hombre aquí a Dios, en que Esto no hay quien lo iguale!

Es enseñarle al espíritu que el cuerpo hay que dejarlo como algo que no sirve.

Medita este Mensaje y oblígale a tu cuerpo que haga lo que Dios mande.


***

Libro 19 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo III - C8

viernes, 10 de abril de 2020

El espíritu sólo recoge

En Sueño Profético decían:

Tan sólo al decir el tiempo que Dios hizo la primera Aparición y que hasta el día de hoy sigue igual, ya debería al hombre darle miedo la duda que le llegara.

Esta seguridad, al ser de Dios, hace la constancia. Y esta constancia hace la seguridad que el hombre no puede desmentir.

Este seguir sin parada, de no ser Dios, no hay quien lo siga.

Este Manantial Divino de temas diferentes, con esta Enseñanza, no puede el hombre presentar, queriendo decir: “a mí me pasa igual”, o “es inteligencia mía, material”.

Aquí se estrella el que quiera igualarse con el Mando de Dios. Este Mando obliga a la materia a que escriba momentos que vivió el espíritu sin cuerpo, que pudieron ser horas o segundos.

El espíritu recoge el Poder de Dios rápido y seguro, cuando está sin materia, porque este Mando no deja permitir.

Desperté, oí:

Por eso, el espíritu sólo recoge, pero no expone lo que quiere exponer.

Ya es un mando a la vida del cuerpo, llevada por el espíritu.

Luego, el espíritu presenta obediencia o desobediencia.

Aquí, en este espíritu, no entra la desobediencia.

Porque desobediencia es no ser fiel a su Mando, y ya Dios no arroba.

Dios arroba cuando la materia sigue al espíritu, y este espíritu tira de la materia, obedeciendo las Leyes de Dios.

Que estos Escritos se cundan, a más distancia mejor, porque Dios no tiene sitio.

Puede que en sitio más hondo, más fuerte se oiga el grito de que a escala mundial se conozcan estos Escritos.


***

Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C3

jueves, 9 de abril de 2020

Dios quiere que tú Lo llames cuando sea por Amor

En Sueño Profético decían:

Si la Gloria se comprara o se heredara, sería Gloria del hombre, no Gloria de Dios.

Dijo uno:

Éste es el mal de muchos,
que creen que dinero y Perdón,
por fuerza los lleva a la Gloria.

Otros están viviendo pecados
y poniendo la Misericordia de Dios
para entrar en la Gloria.

Y ya queda el que cree
que la Gloria y el Infierno
es todo una pura historia;
que luego, después de muertos,
¡qué más te da que sea Gloria,
que un grande fuego con llamas!

Esto es el hombre animal,
que va viviendo su vida
sin poderse controlar.

Aun peor todavía:
el animal tiene instinto,
y a veces, si hace mal,
se va escondiendo del hombre.

Dijo otro que contestaba sin oírse las palabras hasta que ya dio sonido:

Yo viví siempre, en el mundo material, al cuido de los animales, por ser mi medio de vida. Nunca parió una vaca fuera de su retablo, nunca parió en llano, siempre la vi acercarse a un sitio como escondiéndose.

Los pájaros y las aves
hacen su nido y se esconden
entre hojas de los árboles.

Las gallinas cacarean
y te dejan puesto el huevo
escondido entre la leña,
y a veces salen piando
de una nueva cría hecha,
que la gallina lo puso,
y su calor, madre sella.

Así te voy numerando
cómo vive el animal
que al final Gloria no espera,
pero vive entre el hombre
y a veces al hombre enseña.

Desperté, oí:
¡Cómo han hablado en Gloria
de la misma Gloria!

¡Cómo han explicado al hombre
que no ama y habla de Gloria!  

¡Cómo te dicen el vivir
sin control que lleva el hombre!

Te comparan al animal
que cree que hace mal y se esconde.

El hombre nunca le dio
el sentido que esto tiene.

Tal vez sienta el animal
algo sin saber el hombre.

Mayoría de los hombres,
si vivieran con control,
pensarían en la Gloria
y no habría último Perdón.

Porque el Perdón a la fuerza,
éste no le llega a Dios.

Dios quiere que tú Lo llames
cuando sea por Amor.


***

Libro 14 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo II - C8

miércoles, 8 de abril de 2020

Si estás cerca de Dios, no te retires

En Sueño Profético decían:

Si estás cerca del que Dios le da sus Palabras, no te retires.

Uno contestó:

Cierto que, el que se retira, va achicando el Premio y complicando su vida. Yo no podía dar gracias por haber vivido el tiempo que Dios bajó a la Tierra y vivió con Cuerpo de Carne, que aunque veías a un Hombre, no podías guardar el Dios. Que esto lo vio el que pidió mucho al Padre Conocerlo. Y el que Lo persiguió, si no Le ve el Dios, no Lo mata. Pues hubo quien dejó el sitio y él solo se castigo.

Otros que habían estado retirados, buscaron a los Discípulos y les preguntaron:

–Si le cambiamos las horas a nuestro trabajo ¿podemos ir con vosotros a Oírlo predicar?

Uno contestó:

–Es mejor que Le preguntes al Maestro. Porque nosotros sólo sabemos el Mando que nos da, y Él sabe el Mando que nos tiene que mandar. Lo que sí quiero es ayudarte, por si vienes de verdad, para que no regreses camino hasta que oigas su contestar.

Desperté, oí:
No perdió de su vista a los Discípulos cuando el Maestro llegó.

Si a la derecha miraba, todavía oía la voz de alguno que al Maestro nombraba.

A la izquierda puso la mirada y el resplandor le contestó con la presencia de un Hombre que iba vestido con túnica, como sus Discípulos, y en el rostro decía: “Soy Dios”.

Cortas Palabras le dijo y grande premio le dio cuando todos oyeron:

Si Yo voy buscando al hombre para que mi camino siga, tú que vienes a Buscarme, se que jamás te retiras.

–Di que Me has buscado y Yo he salido a tu camino.

–Ya el tiempo te obedecerá, cuando sea para ir con mis Discípulos
.

Los Discípulos no andaban sin antes al Maestro consultar.

Querían que oyera Premio, si es que iba de verdad.


***

Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C5

martes, 7 de abril de 2020

Haceos niños y entraréis en mi Reino

En Sueño Profético decían:

Jesús dijo a sus Discípulos:

El que os conozca y no os siga está en contra de Mí, y el que está en contra de Mí, está en contra de mi Padre y no puede oír mis Palabras”.

“Aprended a conocer al que no Me comprende o al que Me comprende y no quiere que Yo esté en la Tierra, entre el hombre. Éste no puede oírme, y si Me oye intentará ir diciendo que Yo no soy Dios Hombre”.

“Al que no comprenda, ponedle al Amor Paciencia, y acabará comprendiendo. Tratadlos como niños, que así manda mi Padre que el hombre sea cuando se hable de mi Reino. El que vaya enseñando, sea hombre. Y el que os oiga, se haga niño, si quiere entrar en mi Reino”.

“No quered enseñar más de lo que Yo enseño, que si no va de Mí la Enseñanza, hablaréis sin fuerza y os podrá el silencio del espíritu satánico”.

“Si mis Palabras las lleváis en el espíritu, le podrán al que las lleve en la lengua, aunque le oigan mi Nombre
”.

Desperté, oí:
Con esta Enseñanza no podían escribas, fariseos o hipócritas.

Con estas Palabras, ya llevaban fuerza para el que quería oírlos o desmentirlos.

Al que no comprendía y Lo buscaba, quería el Maestro que lo trataran como niño.

Dios Hombre ponía Amor y Paciencia, y donde no admitían las palabras del que a Él no Lo quería, les decía:

Haceos niños y entraréis en mi Reino. No queráis comprender más de lo que estáis viendo”.

“Que puede que, cuando estéis lejos de Mí, os vengan sufrimientos, y a Mí Me llegue sufrir
”.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C3

lunes, 6 de abril de 2020

El Mundo de Dios es siempre el mismo

En Sueño Profético decían:

¡Qué diferencia tan grande:
Mando de Dios, mando del hombre!

El Mando que va de Dios,
siempre es el mismo:
Amor al Prójimo, pecado no.

Sin estas dos asignaturas
no puede elegirte Dios,
si no has cambiado de vida
como a Agustín le ocurrió
y a otros pecadores
que Dios sus Palabras les dio
porque buscaron refugio
en el Primer Sagrario de Dios.

Dijo uno:

Si te acercas a Dios amando al Prójimo, ya entenderás su Mando y no pondrás los porqués en tu espíritu, y siempre estarás dispuesto a obedecer sin cansancio. Obedece y pide que no exista el silencio. Que todos sepan el Mando, que es el camino para que a Dios se ofrezcan y abunden los perdonados. Que éstos, la mayoría, fueron pecadores por retirarse de Dios o por engaño de espíritu condenados.

Desperté, oí:

Cierto que el mundo del hombre cambia según el que manda.

El Mundo de Dios es siempre el mismo.

Por haber un solo Dios, que es el Dueño del Mundo.

Del mundo que hizo para el hombre, y del suyo, Reino Eterno, que entra el que quiere su Reino Prometido.

Al que Dios le da sus Palabras, el que lo oye, si es de Dios, sabe que no son suyas.

Y si ama a Dios, él sabe que es de Dios aunque no lo diga.

Por eso el teólogo sabe que aquí no hay mentira.

Sería querer decirle al día, noche; y a la noche, día.

Tu silencio sea escándalo, porque así Dios lo dicta.


***

Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C9

domingo, 5 de abril de 2020

Todo lo sabía el Maestro, como Dios que era

En Sueño Profético vi un sitio grande y una mesa. No se veían más muebles que unas sillas. Unas quedaban fuera de la mesa y otras, sus asientos, metían debajo de la mesa. Había unas ventanas que estaban dentro del muro, y desde dentro costaba trabajo tocar los hierros.

Ya dijo el Mando de Dios en un espíritu:

A esta mesa se acercaron y oyeron a Jesús los Discípulos y algunos que no tenían Mando del Maestro todos los días.

En esta mesa cayeron lágrimas de algunos Discípulos cuando el Maestro les dijo que sabía lo que iba a pasar, y que ellos no lo sabían. Cayeron lágrimas al oír:

Yo sé, de aquí, el que está con el que quiere crucificar mi Cuerpo”.

Antes de terminar las Palabras, se pusieron de pie unos, otros no pudieron decir nada más que ¡Maestro!, y las lágrimas seguían dando testimonio del Amor que aquel cuerpo sentía por Dios, aunque se oía “Maestro”.

Otra vez se vio la mesa, y siguió la misma voz:

Después de faltar Jesús no podían llegar a la mesa. Adoraban el sitio que ocupó el Maestro, y lloraban cuando miraban el sitio de Judas. Quedó para siempre fuera de los Once.

Desperté, oí:
Judas no peca contra su cuerpo,
Judas quiere saber
del Maestro para venderlo.

Los Discípulos no sabían nada.

Todo lo sabía el Maestro,
como Dios que era.

Judas acaba con su cuerpo,
pero al espíritu no llega.

Que éste Mensaje sirva
para Amar el hombre a Dios,
en la Tierra.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C4

sábado, 4 de abril de 2020

Que no me canse de hacer tu Mandar

En Sueño Profético hablaban de temas diferentes unos de otros, pero todos eran para aprender a quitar o remediar defectos que dicen mal si crees en Dios.

Al ocultar el sufrimiento –en un momento dado–, las sobras que tengas o los apuros que estés pasando, no crees esto como es, que es Dios el que Aquí hace que salga el Mando.

Dijo uno:

Si los que se van se creen precisos, Dios ocupará con otros su sitio. Y luego tendrán siempre este pensar: “¡Cómo me engañó el espíritu de Satanás! ¡Si la vida es corta y no tiene tiempos! ¡Igual te deja a los noventa, que cuando te ven en buen uso y tú echando la cuentas de hacer compras para el mañana!”. Cuando tienen este pensar, pocos buscan al Elegido, lo buscan para decirle: pide que tenga más. Entonces Dios responde poniendo a otro en tu lugar y dejándote a ti que sigas tu vida hasta que tengas que buscar lo que ya no encuentras, porque el sitio que dejaste, ocupado está.

¡Dios no necesita al hombre, es el hombre el que sin Dios no puede pasar!

Aquí, los que han vuelto la espalda, de espaldas van a llorar. Y si lloran de cara, con la cara tapada. Igual que el que pida Mando, más feliz vivirá.

Desperté, oí:
Nada le vino bien
al que conoció al Maestro
y quiso vivir bien sin Él.

Y ya, el que el Maestro quitaba,
con su Mando, de algún sitio
y la cara no aceptaba,
al Maestro no servía.

Tienes que poner el Amén
cuando Él la Palabra diga.

Con Amor seguir sus Pasos,
y pedir con ansiedad:
“que no me canse
de hacer tu Mandar”.

“Yo quiero decir sí
antes de oír tu Mando”.

Los que vivan con este pensar,
no podrán vivir alejados
por quererse ellos alejar.

Se alejarían
si les amarraran pies y manos
y en carruaje los echaran.

Si sientes Amor de Dios
y con sus Palabras te encuentras,
mil veces pides Perdón
antes que alejarte quisieras.


***

Libro 31 - Te Habla El Profeta - Tomo IV - C6

viernes, 3 de abril de 2020

El mundo material

En Sueño Profético hablaban del mundo material. Decían:

Si no hubiera Dios, no habría vida en nada. Y al no haber vida, no existiría ese mundo del que el hombre se cree dueño de algo.

Si no existiera Dios, no le daría al hombre miedo de la muerte cuando de sus energías creyera que él dispone, cuando pensara en algo que no ve ni oye. Pero su conciencia le dice que alguien estará al final que ajuste las cuentas.

Si no existiera Dios, ¿cómo creen los intelectuales que ese mundo se hizo o nació? ¿Cómo cree el hombre que el cuerpo del hombre sea maquinaria de tal perfección? ¿Y el agua, en la lluvia, suba y luego baje cuando quiera Dios, no cuando el hombre mande?

Si no existiera Dios, no existiría el aire, y no habría este Mundo, del que en cada momento ve el hombre señales.

Desperté, oí:
Si no existiera Dios,
¿quién dictaría estos Mensajes?

Que se puede comprobar
que de ese mundo no salen.

El hombre necesita
que Dios unas horas lo dejara solo,
con su poder, su capital y sus fuerzas.

Y entonces, los que quedaran,
si eran dos, podrían ver
y conversar de su Existencia.

Este Mundo siempre está
avisando a ése de Tierra.

Pero por falta de amar,
el hombre, al Elegido,
le forma la guerra.


***

Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C5

jueves, 2 de abril de 2020

El encargado de la fragua

En Sueño Profético decían:

Hay sufrimientos en la vida que si quisieras medir y pesar, no podrías, por no tener peso que aguantara ni medida que a la altura llegara.

Hay sufrimientos tan hondos, que tienes que pasarlos para comprenderlos.

Estos que los tienen, no son como cojos, que ves las muletas o pierna más corta, y ya dan palabras como consolando.

Dijo uno:

Yo trabajaba en la fragua y cuatro había conmigo. Pero el que más mandaba, siempre del sufrimiento te hablaba. Decía:

“Si eres cojo y con muletas, todos los ojos que miren se unen a tu cojera y la lástima la sueltan. En cambio, hay sufrimientos tan grandes, que no puedes contarlos, porque los hacen mayores en vez de quitarlos”.

Contaba que el sufrió mucho de niño grande, porque su padre unos años vivió en la cárcel. Él iba a visitarlo, y siempre decía que su padre le decía:

“Hijo, muere de hambre, pero no mueras de cárcel. Yo tuve unos amigos que me arrastraron a coger lo que no era mío. Ellos entraron aquí y pronto salieron, porque hubo quien se compadeció de ellos”.

Dice que la madre lo miraba y le decía:

“No le cuentes al chiquillo nada de eso. Si tú fuiste engañado y ellos fueron los favorecidos, dile que busque amigos que a Dios sigan su camino”.

No quería esta mujer que el niño oyera “robo”. Ella le contó que un día había bebido unas copas y a la autoridad ofendió y a la cárcel fue a parar. Que sus amigos no querían a Dios, y ella mucho sufrió.

Desperté, oí:

Este encargado de la fragua tenía siempre en su boca: “Hay sufrimientos tan grandes, que si los cuentas, los agrandas”.

Porque en el sufrir guardado, todos te ponen la espalda.

Si la cárcel se nombraba, todos echaban la llave donde ponías la mirada.

Al cojo compadecían y a ti puertas te cerraban.

Si al que robó una vez, compadecen como al cojo, él da las gracias a Dios y evita que otros roben.

Da la caridad al cojo, y al sufrir, donde se esconde.


***

Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C6

miércoles, 1 de abril de 2020

El que mucho ama a Dios

En Sueño Profético decían:

El que mucho ama a Dios, mucho conoce lo que no es de Dios.

El que mucho ama a Dios, sabe llevarte por el Camino de Dios y retirarte de donde a Dios no aman, aunque a Dios te nombren.

Dijo uno:

Si a Dios no confías tu vida de espíritu y tu vida de cuerpo, no podrás saber lo que en ese mundo es de más provecho para que tu espíritu esté siempre contento y sea guardián de lo que haga el cuerpo.

El espíritu que es de Dios no le permite al cuerpo que albergue pensamientos de pecado, y antes de que haga acción, ya lo están frenando.

La vida de la materia es cuchillo con filo por los dos lados, y a pesar de que es corta, es muy larga para hacer lo malo.

Consejo que dan en Gloria:

Que en Dios estés siempre pensando, cuando todo lo que mires veas que es por Él creado: persona y Naturaleza; montes, mares, Sol y Luna, día y noche, vida y muerte.

Desperté, oí:

¿Quién no tendrá en su vista algo
de lo que ya se ha nombrado?
Pues al mirar donde mires,
ya de Dios te estás acordando.

Y al acordarte de Él,
te retiras del pecado.

Y te notas el contento
que nada puede pagarlo.

¡Qué cierto
que el espíritu que es de Dios
no puede hacer nada malo!

Y sufre cuando ve
que de Dios
se están apartando.

Que este empiezo es
llamándole a nada malo.


***

Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C3