lunes, 31 de agosto de 2020

La muerte siempre está al Mando de Dios

En Sueño Profético decían:

¿Qué disculpa darán a Dios, el día que ahí dejen muertos sus cuerpos, todos los que pudieron y pueden abrir las puertas a estos Mensajes para bien de la Humanidad, para acortar el fuego del pecado?

Con esta Verdad y la verdad de la muerte, por fuerza frenaría el pecado.

La muerte siempre está al Mando de Dios. La muerte no necesita enfermedad para que llegue. Esto, que lo piensen los sanos de cuerpo.

Dijo uno:

Pensar en la vejez o en la enfermedad, estando sano y no viejo, te da valentía y haces mal lo que tenías que hacer bien hecho.

Si además de estar sano y no ser viejo, tienes un buen cargo, ¡detente bien en lo que hagas, porque la muerte te puede llegar con el “Ve” que Dios le mande!

Desperté, oí:

Qué alegría es, tan grande, pensar:

“Señor, dime qué hago
para que el pecado frene
en estos tiempos tan malos”.

“Señor, si mi servicio Te niego,
mándame pronto el castigo,
que viva arrepentimiento”.

El espíritu, con el cuerpo,
se esconde y se tapa.

Luego, llega la muerte
y ya no hay persona.

Queda algo que no sirve
ni para Gloria ni para pecado.

La muerte se llevó el espíritu.
¡Ya Dios le daría su Mando!

Ya, con la muerte, iba a Gloria
o a sitio de condenados.

¡No pienses que vas a Gloria
si a Dios le niegas su Mando!


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Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C8

domingo, 30 de agosto de 2020

Ama mucho a Dios a tu manera

En Sueño Profético hablaban de Elegidos por Dios, de cuando vivieron con materia. Éstos se ofrecieron a Dios y Dios los eligió.

Cuentan de una mujer que vivió amando mucho a Dios y que sirvió su Amor para Enseñanza de muchos. Esta mujer va a ser hoy el punto de Enseñanza.

Dijo uno:

Cuatro puertas no había de su casa a la mía. Era joven. Y a mi madre y a mi abuela –que mi madre unos años mayor que ella era–, siempre las buscaba para ampararse en la vida de sufrir que llevaba de trabajo y de desprecio. Esta mujer fue, desde su niñez, huérfana de padre y madre, y se crió con una familia que se hizo cargo de ella como instrumento de trabajo que coges, y dejas cuando no sirve. Se casó, y con el marido empezó vida de grande sufrir, en silencio. Pues a los dos hijos que tenían los crió con el ejemplo de buenos modos y llanto, pero lágrimas por dentro. Decía esta mujer, que quería que su sufrimiento fuera sólo para ella, y que así, el día que Dios ya mandara retirar sufrimiento, sus hijos no habrían vivido sufrir de mayores; y que sus ruegos podían a Dios alcanzar para que su padre sintiera el amor de los hijos, aunque a ella no llegara. Esta mujer, consolaba a mi familia cómo su sufrir llevaba: siempre con Dios en su mente, siempre con Dios en su acción, siempre respondiendo Paz cuanto de ella se aprendió.

Desperté, oí:

Estas palabras decía esta mujer,
que sin duda a Dios tenía:

Ama mucho a Dios a tu manera,
y sufrir dejas en puertas,
y a tu espíritu no llega.

Ama y piensa en el Sudor que Dios tuvo
por el sufrir que Le dio el hombre.
      
Ama y rompe medida
del Amor que el hombre llama.

Si este Amor le falta al hombre,
el sufrimiento no calla.

Yo callo y a Dios Le pido
que olvide lo que Le hagan.

Esto tan sólo decía
a mi familia en mi casa.

Hoy lo dictamos en Gloria
como Pregón que Dios manda.


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Libro 14 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo II - C2

viernes, 28 de agosto de 2020

Luz del Cielo

En Sueño Profético decían:

Este Mensaje se titula “Luz del Cielo”, para el que sólo vive luz de la Tierra, para el que cree que él nada necesita, para el que no ve nada malo, para el que no cumple con Dios porque esta Luz necesita. La Luz del Cielo, al que Aquí la pida, Dios le manda resplandores y el camino le ilumina, y ya nada hará mal, y verá vivir otras vidas en medio de oscuridad, como antes él vivía.

Dijo uno:

Todo lo que en la Tierra se hace mal, es por caminar con oscuridad y falto de Luz de Dios. Pongamos un ejemplo: si en lo material entras en una casa oscura, irás tropezando; y si hay peligro, irás corriendo un riesgo mortal. Si enciendes luz, ya ves, pero lo material, porque la luz de la Tierra no sirve para ver lo Divino. Ahora, si tú pides: “¡Dios mío!, quiero Luz para ver lo que esta luz me tapa cuando quiere que vaya en tu contra, cuando quiere que yo peque de palabras o de actuaciones que den escándalo, cuando quiere que me den desprecio para sellarme como hombre malo”. La Luz de Dios te hace hombre fuerte, te hace hombre sabio, te hace ver lo oscuro aunque te digan que es claro, te hace decir en público: “esa vida es de pecado”, aunque le quite maldad título o adinerado. Pero si tú tienes Luz, a todos los que no amen a Dios, a todo iras callando. 

Desperté, oí:

Cierto que la luz de la Tierra
no te sirve para Aquí,
si tú esta Luz desprecias.

La Luz de Dios te va diciendo:
“esto hazlo, esto no”.

La Luz de Dios te va juntando
con los que quieren Resplandor.

Todo lo que se hace mal,
por soberbia o por coraje,
es falta de claridad.

Que el que a Dios Le pide Luz,
ya le hace ver el mal,
y Dios le manda más Luz.

Vive antes Luz del Cielo,
y después la de la Tierra.

Porque esa no te sirve
por mucho que creas que sabes.

El saber, más se demuestra,
queriendo lo que más vale.


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Libro 14 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo II - C3

jueves, 27 de agosto de 2020

Aprended a conocer al lobo

En Sueño Profético hablaban hombres que siguieron a Dios Hombre y que tuvieron amistad con los Discípulos. Aquí dicen palabras que oyeron para enseñar a cómo poder Seguirlo.

Dijo uno:

Yo Le oí una mañana decirles:

Tendréis que quedar ciegos y mudos en los momentos que Yo no os dé Mando. Ciegos, para no ver lo que habéis visto. Y mudos, para no contestar a la pregunta que hayan preguntado. Que el que os pregunte lo que Yo hago y no Me pregunte a Mi, no está dispuesto a recibir Mando”.

“El Mando que mi Padre da en Mí, Yo a vosotros os voy dando. Y ya, lleváis mi Nombre”.

“Aprended a conocer al lobo, aunque el lobo quiera pasar por cordero”.

“Id siempre preparados para cerrar las puertas a los espíritus que os quieran retirar de mi Enseñanza para que vuestras obras vayan enseñando
”.

Desperté, oí:
Una Palabra dicha a sus Discípulos podía ser una Enseñanza para todo el que creyera que era Dios, aunque vieran a un Hombre.

Él no reservaba Palabras.

Es que no las pedían para llevarlas con la misma medida que Él las daba.

Unas veces tenías que no saber nada, y otras veces tenías que decir palabras para que al Maestro buscaran.

“Maestro, no me dejes que yo diga que esto es mío”. Casi siempre ésta era la despedida.

Querían ser ciegos, sordos o mudos antes de romper el Mando que su Maestro les había dicho.


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Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C6

miércoles, 26 de agosto de 2020

Soy Dios

En Sueño Profético decían:

¡Qué poco ha cambiado el hombre en querer saber de Dios, si haces un recuento y piensas!

Antes de hacerse Hombre, no creían que existiera. Se hace Hombre, con su Palabra Divina, que forma Carne, y donde nace es Madre de Dios y Virgen, primer Sagrario que Dios Padre elige para enseñar a vivir al cuerpo amando su Gloria y despreciando el pecado, que éste no puede entrar en su Reino. Siendo el Dueño de todo, deja que el hombre Le ofrezca un rincón de casa para vivir. Siendo Niño, sus Hechos ya iban diciendo “Soy Dios”. Sigue su Enseñanza con su predicación, sin elegir sitio ni personas acomodadas, ni pudientes. Por donde iba pasando, un Hecho dejaba que te hacía pensar en otro Mundo. Lo matan y su Espíritu no deja de mandarlo como prometió, para que siempre tenga el hombre su Presencia. Pues el hombre sigue igual: sin querer saber de Dios, de su Gloria, de su Reino, de los espíritus que no tuvieron cuerpo y de los espíritus que ahí tuvieron cuerpo.

Dijo uno:

El Espíritu de Dios, cuando coge aposento en una carne para que dé su Mando, esta carne –cuerpo– tiene que ir suplicando para que oigan este Mando. Y mayoría de veces, con palabras o gestos de desprecio.

Desperté, oí:

El hombre, por no aceptar la Existencia de Dios hay muchos hechos de Dios Hombre perdidos.

Pero sigue con su indiferencia.

Que este Caso, que hoy está ocurriendo, te lo justifica y te lo comprueba.

¡Es vergonzoso que Dios esté ofreciendo su Reino y el hombre Le responda con desprecio o con insultos!

Que estos insultos pueden ser con indiferencia o con olvido.


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Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C4

martes, 25 de agosto de 2020

Este Amor tiene que formar escándalo

En Sueño Profético decía Teresa de Ávila:

¡Qué lástima que el hombre no espere estas Palabras que bajan del Cielo! Y luego tenga que escarbar para buscarlas. Que luego puede agrandarlas o achicarlas.

Si las achica, ofende a Dios, y si las agranda, Lo enfada, porque quiere poner saber, no sabiendo él nada.

¡Qué lástima que los hombres hagan sufrir al que este Amor se hace Mando y a él le manda!

Este Amor, a donde llega, tiene que formar escándalo.

Es brasa de Lumbre Divina, que te quema, y tú, ya, no puedes callarlo.

Yo siempre lo comparaba, y lo sigo comparando, con algo que entra en ti y la vida te está dando, que es vida que da sufrir, lágrimas y llanto, y ves caminos que te pinchan y tú intentas pasarlos. Que después, en este Camino, al final, ya los pinchos se han cambiado por un sentir que no sientes porque el éxtasis ha llegado.

Desperté, oí:

¡Ay éxtasis que eras muerte
con vida de Vida Eterna!

¡Ay éxtasis que eras Vida
el tiempo que estaba muerta!

Debería el hombre aprender
a conocer
al que Dios trae a su Gloria
cuando aún vive con cuerpo,
y no daría castigo
de abandono y de desprecio.

Mis lágrimas las sujeté,
dentro y fuera del convento,
cuando quería contar
el éxtasis
y recibía el desprecio.

¡Ay desprecio de maldad,
de hipócritas y de incrédulos!

¡Ay desprecio que aguanté,
porque a Dios llevaba dentro!

Él me cubría de Amor,
y yo no guardé silencio.

Si lo guardo,
hoy no estoy a su servicio,
sin cuerpo.

¡Bendito sea
el sufrir que me dio
el no guardar yo silencio!

TERESA DE ÁVILA


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Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C5

lunes, 24 de agosto de 2020

El espartero

En Sueño Profético decían:

Si tu espíritu se enferma, ya no le puede servir a Dios, aunque tu cuerpo quiera. Pero el espíritu es el que le manda a la materia. Y si el cuerpo quiere que se detenga, si el espíritu está bien alimentado, lo verán con más fuerza, alimentado con alimento Divino, que es oxígeno para el espíritu. El oxigeno del cuerpo no sirve para el espíritu. El del espíritu lo mantiene sano y joven.

Dijo uno:

Yo conocí a un hombre y tuve íntimo trato con sus nietos por oírlo a él hablar cuando hablaba del pasado. Espartero era su profesión, y dejó de trabajar dos semanas antes de morir, y murió con los cien años, pero su espíritu no había nunca enfermado. Sufrió mucho en la vida porque se crió sin padres, por morir cuando él no los conocía. Los hijos también murieron jóvenes, y con los nietos vivía. Que éstos son con los que yo intimidad tenía. Pues este hombre hablabas con él y a más de un joven distraía. Siempre te hablaba de Dios y este Nombre le salía con alegría y Amor. Decía:

“Por mucho que la vida sufrimiento os dé, que vuestro espíritu no coja consejo en contra de Dios. Porque ya vuestro espíritu se pondrá enfermo, no le servirá a Dios y le abrirá las puertas al pecado. Coged la salud de dentro a fuera”.

Desperté, oí:

A muchos enseñó el espartero,
para que el espíritu cuidaran
y no se enfermara.

Cien años tenía,
y sus palabras
a todos bien les venían.

No quería la vejez
por el desprecio del hombre,
no por ser viejo él.

Decía,
mientras hacía los capachos y las esteras:

¡Qué contento estoy con Dios,
que la vejez no me llega!

Ni la vejez,
ni mi espíritu se enferma.

Yo quiero servirle a Dios
para que muchos Lo quieran.

Y que mi nombre se oiga
cuando a mi cuerpo echen tierra.

Contadme alegrías o penas,
que yo os daré respuesta,
aunque la respuesta me viene
del que la vida me deja.

Va el Mensaje a que el espíritu,
si tú quieres, no se enferma.

Pero tienes que seguir a Dios
en la alegría
y en los sufrimientos que llegan.

Porque esa vida es muy corta
comparada con la Eterna.


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Libro 29 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C7

domingo, 23 de agosto de 2020

Los Discípulos de Dios

En Sueño Profético decían Palabras que Jesús dijo a sus Discípulos:

El que os aconseje, retirando vuestra acción, no cree que vais mandados por Mí”.

“El que crea en Mí y a vosotros os diga ¿por qué ha hecho eso el Maestro?, es tentado, porque ya quiere que también vosotros pongáis dudas en lo que mi Padre dice en Mí para que el hombre no pierda la Gloria. Que la Gloria es Sitio Purificado, por estar mi Padre, Único Dios y Creador de los dos Mundos. Allí no existe cuerpo, hasta que Yo vaya al Padre con Cuerpo. Y aunque es el mismo Dios que estáis viendo, ya quedará por los siglos sin fin: Mi Padre sin Cuerpo, Yo con Cuerpo de Carne, y el Espíritu Santo, que es mi Mando al hombre para que en el hombre Me vea a Mí”.

“Aceptad mis Palabras como aceptáis la estatura del cuerpo, el color de los ojos. Tened fuerza para vencer las tentaciones que el espíritu satánico os pondrá. A Mí, siendo Dios, también intentará Tentarme
”.

Desperté, oí:

No podían ser Discípulos suyos
los que no veían bien
el Mando que daba.

No podían ser Discípulos suyos
los que admitían
que del Maestro hablaran,
aunque no fueran ofensas
y adornaran las palabras.

El adorno era engaño,
y la duda la agrandaban.

De tantos hombres que había,
cuando Dios de Hombre estaba,
once son los que Le sirven,
aunque doce se contaban.

Dejó que fueran los doce,
hasta dejar Enseñanza.

El que Dios elige,
nunca dijo:
¿Por qué pasa?

Puso Confianza en Dios
y depositó Esperanza.


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Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C2

jueves, 20 de agosto de 2020

Si el que Me sigue no sufriera, no sabrían el que Me amaba

En Sueño Profético decían Palabras que Dios Hombre dijo a sus Discípulos:

Si el que Me sigue no sufriera, no sabrían el que Me ama. Igual que si Yo no dejara mi Permitir al hombre, ya no sería Dios, sería un dictador, que este mando sólo sirve para la materia.

Habrá buenos que sufran al mando, y habrá malos que más mando quieran. Éstos no Me siguen, éstos perseguirán siempre mi Nombre, hoy mi Cuerpo, hasta verlo destrozado por la ira de los demonios.

Ya, el que cree en Mí, tiene grande sufrimiento de ver lo que el hombre Me da a cambio de ofrecerle Yo mi Reino. El que Me sigue, ya sufre de ver el trato que Yo permito. Los que siguen diciendo: “Maestro, ¿qué hago?”, Yo les doy Fuerzas y Luz al espíritu, para que conozcan el bien y el mal.


Desperté, oí:

Siempre tenía el Maestro algo nuevo para sus Discípulos.

Esta era la Enseñanza que Dios Padre en el Hijo enseñaba.

Estas Palabras hacían pensar al que no Lo seguía:

Si el que Me sigue no sufriera, no sabrían el que Me amaba”.

Podías seguirlo por ti, no por amarlo para estar con Él en su Gloria.

Así, era interés de la Tierra, no Amor de espíritu al Único Dios.

El que este Amor practique, a todo le cambia el color, cuando de Dios te retiren el sufrimiento y el dolor.

      
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Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C1

martes, 18 de agosto de 2020

El amar a Dios te cambia lo que ves

En Sueño Profético decían:

Si amas a Dios, tienes que decirlo en el Prójimo.

Si amas a Dios, tienes que levantar al caído y ponerte en su lugar:

Si tú fueras el caído y te dejaran en el suelo, y juzgaran al pasar…

Si tú amas a Dios, eres distinto del que no vive este amar.

Dijo uno:

El amar a Dios te cambia lo que ves, y te hace pensar:

“Si yo lo veo así, puede que sea mi mirar. Yo voy a responder haciendo el bien, y Dios me lo pagará. Cuando me llegue el pedir, Dios me responderá. Y cuando dé una caída, si yo no la quise dar, Él me pondrá en mi camino a alguien que me levantará”.

No hay Paz más grande que hacer el bien sin juzgar.

Desperté, oí:

Antes de juzgar,
tráete a tu memoria
pasos que diste
o pasos que dando estás.

Si a Dios amas,
tú tienes que ayudar
en aquello que Dios manda,
que Él bajó a la Tierra a enseñar.

El Amor a Dios
no lo oculta el que lo tiene,
porque Dios no se lo deja ocultar.

Él no obliga,
pero cuando tú te ofreces
en aceptar lo que venga
y en repartir caridad,
cuenta ya con este Mando,
aunque no oigas mandar.

No oyes, pero lo sientes,
y el sentir te lleva a actuar.

Si a Dios amas de verdad,
te acompaña el personaje
que su nombre es Caridad.


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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C5

lunes, 17 de agosto de 2020

Vence la tentación

En Sueño Profético decían:

Si el que Dios elige se negara a lo que Él le manda, no sería verdad el Mando de Dios, y Dios no lo habría elegido.

Dios elige cuando tú vas por su Camino, aceptas lo que te viene y te haces más amigo de lo que sabes que Él quiere: Caridad, Amor al Prójimo y olvido. Olvido para el Perdón, cuando éste es pedido. Que esta petición es a Dios ir allanándole caminos, ir dando ejemplo de la Enseñanza que sale del Cielo y al Cielo vuelve, por ser vida que baja al cuerpo.

Si esto el hombre lo practicara, con el ejemplo por delante, habría abundancia de Elegidos.

Pero, ¿quién quita el obstáculo del camino para que otro no caiga después de haber él herido y a Dios mandar la plegaria?:

“Señor, sufro porque sé que Tú sufres”.

“Señor, no permitas que Te culpe”.

“Porque si yo Te culpara, no merecería el Perdón al espíritu, que es el Perdón que Tú das”.

Pues el perdón del hombre es un cumplido que, mayoría de veces, no llega al espíritu.

Desperté, oí:

El Elegido, antes de ser Elegido, vive normal todo el sufrimiento que le llega.
     
Vence la tentación.

Que de no vencer tentación, en contra de Dios te llevará el sufrimiento, buscando razón.

Una vez que el Elegido lleva Mando.

Que este Mando va venciendo, y el Elegido nunca será vencido.

Si se niega a presentar lo que Aquí al espíritu le han dicho, Dios no lo habría elegido.

Antes de darle Dios Mando y decir “Ve en mi Nombre”, había recogido fruto el Prójimo, del fruto que Dios quiere.

Que sin señal ni letrero, a Dios lleva por delante.

Luego, es Mando que no lo corta el hombre.

Y aquel que intente cortarlo, en contra de Dios se pone.

Mando de Dios dado Aquí, no puede pararlo el hombre.


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Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C6

domingo, 16 de agosto de 2020

Para servir a Dios no te hace falta el tiempo

En Sueño Profético decían:

Para servir a Dios no te hace falta el tiempo, tú Le mandas el Amor y Él ya te manda el tiempo.

Para seguir a Dios tienes que tener por dentro algo que no puedes explicar, pero que todos van viendo.

Cuando Le sirves a Dios se va de ti el cansancio y el sueño.

El cansancio ve que no le ponen descanso, y el sueño no se ve necesario, porque lo desprecia el cuerpo.

Todo es Amor queriendo, que no le hace falta descanso ni sueño. El tiempo sí lo precisa, pero de esto Dios es Dueño.

Este Dueño te da algo que ya a la vida sin Él yo le llamo sepultura.

Yo, cuando oía hablar de las cosas de la Tierra, horas y horas hablando, y el nombre de Dios no oía, ya los veía distintos.

Aquellos que yo veía, ya daban la despedida cuando a mí me veían.

El tiempo ya les faltaba, porque Amor a Dios no había.

Desperté, oí:

¡Ay Amor que llevas tiempo
para el que este Amor quiera!

¡Ay Amor que eres ladrón,
robando sueño y pereza!

Este Amor se hace ladrón
para quitarte peligros
de la mala tentación,
cuando el sufrir te ha acudido
y quiere culpar a Dios.

Ama a Dios con avaricia,
que el Amor no quede dentro,
que todos miren tus pasos,
y ya Dios te mandará tiempo.

TERESA DE ÁVILA


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Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C7

viernes, 14 de agosto de 2020

Sabiduría Divina que el Padre manda

En Sueño Profético decían:

Todo lo que el hombre Le hizo a Dios fue por decir Dios: “Yo Soy Dios, que mi Padre Me ha enviado del Cielo, y mi Nombre es Dios Hijo, el Mesías, que se hace Hombre para que el que quiera entre en mi Reino.

Yo Soy el Salvador del espíritu y el Bálsamo del cuerpo.

El que cree en Mí, Me busca en la alegría y en el sufrimiento
”.

Dijo uno:

Ésta era una de las Predicaciones que casi siempre ponía delante cuando iba a sitios que no era conocido como Dios.

Desperté, oí:
Cuando era conocido, Le hacían preguntas, y Él contestaba con la Sabiduría Divina que el Padre en Él mandaba.

Yo Le oí más de una respuesta con estas Palabras:

Eso no lo has dicho tú. Eso viene de mi Padre para que Yo conteste y aprendan los que Me oyen. Los que Me oyen, aunque ahora no estén aquí.

Pero el que crea en Mí, luego os oirá a vosotros y ya Me estará oyendo a Mí, por ser mías las Palabras
”.

Otras veces, a las preguntas que le hacían sin creer que era Dios, contestaba sin Palabras.

Primero veían su Poder, y luego oían sus Palabras.

Había veces que en el mismo sitio hacía una tapia de sombra en medio de los hombres.

Otras veces de viento. Estando las ropas puestas juntas, unas se balanceaban con fuerza, y otras quedaban como telas que el escultor pone.

Vieron salir de los cuerpos, a su Mando, a los demonios.

Esto se cundió y no pudieron callarlo, como todo lo que hace Dios.


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Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C5

jueves, 13 de agosto de 2020

Amor con admiración al Cielo

En Sueño Profético hablaban hombres que quisieron amar a Dios y Dios los traía a su Cielo. Eran hombres que buscaban dónde se encontraba la Paz. Eran hombres sin avaricia al dinero. Eran hombres de palabras siempre templadas, porque pensaban en el Cielo. Eran hombres convencidos de poner a Dios primero. Y yo tuve trato con ellos.

Un día estaban hablando y poniendo distintos ejemplos, todos eran de un Amor con admiración al Cielo.

Ya, uno dijo:

“Mira si estoy convencido de que Dios está delante de todos los actos del hombre, que yo hay veces que cuando estamos reunidos hablando varios de Él, pongo una silla a mi lado sin dejar que nadie la ocupe, porque sé que está allí”.

Pues estos hombres tuvieron Apariciones y conocieron la Gloria antes de enterrar su materia. Tenían su inteligencia, nunca ocupada por el pecado. Enseñaban a los hijos a que echaran su mirada al descalzo y al desnudo, a que cogieran moneda y la pusieran en la mano del que caridad pedía en nombre de Dios. Enseñaban a vivir sin trabajo y con consuelo.

Desperté, oí:

Estos hombres se juntaban,
siempre hablando de Dios.

Si no nombraban su Nombre,
era Prójimo, Amor.

Era buscar a los hombres
que sabían que pecaban.

Era comparar la vida,
de mentiras, de marañas.

Que la Verdad era Dios,
sus familias y sus casas.    

Que el tiempo se llevaría
la juventud, las familias,
y quedaría la maraña.

Que si tú vivías Verdad y Vida,
vivías en contacto con Dios.

Esto ya es de otros hombres:
¿Por qué no elegirlos Dios?

Si tenían pies en la Tierra
y espíritu en flotación.

Si Dios buscó a pecadores,
¿por qué aquí no bajar Dios?


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Libro 14 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo II - C4

miércoles, 12 de agosto de 2020

Se ve más la mancha cuando cae en lo limpio

En Sueño Profético decían:

Tienes que advertir al que te sigue, que lo malo está mal hecho –aunque él no lo haga–, para que lo vea mal hecho. Si lo bien hecho se cunde, más se cunde lo mal hecho. Y si lo mal hecho está mal hecho en uno que a Dios no siga, peor está hecho en el que ven que tiene amistad con el Lugar que estas Palabras escribe porque Dios manda que se dicten.

Dijo uno:

No es de extrañar que el Elegido dé caminos a seguir para que las fuerzas del mal aquí no puedan llegar. Ésta era una de las Enseñanzas que Jesús más repetía a sus Discípulos y al que Lo seguía:

No hagas presencia en nada que pueda ensuciar mi Enseñanza. Pensad, antes de que os vean, que mi Nombre lleváis delante. Si la acción es de mi Enseñanza, más os destacaréis del que quiere desmentir que Yo soy Dios enviado por mi Padre para que el hombre Me busque y Yo vaya a buscarlo. Si lo mal hecho está mal hecho en el que no Me sigue, en el que Me sigue va ensuciando el Camino que Yo voy enseñando”.

Desperté, oí:

Se ve más la mancha cuando cae en lo limpio, que cuando en lo sucio cae.

Y molesta más el ruido en el que mejor oye.

Pues el que seguía al Maestro, en el bien o en el mal que él hacía, más su Nombre se cundía.

Antes de que Lo nombraran, en el que el bien o el mal hacía, salía el Nombre del Maestro.

Si era el bien, con alegría. Y si era el mal, lo cundía el que no creía o el que no quería que se hablara bien de Dios.


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Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C6

martes, 11 de agosto de 2020

Enseña al niño a que viva amando a Dios lo primero

En Sueño Profético decían:

Si eres de Dios, haces el bien y ya lo olvidas, y estás pensando dónde otro bien hacer, que sin tú saber están esperando. Porque se lo piden a Dios, y Dios, a ti, te está mandando.

Si eres de Dios, tú haces el bien y vas enseñando.

Dijo uno:

Si a los niños se les enseñara a hacer el bien como se les enseña a comer, hablar y andar, y antes de cada enseñanza, el Nombre de Dios se pusiera con estas palabras…

En la comida decir: “Señor, que este alimento sea dado por ángeles de tu Gloria”.

En las primeras palabras, nombrarle a Dios, diciéndole dónde está Dios, con la mirada en el cielo.

Cuando ya hable el solo, se le nombra a Dios de Niño, diciéndole que Dios fue primero Niño, y por eso son los niños para Él los primeros. Pero tienen que quererse todos los niños para que Dios esté contento.

Ya, cuando el niño ande solo, que el mayor le dé la mano y lo lleve donde Dios está esperando para entrar en tu cuerpo, dando Gloria y perdonando.

Desperté, oí:

Era el nombre de los niños
lo que se oía en el Cielo.

Y culpaban al mayor
de que al niño no enseñaran
que para Dios
eran ellos los primeros.

Si Dios quiere que te hagas niño
para entrar en su Reino,
cuida el espíritu del niño
y después cuídale el cuerpo.

Enseña al niño a que viva
amando a Dios lo primero,
y ya, cuando llegue a hombre,
su mirada será para el Cielo.

En momentos de alegría
o en momentos de sufrimiento.

Que esto te ayuda a vivir
hasta que vengas al Cielo,
como pediste ahí
cuando vivías con cuerpo.

Ten siempre en tu memoria
que los ángeles y los niños
son para Dios los primeros.


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Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C9

lunes, 10 de agosto de 2020

¡Señor, llévame por tu Camino!

En Sueño Profético decían:

Si vas por el camino de Dios,
algo de Dios vas sintiendo.

Él te manda claridad
y te avisa en los momentos
que del Camino te vas.

Te avisa, dejando la Libertad.
Pero coges el aviso
y dejas la Libertad.

Dijo uno:

Yo oí una mañana, a Dios cuando vivió con Cuerpo, estas Palabras, que hoy mandan que las dicte:

Donde mis Palabras no las cumplan, no seguid, que ese no es mi Camino y podéis perder mi Reino, que es el que Yo os tengo prometido. Mi Camino es duro si falta Amor a mi Padre y si dudáis de que mi Padre vive en Mí y Yo iré al Padre cuando mi Cuerpo levante la piedra y deje la fosa vacía, premiando y sembrando remordimientos”.

Desperté, oí:

Pocos cogieron Premio,
porque pocos Lo creyeron
y pocos Lo buscaron.

Su Camino, si lo sigues,
tráete a la memoria:
¡corona de espinas,
heridas de Pies y Manos
que sujetan unos clavos
que llevaron a la agonía!

Pero cuando esto pienses,
haz que lo supere
el pensar que está Vivo,
con Cuerpo de Carne,
esperando que el hombre diga:
“¡Señor, llévame por tu Camino!”.

Y que el sufrimiento no me aparte.

Si no tuve sufrimiento,
es que vivo sin amarte.

Quiero ir por tu Camino
y así Tú me esperas
en tu Reino Prometido.


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Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C6

domingo, 9 de agosto de 2020

¡Ay Amor, que tanto esperas que el hombre siga tus Pasos!

En Sueño Profético hablaban del Amor a Dios. Ponían comparaciones de este Amor cómo era, pero faltaban palabras que ya las sigue Teresa:

Este Amor,
para entenderlo,
tienes que estar siempre hablando
de Dios Vivo
y olvidar que estuvo muerto.

Muerto para la Tierra.
Para el Cielo,
siempre Lo vieron Vivo.

Yo, cuando veía
que de Dios no estaban llenos,
me hacía esta pregunta
cuando estaba, en mi oración,
esperando el éxtasis:
¿Cómo se verán vivos,
sin sentir este Amor
que te lleva a la Locura,
Locura de un grande Amor,
que te salen las palabras
sin darte tiempo a juntarlas,
por ser Dios el que las habla?

¡Yo, me sentía una Fuerza…,
cuando me traía a mi vista
como Él se presentaba!

Una noche de esas frías,
no por frialdad de cuerpo,
era la frialdad de mi espíritu
por no tenerlo contento,
fue ponerme de rodillas
y verme que iba subiendo
y una voz me decía:

Teresa, todavía te falta tiempo
para que hagas llamada,
y crean que tuya no es la llamada,
que mi Mando vas cumpliendo
”.

Desperté, oí:

En este éxtasis sentí
las rodillas en el suelo,
pero yo no estaba allí.

Cuando todo ya pasó,
sentía por dentro fuerza
y unas ganas de gritar
para que todos me oyeran.

Cuando la calle pisé,
mi rostro algo llevaba
que me veían pasar
y clavaban sus miradas.
Yo quería transmitir
este Amor cómo se siente.

Yo quería oír decir:
“Teresa, ¿cómo no te cansas
de querer que todos oigan tus palabras?”.

Esto me hacía pensar
que mi Amor no lo callaba,
que por no guardar silencio,
por la noche Dios me buscaba,
que era lo que yo de día publicaba.

¡Ay Amor, que tanto esperas
que el hombre siga tus Pasos!

¡Ay Amor, que el hombre niega
que tu Vida está en la Tierra
cuando dos, de Ti, están hablando!

Este Amor, cuando te llega,
no sabes como abrazarlo,
si en silencio o en escándalo.

Yo lo abracé en escándalo,
y todavía el silencio no ha llegado.

Esto te hace pensar
que Dios quiere el escándalo.

TERESA DE ÁVILA


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Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C7

jueves, 6 de agosto de 2020

Dejad que los niños se acerquen a Mí

En Sueño Profético decían:

Si el hombre supiera valorar lo que valor tiene, no podría valorar nada con más valor que lo que va del Cielo.

El que vive el mismo tiempo que el que Dios coge para que queden en la Historia sus hechos y palabras –que Aquí ya le dieron–, si no valora este Lugar, no merece que sus súplicas –cuando le llegue el suplicar–, sean oídas Aquí en el Cielo.

Dijo uno:

¡Cómo puede el hombre vivir esta indiferencia sabiendo que se tiene que morir! Que poniendo tan sólo en su pensamiento la duda de si habrá otro sitio cuando el cuerpo muera, si esta duda le llegara, seguro que buscaría donde dijeran: “allí Dios dicen que habla”. Y cuando llegara al sitio, el “dicen” ya lo cambiaba, con las manos en el Evangelio y haciendo juramento a Dios: “Yo cundiré en todos sitios que Esto es Palabra de Dios”.

Desperté, oí:

Creer en la Gloria y no acudir donde digan que Dios habla: cambia el creer por desmentir y di que después de muerto ya no hay nada.

Decían mucho en la Gloria: ¡Hombre que valora al hombre y no valora lo que Dios le manda!

¡Hombres que valoran el pecado cuando dejan esta Enseñanza!

Enseñanza que debía estar unida a su Nacimiento, Muerte y Resurrección, en la Primera Enseñanza.

El hombre pone castigo con retirar las Palabras que Jesús dice a los niños:

Venid donde Yo estoy, que sois los primeros aquí en la Tierra y también en el Cielo”.

Y a los hombres les dice:

Dejad que los niños se acerquen a Mí, que yo les dejo contacto de mi Gloria, que es su mayor alimento para el crecimiento de sus cuerpos”.

“Y así siempre obedecerá el cuerpo al espíritu y no perderán mi Reino
”.

Si esto el hombre no enseña, castigo pone a los niños y pueden llegar a hombres y perder el Reino que Dios les ha prometido.


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Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C7

miércoles, 5 de agosto de 2020

El sufrimiento es lumbre

En Sueño Profético hablaban de quitar sufrimientos pudiéndolos quitar, o de dejarlos que crezcan porque hoy en ti no estén:

Al que pueda quitarlos
y no haga parada
ofreciendo su ayuda,
tienen que llegarle momentos
de acordarse de Judas
y pensar en la higuera
para quitarse la vida.

Que esa muerte es para el que queda.
Para él es la ropa de esa vida.

Él no muere,
él entra en otra vida,
donde no se nombra a Dios,
donde Paz no se respira,
donde todo lo que sale
es para que a Dios no sigas.

Dijo uno:

¿Quién puede ver sufrimientos,
mirar al Cielo y no quitarlos,
y que se tenga por cristiano?

Esto jamás puede ser:
tener bálsamo y venda escondida,
y estar viendo roto el pie.

Esto es sufrimiento
que tú puedes quitar
y no quieres saber de él.

Desperté, oí:

Amar a Dios,
tener remedio para quitar sufrimientos,
y no quitarlos,
no esperes la ayuda de Dios,
porque Lo ofendes en vez de alabarlo.

Dios no te obliga,
pero sí te pide entrega a tus hermanos.

Entrega para ayudar
a carga que veas arrastrando.

Que esta carga puede ser de espíritu,
que es el peso que más pesa
cuando el sufrir se ha agrandado.

Si el hombre se preocupara
de ayudar al sufrimiento,
no crecería, y se achicaría.

El sufrimiento es lumbre
que el hombre le echa troncos
en vez de echarle agua.


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Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C8

martes, 4 de agosto de 2020

Dios, Único en Poder, en Amor y en Perdón

En Sueño Profético decían:

¡Dios, Único en Poder, en Amor y en Perdón, qué mal te recibe el hombre, aunque no vea tu Imagen!

El hombre ve que eres Tú en aquel que de Ti hable, porque el Lugar hará presencia de un Poder grande.

¡Dios, Único en Poder, en Amor y en Perdón, cómo se atreve el hombre a vivir sin este Amor, que todo de Ti depende!

El que sólo ama, ya cuenta con el Poder y con el Perdón. Pero no quiere pedirlo, quiere, día a día, aumentar más el Amor. Y ya, el Amor, que lo pida en todo lo que no ofenda a Dios, en todo lo que desees que nunca te haga falta el Perdón.

Hay cosas que desea el hombre y que sufre si no llegan. Que si éstas le llegaran, Perdón a Dios Le pediría y, a la vez, ruegos que desbarataran aquello que él no veía porque en Dios no confiaba.

Desperté, oí:

El Poder de Dios te hace
que en ti Lo vean.

Porque ya ven tu vivir,
que es vivir de otra manera.

No buscas Poder ni Perdón.
Buscas que el Amor te crezca.

Su Poder y su Perdón lo pides
hasta que el hombre comprenda.

Cuando comprende, ya ama,
y retira de su mente
cosas que le mortifican
y que no le hacen falta.

El que se llena de Amor,
haciendo lo que Dios quiere y te manda,
éste no te manda él,
te manda lo que Dios quiere que tú hagas.

Él utiliza el Amor, el Poder,
y el Perdón ya Dios lo manda.

Por eso, amando mucho,
Dios Poder a ti te manda.

Que esto es milagro o prodigio
que Dios manda que se haga.


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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C4

lunes, 3 de agosto de 2020

Si puedes quitar sufrimientos, no lo pienses y quítalos

En Sueño Profético decían Palabras para decirlas y practicarlas. Que aquí quedan hoy escritas para que sirvan de Enseñanza:

Si vives la Palabra de Dios,
tu vivir hace camino a la Gloria.

Si a Dios buscas
y te ofreces a su Mando,
no hay trabajo que después
dé más descanso.

Si sufres por el que está sufriendo,
tú no puedes olvidar el sufrimiento,
y tu oración mandas al Cielo.

El que vive mejor,
menos se acuerda
del que está sufriendo.

Si el que tiene de sobra,
al sentarse a la mesa,
pensara en el hambriento,
las horas de la comida
serían para él un sufrimiento.

Vivir sin acudir al Prójimo
no es vivir,
aunque vivo te vean ahí.

Dijo uno:

Te voy a decir, con el Mando de Dios, unas palabras que mucho se oían en mi casa:

Si puedes quitar sufrimientos, no lo pienses y quítalos, para que cuando a ti te lleguen puedas decir: “Señor, mándame quien me ayude”.

Sufrimiento con ayuda, Palabras de Dios cumplidas.

Desperté, oí:

Culpaban en la Gloria
al que no tenía sufrimientos,
del que grandes los tenía.

Que lágrimas con pañuelo,
lágrimas al suelo no caían.

Y comer teniendo de sobra,
si pensabas en Dios,
comida repartías.

El sufrimiento
el que es de Dios,
va al sufrimiento a buscarlo.

El que no es de Dios,
cambia el camino para no encontrarlo.

Si sufres por el que está sufriendo,
tú no puedes olvidar el sufrimiento.

Estas Palabras las ha oído el espíritu
en la Gloria de Dios Padre y de Dios Hijo.


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Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C8

domingo, 2 de agosto de 2020

Pídele a Dios abundancia por ser Instrumento para el Cielo

En Sueño Profético decían:

Por mucho que a Dios Le pidas, piensa que Le pides poco. Él te manda y te ilumina, por ser el Dueño de todo.

Cuando oigas “yo te doy, o te he dado”, di que están nombrando al Cielo, porque el que Dios elige, de Aquí salen ya sus hechos.

Pídele a Dios abundancia por ser Instrumento para el Cielo.

¿Quién mejor que Dios sabrá tus hechos y tus pensamientos?

Aquel que cree que a Dios Le da, aún le falta comprender lo de la Tierra y el Cielo.

Y pensar: ¿qué doy yo al Dueño de mi vida para cuando muera el cuerpo?

Del cuerpo me deja dueño, si yo no quiero mi cuerpo, pero, ¿y luego el espíritu?

Al hombre le falta creer en esta Vida del Cielo, y saber: esto hago bien y esto hago mal hecho

Dijo un espíritu con Mando de Dios:

Piensa que llegará momento que quieran servirte y ya no te sirvan. Que quieran oír de ti estas Palabras y anden detrás sin poder oírlas.

Tú pídele a Dios abundancia en todo lo que te sirva para cundir sus Palabras.

Desperté, oí:

Pídele a Dios abundancia,
repetían en la Gloria.

Pídele, que Él ya sabe
que el pedir te hace falta.

Te hace falta
para quitar enfermedad del espíritu.

Para alimentar la carne,
para vestir al desnudo
y para acercar a Dios,
que Lo tienen en olvido.

Pídele a Dios abundancia
aunque nunca la hayas pedido.

Pues Dios sabe como hace
la petición el Elegido.

Si creyeran lo que dictan,
que esto antes fue al espíritu,
verían que lo que daban
no era al Elegido.


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Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C4

sábado, 1 de agosto de 2020

Hay un Dios, una Gloria, y puedes condenarte

En Sueño Profético se oía a Dios Hijo con estas Palabras: “No puede estar cerca de Mí el que ponga el desprecio en ti. Mis Palabras son dichas para no perder mi Reino, pero no para el desprecio. El desprecio no quería mi Resurrección en mi Cuerpo”. Sigue después de un silencio un Discípulo de Jesús: El que sus Palabras despreciaba no podía presentar su acción en momentos duros, en momentos de compasión, en momentos que sabías que Él esperaba y te veía. Que al saber que te estaba viendo, si no había Amor, ponías temor, y ya Él no daba Mando. Su Mando tenías que hacerlo estando siempre pensando: “Mándame, Maestro. Que mi cuerpo obedezca contento a tu Mando. Si tu Mando me cansara, dame doble Mando”. Desperté, oí: Si esto no fuera Verdad, no tendrían esta Fuerza estos Dictados que han sido dichos antes al espíritu sin cuerpo. Aquí ves a Dios Hijo, con el Mando de Dios Padre, cuando bajó a la Tierra. Sus Palabras son las mismas, por no haber ni otro Dios ni otra Gloria. Sólo hay un Dios con tres Imágenes. El desprecio, si lo tratas, tienes que poner delante: “Que hay un Dios, una Gloria, y que puedes condenarte”. Esto, con fuerte poder, puedes desprecio quitarte. Un Discípulo de Jesús. *** Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C6