En Sueño Profético decían:
Sufre más el Elegido con los que les llaman buenos y pueden ayudarle, que con los que tuvieron grandes defectos y hoy lo buscan para que de Dios les hable.
Los buenos –que llama el hombre–, si a Dios no llevan por dentro, llámales hombres que cumplen lo que otro hombre va diciendo, pero retírale pronto la palabra “hombre bueno”.
Dijo uno:
Estos buenos que viven isla sin Dios,
no sienten Prójimo dentro,
no viven esta Palabra
que su nombre es sin tiempos,
Dios Único,
sin progreso y con progreso.
Progreso: fuerza del espíritu del mal
que en el hombre está metido dentro.
Progreso: destrucción de la inocencia,
vida de angustia y de miedo.
Esto es el adelanto
de unos que no sintieron
Prójimo por dentro.
Prójimo e inocencia de niño
son lo que agrandan el Cielo.
Desperté, oí:
Tienes que querer ser bueno
para poder comprender
el empiezo del Mensaje.
Los que tuvieron defectos,
vuelven camino hacia Dios,
y a Dios quieren ayudarle.
Los buenos, buenos del hombre,
viven en la isla sin Dios.
Y el progreso y adelanto
abren las puertas a un mundo
de demonios disfrazados.
Coge el adelanto
para que te dé más tiempo
de adorar a Dios
y de buscar a hambrientos.
Si vieras que el adelanto
te retiraba de Dios,
no pienses: “es adelanto”.
Piensa: “yo vivo condenación”.
Si haces este pensar,
ya eres bueno de Dios.
***
Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C1
Ya a estas alturas esta la tierra como la isla del Mensaje
ResponderEliminarA la inocencia nadie le da importancia y al prójimo mucho menos