martes, 26 de agosto de 2025

El Permitir de Dios debería el hombre pensarlo

En Sueño Profético decían:

¿Cómo no verá el hombre dónde la Fuerza de Dios se encuentra?, que es su Mando, y que este Mando lo cumplan con alegría y sin protestas. Si existieran protestas, se presentaría la duda, pensando: “Esto es de la Tierra”.

No puede haber Mando de Dios, ni con protestas, ni con dudas, ni con tristeza.

El que Dios elige, siempre se guarda por dentro palabras que no las dice. Porque el decirlas sería contentar a los demonios que en contra de Dios actúan.

El que Dios elige para enseñar, antes de hablar, con su actuación y aceptación, ya va enseñando.     

Dijo uno con Mando de Dios:

Tu mando sea sin miedo y con más mando.

¿Quién mejor que el que Dios elige puede dar mando? Él verá cómo está el Cielo antes que llegue nublado. Nublado, no de las nubes. Nublado que nadie ve como Dios no le dé Mando.

Se va a poner comparación para que piensen si este Mando es del Cielo o de la Tierra:

El animal más manso, que su cría delante tuviera y se la quitaran poniéndole otra, ¿crees tú que le daría cariño y calor como a los hijos que le quitó el pastor? –suponiendo que fueran corderos–.

Pues si esto no fuera de Dios, el Instrumento no caminaría con Amor a Dios, contento y viendo, en el sitio de su cría, otra cría puesta.

Desperté, oí:

El Permitir de Dios debería el hombre pensarlo y estar en oración para el sufrimiento achicarlo.

Daban en Gloria más alta puntuación, a aceptar con alegría este Permitir de Dios.

Permitir que da Enseñanza, como la Virgen Madre, que todo lo de Dios Hijo aceptó.

Si te acercas un poco a Dios, ya podrás valorar este Permitir de Dios.

Este Mensaje sea dicho o prohibido donde el Instrumento quiera.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C8 

lunes, 25 de agosto de 2025

Él sabía que era pecado

En Sueño Profético hablaban de varias cosas diferentes, pero todas eran Enseñanza para saber lo que era pecado, lo que era más pecado y lo que era el mismo Satán.

Dijo uno:

De éste van los pecados y a éste le llegan, porque son por él mandados. 

Hay quien por disculparse dice: "Él sabía que era pecado", y hay quien tiene más fuerza y de Dios va alejando al que hace pecado. Pues en éste que lo aleja crece doble pecado. Pongamos una comparación con lo humano para entenderlo:

Si llegas a una botica pidiendo algo que mate y te declaras diciendo que es para ti, y el boticario te lo vende, seguro que va a la cárcel. Porque él tiene más culpa que el que quería envenenarse. Pues en el pecado tiene más condena el que ofrece el pecado para que más pequen, por ser éste un enlace de Satanás, que el que peca y no cumple, si no hace que pequen los demás.

Desperté, oí:

No quedas bien con Dios si dices "él sabía que era pecado" y lo dejas pecar.

Es boticario que vende veneno sabiendo que el comprador se va a envenenar.

Aquí no tiene disculpa aunque digas "él sabría por qué se quería matar".

Esto en las leyes del hombre.

En las de Dios tu deber es quitar de pecar.

Puede que uno vea la piedra y otro no vea el mural.

Puede que uno note que lo tientan y eche el paso hacia atrás, y otro no se dé cuenta hasta dejar de pecar.

Hay que estar preparados con la reserva de Amor.

Y puede que seas tentado y no llegues a pecar.

Pero el que vende el pecado o el que no quita de pecar que sepa que le está haciendo servicio a Satanás.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

viernes, 22 de agosto de 2025

El Santazo del pueblo

En Sueño Profético decían:

Ya tiene premio de Dios el que acepta lo que Dios dispone.

Si todo lo que va de Dios se aceptara convencido de que Dios lo quiere, se sentiría el consuelo de Él.

El hombre, mayoría de veces, quiere superar el Mando de Dios, y aquí le viene el fracaso.

A los Santos les llaman Santos, no porque tengan diferencia de otros hombres, los Santos es que viven la aceptación de esta Gloria: ya viven sin Libertad aún teniendo materia; por su Amor a Dios han aceptado todo lo que Dios ha mandado, sin replica y sin pedir cuentas a Dios; y lo que Dios ha permitido lo han aceptado sin violencia, y han pensado en el sufrimiento de Dios, y se han unido a su sufrimiento; han puesto todo en Manos de Dios y han enseñado este Evangelio. Esto es el vivir de los Santos que viven ya Santos ahí.

Dijo uno:

Esto que aquí refiero con el Mando de Dios, fue contado por mi padre, al que conocían como “El Santazo del pueblo”:

Decía que vio condenarse a uno por querer ir en contra del Poder de Dios; y que a otro, por aceptar la Voluntad de Dios, lo vio con grande fortuna. Eran dos que tenían unos terrenos sembrados, y que estaban preparándose para la siega cuando empezó un fuerte chaparrón en el que caía piedra. Este que se condenó ofendía a Dios a gritos. Y el que tenía la misma cosecha y en el mismo sitio dijo:

   –No siento la pérdida del trigo, siento el Sudor de Sangre de Dios Hijo, que con tus ofensas caerán sus gotas –y se tapó sus ojos para no verlo.         

Dicen que, cuando pasó la nube, fueron dos cuadrillas de hombres a ver dónde estaba el trigo para segarlo, y que fue tal la impresión, que allí manaban las conversiones. Las espigas del que aceptó la nube de piedra estaban derechas y secas; y las de la linde –las del amigo–, tumbadas, vacías las espigas y el terreno lleno de piedras, que jamás serviría para más siembra.

Desperté, oí:

No vio sólo este milagro
el que amaba a Dios del Cielo.

Fue todavía mayor:
en un poco de terreno
la Mano de Dios se vio.

Tenía una sementera
sin haber nadie sembrado.

¡Ni era el tiempo siquiera!

Lo hicieron los labradores
que labran desde la Gloria.

Lo hicieron sin el arado,
mientras la nube caía,
cambiando el trigo a otro lado.

Con dos hombres sólo basta
para que cojas ejemplo
de aceptar lo que Dios manda.

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Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C5 

jueves, 21 de agosto de 2025

El Infinito

En Sueño Profético hablaban del estudio que el hombre hace para llegar y saber del Infinito, y de lo sencillo que lo ve el que a Dios ama.

Comparemos al niño, al hombre de edad provechosa, y al que sus años se presentan con la palabra “anciano”:

El niño, nunca, por más que el hombre invente, podrá dejar de ser niño, hasta que Dios lo dé por hombre.

El que ya es hombre y está dando el provecho, por más que se esfuerce, pronto dejará de dar utilidad.

Y ya, la vejez, tienes que ponerla con el niño.

De las tres etapas del hombre, una es nada más de la que él dispone. Si piensas en las tres, ésta es una cortísima de tiempo en la vida de materia.

Pues si piensas en la edad provechosa, no merece la pena esa ansiedad que pone el hombre en querer investigar, pues para la Vida Eterna es andar camino adelante y después quedar atrás. Al infinito no llega el hombre por ser hombre. El Infinito es el sitio del Amor, un sitio que es para todos sin hacer investigación.

Desperté, oí:

Este Mensaje te hace
que pienses en la ansiedad
de querer ser en la vida, 
y que piense en el final.

¿Cómo Dios dejar al hombre
que camine por los sitios
sólo por investigar?

Si el hombre buscara a Dios,
todo podría alcanzar.

Pero tienen que enseñarle,
desde chico, el Amar. 

Y cuando ya sea hombre
de provecho, este Amar.

Y cuando llegue vejez,
se encontrará en un empiezo,
que el hombre llama final.

Esta es la investigación
que debe el hombre enseñar.

Y no que vive luchando,
una lucha sin final.

Que antes lucharon otros,
sin Infinito pisar.

Dedica siempre tu vida
al que la vida te da.

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Libro 4 - Te Habla El Profeta - Tomo I - C7 

lunes, 18 de agosto de 2025

Señor, que tu Amor me crezca

En Sueño Profético hablaban dos mujeres. Ya una subió la voz con estas palabras:

¡Que falta hace que mucho se hable del Amor a Dios! ¡Qué falta hace que el hombre ame!

Aquí refiero yo un hecho por si sirve de Enseñanza. Es el hecho de aquel día que juntas fuimos por agua:

Estando yo llenando el cántaro, tenía yo esta conversación:

   –¿Qué haría yo para que nunca se me quitara este Amor tan grande que siento por Dios? Hay veces que siento miedo; hay veces que digo no, no quiero lo que en la Tierra pudiera robarme tu Amor. Esto hay veces que me pone apenada, pero antes de quedar vacía mi imaginación, otra vez me viene: “¿Qué haría yo?”. Estando en este relato, fue cuando tú miraste para atrás y el Maestro estaba con los Discípulos a dos pasos. Esto se oyó de Él:

   –Mujer, con no querer de dejar de amar, ya no te dejará el querer. El querer es la Fuerza de mi Padre, que es el Dios que ahora ves. Cuando llegues a tu casa, suelta el cántaro y busca para enseñar a Amar. Todo el que beba de ese cántaro, no querrá dejar de amar, porque de Amor lo has llenado. ¡Anda mujer…, y enseña al hombre a que viva sin pecado! 

Despierta, oí:

Este arrobo es de Amor, 
y luego es de Enseñanza.

¡Qué Amor tiene esta mujer, 
que sufre por no perder 
el Amor que está aumentando!

Tan sólo con desear, 
ya Dios le manda su premio:

Que sirva su inteligencia 
para pensar en el Cielo.

Antes de ocupar el sitio 
las cosas de la materia, 
otra vez ella decía: 
“Señor, que tu Amor me crezca”.

Dios se presenta en la fuente 
y de Amor a ella la cubre.

La manda para que vaya 
hablándole a los hombres.

Hablándoles de Dios Hijo, 
hablándoles de Dios Padre.

Y el cántaro se lo llena 
de lo que no lo ve nadie.

Que luego ya lo verá 
el que quiera a Dios Padre.

Que allí veían al Maestro, 
y en el Cielo era el Padre.

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Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - C3

domingo, 17 de agosto de 2025

Fe y Bendición

En Sueño Profético decían:

Si la Fe vive contigo, no dejes que la Fe se vaya. Porque la Fe, si la cuidas, 
siempre te dará ganancias. 

La Fe siempre acerca a Dios. La Fe es una Palabra que debe de ir delante 
de la petición.

Pedir sin poner la Fe delante es petición a los hombres, que puede que no sea buena o que no puedas alcanzar aquello que tú deseas.

Dijo uno:

A Dios tienes siempre que pedirle con Fe y aceptación. La Fe te ayuda a vivir, y la aceptación más te acerca a Dios. Y ya te viene el pensar: “¡yo qué sé lo que es mejor!”.

Aceptar es devolver un Amor mayor a Dios. No digas yo tengo Fe, si no hay aceptación.

Desperté, oí:

Era la palabra Fe
la que llenaba la Gloria.

La Fe mueve la montaña.
Esto Dios Hombre aconseja.

¡Qué cierto que la palabra Fe
no va en lo que Dios no manda!

Fe y Bendición
no pueden ir a otro sitio
sin ser Camino de Dios.

Abraza la Bendición
como algo de tu cuerpo
que Dios del Cielo mandó.

Como la carne que une
sin ley de separación.

Ya la Fe te da la vida
y llega la aceptación.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C5 

martes, 12 de agosto de 2025

Esta Enseñanza es Luz Divina

En Sueño Profético contaban una Enseñanza que Dios Hombre les dio a su Discípulos y a otros que también Lo seguían:

Pecará menos, el que Me conozca y siga mi Amistad, y si Me sigue, no hará pecado, verá mal hecho todo lo que Yo digo que está mal hecho, y él no lo hará, por quitarme a Mí sufrimiento; contestará, sin pensarlo, cuando le digan que si me conoce: “¡Si, yo voy con Él para aprender lo que es de la Tierra y lo que vale en el Cielo!”; no podrá tener amistad con quien a Mí no Me conozca, porque tiene que oír hablar mal de mi Padre, que es hablar mal de Mí; o que no Me nombren, y ya acepta indiferencia, que es no creer que soy Dios. Sufrirán los que Me siguen por Amor, cuando oigan que no está bien dicho mi Mandato, e intentarán llevarse la cordera que anda perdida, a mi Rebaño”.

Ya nos puso a todos de pie para seguir andando y dijo:

Pensad, que lo mismo que vosotros estáis a un palmo de Mí, han podido estar otros. Aprended e ir enseñando a “los lejos”, que es mandato que mi Padre dice en Mí, y Yo Lo dije primero, antes de a la Tierra venir. Que no queden mis Palabras como siembra de la que no sale tallo, que entonces estaréis ya pecando. Esta Enseñanza es Luz Divina que alumbra al hombre que esta Luz quiere. El que la desprecia, verá con la luz de las tinieblas”.

Desperté, oí:

¿Qué se puede más decir, 
que este grandioso Evangelio?

Si leyéndolo, practicándolo y enseñándolo, 
dejas al pecado muerto.

Es sufrimiento de sangre, 
de sudor y de calvario, 
el ver cómo habla este Dios, 
y el hombre sin escucharlo.

¡Hombres que andan y ven, 
y le dan a Dios maltrato, 
por dejarlos Dios vivir 
por si fueran reformados del pecado!

El que esto lo pensara,
estudiaría este Evangelio,
y no permitiría pecados,
o él no haría nada mal hecho.

Haría frente a lo malo,
enseñando al buen ejemplo.

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Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C3