domingo, 28 de enero de 2024

Señor, Tú eres mi Dueño

En Sueño Profético decían:

Cuando te llegue un pensar que creas que es para bien, mira al Cielo, si puedes, y si no, a los Humos Divinos que están en flotación delante de tu presencia, y di: “Señor, Tú eres mi Dueño. Mándame con fuerza a mi pensamiento, y ya, lo que yo haga, tiene que estar bien hecho, aunque no lo vea bien el que no Te ama”.

Dijo un espíritu de Dios:

En esta Enseñanza ya se ha dicho varias veces que cuando tengas un pensamiento repetido, ya no es tuyo. Y por no ser tuyo, cuesta trabajo que lo vea bien el que esté a tu lado. Esto, si falta Amor de Dios, no lo pueden ver claro.

Desperté, oí:

Es difícil ver lo que no tiene palabras ni imagen.

El que tiene Mando de Dios, a veces es el sentir el que lo lleva, y nunca ve mal lo que hace, aunque otro, mal lo vea.

Este sentir sin palabras, a veces, hace sufrir, cuando tienes que decir: “Yo no digo nada, pero yo no lo haría así”.

Decían en el arrobo que ya aquí la duda sobraba.

Que esto, todos lo deberían oír como toque de campanas.

Viendo la Piel de Cordero brotar agua, ya imposible no hay para Dios nada.

¡Qué Palabras dicen en la Gloria para que sean repetidas!:

“Señor, Tú eres mi Dueño. Mándame con fuerza, a mi pensamiento”.

El milagro de la Piel de Cordero quita el sueño.

Los brotes de agua hacen cruces y hacen caras.

Y el brillo que tienen no puede hacerlo el agua.

***

Libro 45 - Te Habla El Profeta - Tomo VI - C5

sábado, 27 de enero de 2024

Palabras dichas por Dios Padre a Dios Hijo

En Sueño Profético contestaban al pensar de este Elegido:

Si el pensar así no fuera, sería pedir lo que no es de Dios, sería pedir el bien para los espíritus que viven mando de Satanás.

El pedir del que ama a Dios es: “Señor, si su vivir va a ser sin arrepentimiento, llévatelo a tu Reino, sin que lo vean enfermo”.

Sigue el Mensaje un espíritu de la Gloria:

Si el hombre pensara todo lo que a Dios, cuando vivió de Hombre, le hizo el hombre, no le extrañaría nada de lo que le hicieran al que Dios trae a su Gloria para que lleve sus Palabras a la Tierra. Pues aquí han hecho mucho daño y más quieren hacer los espíritus malos. Con Amor de Dios, estos espíritus quedan retirados y metidos en el cieno.

Desperté, oí:

No hace falta decir todo el mal que aquí han hecho.

Y quisieran seguir haciendo, empezando por los que más son del Elegido.

Esta noche pasada el sueño no llegaba y el pensar era: “Señor, ¿dime qué hago para que mis palabras no sirvan de enfado?”.

“Yo pido muerte antes de que no cumplan las Palabras dichas por Dios Padre a Dios Hijo”.

“Que pronto salgan de aquí más Libros y que otra vez esto se repita, hasta que Dios dé aquí Escándalo”.

Aquí han querido hacer más mal del que han hecho, pero no han podido.

***

Libro 55 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IX - C4

viernes, 26 de enero de 2024

La Presencia de Dios

En este Sueño Profético decían palabras y ponían comparaciones de estos Mensajes dichos en la Gloria; de los Hechos de Jesús, Dios Hijo, cuando salía con sus Discípulos y hacía parada en los que veía que su ayuda la necesitaban. Pero si habían estado un tiempo sin vivir sus Palabras, este pensar les retiraba de buscar a sus Discípulos para decirles que cómo ponerse delante del Maestro, ya que el Perdón no lo merecían. Pues si su arrepentimiento, por el grande Amor que sentían, buscaba a sus Discípulos, ya Dios les daba sitios para que fueran. Que eran hechos que después de ser perdonados podían ir dando ejemplo de arrepentimiento. Que este ejemplo es lo que necesita el hombre que hoy vive adelanto y sin tiempo para ir al Prójimo, que es donde está la Presencia de Dios.

Dijo un espíritu de la Gloria:

Si aquí se publicara todo el bien que este Elegido ha hecho, con el Mando de Dios, verían como su comportamiento era con el Mando de Dios. Pues este mismo Mando tendrá hasta que muera el cuerpo.

Su pensar es hacer lo que Dios, en su espíritu, le manda, aunque esto no lo vean hasta que esté hecho.

Desperté, oí:

El pedir del Elegido es que pronto salgan todos los Libros y cintas, para que vean que Esto de la Tierra no puede ser.

Decían que Dios, a este Elegido, le hacía ver y pensar cosas antes de que pasaran.

También le hacía pensar que los sufrimientos de la Tierra son para una corta temporada.

Y que el sufrir lo cambiaras buscando, en el Prójimo, al que a Dios llama y nadie se acerca para darle ayuda en la vida que lleva.

***

Libro 64 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo VIII - C6