lunes, 9 de mayo de 2022

Dios deja el Permitir para el arrepentimiento

En Sueño Profético decían:

En este Sueño se dicen palabras para el Elegido de Dios por lo que le sucedió el día pasado:

Que tu pensar esté cada día más seguro de que Dios te acompaña en el caminar, y de que tiene que llegar el día que te pidan el perdón por el desprecio tan grande que a tu presencia le dieron.

Todo es por no creer que haya Dios en el Mundo Eterno. Que Eterno es lo que no muere, lo que pasa de la Tierra al Cielo. Cielo es lo que ves cuando tienes los pies en el suelo y miras hacia arriba. Si es día ves Sol. Si es noche, estrellas siguiendo a la Luna que alumbra a la Tierra.

Dijo uno:

Si pudieran te negarían la entrada, aunque al enfermo perjudicaran.

Aquí se ve actuación diabólica.

Dios visitaba al leproso y al paralítico. Su visita curaba carne y espíritu.

Pues si piensas que Dios da Mando, algo el Elegido de Dios irá dejando. Si lo sigues, verás comportamiento del agrado de Dios: visitar al enfermo y buscar al pecador.

Desperté, oí:

Si pudieran, no la dejarían entrar.

Pero Dios le irá Iluminando los caminos que tiene que andar para que no le nieguen la entrada cuando del enfermo oiga llamada.

Su presencia da ejemplo de Caridad y de ayuda en las palabras que a Dios nombra.

Repetían en la Gloria, que más se veía que aquí actuaba Dios por la negación que el hombre le daba al que Él mandaba.

Por eso tienes que no dejar los caminos que obliguen a que te den lo que derecho tienes.

Se ve que ha habido quejas para que te nieguen la entrada y sirvas de mofa para ellos.

Con lo que el día que ha pasado te han hecho, ya tienen gran castigo, cuando vean cada día más documentos.

Más documentos y más Escándalo, con estos Escritos que manda el Cielo.

Si Dios no permitiera, no habría Gloria, sólo habría Infierno.

Dios deja el Permitir para el arrepentimiento.

Pero piensa que el tren tienes que cogerlo cuando esté parado, no cuando esté corriendo.

Pues piensa que no es lo mismo pedir arrepentimiento pudiendo servir a Dios, que cuando te estás muriendo.

O que los vivos que queden pidan a Dios que los entre en su Reino.

Esto sería ser Dios Dictador del espíritu y del cuerpo.

Y ya no sería el Dios del Amor y del Perdón.

Sin diferencia de clases ni de sexo.

Esto es Vivienda Divina, Eterna, para el espíritu sin cuerpo.

***

Libro 40 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C1

No hay comentarios:

Publicar un comentario