martes, 10 de junio de 2014

Cuando al niño, Dios le habla

En Sueño Profético hablaban de muchas cosas diferentes y ponían ejemplos y comparaciones. Decían:

“Esto es para el espíritu”. Ponían otras comparaciones y decían: “Esto es para el espíritu y la carne”. Seguían hablando y decían: “Y esto es para Enseñanza”. Esta Enseñanza es sencilla, por ser explicada por Dios y dictada. Referían un hecho ocurrido 400 años atrás.

Dijo uno:

Por falta de Enseñanza, yo vi cuando viví con materia, un niño maltratado por la familia, por decir: “Yo veo niños que a jugar conmigo vienen, y cuando la madre me llama, se van”. Más de una vez le vi esta expresión y palabras: estar el niño agachado, ponerse de pie, sus manitas, las dos en su divina boca, y pronunciar estas palabras:

   –¡Adiós, ven mañana, pero ven con todos los niños!

Le pregunté:

   –¿Por qué dices: ven con todos los niños?

Estas palabras fueron del niño:

   –Porque hay muchos, y cuando se van, ya veo Uno, y con la cabeza me dice: ¡Sí!

Este niño, que 6 años no contaba, se ganó martirios de la familia; fue observado por el hombre que nada sabe de Dios; fue su cuerpo apaleado por las manos de los grandes y pecadores.

Desperté, oí:

Grandes de cuerpo,
chicos de espíritu.

El niño era chico de cuerpo,
inmenso en espíritu.

En esta casa no se hablaba
de la existencia de Dios.

Cuando un mayorcillo
nombraba algo de Dios,
le aplicaban el castigo,
el padre y otro mayor.

Aquí ve el hombre claro
la falta de Enseñanza.

Aquí no creían al niño,
que el mismo Dios le hablara.

Dios iba con los Ángeles
que viven Aquí en su Cielo.

Los dejaba que jugaran,
y luego, al recogerlos,
sólo al Niño dejaba.

Todo era el mismo Dios,
lo que a la Tierra bajaba.

Aprende a conocer
cuando al niño, Dios le habla.


***

Libro 6 - Dios Manda en su Gloria que Enseñen - Tomo I - Pag. 206-207-208

2 comentarios:

  1. Los niños son ángeles y como a ángeles hay que tratarlos.

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  2. Cuantas cosas verán algunos chiquillos y nadie les echa cuentas por no creer los mayores lo que Dios puede hacer con los espíritus de Su Gloria.

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