En Sueño Profético decían:
La vanidad del hombre lo aparta de este Dios. La vanidad del hombre lo lleva a sitios sin Dios.
Dijo uno:
Si el hombre pensara en la carne enferma, se corregiría muchos defectos; y si ya pensara en la muerte, su vida con materia la viviría santa y a Dios quitaba de sufrir.
Es curioso el pensar, que a más inteligencia en lo material, más torpeza en las cosas del espíritu. Esto es por falta de pensar, por falta de estar seguro de que espera otra Vida. Sería un consejo bueno que el hombre pensara en grandes herencias y hablara con los herederos: vería por cuantos había pasado la herencia. Pues si esto es así, nadie fue dueño; dueño no es el hombre ni de su cuerpo. El hombre tan sólo tiene un caudal, que si lo cuida, siempre será dueño y nadie podrá heredarlo, porque tu espíritu fue, para tu carne, creado. Esto es lo que no piensan la mayoría de hombres cultos.
Desperté, oí:
¡Es lástima que la cultura
se separe de lo Divino!
Un literato y filósofo
decía un día en la Gloria:
“Por un culto que ame a Dios,
van miles y miles a la Gloria”.
Si el intelectual pensara
la renta que luego cobra,
ponía su capital
en divisas a esta Gloria.
Hazte hombre culto ahí
y negocia luego Aquí.
Que tu cultura en la Tierra
sea para amar a Dios,
y Él te pagará la renta.
Este Mensaje es de Amor,
aunque parezca quimera.
***
Libro 9 - Dios Habla Al No Quiere del Hombre - Tomo I - Pag. 244-245-246
Es preferible ser rudo si no se ama a Dios, así sólo hará daño a su espíritu.
ResponderEliminarLa verdadera inteligencia conduce la razón a Dios y se convierte en amor.El aprendizaje, la cultura y la conducta tienen como brújula la trascendencia de lo material.
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