En Sueño Profético decían:
Al hombre le sorprende que le digan que Dios habla en el hombre; que habla en “Sueños”; y que estando despierta la persona, Dios toma aquel Lugar para que vean que Dios es quien mueve aquel espíritu, dándole su Inteligencia y Poder para que el hombre sepa que Dios está Vivo y Presente en manera no visible para el hombre.
Dios, cuando se comunica, su actuación es poderosa. Antes de su Venida, a quien se le comunicó, formó escándalo. Estos Profetas tenían Poder del Mismo Dios. Si su materia no era la de Dios, era el Espíritu, y aquí viene la interpretación, interpretación mal tomada del que no ama a Dios. El que no Lo amaba cuando Moisés, no podía cumplir los Mandamientos, que esto es la Ley de Dios. El que a Dios amaba, veía no era Moisés, veía a Dios, y sus Palabras tenía que cumplirlas. El que Lo ama, ve que estos Escritos son hechos con pluma, pero no haría falta mano, porque están dictados y hechos por Dios. Dios, para comunicarse al hombre, tiene que venir a vivir de Hombre o hablar en el Lugar que Dios Padre puso, Profeta, hombre que Dios habla en él.
Despierta, oí:
Antes del Nacimiento de Dios, se habló mucho de Dios.
Ya, cuando nació, fue alegría para unos y gran contrariedad para otros.
Y quedan los que piden al rey Lo degüellen:
Dios Padre, en Sueño, habla a José, y José comunica a la Sierva de Dios Padre y Madre de Dios Hijo.
Esta Madre y Virgen obedece y libra a Dios de que el hombre mate su Carne.
Pero como el hombre no quería a Dios, y Dios sí al hombre, el hombre mataría a Dios, si no de Niño, de Hombre.
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Libro 4 - Te Habla El Profeta - Tomo I - Pag. 222-223
La terquedad del hombre no cansa a Dios. Su Amor es infinito y constante.
ResponderEliminarQuién no se enamore de Dios leyendo sus Palabras corre el peligro de condenarse.
ResponderEliminarEn la Gloria no entra la indiferencia.