En Sueño Profético decían:
Si vives presencia de Dios,
conoces lo que de Él viene.
Si vives presencia de Dios,
tienes que hacer lo que Él quiere,
con alegría y Amor.
Pues haciéndolo así, di:
“Yo, solo no me siento,
algo hay dentro de mí”.
Dijo uno:
Todo el que ama a Dios,
acepta lo que le pase,
y en el aceptar, ya dice:
“Señor, que yo nunca de Ti me aparté,
porque a la vida sin Ti,
vida no puedo llamarle”.
El que haga este pensar,
tiene a Dios siempre delante
y todo por Él lo hará.
Y como contento final
se le vienen estas frases
que como Evangelio están:
“Dios da el ciento por uno,
y a veces todavía más”.
Dios nunca pide que hagas
aquello que no podrás.
Al pez le pide en el agua;
al ave, en el volar;
al caballo, en el trote;
y al hombre, en la Caridad,
cuando Caridad necesite el hombre
y tú se la puedas dar.
Desperté, oí:
Dios nunca le pedirá al hombre lo que el hombre no llegaría por altura o por peso.
Dios nunca le pedirá al elefante la lana como a la cordera que la cría.
Ni que la fiera sea mansa, si el domador no la tiene a su cargo desde chica, cuando nació.
Dios no le pide al hombre nada que el hombre tenga que negarle, diciendo: “Señor, me pides lo que sabes que yo no puedo darte”.
Todo lo que pide Dios, piensa que ya lleva tu medida y tu alcance.
Pero si a Dios no amas, tú ya nada puedes darle.
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Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C2
Y nosotros, podemos decirle a Dios con alegría, todo lo hice por Tu Amor?
ResponderEliminarCuántos momentos perdidos! que ayudarían a ganar más Cielo!
Y los pasamos pensando en los cuatro garabatos de este triste suelo.