El Camino de Dios

En Sueño Profético hablaban del Camino de Dios y del camino del hombre. Decían:

El que va por el Camino de Dios, ya todo lo ve diferente al que va por el del hombre.

El Camino de Dios es con Paz, y vas buscando donde tú ayuda dar. Que si tú ayudar quieres, sin saber cómo, tú ayudar puedes.

El Camino de Dios tiene pocos caminantes que sigan hasta el final con buenas obras delante.

Dijo uno:

Este Camino no admite caminantes que no den Resplandor Divino. Que este Resplandor aparta al que no está lleno de Dios.

Los Caminos de Dios hay muchas maneras de pasarlos, por tu tiempo que te amarra y no te deja, y ya no es su Camino el que llevas.

Desperté, oí:

El que pase este Camino
de la Tierra a la Gloria,
algo lleva delante
que hace que miren a su persona.

Este Camino rechaza
la envidia, la ira,
la soberbia y la avaricia.

Va dejando Caridad
el que va pasándolo.

Y ya, cuando llegas al final,
con Dios te encuentras,
que es el que te abre
las Puertas de la Gloria.

A este Camino,
los sufrimientos los pone
el que a Dios no ama.

Y al no amar, persigue
y pone pinchos y espinas
al que lo sigue.

Pero el que ama
va poniendo sus pies
donde Dios
va dejando sus Pisadas.

A éste no le importan los pinchos,
porque a Dios adora y ama.

Y es más fuerte el Amor que el daño
que los pinchos le hagan.


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Libro 31 - Te Habla El Profeta - Tomo IV - C8