En Sueño Profético decían:
La fuerza te da la decisión, y la decisión te hace que llegues. Pues la verdad y la razón justifican la decisión, y la razón triunfo tiene.
Sin fuerzas no levantas peso, porque nada más pensarlo te resulta doble peso.
Dijo uno:
Decisión sin fuerza, ya no justificas, aunque verdad sea.
La Fuerza de Dios no deja tranquilo al motor, al motor que empuja a la rueda. ¡Es que esto es así! Y si así no fuera, nadie conocería lo que de Aquí llevan.
Sin Fuerza, quién dice: “Yo, cuando me duermo, Dios saca mi espíritu, y mi cuerpo queda muerto”.
Para esto decirlo tienes que sentir gran fuerza contigo, porque después viene el “no” del enemigo. Éste, ya sin fuerza, porque el Poder de Dios en cenizas todo deja.
Tú no dejes de buscar llaves que abran las puertas. Que si llaves no te dan, pueden hasta abrirse solas. Lo que no puedes es callar, porque tú, en ti no mandas, en el Mensaje que dan.
Desperté, oí:
Tu intuición sea puesta en práctica,
y el hombre, que obedezca,
que a ti no te hace nada.
Si piensas: “yo allí no voy
porque voy a llegar cansado”,
no te moverás jamás
si te encuentras acomodado.
Los pastores de Belén
no se encontraron cansados.
Tuvieron fuerza y decisión,
y no llegaron cansados.
Si con el pensamiento miden lejanía,
mal camino y duda de Dios nacido,
no queda por todo el mundo
que ellos fueron los primeros
que adoraron a Dios Hijo.
Esta alegría pagó cansancio
que hubiera nacido.
Todo lo que hagas por Dios
es decisión con fuerza de espíritu.
Si esta fuerza no la sientes,
hay cansancio antes de llegar al sitio.
***
Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - Preámbulo
Los pastorcitos llevaban fuerza porque se decidieron por Dios ,sus espíritus eran limpios y con ganas de ver a Dios Niño
ResponderEliminarQue caritas de alegría con llanto de emoción tuvieron aquellos pastores al ver a la Virgen Maria con Dios en los brazos
No hay estampa que pueda pintar aquella noche de Navidad