El niño y las Imágenes

En Sueño Profético decían:

Hay sufrimientos que van escondidos sin nadie verlos. En cambio, otros sufrimientos que son más chicos van al descubierto.

Dijo uno:

Van al descubierto y a Dios ofendiendo.

Al que va por el Camino de Dios, la Gloria se encarga de hacerle pensar que el sufrimiento, con Dios, deja enseñanza. Yo, cuando veía que hablaban de Dios y gran sufrimiento no les había llegado, sin querer pensar, este pensar me venía: “Si sufrir les llegara, ¿cómo lo aceptarían?”. Pues a este pensar me contestó Dios con una familia bien acomodada que cayó en ruina y quitaron las Imágenes que en su casa tenían. Y cada vez que nombraban la ruina, a Dios ofendían. Un chiquillo que tenían de catorce años, estas palabras a la madre le decía:

“Yo vivo mejor ahora, sin tanto dinero, porque siempre estáis padre y tú en casa y mis dos hermanos no me dan ya guerra. Lo que sí tengo es pena, y cuando me acuesto, lloro, porque no veo en mi cuarto ninguna Imagen”.

Desperté, oí:

El sufrimiento les destapó que de Dios no eran.

El hijo pedía a Dios ver las Imágenes puestas.

A los hermanos más chicos les decía que las pidieran.

Las pusieron en su sitio e ingresos en la casa iban entrando.

Si sin sufrimiento a Dios lo amas de verdad, en el sufrimiento Lo amarás más.

El niño te lo demuestra cuando Le pide a Dios que las Imágenes sean puestas.

La petición del hijo llega a Dios y hace que los padres a Dios le pidan el Perdón.

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Libro 41 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo III - C5