En Sueño Profético decían:
El Poder de Dios te da la vida.
El Poder de Dios, el que quiera, lo puede ver en la vida que lleva el Elegido.
Es vida de sufrimiento, vida de desprecio y vida de estar siempre pidiéndole a
Dios por los enfermos y por los sanos. Que por esta vida que hace, debería
estar mejor mirada.
Dijo un espíritu que, cuando
vivió con cuerpo, conoció la vida de sufrimiento que este Elegido tenía y sigue
teniendo:
Nadie le quitaba el sufrir, pero
ella acudía a cualquier sufrir que le llamaran para que a Dios pidiera. Pues
así sigue su vida, pero es muy poco apreciada. Que todo esto lo hacen los
espíritus del mal para que su cuerpo diga: “no puedo más”. Cuando le van a dar
una alegría, estos espíritus intentan cambiarla para hacerle sufrir. Pero el
Poder de Dios los detiene y los deja fracasados.
Desperté, oí:
Cuando al Elegido le viene una
alegría, se presenta un sufrir, para no poder disfrutarla.
“Señor, Te pedimos que sigan al Elegido y que se acerquen muchos a él”.
La curación de la niña te da Paz,
fuerzas y alegría.
Decían en la Gloria que pidieran
por los que están cerca, que te hacen falta y Dios los premia.
Éstos, que cuiden su sitio, y así
a Dios contentan.
***
Libro 47 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VI - C6
No tengo palabras para decir el sentir de este Mensaje.
ResponderEliminarHan sido tantas vivencias al lado de Este PROFETA!
Quién me habría de decir que algo así yo conociera.