Hombres con Fe

En Sueño Profético decían:

Abraza tu Fe con fuerza y lo grande lo verás chico; lo imposible, fácil, y las horas las verás como segundos, y tu Fe te irá llevando por el mejor sitio. No hay quien viva con Fe y su Fe siga igual. Pues la Fe es amasijo que te eleva, es Poder que Dios le manda al hombre, y ya se ve protegido.

Dijo uno: 

La Fe te da abundancia de lo que tú crees perdido. La Fe te hace de guarda para el espíritu, para que los sentidos nunca se vayan de la Fe. Te notas crecimiento, que esto es lo que a Dios le agrada. Cuando se pierde la Fe llevas la vida amargada, no sientes el empuje que la Fe quiere que sientas. La Fe siempre te la quita el espíritu del mal, que éste quiere que Fe no tengas para que vivas una vida con azotes de tormento y de condena.

Desperté, oí:

Es un sufrimiento constante no tener Fe y vivir sin que la Fe te acompañe.

Dios Hombre enseñó a los hombres a que vivieran la Fe.

Y así, donde no hubiera camino, camino podía nacer.

¿Quién puede poner mando al Mando que manda Dios?

La Fe es tan necesaria para vivir en la Tierra como la noche y el agua.

El agua para el sediento.

La noche para la calma, para pensar en el día y corregirte tus faltas.

La Fe es un medicamento imprescindible para mantener la calma.

Y ya te crece tu Fe y ves chica la montaña.

Hombres con Fe quería Dios porque en Él confiaban.

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Libro 68 - La Palabra del Creador - Tomo VII