Quedé
dormida con alegría y desperté con alegría.
En
Sueño Profético decían:
Al que
Dios trae a su Gloria y le da Palabras de Enseñanza, la alegría no le falta. Al
quedar dormida empieza el arrobo. Y al despertar, ya al espíritu, en el cuerpo,
Dios manda que le dicten todo lo que en el arrobo se vio y las Palabras que
Dios dijo con su Voz o con su Mando. Esto es tan grande, de Amor y de Fuerza
Divina, que ya no puede faltar alegría.
Dijo
un espíritu que Dios le da Mando:
Lo que
sí se va a decir es que esta alegría da muchos sufrimientos por querer que
todos busquen y amen al que Dios le da sus Palabras para que más se cunda que
esa vida es corta y falsa, y engaña al que no ponga lo de Dios lo primero.
Desperté,
oí:
Mandan
dictar lo que se oía en el arrobo varias veces y con varias voces que aquí se
repiten:
¡Señor,
Te rogamos para que las alegrías le cierren puertas al sufrimiento que los
espíritus del mal a este Elegido le quieren llevar!
Que
aquí no se deje de aprisa los Libros presentar.
Decían
en la Gloria que este Caso tiene los reconocimientos que hoy nadie tiene.
¡Son
muchos años amando a Dios y pidiendo Escándalo!
Que
este pedir de Escándalo es para que el hombre más ame a Dios y pise el pecado.
***
Libro 55 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IX - C2
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