lunes, 10 de agosto de 2020

¡Señor, llévame por tu Camino!

En Sueño Profético decían:

Si vas por el camino de Dios,
algo de Dios vas sintiendo.

Él te manda claridad
y te avisa en los momentos
que del Camino te vas.

Te avisa, dejando la Libertad.
Pero coges el aviso
y dejas la Libertad.

Dijo uno:

Yo oí una mañana, a Dios cuando vivió con Cuerpo, estas Palabras, que hoy mandan que las dicte:

Donde mis Palabras no las cumplan, no seguid, que ese no es mi Camino y podéis perder mi Reino, que es el que Yo os tengo prometido. Mi Camino es duro si falta Amor a mi Padre y si dudáis de que mi Padre vive en Mí y Yo iré al Padre cuando mi Cuerpo levante la piedra y deje la fosa vacía, premiando y sembrando remordimientos”.

Desperté, oí:

Pocos cogieron Premio,
porque pocos Lo creyeron
y pocos Lo buscaron.

Su Camino, si lo sigues,
tráete a la memoria:
¡corona de espinas,
heridas de Pies y Manos
que sujetan unos clavos
que llevaron a la agonía!

Pero cuando esto pienses,
haz que lo supere
el pensar que está Vivo,
con Cuerpo de Carne,
esperando que el hombre diga:
“¡Señor, llévame por tu Camino!”.

Y que el sufrimiento no me aparte.

Si no tuve sufrimiento,
es que vivo sin amarte.

Quiero ir por tu Camino
y así Tú me esperas
en tu Reino Prometido.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C6

2 comentarios:

  1. Si Él lo pasó primero y culminó en Gloria,quien pise sus Huellas no quedará defraudado.

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  2. Lo fácil que enseñan en la Gloria a hacer oración
    Es la oración bien hecha la llave para alcanzar la salvación

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