En Sueño Profético se oía un grupo de voces a coro, en la Gloria Celestial, con estas Palabras:
¡Señor, Te rogamos por el que sufre,
porque Tú estás sufriendo!
¡Señor, Te rogamos para que aquí
no llegue el silencio!
Que día que llegue la noche,
haya hecho más escándalo
este “Evangelio hoy diciendo”.
¡Señor, Te rogamos
por los que quisieran ver
y los asustan no viendo,
por un gran poder
que quiere que sigan ciegos!
¡Señor, Te rogamos
para que al que puede y no hace,
le quites ese pudiendo,
y tenga que mirar al Cielo
implorando que lo perdones!
¡Señor, Te rogamos
por los que no aprendieron,
porque no les enseñaron
tu Nuevo Testamento!
¡Te rogamos, Señor,
por el que sufre,
para que no se vaya de Ti lejos,
para que Te busque y Te cuente
lo que Tú ya estás viendo!
Desperté, oí:
No se puede describir
estás voces cómo eran.
Eran voces de sentir,
más que ruido que oyeras.
Eran voces de una Vida
que muerte jamás le llega.
Todo era hacerle ver al espíritu
que el Cielo ve
lo que hace el hombre en la Tierra.
Todo es querer que el hombre viva
su Nuevo Testamento.
Porque habiendo Amor a Dios,
todo lo haces bien hecho.
Si el pecado pudo en ti,
pecadores hay en el Cielo.
Que después de que pecaron,
llegaron a Dios pidiendo
si podían ser perdonados.
¡Cuánto bien harían estos Escritos a ese mundo,
que le ha puesto título y cuadro de honor
a la palabra “no es malo”!,
a esto que aquí se nombra:
Guerra, crimen, adulterio, robo,
y como cultura,
no enseñar que hay otra Vida.
Si el Nombre de Dios
de la enseñanza retiras,
aprende las primeras letras,
porque sin Dios no es cultura.
***
Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C8
Estos ruegos en oración me los apunto para mí devocionario
ResponderEliminarNo hay oración más perfecta que la que dictan en el Cielo