En Sueño Profético vi el campo, había muchos borregos, y volaban gran cantidad de pájaros
por aquel manchón. Los pájaros no dejaban de trinar, mientras que los corderos
pastaban con la humildad y primor del que molestar no quiere. Salió un pastor
de en medio de los borregos y dijo:
“Estos borregos enseñan
humildad al hombre, y a la vista proporcionan Paz. En un metro de terreno se
abrigan unas a otras, dándose sus cabezas y lateral de su cuerpo, queriéndose
meter una dentro de otra para más quererse, y sin querer ninguna tener
preferencia, siendo ejemplo de obediencia. Si las miras detenido, verás que una
avanza y todas la siguen. Ha habido veces de que una bajó la montaña y todas
siguieron este peligro. Cordero: símbolo de la humildad, estampa que calma el
alboroto”.
“Los pájaros te enseñan a que
tengas alegría; ellos, con sus trino, se unen a los cantos de la Gloria; te
enseñan a tener confianza en Dios; te enseñan a que Dios es Padre y Él te
procura la comida”.
Cuidará de tu alimento
como la madre al lactante,
como la loba al cachorro,
como el pájaro al nido,
que le lleva el alimento
como todo ser que nace,
que cuidan y va creciendo,
que luego, él hace
lo que a él le están
haciendo.
Esta es la confianza
que piden Aquí en el Cielo.
Desperté, oí:
El hombre no tiene Paz
porque piensa en el mañana,
que si pensara en amar,
el mañana no llegaba.
Si la humildad del cordero,
el hombre fuera copiando
desde que nace al final,
Aquí vendría ya enseñado.
Y el chirrío del pajarillo
siempre tuviera en sus labios.
Esto sería agradecer
sin tener a Dios enfadado.
Para hacer esto que digo,
tienes que amar a Dios tanto,
que amando como yo digo,
amas sin hacer trabajo.
Si el pájaro lleva al nido,
y la loba a los cachorros,
¡qué hará este Dios contigo?
En amando, Él te manda
lo que no ve el que no ama.
Haz como los pajarillos
y,¡cómo no!, los corderos,
y cuéntate cuando hables
con esto que hay en el Cielo.
***
Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C6
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