En Sueño Profético decían:
El que Dios elige y trae a su
Gloria para que de Aquí enseñe, recibe el Mando de Dios. Este Mando, al que lo
recibe, le ves gran cambio en su vivir.
Dijo un espíritu de Dios:
El ser Elegido es un gran Premio.
Pero si piensas, ves que a este Premio lo persiguen espíritus que sus cuerpos
hacen falsedades y engaños para ensuciar lo que el Elegido quiere que todos
vivan buscando estas Palabras. Persiguen más a los que más cerca están de este
Caso.
Desperté, oí:
El Elegido recuerda su saber de
letras –con pocos años la quitaron del colegio– y cómo Dios la ha cogido para
hacer Libros.
¡Para Dios no hay nada imposible!
Si tu gran Amor le pide a Dios sin
cansarse, recibiendo los malos momentos que la vida hace, pero respondiendo con
Amor a Dios, tu petición Él te la concede.
Decían en la Gloria que, en todos
los momentos, el responder del Elegido se ve que es de Dios, el que sin
palabras lo dice en su espíritu.
Todo es pobre, todo es chico, si
lo comparas con la Eternidad
de tu espíritu.
***
Libro 60 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VII - C7
No hay comentarios:
Publicar un comentario