En Sueño Profético decían:
No hay palabras mejor dichas que estas que dictan en
la Gloria:
¡Gracias, Señor, porque Te veo en momentos de mi vida!
¡Gracias, Señor!
Dijo uno:
En este Caso hay noticias que son bien dadas y no son
comprendidas, y hasta pueden llegar a hacer sufrir. Que esto es para culpar a
estos Mensajes, que están ya sin obstáculos y sin poderlos parar nadie. Aquí se
ve que quieren quitar la alegría y poner el sufrimiento. Pero para quitarlo, en
el sitio de la discusión hay que poner estas palabras:
¡Gracias, Señor, que no me falta tu compaña!
Desperté, oí:
Hay avisos que son bien dados, pero el que los recibe
puede mal interpretarlos.
Que esto pasa cuando hay alegrías, para disgustarlos.
El Elegido comprende lo que otro hace, y quiere que ni
de palabra ni acción ofendan a Dios.
¡Gracias, Señor!, son palabras que te salen si dentro llevas
Amor.
Unas veces das sonido. Y otras, el Amor, silencio dio.
¡Gracias, Señor, yo Te pido que siempre siga tus Pasos
y que Tú seas mi Amigo!
Esta oración no la hay ni en memoria ni en libros.
***
Libro 41 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo III - C3
No hay comentarios:
Publicar un comentario