En Sueño Profético decían:
Puedes creer y
no amar, pero si amas, el creer ya no hace falta.
Si quieres
sentir la felicidad, no puedes dejar de a Dios amar.
Si pensaras en
la muerte del cuerpo, valorarías el espíritu y no le quitarías el sitio
valorando lo que se acaba.
Si
reconocieras tus pecados, empezarías a vivir de nuevo, porque Dios te habría
perdonado.
Dijo uno:
Estas tres
palabras, tres frases o tres consejos, son de Teresa de Ávila y de Agustín de
Mónica, que Aquí refieren los dos que se oyeron:
“Cierto que el
Amor rechaza las dudas que el que no ama tiene, y al reconocer el pecado, ya
estás pidiendo el Perdón”.
Desperté, oí:
Cuando a Dios llevas por dentro,
oyes palabras sencillas,
que el Amor lo
va diciendo.
Las palabras que en la Gloria
en arrobo repetían,
eran del Amor sin medida
que decía Teresa
cuando vivía
esa vida.
Eran palabras
que se metían en tu espíritu,
y tú, ya, no
las echabas.
Las de Agustín,
querías oírlas
y te tapabas
la cara.
Entonces él te seguía
y te decía palabras
que iban borrando el camino,
para que tú lo
olvidaras.
Decía: “Reconocer,
es querer mi
amistad.
¡Cómo pagarle yo a Dios
este Premio
que me da!”.
***
Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C5
Es un Consuelo para el alma oír de Dios estas Palabras.
ResponderEliminarQue con reconocer los pecados ya se empieza camino nuevo porque quedan perdonados, nadie puede decir estas Palabras sino sólo Dios.
Porque solo Él, es El Dueño del Perdón.