sábado, 30 de junio de 2018

Mi Reino no es de este mundo

En Sueño Profético decían:

No tiene explicación que el hombre quiera la muerte de aquel que elige Dios. Y no tiene explicación que no busque este Lugar el que representa a Dios.

Son actuaciones que dejan al descubierto al que dice “yo amo a Dios”.

Dijo uno:

¿Qué ley puede castigarte cuando tú quieras saber lo que de la Gloria Él hoy mande?

Puede despreciarte el que a Dios no quiera, pero no castigarte cuando tú vivas estas Palabras y enseñes a vivirlas con la Paz delante y la ayuda que Dios mande, que es la caridad y consolar al afligido y tener siempre delante las Palabras que Dios dijo:

Mi Reino no es de este mundo. El que Me busca, Me encuentra, porque Yo ya lo estoy esperando”.

Desperté, oí:

Si al que dice que a Dios ama, nunca le faltara este Amor, no podría vivir sin buscar sus Palabras.

Dejaría lo de la Tierra, porque en la Tierra no está su Reino.

Y buscaría el Lugar que hoy sigue las mismas Palabras diciendo.

No tiene disculpa ni explicación el no acudir ni querer saber lo que en la Gloria manda Dios.

El hombre cree que adora maltratando al Elegido.

Y pone como final: “Maltratado fue Dios Hijo”.

Y ya, como final del Mensaje, mandan en la Gloria que se dicte que el que no ama, jamás puede salvarse.


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Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C3

jueves, 28 de junio de 2018

Lo que da la alegría

En Sueño Profético decían:

Hacer el bien en el Prójimo,
la Confianza en Dios
y no querer pecar,
es lo que da la alegría.

Es alegría que aumenta,
y ya tienes compañera,
que siempre bien te aconseja.

Si haces el bien
y tienes Confianza en Dios,
para qué quieres más renta
que la que Dios ya te da
con el pensar que tú tengas.

Ya, al no querer pecar,
es que tu pensar ya piensa:
“yo a Dios no quiero enfadar”.

Dijo uno:

Es alegría el pensar
pecado que te perseguía
y te pudiste quitar.

Pues, a veces, siendo buenos,
el bueno de ti se va.

Aquí es donde el hombre
no usa la Caridad.

En cambio,
si encuentra a uno
apoyado en las muletas,
sí saca la caridad,
sin dejarse una reserva
que a otro le pueda dar
que no le ven las muletas.

Desperté, oí:

Tres palabras dan en Gloria,
para que no falte alegría
de la renta que Dios te da:

Hacer el bien en el Prójimo,
la Confianza en Dios
y no querer pecar,
es lo que da la alegría.

Pero estas tres palabras,
son pocos los que las practican.

Hacer bien en el Prójimo
creen que es sólo alimento de comida.

Como el animal,
que sólo la hierba necesita.

La Confianza en Dios,
el hombre no la practica.

Y si no confía en Dios
no puede haber alegría.

Piensa en aquel pecado
que engañarte quería
diciendo que no era malo,
y te vendrá la alegría.

Éstas son las Enseñanza
que el hombre hoy necesita.


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Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C2

miércoles, 27 de junio de 2018

No te retires de Dios, que el sufrir se te agranda

En Sueño Profético decían:

Si vives cerca de Dios, se nota en la enseñanza que va dejando tu acción, tu consejo y tus palabras.

Si vives cerca de Dios, al pecado lo espantas.

Dijo uno:

Nunca podré olvidar, cuando viví con materia, las palabras que mi madre siempre tenía en la boca, y que Aquí mandan dictar:

No hay nada en el mundo que me pueda retirar de vivir cerca de Dios, ni la risa ni las lágrimas. Risa sin Dios, lleva al pecado; y lágrimas sin Dios, por sufrimientos llámale calvario, sin poderlo subir y sin tener quien te pueda dar su Divina Mano.

Desperté, oí:
 
El estar cerca de Dios no puede taparlo nada.

Esta mujer, para todo, este consejo te daba:

“No te retires de Dios, que el sufrir se te agranda. Y si te llega alegría piensa: esta alegría a Dios Le agrada”.

Quería Presencia de Dios en la alegría para decir:

“Gracias Señor, que siento tu compañía”.

Ya en los grandes sufrimientos, ¿quién podría ayudarle para no perder el Cielo?

Es la Presencia de Dios la que hace que seas bueno, pero un bueno que tu espíritu traiga a muchos a este Cielo.

Si la Presencia de Dios no la notas en tu cuerpo, quítale el nombre de vida y ponte el nombre de muerto.


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Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C1

lunes, 25 de junio de 2018

Perseguir, destruir o traicionar no es pecado de Perdón

En Sueño Profético decían:

Perseguir a Dios e intentar destruir sus Palabras, no hay pecado mayor.

El perseguir es mando de Satanás, porque sabe que tú aceptas su mando. El destruir, casi siempre es pagado, destruir o traicionar. Perseguir, destruir o traicionar no es pecado de Perdón.

Dijo uno:

El pecado no tiene otra palabra que pecado. Hay pecados hechos que en el camino te encontraste el pecado. Y hay quien se ofrece para llevar a pecar o para servir el pecado. Éste, jamás puede ser perdonado. Si así no fuera, no se conocería al que a Dios amara, viviendo en la Tierra.

El que ama o cree, no puede hacer el papel de Judas. Si esto lo pensara el hombre, se quitaría las dudas que algunos se ponen, pensando: ¿estará perdonado Judas?

Desperté, oí:

¿Cómo va a comparar el hombre, que entres a destruir un rebaño, con que te lleves un cordero?

Si aquí juzgara el hombre, uno quedaría fuera, y otro quedaría dentro de cuatro paredes, y seguro que para buen tiempo.

¿Cómo Dios va a perdonar a la víbora que entra a sus Palabras ensuciar?

Éstos fueron apartados para una eternidad.

Judas traiciona a sabiendas de que cobra y que a Dios Hombre Lo van a matar.

No pienses aquí el Perdón, que te puedes condenar.


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Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C5

viernes, 22 de junio de 2018

Dios manda sus Palabras para todos

En Sueño Profético hablaban de la fuerza del mal y del gran Poder de Dios. Decían:

El mal tiene fuerza, porque el hombre le deja la fuerza.

Si los hombres amaran a Dios, cada uno en su sitio, el mal quedaría al descubierto y derrotado.

El mal tiene fuerzas, porque el hombre le abre las puertas.

Comparemos estas Comunicaciones tan claras, que Dios manda que sean publicadas al mundo entero, con gran sencillez para poder ver que son dichas en su Reino, y que Representes de Dios e Iglesias tengan este abandono, dejando que los espíritus del mal ofendan a Dios por esta indiferencia, queriendo demostrar que son buenos los que más les pertenece hacer publicación, por administrar Poderes de Dios.

Desperté, oí:

Dios manda sus Palabras para todos, sin diferencia de sexo ni clase.

Pero para darlas a conocer son más aceptadas si son cundidas por los que representa a Él.

Se une más el que no quiere que se hable de Dios vivo, que el que dice que Lo ama y cree que está Vivo en su Reino.

Si los pocos que Lo aman se unieran, harían que pensaran en la muerte los que les cierran las puertas a estas Palabras.

Si el cuerpo no muriera, como el espíritu, Dios le permitiría a la Iglesia el silencio a estos escritos.

Tienen 28 años de silencio sin disculpa, aunque presenten pretextos.


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Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C4

jueves, 21 de junio de 2018

El no creer, hace desprecio a estas Palabras

En Sueño Profético decían:

Si creyeran que tu espíritu es Aquí traído para llevar Enseñanza de este Reino, no podían hacer la contra a este “Diciendo”, porque esta Enseñanza les lleva siempre a caminos buenos y siempre dará consejo para no perder el Cielo; lleva alegrías al espíritu, que el espíritu es el que agranda o achica los sufrimientos; al cuerpo le pone stop en el dolor, y ya es enfermo con consuelo; el pecado huye del que Dios trae al Cielo; si lo va a hacer no lo hace y, si lo hizo, le siembra remordimientos, y ya acude al Perdón que Dios le manda del Cielo. Todo esto es lo que hace el contestar de este Cielo en el Lugar que Dios coge para que lleve el Mensaje de que Dios es Vivo y no es muerto.

Dijo uno:

Si creyeran que Aquí están los muertos que ahí muertos vieron, pero que no están muertos, Ministros y seglares no podrían pasar día sin este Mensaje que lleva al Camino de la Vida Eterna. Aquí está muerto el que ahí ven vivo y desprecia lo que Dios quiere que sea publicado para todas las razas del mundo.

Desperté, oí:

El no creer, hace desprecio a estas Palabras.

Al no creer, no se corrigen sus faltas.

Si esto no fuera de Dios, tendrían que tener venganza cuando buscaran a Dios en los momentos que Lo buscan porque les llegó oración.

La oración, del que está al Mando de Dios.

¡Es pena ir repartiendo este Mando que da Dios, y el hombre dando desprecio!

Si se viera una imagen de todo el bien que va dejando el que Dios tiene Elegido, para el bueno y para el malo tendrían que pedir el Perdón por haber dado mal pago a la Palabra de Dios.

Para el bueno, para que practique lo bueno y lo bueno vaya contagiando.

Y para el malo, para que piense: “yo también puedo ser bueno y morir ya perdonado”.

Porque Dios se hizo Hombre sabiendo que el hombre quería ser perdonado.



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Libro 32 - La Palabra del Creador - Tomo III - C2

martes, 19 de junio de 2018

Evangelio Diciendo

En Sueño Profético hablaban de estos Escritos, que son dictados en Gloria y que nadie puede desmentirlos con pruebas teológicas, o por el que tiene una gran altura, dada por el hombre, de escritor o de fenómeno en las letras.

Todo lo que hay escrito, de hombres que fueron elegidos para comunicar de Aquí, no pueden compararlo con la abundancia de Palabras dichas a este espíritu, y después al cuerpo, para que queden, no como una Visión, sino como una Enseñanza para el espíritu.

Dijo un espíritu con Mando de Dios:

Debería el hombre que conoce este Mando de Dios, no poder dormir, ni que el agua pasara por su garganta, si pudiendo, con su sabiduría, no presenta estos Mensajes Divinos, abundantes y tan necesarios para el espíritu, que es el que conduce al cuerpo al bien o al mal.

Desperté, oí:

Hacen desafío, en Gloria, a los literatos y a la cultura de letras, para que comparen este Saber espiritual sin fronteras.

No hay quien pueda presentar, sin saber, escritos de esta altura, prohibiendo el reformarlos.

La cantidad para imprimir, que Dios le tiene dictada, no hay comparación ninguna que hoy pueda ser presentada.

¡Es lástima sin Perdón, que este Caso que hoy es único, los que lo podían dar a conocer, lo quieran tener oculto!

Este desprecio tan grande a este “Evangelio Diciendo”, tiene que dar muchas lágrimas, que no saldrán fuera, que quedarán dentro.

Que son lágrimas de remordimiento.

Remordimiento que crecerá cuando te encuentres enfermo y te hagas confesión: “Fui culpable de no cundir este “Evangelio Diciendo”.


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Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C6

lunes, 18 de junio de 2018

La fuerza del bueno es Dios el que se la manda

En Sueño Profético hablaban de cosas diferentes unas de otras. Eran diferentes, pero iguales todas para la Enseñanza. Decían mucho estas palabras:

Se ayudan más los malos a los malos, que los buenos a los buenos. Por eso repiten en Gloria, que si el bueno fuera bueno, el malo no sería tan malo.

Recibiendo mucho bien, el mal lo vas retirando de aquel que recibe el bien. Pero el bueno no practica Palabras que son de Dios. No practica ni se ofrece a ofrecer lo que no es suyo, aunque diga: “el dueño soy yo del dinero o del sitio que salen los síes o los noes. Si están lejos de Dios, se reservaran los síes y abundarán los noes.

Los buenos, si fueran buenos y lo bueno practicaran, lo bueno podría a lo malo estando ahí con materia, y el mal se iría achicando.

Dijo uno:

¿Qué debería hacer el bueno que por bueno tiene el hombre, cuando tuviera en sus manos un caso como éste, que es Sedante para la materia y Medicamento para el espíritu?

Desperté, oí:

Cuando Dios se hace visible
en Imagen o en Acción,
se quedan al descubierto
los buenos, los malos
y los que quieren a Dios.

Los buenos quedan parados,
con reserva en interior.
Los malos forman la guerra,
queriendo agrandar los noes.

Los que aman quedan solos,
pero como llevan a Dios,
uno que ame con ganas,
queriendo cundir este Amor,
la fuerza que Dios le manda
agiganta la razón.

Una docena de buenos,
si el ser bueno lo practicaran,
la hoguera del mal del mundo,
seguro que la apagaban.

Porque la fuerza del bueno
es Dios el que se la manda.


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Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con el Padre Eterno - Tomo III - C2

sábado, 16 de junio de 2018

¡Mundo, que Dios puso al servicio del hombre!

En Sueño Profético hablaban del adelanto del hombre; de la cultura; del mundo, en el que él está de paso; del invento de destruir aprisa los cuerpos y sus inventos. Decían con frecuencia:

¡Mundo, que Dios puso al servicio del hombre! Primero hizo el mundo, después creó al hombre. Pero no para que el hombre fuera la destrucción del mundo y no amara lo creado, que es el hombre.

¡Mundo, que Dios puso al servicio del hombre! Primero hizo el mundo y después creó al hombre.

Dijo el Mando de Dios en un espíritu que termina este Diálogo Divino, que su nombre es Mensaje del Cielo a la Tierra:      

Hasta que el hombre no sienta al Prójimo en él como siente el latir del corazón –motor del cuerpo mandado por el espíritu–, no tendrá el mundo arreglo. El hombre inventa el gran y fuerte edificio, y antes de terminar este invento, ya está inventando algo para aprisa destruirlo. Para el medicamento del cuerpo falta sitio para guardar tantos medicamentos, para al cuerpo curar cuando se enferme el cuerpo. Y luego, en hombres sanos, ves cuerpos muertos a montón, que aprisa los matan los inventos. 

El hombre, la mayoría de su sabiduría es monstruosa.

Es falta de creer en esta Vida, es falta de vivir Prójimo.

Cierto que, al edificar el edificio, hace bien y duraderos sus inventos.

Pero otros están inventando cómo destruir aquello.

Ya, si piensas en la vida del hombre, tienes que taparte la cara, que es una forma de arrepentimiento.

Tienen que ser cuerpos sanos los que llevan a que maten los inventos.

Hasta que el hombre no ame a Dios y se culpe del mal que hace su invento, no habrá Paz en la Tierra mientras haya hombres y suelo.


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Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C4

jueves, 14 de junio de 2018

El sufrimiento de mandar con miedo lo que de la Gloria manden

En Sueño Profético decían:

Es sufrimiento grande, y ponlo como el mayor, que Dios te lleve a la Gloria cuando aún vivas con cuerpo y sus Palabras tengas que darlas con miedo por no quererlas aceptar el hombre. Cuando deberían venir los de cerca y los de lejos, de rodillas, a oír lo que Dios manda del Cielo en el arrobo que le hace al espíritu con cuerpo.
      
Es sufrimiento grande que lleves la Salvación para cuando esa vida dejes, que nadie sabe la llamada, ni Representantes de Dios ni millonarios seglares.

Es sufrimiento grande tener que mandar con miedo lo que de la Gloria manden.

Desperté, oí:

Nada material que el hombre valor le ponga, va nadie dándolo y pidiendo por favor que con ello se queden.

Al contrario, que hay quien le sube el precio para que en él se quede.

Pues, ¿cómo creer en Dios y conocer sus Valores y dejar estos Valores en un rincón diciendo que a Dios Lo quieres?

Si este querer no es verdad, da miedo pensar la renta que tiene.


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Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C2

miércoles, 13 de junio de 2018

El abuelo

En Sueño Profético decían:

¡Qué alegría es tener Paz y que esta Paz sea cundida! La Paz rechaza todo lo que otro abriga, que es la ira, la soberbia, la venganza, y si has recibido un golpe, poner la otra mejilla. Si esta Paz tú la practicas, irás contagiando a muchos que esta Paz no la vivían.

Dijo uno:

Yo, de cuatro abuelos que mis amigos tenían, sólo uno tenía. Los otros tres murieron. Mi madre no conoció a sus padres, porque murieron. Mi padre sólo al padre. Su madre murió al tenerlo. Pues mi abuelo era rifado por el pueblo. Mi madre lo quería tanto, que el mejor sitio de la casa era para el abuelo. Siempre refería: “¿qué hubiera sido de mí sin conocer al abuelo?, que me cuida a mis hijos mientras yo voy con el suyo a ganar el sustento”. (El suyo era mi padre).

Mi abuelo reunía en mi casa a otros niños que sus madres también tenían que trabajar en la calle. Le dejaban la comida, y él no pedía nada, pero ellas respondían y mi casa la llenaban. Era curioso que los niños lo buscaran contentos para que les contara cuentos. Les hablaba de Dios, de cuando era Niño como ellos. Les hablaba de la Madre, de cuando vio al buey tan cerca y que respetaba al Niño, y le echaba el aliento para remedirle el frío.

Desperté, oí:

Les contaba mi abuelo, a los chiquillos, cuentos del Cielo. Y él les trasmitía la Paz.

De la muerte de su madre contaba un cuento. Les decía:

Mi madre era tan buena, que Dios la quiso para el Cielo.

No se la llevó Dios antes porque tenía que traerme a mí, para yo servirle a Dios como el pueblo me está viendo.

Vosotros quered, antes que a nadie, a Dios de Niño, porque Él siempre os está viendo.

Luego, cuando seáis mayores, ya llamad a Dios Hombre. Pero llamadlo siendo buenos, ofreciéndos a servirlo con los Diez Mandamientos.

Cuando os entre ira, decid: “yo ya la ira no la quiero”, y la ira se irá.

Cuando os falte Paz, mirad al Cielo, y notaréis que algo llega a vosotros, que es el responder del Cielo.

No os hagáis los sordos ni los ciegos cuando veáis al desnudo y al hambriento.

Tened siempre en la memoria y en la lengua mis cuentos.


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Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Eneseñen - Tomo IV - C5

martes, 12 de junio de 2018

Formas de pedir a Dios

En Sueño Profético hablaban de lo que nace, de lo que muere, del que ama a Dios y a Dios quiere, sin decir: “Señor, ¿por qué me viene este sufrimiento que otros no tienen?”.

Comparaban las dos formas de pedir a Dios. Una era pedir sin Amor y esperar Milagro. Y la otra petición era decir: “Señor, ¿quién soy yo para no subir calvario? Si tu Presencia la llevo, ya estoy viendo Milagro, porque yo no la merezco, por no buscarte aquel tiempo que no necesité Milagro. Si el Milagro va a llevar a muchos a que sigan tus Pasos, ¡Bendito sea tu Nombre!, y adorado por todo el que pise la Tierra. Y al nacer y al morir, tu Nombre con alabanzas se oiga”.

Desperté, oí:

Es más alabanza a Dios, que siempre Le estés pidiendo.

Porque esto ya no es petición, es un contacto del Cielo.

Hablaban del nacimiento y de la muerte.

Decían:

No hay nada que nazca que no muera.

Todo lo que nace, el nacimiento es el nombre y el apellido la muerte.

El hombre es el que puede decir: “mi Vida no tiene muerte”.


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Libro 32 - La Palabra del Creador - Tomo III - C3

lunes, 11 de junio de 2018

Hazte amigo de la muerte, sin romper sus Mandamientos

En Sueño Profético decían:

El fracaso mayor del hombre es vivir ahí sin contar con la muerte que va de Aquí, sin cumplir los años que él se ponga hasta que llegue a morir. Éste es el gran fracaso. Ésta es la primera asignatura que debería el hombre aprender y enseñar, y ya oirías el nombre de Dios en cualquier lugar.

Dijo uno:

Si el hombre contara con la presencia de la muerte, ¡qué poco en esa vida habría hecho para disgustar a Dios!

Si el hombre tuviera siempre la presencia de la muerte, su lucha sería juntar para esta Vida el capital más fuerte, porque ahí nada se deja.

Pues ese capital, con él se viene. En cambio, por el que lucha, puede poner a muchos contentos su muerte y apartarse de Dios para que otros hereden.

Desperté, oí:

Trata bien y quiere lo de la Tierra
porque también es de Dios.

Pero ten mucho cuidado,
porque mayoría de veces aparta de Dios. 

En cambio,
pensar en la muerte con reposo
y en Dios pensando,
te trae a tu memoria:
“Yo no hago esto
porque a Dios no Lo agrado.
Y puede que esté la muerte
ya mi cuerpo rondando”.

Todo el que nace,
ya sabe el que lo ve,
que nace una vida nueva.

Pero que piense también,
que lleva muerte de compañera.

Que ésta no respeta al hombre
cuando el Mando de Aquí lleva.

Hazte amigo de la muerte,
haciendo lo que Dios manda.

Cuando dejes la Tierra,
espíritus de su Gloria Dios te manda.

Si el hombre cuidara su espíritu
como cuida el cuerpo,
ninguno perdería la Gloria,
y tendría su entrada normal,
como al cuerpo es normal
darle sepultura y entrada en el cementerio.

Hazte amigo de la muerte,
sin romper sus Mandamientos.


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Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C6

miércoles, 6 de junio de 2018

¿Cómo pueden vivir dando tanto desprecio?

En Sueño Profético decían:

Tiene que llegar el momento que Dios prohíba que ruegues por el que el ruego te pida y antes te dio desprecio a sabiendas de que Dios Aquí te traía para darles a ellos premio. Tu respuesta será ésta, en palabras o en silencio: “Tú pídeselo a Dios. Yo no me atrevo”. Estas palabras serán dichas más veces en silencio.

Dijo uno:

Y sin saber cómo, habrá obstáculos para que no vaya el Instrumento que Dios tiene con poderes para calmar y quitar los sufrimientos.

Desperté, oí:

Esto es ya uniforme rodeado de focos
que todos están viendo.

Que si no ves bien el uniforme,
la luz sí la estás viendo.

Si estando a tu alcance,
no los quieres ver,
cuando te haga falta luz,
ellos no se querrán encender.  

Pues piensa, estar cerca
y mirar esto con desprecio,
cerrándole puertas
para que no llame.

Si esto baja de donde todos tienen que acudir
cuando les llegue el momento de sufrir,
¿cómo pueden vivir dando tanto desprecio?


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Libro 31 - Te Habla el Profeta - Tomo IV - C4

martes, 5 de junio de 2018

El hombre debería estar siempre buscando los Mandos que van del Cielo

En Sueño Profético hablaban del hombre intelectual. Decían que dentro de los intelectuales había quien su intelectualidad le servía para a él engañarle.

Primer engaño: apartarlo de las Palabras que Dios dejó cuando vivió con Cuerpo, y que hoy, las mismas, sigue diciendo. Si su sabiduría no llega a ver que estos Escritos son Aquí dictados, ya lo están engañando.

Dijo uno que ya sigue el Mando de Dios:

Estos hombres, que son oídos por muchos hombres y respetados por su sabiduría, están siempre perseguidos por espíritus que no son de Dios, para que su sabiduría no acerque a otros hombres a esta Gloria.

El culto que su cultura es provechosa para el cuerpo, si emplea la cultura para el espíritu, es oído y respetado y puede hacer un gran servicio a Dios.

Desperté, oí:

No crea el hombre rudo que ama a Dios,
que a él Dios no le manda.

Le manda y le da caminos
para cundir la Enseñanza.

Que estos caminos están tristes
por falta de esta Enseñanza.

El hombre debería estar siempre
buscando los Mandos que van del Cielo.

Y sería provecho para el hombre
que no cree que Dios esté Vivo,
que está muerto,
y que el mundo es mundo
gracias a sus inventos.

Si a la cultura le falta
el primer Mandamiento,
no se acabarán las guerras,
el crimen y el adulterio.

Hay que enseñar de esta Vida,
para cuando muera el cuerpo.

Que tú espíritu ya va al sitio que pidió
según la vida que hizo tu cuerpo.


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Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C1

lunes, 4 de junio de 2018

¿Qué dirá Dios mañana?

En Sueño Profético decían:

Cuando Dios se manifiesta para enseñar, es cuando ves lo poco que el hombre quiere saber de Dios. Aquí lo está demostrando.

¡Tener esta Grandeza Divina, con los miles de Mensajes y temas, que era para que los hombres de buena fe escándalo hubieran dado al ver la cantidad de Escritos, todos por Dios dictados!

Dijo uno que Dios le dio Mando:

Teólogos, literatos, hombres de letras y profesores que se dedican a la enseñanza, deberían estar detrás del Instrumento preguntándole las palabras que le han dicho en el Cielo.

Es lástima, y van ha salir muchos responsables, el tener esta cantidad de Comunicaciones, dadas por Dios a un espíritu en arrobo, para que lleguen al último rincón del mundo –porque donde hay suelo hay hombres– y que de esta generación muy pocos puedan leer lo que hay escrito, cuando debería estar ya todo leído y esperando ¿qué dirá Dios mañana? Y en este esperar se corregirían sus faltas los que las reconocieran y los que fueran buenos y ejercieran lo bueno para que lo bueno se cundiera.

Desperté, oí:

Ya se ha dicho muchas veces –y se seguirá diciendo– que puede comprobar el hombre que este Caso hoy es único.

Es único en profundidad de temas y en abundancia.

Su dirección es perfecta, por ser Dios el que da el Mando.

El que crea en Esto, el silencio le será más imposible que el niño llegue a hombre sin que el niño haya llorado.


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Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C1

domingo, 3 de junio de 2018

Los Caminos de Dios

En Sueño Profético hablaban de los caminos de Dios. Decían:

Cada palabra tiene un camino, pero todos son un mismo camino para llegar a Él.

Primer camino: tener siempre intranquilidad por oír sus Palabras, ofrecerte a Él para que te mande donde quiera y que el servicio esté hecho con alegría y contento, sin pensar: “El Mando no está bien mandado”. Éste es el primer camino. De éste ya salen todos. Este camino te avisa cuando vas a irte de él. Te ponen indiferencia y te quieren presentar otros caminos más anchos en los que Dios ya no está, y te llevan a la memoria: “Yo qué sé cuál será el camino mejor, yo vivo a mi manera, no hago mal a nadie, cada uno que viva como quiera”.

Desperté, oí:

El Camino de Dios
siempre tiene un caminante,
que te pregunta o te dice
dónde habla Dios
o dónde dicen que Dios habla.

El Camino de Dios
siempre es lo mismo,
pero hay quien lo tuvo más cerca
y quien más lejos lo tuvo.

Y hay quien de él se salió
porque el Amor a Dios
para él era sacrificio.

Tienes que decir:
“¡Señor, mándame lo que Tú quieras!,
que tu camino lo sigo
aunque yo no Te entendiera.
Pero Te pido, Señor,
que no me quites el Mando,
porque antes el castigo quiero yo”.

Este es el mejor Camino
para estar siempre con Dios.


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Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C2

viernes, 1 de junio de 2018

Dios aparta y no castiga

En Sueño Profético decían:

Dios no castiga, Dios aparta y te retira, y no oye las súplicas del que Le dio desprecio y a su Palabra no acudía.

Dios aparta y no castiga, pero al quedar apartado, date ya por castigado.

Dios aparta y no castiga. Si Dios castigara, el día no vería la claridad. Sería noche y día oscuridad permanente, y ya sí sería castigo.

Que un “Sí” de Dios dejaría al mundo, oscuro, que es lo que merece el mundo.

Dijo uno:

Las fuerzas del mal crecen porque el hombre quiere vivir un mundo sin Dios. Él cree que su vida es suya, y no piensa que la vida está esperando la Llamada de Dios. Que ésta no tiene noche ni día, ni respeta medicina que mandara un buen doctor. Ella oye la Llamada y, lo mismo en risa que en llanto, se va dejando ahí el cuerpo, y ya tienes que enterrarlo. Esto es Vida que la cultura no quiere enseñar.

Debería el hombre hacer público el porqué no enseñar esta Existencia. Que si pensara en la muerte, su cara lo diría con tristeza, y si se notaba un mal en su cuerpo de los pies a la cabeza, aunque fuera sin remedio, tendría que cambiar.

Desperté, oí:

¿Qué diría un hombre culto
que ocupara un buen sillón,
si el del campo preguntara:
“¿Por qué no enseñar de Dios?”.

Esta pregunta le haría
hasta sentirse un dolor
donde enfermedad no había.

Si de la Tierra no se pasara,
no consentiría el Cielo
que de Dios no se hablara.

La cultura es culpable
que de Dios no se hable nada.


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Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C2