En Sueño Profético hablaban los Discípulos de Jesús. Contaban hechos
ocurridos a ellos y hechos que el mismo Dios les había contado.
Dijo
un Discípulo:
Yendo
un día caminando muy temprano –otro contesta: tan temprano que podías creer que
venía comienzo de día o de noche–, se paró el Maestro y nos dijo:
–Cuando
ahora más adelante nos salgan unos a preguntar, dejad vuestras lenguas sin
movimiento, ya que la respuesta está en Mí, por ya haberla mandado mi Padre.
Seguimos
caminando, y ya que entraba el día bien descubierto, nos salieron unos cuantos hombres de aspecto bien
presentado. Uno de los más poderosos de entre todos ellos, dijo:
–¡Dios os guarde! He oído mucho hablar de
todos vosotros, y principalmente de Ese que para vosotros es un Maestro.
Adelantó
el Maestro unos pasos, y con una Mirada de Grande Poderío dijo:
–No
sigas hablando, que te voy a decir a lo que vienes. Vienes a decir a éstos –y
señaló a los Discípulos– que Yo no soy
Dios, que mi Padre no es mi Padre, que levanto y alboroto los espíritus, que
ofrezco un Reino que no existe, y que soy un endemoniado.
–Aquí se han cumplido las primeras palabras que has pronunciado al
vernos. Éstos están conmigo y mi Padre los guarda por los siglos sin fin. Hoy
están con Dios en Materia. Mañana estaremos en Espíritu con el Padre, que soy
Yo.
Todos
inclinaron las rodillas, menos el que Dios no lo dejó.
Desperté, oí:
Este
hombre hacía más daño que el que sólo no quería a Dios.
Éste
era un pudiente en dinero y amistades, y no podía resistir que Dios Hombre
estuviera en todas las bocas, diciendo la Paz que dejaba.
Sabía
el camino que llevaban, y juntó a otros para derrotarlo.
Ya
se le cambió la cara cuando el Maestro le fue diciendo, palabra por palabra, lo
que él llevaba pensado.
Que
unas cosas les había dicho a los que iban con él, pero otras no.
Dios
le demuestra el Dios, descubriendo sus palabras, perdonando a los que con él
iban, y apartándolo a él.
Es más daño hacer daño,
queriendo
el daño extender.
Pues si tú solo haces daño,
es
un daño sin poder.
Y puede que este mal te sirva
para
que llames a Él.
***
Libro 3 - La Palabra del Creador - Tomo I - C7
El que es de Dios intuye cuando tiene cerca a una persona así, como este personaje tan siniestro.
ResponderEliminarDios destapa al que no quiere amar y su trabajo es repartir discordia para apartar de Dios a los demás.