En Sueño Profético decían:
No
puede dar buen consejo el que a Dios no ame. Puede aconsejarte que no robes ni
mates, pero puede que te enseñe a que estés matando y robando sin que esto vea nadie. El robo hay quien lo
practica, diciendo: ¡No! ¡No!, no robo a
nadie, y el crimen lo va siguiendo por sitio que no haya nadie.
Esto
que yo aquí refiero, le fue oído a un hombre con el que viví de compañero,
compañero de trabajo y maestro de espíritu. Este hombre decía:
¿A
cuántos hombres, que dice el hombre que son buenos, si les hicieran ver todas
las escenas que sus espíritus saben que ellos han hecho en contra de Dios –si
esto saliera a la vista del hombre–, les sobraría el bueno?
El
hombre, para ser bueno, tiene que llevar una lista en la mano, en la que diga:
Lista de Dios y lista del hombre; comportamiento que manda Dios, exigencias que
obliga el hombre. Pues tú con tu lista en la mano y sin llegar la noche, pon el
“sí” en lo de Dios, para seguir en el orden de lo que Dios tiene dicho: cómo ha
de vivir el hombre. Y el “no” lo vas apuntando en la exigencia del hombre para
hacerte hombre malo.
Desperté, oí:
¿Quién
diría, comprendo la risa en llanto?
¿Quién diría, quiero esto,
pero dejo un claro en blanco,
para lo que quiera Dios,
yo
lo recibo cantando?
Con canto, en los ojos viendo,
que
lágrimas están brotando.
Que esto comprenderá
aquel
que mucho este amando.
Las gracias y el pedir,
son
palabras que todos usan.
Unos piden exigiendo,
y
otros dan gracias cumplidas.
Por eso amando tanto
como aquel que mucho ame,
tiene que ser comprendido
el
que de esta Gloria hable.
Estas Palabras dictamos
para
cierre del Mensaje:
No es amar, llamar a Dios
para insultar o enfadarte,
en cambio es grande Amor
aceptar
sin enfadarte.
***
Libro 2 - Meditaciones y Palabras Directas con el Padre Eterno - Tomo II - C4
Suele acontecer lo que contaba el compañero,y llevaba toda la razón al decir que hay mucho encubierto.
ResponderEliminarDios nos Ilumine y nos haga humildes para no perder la Lista de Dios.