Enseñanza de Dios

En Sueño Profético decían Palabras que Jesús dijo, cuando vivió de Hombre, para enseñar al que quería la Enseñanza.

“Pensad, que Yo puedo ir a buscar al pecador y no ir al que de mi Mando se retire”.

“Hace más daño el que ven que ya no lleva mi Mando, que el que lo vieron pecando. El que lo vieron pecando, no es tan conocido como el que lleva mi Enseñanza y va hablando de Mí”.

“El que pecó se hace él el daño. El que se va de mi Mando, retira de que vengan otros a pedirme Mando, y ya hace más daño”.

“El pecado puede ser caída, y Yo voy cuando piden mi Mano, que de esto puede hablar el que sigue mis Pasos”.

“Si a vosotros os llegara el momento de no seguirme, pensad que Yo no iría a buscaros, porque ya confundirían a Dios con las actuaciones del hombre”.

“Yo busco al pecador que Me llama, no al que mi Mando abandona y va dando “buena enseñanza” para el que quisiera que yo no fuera Dios Engendrado con la Palabra de mi Padre para enseñar al hombre que no hay muerte para el espíritu”.

Desperté, oí:

¡Gloria a Dios en el Cielo, y en la Tierra pide Luz Divina para que el espíritu vea el mal antes de hacerlo!

¡Cómo te hace esta Enseñanza que veas que hacía más daño seguir al Maestro y retirarte, que haber pecado y llamarlo!

Los que no Lo creían, querían que nadie Lo siguiera.

Los Once, con Él quedaron y con Él están en la Gloria.

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Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C6