En Sueño Profético hablaban de lo que
es normal y de lo que está fuera de lo normal. Decían:
Este
desinterés por estas Revelaciones Divinas, en este largo tiempo, no es normal.
Lo normal no extraña y está admitido por el Reino de Dios.
Si Dios no
hubiera anunciado su Nacimiento por los Profetas, habrían tenido disculpa los
que no Lo siguieron. Pero el no querer, no tiene disculpa. Lo normal es normal
para todos los hombres que aman a Dios y cumplen sus Palabras.
Se van a decir
palabras para que sirvan de Enseñanza y queden en el pensamiento para cogerlas
cuando hagan falta:
Es más normal
que la gallina tape a los polluelos, aunque éstos estén alborotados, que los
polluelos tapen a la gallina.
Es más normal
que la madre tape al hijo de sus defectos, que el hijo tape a la madre.
Es más normal
decir que hace frío en invierno que en verano.
Y ya verás
normal, si amas a Dios por dentro, no de palabras, ir al Prójimo y que dejes la
enseñanza. Enseñanza de provecho, dando, y quitando faltas, faltas que los
retiran del Cielo.
Desperté, oí:
El hombre quiere poner normal
lo que está en contra del Cielo.
El hombre quiere cambiar
Palabras del
Evangelio.
Ponían en la Gloria, normal,
lo que normal
podía serlo.
Que normal es lo de Dios,
por poder
todos hacerlo.
Le quitaban lo normal
a esto que
está ocurriendo.
¡Tener esto en abandono,
tantos días,
tantos meses y
tantos años!
Es normal que tengas sed
y vayas
buscando venero.
Lo que no es normal
es que tengas sed
y el venero
despreciarlo.
Es normal buscar a Dios
y acudir donde
esté hablando.
Si te falta este normal,
ya vives lejos
del Cielo.
***
Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C8
La Paciencia que tiene Dios no tiene compañero
ResponderEliminarPues aún viendo las consecuencias que tiene el darle a Dios desprecio,sigue el hombre con su indiferencia y dando la espalda al Cielo.