En Sueño Profético decían:
Todo el que pueda –que todos
pueden, cada uno en el terreno que tenga– divulgar estos Escritos dictados en
Gloria, y no los divulgue, está apartado de Dios. Porque al tener su contacto,
no puede decir: “Yo no quiero saber nada más que lo que Dios dejó escrito”. El
que tenga este pensar, no tiene a Dios por Vivo.
Estos Mensajes deberían oírse en
alta voz, para que los disfrutaran los que no saben leer y los ciegos. Ciegos
de cuerpo. Que los ciegos de espíritu son otra clase de ciegos. Éstos están
ciegos para la Palabra de Dios, y tienen vista y obedecen el mando de espíritus
que no están en la Gloria.
Dijo uno:
Muchas veces se ha dicho, con el
Mando de Dios, que no puedes oír al vendedor y no acudir, cuando tú desees lo
que el vendedor lleve a buen precio y bueno. Al no acudir, o eres sordo o pasas
sin ello.
Desperté, oí:
Podrías pensar:
“¿Y si no hay dinero?”.
Pero por amar a Dios,
no te cobra el Cielo.
Y si tú no amas y vives contento,
vives alegría del mismo Infierno.
Todo el que ha tenido
estos Escritos en sus manos,
y pudiendo no hizo,
¿cómo quiere él
que Aquí llegue su “Dios mío”?
Que esto es noche al día,
que llega por fuerza.
A estos Escritos
no les hace falta
defensor que los defienda.
Al empezar, ves a Dios;
y al terminar,
das alabanzas y pides Perdón.
Hoy no hay quien tenga,
tantos años, a diario,
una Comunicación de Dios.
***
Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C9
Hay tantas formas de ayudar.. con oración lo primero, pidiéndole a Dios que nadie pueda vivir sin adorar a Dios, que se adora en sus Palabras igual que en El Santísimo Sacramento.
ResponderEliminarCon llevar la noticia a los cerca o a los lejos.