En Sueño Profético
se oía la Voz de Dios Hijo con estas Palabras:
“El que más cree en Mí, más busca las
Palabras que Yo digo en el Lugar que vive con cuerpo para que las diga poniendo
mi Nombre delante, como Yo cuando vivía con Cuerpo decía el Nombre de mi Padre”.
“El que no ponga primero mi Mando, no
merece oír mis Palabras, dichas al amanecer del día por el cuerpo que su espíritu
es por mi Padre arrobado”.
Desperté, oí:
Ángeles, arcángeles y espíritus de la Gloria,
ruegan a la Madre Virgen
para que ofrezcan
todo
lo que Dios les deja.
Siendo el Mando el mismo,
el
despertar no es el mismo.
En este despertar te notas
como con culpa
de no buscar caminos
que
lleven a más escándalo.
Y te quieres quitar culpa,
pensando:
“Yo a Dios enfado
por hablar de los Mensajes
al
que no coge mi mando”.
Todo el pensar que hagas,
a
Dios no puede enfadarlo.
Si esto no fuera de Dios,
no
te darían tan mal pago.
En este arrobo ha oído
la
Voz de Dios Hijo.
Y en el día,
que a esta noche le dio paso,
Dios ha respondido
al
Amor del hombre, contestando.
Tu presencia debería
a
los “noes” enterrarlos.
Cuando estos “noes” sean
a Dios despreciando.
***
Libro 32 - La Palabra del Creador - Tomo III - C6
Si no hay hambre de Dios, difícil es que busquen Sus Palabras.
ResponderEliminarNi seglares ni religiosos tienen excusa al darle a Esto la espalda.
La realidad pura y dura es que a Dios lo tienen como una antigüedad que ya no hace falta.
Cuando la Realidad Verdadera es que tenemos una "Cámara" grabando las 24 horas del día, acciones y pensamientos.
Cuidado con lo que dices y haces ..! Que todo, todo, queda grabado en el Cielo!