En Sueño Profético decían:
Dios
le puso precio a la Salvación del espíritu, pero prohibió que el dinero aquí
sirviera. Este precio todos pueden pagarlo. Este pago se hace de varias maneras.
Hay quien lo hace en el curso de su larga vida, siempre echando en la hucha
invisible para el hombre, transparente y apreciada por Dios. A otros, que vida
corta tuvieron, hucha llena Aquí les vieron, y ya, a grandes pecadores quitaron
de pecar. Éstos, no se conforman con llenar la suya, que también quieren llenar
la de los demás. A éstos Aquí Dios los premia, dándoles la potestad para que cuando vean algo
en el hombre, irlo a buscar.
Dijo
uno:
Dentro
de mi familia había un caso que aquí yo cuento:
Había
una mujer pecadora y toda la familia la tenía despreciada por su forma de pecar
tan públicamente. Pues un día fue al encuentro de mi padre, y llorando le pidió
la entrada en mi casa, diciéndole que hacía tiempo que hacía vida buena, pero
que no quería buscarlo hasta que Dios le diera el Perdón.
–Ya, ayer, pude comprobar lo que en un Sueño
me dijeron: “Esto es un don que Dios te manda, que en el sitio que entres habrá
abundancia de Paz, se quitarán los pecados y cundirá el sustento”. Ayer fui
recorriendo sitios de pecado, y ésta era mi entrada: “Si aquí sigue el pecado,
yo no puedo entrar, ya que Dios me ha dado el Perdón en un Sueño”. Todos
salían, me abrazaban y rompían en llanto. He comprobado el Sueño, con mis
suplicas a Dios antes de tener el Sueño.
Desperté, oí:
Veintisiete
años tenía cuando dejó de pecar.
Estuvo
cerca de un año llorando sin descansar, pidiendo a Dios, rezando, cuando se iba
a acostar:
“Señor,
yo sé que Tú me perdonas, pero quiero que me des palabras seguras, palabras con
tanta Fe, que pueda servirte en algo”.
Esto,
media noche pasaba en rezo y llanto, hasta que tuvo el Sueño.
A
Dios le pedía llorando, no ya por sus pecados, pedía por el que estaba pecando.
Ella se llenó la hucha, y se la llenó a tantos, que el pueblo la conoció
por
“la que reza de noche para acabar con el pecado”.
No
necesita dinero el que a Dios siempre está amando, porque Dios le prohibió el
dinero para pagarlo.
***
Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C5
Limpiará el Perdón de Dios!!??
ResponderEliminarAquí queda de ejemplo! una mujer joven que deja el pecado y Dios la deja tan limpia como niño recién bautizado.
Para que nadie piense, si será perdonado,que Dios no tiene límites cuando lo buscan con verdadero arrepentimiento y con Amor.