miércoles, 27 de febrero de 2019

Da el uno sintiendo a Dios

En Sueño Profético decían:

Dios da el ciento por uno cuando tú el uno a Él Le das. Cuando lo haces por el hombre, Dios ya no responde igual. Ya, quien responde es el hombre.

Todo lo que se hace por Dios, no puede imitarlo el que a Dios no siente, porque antes de hacerlo, un cerro de inconvenientes delante se pone y le da importancia antes de que llegue.

El cien por uno que da Dios, va en la moneda que te manda Dios. Que ésta, más la entiende el que vea más claro que otra Vida tiene.

Hay quien vive con pena y tristeza por no poder dar el uno en moneda.

Desperté, oí:

Hay un capital más grande
en el Camino de Dios,
que todos los pueden dar,
que es Caridad y Amor.

Si esto lleva la moneda,
ya le doblas el valor
que la moneda tenga.

Piensa que Dios te puede dar
todo lo que tú quieras dar.

Hay quien le sobra de todo
y le falta Caridad
y Amor al Prójimo.

Éstos, cuando el uno dan,
ofenden al que recibe,
por falta de Caridad.

Si das el uno, sintiendo a Dios,
vive ya tranquilo,
que Dios da contestación.

Pídele a Dios para dar
de lo que Él quiere que des.

Si no tuvieras monedas,
hay muchos valores
para al Prójimo socorrer.


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Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C8

martes, 26 de febrero de 2019

Resurrección es ver luz donde hay oscuridad

En Sueño Profético decían:

Si amas mucho a Dios, poco tienes en tu memoria la Cruz, y sí, siempre, Resurrección.

Resurrección: alegría, confianza de saber que está Vivo Dios. Que Crucifixión permite, y después más se ve el Dios.

Resurrección, que te sirve para no hacer aquello que hace sufrir a Dios.

Resurrección, que te dice que todo puede hacerlo Dios. Da vida otra vez al Cuerpo y se lo lleva a su Reino, sin señales en su Frente, sin heridas en sus Pies y en sus Manos. No quiere dar sufrir donde están los ángeles por Dios Padre creados; ni a los arcángeles, guardianes con su Mando. El Padre sufre el dolor, por ser Él mismo Engendrado. La Virgen sufre dolor, por ser su Cuerpo Sagrario.

Desperté, oí:

Resurrección da la vida
en aquello que tú ves
con clavos
y con corona de espinas.

Resurrección es pensar
que Dios le manda a la vida,
que nadie puede mandar.  

Resurrección es ver luz
donde hay oscuridad.

Que esto te hace que vivas
Esperanza, Paz y Caridad.

Crucifixión, te da pena
y la debes de pensar
cuando vayas a hacer algo
que a Dios puedas enfadar.

Entonces piensa:

“Señor, mi pecado
ayuda otra vez a crucificar.

Que yo viva tu Presencia,
predicando y enseñando
que Vivo en tu Gloria estás”.


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Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C4

domingo, 24 de febrero de 2019

Académico del Cielo

En Sueño Profético decían:

Demuestra más la inteligencia la acción que las palabras. Las palabras pueden ser de estudio. La acción, luego al estudio le manda, y ya eres inteligente, y a los que se creen inteligentes los callas. A la inteligencia del cuerpo, si no ha pasado por el espíritu, llámale analfabeta. La cultura del espíritu te pone a Dios lo primero, con dos amplias asignaturas: Amor a Dios, Amor al Prójimo.

Dijo uno:

El espíritu que tiene Enseñanza de Aquí, en sus acciones vas leyendo. Que puedes apuntar y practicar, y tú también puedes callar a los inteligentes que sólo son de libros.

Desperté, oí:

Cultura sin Dios
es grano en suelo de mármol.

Que después de trabajarlo,
en el mármol se ha quedado.

La inteligencia de libros,
si lleva la del espíritu,
agranda a profesores y alumnos.

El espíritu enseñado
y con Mando de este Cielo,
uno que practique letras,
manda Paz al mundo entero.
Porque en esta Sabiduría
te ponen notas los hechos.

Coge la inteligencia del espíritu
para que enseñe
a la inteligencia del cuerpo.

Y ya, cuéntate “Académico del Cielo”.


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Libro 30 - Investigaiones a la Verdad - Tomo IV - C4

jueves, 21 de febrero de 2019

Y vendrá mi Espíritu

En Sueño Profético decían:

Le tarda en llegar el sueño porque el tiempo lo ve corto para hacerle a Dios ruegos para que el hombre pregone lo que Dios está haciendo.

Dijo uno:

Ya, el diálogo es corto para hablar de esta Verdad. Son los Libros los que responden de este Caso, como el que no hay hoy en día otro igual.

Tu vida pueden seguirla, que dará mejor respuesta que lo que tus palabras digan. Esto ya pasó su tiempo de hacer publicación de aquellos primeros tiempos. Sea el tiempo aprovechado para hablar de estos Mensajes que están puestos en los Libros con gran respeto firmados por los que vieron que del hombre no podía ser este Mando, con gran desafío, sin poder nada cambiarlo. Ya supera a todo lo que fuera de esto quiera el hombre publicarlo. No empecemos a habar de las primeras letras cuando salgas de la universidad con el título en la mano.

Desperté, oí:
 
Era el consejo en la Gloria para que más se cundieran los Mensajes que la vida de la persona.

Para que todo lo que hay escrito, dictado ahora en el Cielo, fuera a manos de los hombres.

Y compararan el talento de la Tierra con la Sabiduría, Sabiduría del Cielo.

Leyendo lo que Aquí se dicta, tienes que decir Evangelio, porque Dios les dijo a los hombres: “Y vendrá mi Espíritu”.

Al hombre le falta Amor a Dios y pone de culpables a los tiempos.

Los tiempos no son culpables, porque Dios es Presencia Viva en la ciudad y en el campo.

Ni la Tierra sube al Cielo, ni el Cielo está en la Tierra y el hombre lo va pisando.

Si esto cambiado lo vieras, si serían tiempos cambiados.

O que la muerte la pares cuando el cuerpo se lo hayan llevado.

Que es el Mando que da Dios apartando el adelanto.


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Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo IV - C4

miércoles, 20 de febrero de 2019

La Caridad de espíritu

En Sueño Profético decían:

“Yo acepto tu voluntad y mándame lo que quieras”.

¿Qué cristiano dice esto, acepta y va enseñando que a Dios Lo quieran? Son tan pocos los que reciben el golpe y responde la prudencia, que mira si son pocos, que al que lo hace ya le declaran la guerra.

Por eso, con el que Dios elige, debería darle miedo al que comparar hiciera.

¿Para que Dios llegara a cogerlo de vivienda para dejar sus Palabras, qué aceptación no habrá tenido este espíritu al Mando de Dios?

Fuerzas, capacidad y que yo no Te ofenda, sí pedía en su caminar.

Dijo uno:

Al que Dios elige, si el que lo sigue no alberga espíritus diabólicos, ve a Dios en muchas actuaciones, aunque Dios no presente su Cuerpo.

Dios hace su Presencia en el Amor al Prójimo, y se retira de donde no practican la Caridad de espíritu. La Caridad de espíritu hace al malo bueno y tú te haces más bueno. La Caridad de espíritu es la que compadece al que pecó y la que evita que llegue pecado.

Esto es Caridad en el Prójimo, pero al espíritu.

Desperté, oí:

¡Qué poco sabe el hombre lo que es caridad de materia y Caridad de espíritu!

Dan caridad, mayoría, mal a la materia, porque al espíritu no saben dar Caridad.

No saben porque no creen que la mayor Caridad Dios quiere que sea al espíritu, que es lo que nunca muere.

A la caridad olvidándote de Dios, no le llames Caridad.

No le llames Caridad, porque siempre será mal hecha.

Si tienes Caridad de espíritu y aceptación a todo el sufrir que te venga, no te extrañe que ya, un día, Dios te coja de Vivienda.


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Libro 25 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C1

miércoles, 13 de febrero de 2019

Si Dios quiere, nos veremos mañana

En Sueño Profético decían:

No hay quien busque a Dios, y no Lo encuentre, porque antes de buscarlo, Él ya estaba presente.

No hay quien busque a Dios, haciendo una vida que Él no mandó, porque en el buscar, ya sientes a Dios.

Dijo uno:

Si el hombre pensara en Dios, cuando pone los pies en el suelo y cuando los echa en la cama, pensaría en su vida y vería que siendo suya, él no mandaba.

La vida del cuerpo no merece tanto el cuidarla, porque ella te abandona cuando siente la llamada. Que si piensas, la llamada es al espíritu, porque el cuerpo no vale nada. Éste actúa a lo que el espíritu manda.

La vida del cuerpo debería suprimir la palabra “hasta mañana” y cambiarla por ésta: “Si Dios quiere, nos veremos mañana”. Porque la vida del hombre puede abandonar el cuerpo en cualquier momento: con pocos años, con mucho cuido y sin haber pasado por los estudios de ningún médico, por verse siempre sano y contento.

Desperté, oí:

¡Qué fácil sería vivir
la vida que manda el Cielo,
si se pensara en la muerte del cuerpo!

Que hay veces que no avisa
y te pilla de sorpresa,
cuando te dicen:
¡No, ya está muerto!

Otras veces ves que el espíritu
no quiere estar en el cuerpo,
y protesta con dolencias
que éstas no tienen remedio,
porque oyen la llamada,
sea joven o sea viejo.

Debería el hombre pensar
lo que es la vida del cuerpo,
y seguro que cambiaría
y no dejaría de oír:

“¡Si Dios quiere,
ya nos veremos mañana!”.

Mañana: larga distancia,
si el espíritu antes no oye
de Dios la llamada.

Ponían llamada de espíritu
al joven y al viejo,
sin poder en la Tierra detener
este cuerpo.


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Libro 25 - Meditacines y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo III - C7

martes, 12 de febrero de 2019

Dios da el ciento por uno

En Sueño Profético decían:

Es mejor que Dios te dé el ciento por uno, que tú sin Él tengas muchos cientos. Los que Él te dé, bajan del Cielo. Los que tú tengas sin Él, es pago para el Infierno, que unos van soltando y otros cogiendo.

El Amor a Dios no se compra con dinero, se compra haciendo el bien, que ese bien es para el Cielo, donde está Dios en Espíritu y con Cuerpo. Que este es el capital que siempre está en aumento, dando y perdonando al que ya no quiere pecar ni de pensamiento ni de cuerpo.

Dijo uno:

Yo siempre Le pedía a Dios, que lo que yo deseara siempre fuera de su agrado. Si era pedir para que Él sufriera, que me dejara ciego antes que la petición yo viera. Yo no podía oír palabras que a Dios hicieran sufrir. Yo siempre estaba pidiendo y sabía que me oía porque yo recibía lo que pedía, y si no me llegaba, me aumentaba la Fe y pedía con más ganas.

Desperté, oí:

¿Cómo no verá, el que crea en esta Vida, que no muere lo que ahí al cuerpo le da vida?

¡Qué cierto, que el ciento por uno que Dios da, es el que tiene el aumento cada día más!

Si tienes muchos cientos, tantos cientos que no pudieras contar, si no van de Dios, no tienes nada.

Dios da el ciento por uno, y luego están los cientos de la Tierra, que tú sólo lo que haces es administrar.

Porque la Frontera Divina no deja pasar nada material.


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Libro 32 - La Palabra del Creador - Tomo III - C2

lunes, 11 de febrero de 2019

Palabra de Dios diciendo

En Sueño Profético hablaban de la aceptación a lo invisible que baja un espíritu del Cielo. Hacían comparaciones con místicos, contemplativos o visionarios que dicen que ven lo que no ve el que está a su lado.

Hablaban de hombres buenos dedicados a la oración y, de ese mundo, apartados; del gran caritativo, que sus manos siempre van dando. Nombraban muchos más casos que en la oración habían pasado y habían dejado huella para poder confirmarlo. Pero este Caso, hoy presente, no tiene comparación con lo que ya se ha nombrado. Aquí es presentar Escritos de un Dios Vivo, que manda que hablen que hay otra Vida sin diferencia de clases, sin edad ni cultura. Esto es Mando que Dios manda, que ya en la Fuerza salen las Palabras. Que ves de momento que es Dios el que habla, por la Fuerza que ya llevan las Palabras que quedan escritas, que no son de uno que oyes que a Dios ama y quiere que amen.

Desperté, oí:
Todo aquello que se diga amando a Dios
es gran apostolado y tiene compensación.

Pero no compares esto,
que es la “Palabra de Dios diciendo”
y con gran fuerza dada al Instrumento.

¿Tú has pensando, oyente de Dios,
inventar palabras diciendo:
“Me las dice Dios”?

¿Presentar escritos y estar esperando
ver qué dicen teólogos y hombres
conocidos por grandes catedráticos?

¿Tener grande lucha
para que los lean los Representantes
que a Dios representan?

Esto solamente,
te da la firmeza
que esto es de Dios
y no es de la Tierra.

Visión, contemplativo, místico
y seguidores de Dios,
no pueden llevar esta Fuerza.

Defendiendo que no es suyo.
Que es el mayor justificante
que da la prueba.

Aquí, lo invisible está visible,
los Escritos lo demuestran.


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Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C2

domingo, 10 de febrero de 2019

Dios siempre se manifiesta

En Sueño Profético decían:

Al que Dios elige dándole Mando para que publique lo que Aquí oiga o vea, el hombre le formará la guerra, porque el hombre quiere un Dios de piedra, un Dios que vivió y que el hombre guarda su historia, un Dios que su Nombre y sus Palabras sean así pronunciadas: “¿Por qué Dios dijo? ¿Por qué Dios cuando vivió de Hombre iba buscando a los humildes, y a los pecadores apartó, a los endemoniados les sacó del cuerpo los demonios, curó a leprosos y echó del Templo a los que sus Palabras no cumplían?”.

A este Dios, así Lo quiere el que dice que Lo quiere.

Dijo uno:

Pues que piense el hombre, que Dios es Vivo y que de Hombre dijo, pero que no deje en desprecio el “diciendo”.

El que esto desprecie, él solo se pondrá al descubierto.

Dios puede hacer que el Instrumento vea lo que nadie puede ver, por ser Visión de espíritu, que no hace falta el cuerpo, pero esto daría más sufrimientos que alegrías, y Dios pone oscuridad y evita sufrimientos.

Desperté, oí:

Va el Mensaje a que Dios quiere un Dios que hubo, pero no un Dios que hay.

Que en esto no hace falta mucho estudio, para que veas verdad en lo que este arrobo dice.

Si Dios lleva a este espíritu a su Gloria, como si su cuerpo no viviera, en esos momentos ve lo que no ve la materia.

Que es el Poder de Dios, que todo lo trae a su Presencia.

Porque sólo hay espíritu, si Dios quiere, hace que el Elegido vea.

Y si Dios no da Mando, siente el espíritu bien o mal, pero no puede poner letras.

Este Poder es tan grande, que anula a aquel que quiera decirle a Dios que no hable.

Dios siempre se manifiesta para que el hombre no dude de su Divina Presencia.

Al que elige, le da Mando para que hable de su Existencia, que mucho no queda escrito porque Mando no lo lleva.

Puedes tener un sentir, pero es un sentir a ciegas, sin nada poder decir.


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Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C6

viernes, 8 de febrero de 2019

Dios no castiga a ningún hombre

En Sueño Profético decían:

La Paz tienes que buscarla, enseñarla y practicarla. Pero si no eres de Dios, no la buscas, no la enseñas y no la vives.

La Paz hay quien la confunde con la abundancia de bienes, creyendo: “Si yo fuera millonario, tendría la Paz conmigo”. El que tenga este pensar, confunde el mar con el río.

El dinero es muletas para el espíritu, cuando éste es de Dios y quiere llevar el sustento para que no llegue hambre y la muerte se presente.

El dinero en abundancia te hace rico y siempre va procurando el retirarte del Mando de Dios. Al retirarte de lo que Dios manda, ya no puedes vivir Paz, porque vives fuera de las Leyes de Dios, y al hacer este vivir, puedes hacer que muchos se condenen, porque los mismos espíritus que a ti te retiran de Dios, los mismos buscan al necesitado para llevarle pensamientos que culpen a Dios.

Si el hombre pensara esto, vería lo que es Dios.

Desperté, oí:

Si Dios no fuera Dios, le obligaría la Paz al hombre.

Pero ya no sería Dios.

Hay quien pone en su boca estas palabras: “Eso es castigo de Dios”.

El castigo se lo pone el mismo hombre, no cumpliendo las Palabras de Dios y perdiendo su Reino.

Dios no castiga a ningún hombre, y lleva a su Gloria al rico y al pobre.

Los dos se hacen falta, si los dos a Dios quieren.

Y ya viven la Paz, y la Gloria no la pierden.


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Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C6

miércoles, 6 de febrero de 2019

El Amor a Dios y el amor al hijo

En Sueño Profético decían:

Hay quien busca a Dios para pedirle, y no Lo busca para darle las gracias por lo que siempre le está dando.

Hay quien pide el Amor que dentro lleva, y hay quien pide con ira y con protestas.

Hay quien su carga ve más grande, y no ve al que Dios le manda ayudarle.

El pedir a Dios, más que aprenderlo, es sentirlo dentro de tu mismo cuerpo, como sientes al hijo antes de que esté pidiendo, que tan sólo al mirarlo, ya le vas llevando lo que está queriendo.

Dijo uno:

Yo traté a muchas madres, y no eran enseñadas a querer ni a tratar al hijo, cuando les pedía agua.

Esto me hizo Mónica que lo pensara:

Decía, que el Amor a Dios y el amor al hijo, no necesitaba enseñanza; que en el querer ansioso, no hacen falta palabras; que el Amor a Dios, el que lo sienta, la acción anula las palabras.

Desperté, oí:

Es grande el amor al hijo, pero le supera el Amor a Dios.

Dios no necesita al hijo. El hijo no vive sin Dios, ni su cuerpo, ni su espíritu.

Yo cuando oía a las madres “mi hijo y después Dios”, ya no veía una madre, y del niño, me daba tal compasión, que cuando miraba al mío, por él también pedía a Dios.

Le pedía con más ganas, para que el niño al llorar, Dios cogiera una plegaria y a su madre perdonara.

Quiere después a tu hijo, porque en tu hijo Él manda.

Y sabrá mejor que tú el corregirle sus faltas.

MÓNICA DE AGUSTÍN


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Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C4

lunes, 4 de febrero de 2019

El Lugar no es lo que enseña, es lo que del Cielo va

En Sueño Profético decían:

Tienen que darse cuenta de que una cosa es ser bueno y premiado por el hombre, y otra cosa es ser Elegido por Dios.

Una cosa es que tengas valores aprendidos en la Tierra, y otra cosa es que no tengas nada aprendido de la Tierra y Dios te haga, en Teología y Literatura, profesor de profesores.

Esto, si practicas la humildad, debes reconocer que no hay jerarquía que a este Lugar se pueda igualar. A Esto, llegará el momento que se tendrán que inclinar, reconociendo el mal que hizo el que conoció el Lugar. 

Esto es querer darle insultos el río al mar porque el río se vea con menos agua y anchura. Si éstos tuvieran habla y el río odiara al mar, ¿qué pensaría, el hombre, del río?

Pues mucho peor está que el hombre, por cargo grande que tenga en la Iglesia o de seglar, si ve estos Escritos, no la llame o la venga a buscar.

¡Si Esto no tiene escondrijo para que vean verdad! ¡Si está al alcance del que quiera! ¡Si de escondrijo no hay nada, porque Dios lo manda publicar!

¡Es el hombre el que no quiere que Dios elija un Lugar donde sus Palabras dé para el bien de la Humanidad!

Desperté, oí:

¿Qué saber se puede comparar
con las Palabras de Dios?

El que no busque
y no acepte estos Escritos,
¿cómo puede decir: “yo amo a Dios”?

Que quiten la mirada del Lugar
y la pongan en el Cielo.

Y sentirá el espíritu,
y el espíritu ya le hablará al cuerpo.

Esto tiene que cundirse
por Mando que da este Cielo.

Y el hombre reverenciar
lo que Dios está diciendo.

Tratar mal al Elegido
y dar desprecio al “Diciendo”,
es declararte enemigo
del Creador de ese mundo
y de éste que hizo primero.

Piensa en Dios,
mira al Cielo
y no mires el Lugar.

¡El Lugar no es lo que enseña,
es lo que del Cielo va!


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Libro 19 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo III - C2