jueves, 30 de enero de 2020

El Creer y el Amar

En Sueño Profético decían:

El Creer y el Amar
son dos grandes compañeros.
Pero si crece el Amor,
el Creer se queda solo,
porque ya camina Amor
con el Mando de este Cielo.

A Dios Le puede servir el que el hombre vea rudo y sin presencia para darle un buen cargo ahí en la Tierra.

Dios elige al que Le pide con humildad y con ansias de servir a los demás. Éste no busca verdad, ve con el sentir que le da el espíritu, y sólo Le pide a Dios que le mande.

El que más hace este pedir, más enseña a que a Dios amen.

El hombre ve imposible la sabiduría en el rudo. El que haga este pensar, él es rudo de espíritu, y ya Dios no le mandará.

Desperté, oí:

El rudo de espíritu nunca llegará a tener Cultura Divina, porque cree ser profesor de Dios.

Son escasos los que tienen saber en la Tierra y se creen analfabetos ante la Sabiduría de Dios.

El que cree y ama a Dios, sabe que el Poder de Dios hace, al rudo, profesor.

La vanidad y la soberbia, de Dios se partan y se alejan.


***

Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C8

miércoles, 29 de enero de 2020

El saber del hombre

En Sueño Profético hablaban del saber del hombre ahí, en la Tierra. Decían, que por mucho saber que el hombre tuviera en la Tierra, si no ponía esta Saber primero, era no saber nada, era un saber incompleto, un abrigo de plumas, una vivienda sin techo, unos pies que no andan aunque estén en el cuerpo. Se podrían numerar toneladas de ejemplos que, sin poner este Saber delante, no digas talento.

Dijo un espíritu de la Gloria:

Una persona con Fe, creyendo en los Evangelios, ya no encuentra saber en el que no cree en Dios y cree en los talentos. Ya, es que lo oye hablar y no le puede poner estas palabras:

“Hombre que tiene gran sabiduría, hombre de talento, hombre bueno”. Estas palabras, uno que no ame a Dios, no pueden entrarlas en su espíritu para que se oigan en su boca.

Desperté, oí:

Un analfabeto de cuerpo
puede tener Sabiduría de espíritu,
y Dios ya lo está eligiendo.

En cambio,
el académico que es analfabeto de espíritu,
no le sirve a Dios,
porque hace daño su ejemplo,
no poniendo primero la Sabiduría de Dios.

El analfabeto de cuerpo,
la mayoría no lo puede remediar.

El de espíritu,
es que se niega a Dios amar.        

Apúntate a la Universidad del Espíritu,
que es la Gloria Celestial.

Una vez que ya te apuntes,
Dios las notas te dará.

Que estas notas pueden ser
Título Sobrenatural.

Pon el título de la Tierra
después que el espiritual.


***

Libro 29 - Dios Manda en Su Gloria que Eneseñen - Tomo IV - C7

martes, 28 de enero de 2020

Jesús enseña para que conozcas lo que va de Él o aparta de Él

En Sueño Profético decían:

El que sepa donde Dios da su Mando y no reverencie este Mando en palabras o acción, guárdate de él, que es mando de espíritus malos.

Lleva más fuerza el mal en el que entra a robar en el cuartel, que en el que roba en un mercado.

Dijo uno:

El que roba en el cuartel, ya lleva el robo pensado. El que robó en el mercado pudo entrar sin intención hasta ver llenas sus manos de aquel mal que se buscó.

No es igual echar cerillas, sin pensar en explosión, que vayas buscando sitio donde des explosión mayor.

Jesús enseña a los Discípulos para que conozcan lo que va de Él o lo que va de espíritus que están apartados de Él:

Si os buscara quien a Mí no Me sigue y además está pecando, poned distancia y no disponed de tiempo para acudir a la llamada. Éstos quieren confundir diciendo: “Los Discípulos también estaban allí”.

“Si os buscan habiendo dejado pecado y queriendo venir a Mí, traedlos con vuestro brazo en el hombro, que Yo soy el primero en hacerlo
”.

Desperté, oí:

Para conocer a los Discípulos de Jesús, sin ellos decirlo, tenían que vivir como les decía el Maestro.

Había sitios que los llamaban para luego poder cundir: “Los Discípulos también estaban”.

Era distinto decir: “Desde que entraron en mi casa nos cambiaron el vivir”.

Ellos iban enseñados, para saber si los buscaban para el Perdón o para decir: “Los Discípulos también estaban pecando”.

Si esta Enseñanza no la llevan, confunden al bueno y al malo.

Daba mejor Enseñanza el ser conocido por huirle al pecado.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C5

lunes, 27 de enero de 2020

La Fuerza de la Verdad

En Sueño Profético decían:

La Fuerza de la Verdad
da silencio a la mentira.

Y el contagio de esta Gloria
al silencio lo retira.

Esta Gloria,
cuando envuelve a un espíritu,
es para que diga:

“Dios me habla
y me manda sus Palabras,
porque su Palabra es Vida,
es vida de Eternidad,
es bálsamo para heridas,
es existencia de un Mundo
que el hombre tanto lo duda”.

El que Dios trae Aquí,
dejando ahí su cuerpo
como vivienda vacía,
cuando da la vida al cuerpo,
la Fuerza reparte Vida.

Dijo uno:

Va grande la diferencia de uno que ame a Dios y hable de su Existencia por lo que los Evangelios dicen, a otro que hable porque Dios le diga:

Habla de Mí. Ésta es mi Gloria: sitio al que tiene que venir el hombre porque quiso. Habla de mi Existencia. Yo estaré siempre en Presencia, sólo a tu espíritu. Mi Cuerpo está sin heridas. Mi Poder hace Imagen y Visión para esta Enseñanza. Todo quedará escrito para Enseñanza del hombre. Te voy a hacer que el espíritu salga del cuerpo a mi Mando. No aceptes el silencio del hombre. Acepta con escándalo”.

Desperté, oí:

¡Cómo puede tener secreto
uno que Dios le dé Mando con Enseñanza
para el que ahí tiene cuerpo?

Éste habla sin descanso,
y el cansancio va retirando
con los Mensajes del Cielo.

Hombre importante de estudios,
que sirven sólo para el cuerpo,
pronto saca en resumen
que Esto es dictado en el Cielo.

Esta Energía Divina
va transmitiendo a los cuerpos.

Unos lo dicen y no callan.
Otros lo guardan en silencio.

Esta Enseñanza es sencilla
cuando tú miras al Cielo
y a Dios entenderla pides.

Lo que no puedes es oírla
y decir que no es de Dios,
porque algo te acerca
a este temor a Dios.


***

Libro 19 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo III - C6

domingo, 26 de enero de 2020

La fuerza del espíritu del mal usa varios engaños

En Sueño Profético decían:

Copia el Mensaje del 20-7-1980 y mándalo a donde Dios ya te ha iluminado.

Pues la fuerza del espíritu del mal usa varios engaños. Unas veces te amenaza, y otras engaña regalando. Pero siempre, lo que busca, es ir de Dios apartando, hasta que te hace ver que lo bueno no es tan bueno y lo malo no es tan malo.

A este tentador demonio, Dios enseña a despreciarlo. Pero tienes que ser tú el que levantes el brazo.

Dios, de 4 deja 3. El que le falta, Dios lo quita de su Presencia con el nombre de Diablo. Éste fue el que empezó a su Obediencia faltando. Dios lo aparta con su Brazo, y sus Palabras lo llevan a Profundidad, quedando: “Príncipe de los Demonios”.

Toda la materia que su actuación sea en contra de Dios, éste será el sitio que tendrá su espíritu. Pero no por Dios mandado, es por él elegido.

Dijo uno:

El hombre necesita saber las actuaciones del “Príncipe de los Demonios”, para no ser engañado y para que desprecie lo que el hombre valora, si este valor aparta de sus Palabras y Enseñanza que salen de su Gloria.

Desperté, oí:

Debe el hombre tener,
al demonio para el espíritu,
como el veneno para el cuerpo.

Que si una gota no mata,
huye y estás en lo cierto
que la vida te arrebata
si no acudes pronto al médico.

Y a veces,
hasta acudiendo te dice:
“no hay remedio”.

Pues cuando veas engaño
para apartarte del Cielo,
di con fuerza:

“¡Satanás, no me aparta de mi Dios
ni un batallón de demonios!”.

Tienes que poner primero
este Contacto de Dios,
sin excusas ni protestas,
si quieres servir a Dios.


***

Libro 18 - Dios No Quiere, Permite - Tomo III - C3

viernes, 24 de enero de 2020

Los ojos del espíritu

En Sueño Profético decían:

Si quieres oír, oyes, si tienes oído. Y si quieres ver, ves, si tus ojos tienen vista. Pero antes tienes que ver con los ojos del espíritu que esto es Amor a Dios.

Si tu espíritu es ciego, cambia la vista de los ojos del cuerpo, y ya tienes vista, y eres para las cosas de Dios, ciego”.

Esto lo dijo Dios Hombre cuando vivió en la Tierra con Cuerpo, cuando el hombre Lo seguía con el nombre de Maestro, cuando Lo veían entrar en la casa del humilde y en la casa del poderoso.

Él se daba a todos los sitios que su Presencia buscaban. El que creía y Lo oía, la duda ya no le entraba. El creer tenía fuerza y su Presencia justificaba. Éstos lo iban cundiendo, y los que no creían –o si creían no amaban–, se enfrentaban, ofendiendo, con palabras diabólicas. Pedían milagros sin Amor y con exigencia, con un mando satánico, como todo el que no ama ni teme al que se enfrenta.

Desperté, oí:

Era ver a Dios Hombre entre los hombres y tenías que decir: “Tú eres...”. Y había quien no seguía la palabra, por quedar tímido de Amor o avergonzado por antes haber juzgado sin querer conocerlo.

Había a quien le hacía vivir con alegría el pensar: “Si yo Lo viera un día entrar en mi casa, yo me pondría de rodillas, pero contándole lo que había hecho por si Él no lo sabía”.

Aquí había creencia, arrepentimiento y en busca de Amor iban.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C6

jueves, 23 de enero de 2020

Ve y dilo en la Tierra

En Sueño Profético hablaban de los Elegidos. Decían:

Nadie puede compararse con el que Dios coge para enseñar de la vida del espíritu, dándole Mando para que lleve sus Palabras a teólogos y literatos.

Dios sabe que no quieren oírla, pero también sabe que no pueden retirar una Palabra porque no esté dicha con Sabiduría Divina y contradiga Palabras dichas por Dios cuando su Palabra se hizo Carne y el hombre lo vio de Hombre, que primero Le veían el Dios. Estas Palabras quedaron con el nombre de Evangelio.

Al no morir y estar Vivo, cada Palabra que dé su Nombre es Evangelio.

Esto, si no es para Enseñanza, dicen el prodigio, pero puede desmentirlo el que no crea en la Existencia de Dios Padre, Tres Dioses en Uno.

Pero de estos arrobos diarios, mandando que sean dictados y escritos por el Instrumento de Dios, ya 30 años, su lectura, el que las lea, no necesita defensor para ver que no puede ser saber de la Tierra.

Desperté, oí:
Este espíritu en la Gloria, la Enseñanza que se lleva, el “Ve” lleva de compañero.

¿Cómo no verán los cultos que cultura temporal valoran, que no puede un ser humano hacer un escrito, prohibiendo el corregir, sea de la rama que sea, cuando el que escribe busca a un pasante para que le ponga el punto a la altura de la letra? Que esto es cultura del hombre, pero sin poder llegar al tema.

Tiene que ser publicado –y Dios irá abriendo puertas– todo lo que Dios diga a un espíritu con el “ve y dilo en la Tierra”.

Que Me ves, dilo” tiene tal fuerza, que ves hormiguero de hombres todo lo de la Tierra.

Unos se pisan, otros se esconden y, al final, todo queda debajo de tierra.

Son 30 años Dios hablando a un espíritu, y el hombre dando sufrimiento a cambio.

Que Dios deja sufrimiento para más avergonzarlos.


***

Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C6

miércoles, 22 de enero de 2020

Acudir al Prójimo es lo que más contentaba a Dios

En Sueño Profético decían:

¡Qué alegría da, cuando ya se ha ido el día, el tener este pensar!: “Hoy he hecho todo lo que a Dios Le agrada en palabras y en la forma de actuar. Voy a rogarle por mí, para que nunca Le mande actuación que Le haga sufrir”.

Dijo uno:

Cierto que la Paz del espíritu la da el hacer lo que Dios hizo cuando bajó a la Tierra: acudir al necesitado y ofrecerle su Reino si él seguía sus Pasos. La Caridad era huella que Él iba dejando.

La ira y la soberbia no podían ir a su lado, ni tampoco ir protestando las protestas de la vida, poniendo los porqués de que a aquél no le pasa lo que a mí me está pasando. Esto, ni de pensamiento podía ir acompañando al Maestro.

Siempre decía:

Pensad que el bien, repitiéndolo muchas veces, le puede a lo mal hecho. Y el que recibe el bien que Yo enseño, acaba achicando sus defectos”.

Desperté, oí:

Decían en la Gloria, que acudir al Prójimo era lo que más contentaba a Dios. El Prójimo, al tenerlo siempre en su memoria el que tenía de sobra, tenía que acudir al Prójimo con sus obras.

Palabras de Dios, dichas con Amor, hacen al malo un poco mejor. Y enseñar a no pecar es retirar los espíritus del mal.

Aquí no hace falta dinero, porque el pudor es más veces roto por el dinero.

Al Prójimo hay dos maneras de llegar: una, con palabras de caridad; y otras, con monedas para el hambre quitar.

Todos los que elige Dios fueron antes conocidos en el Prójimo practicando las Palabras de Dios.


***

Libro 32 - La Palabra del Creador - Tomo III - C6

martes, 21 de enero de 2020

El Amor de Dios es algo que supera a todo lo que ves

En Sueño Profético decían:

Es grande la diferencia de hacer lo que Dios manda, por Amor a Dios, o por una ley que mandan.

Es grande la diferencia de hacer el bien por Dios, o por los hombres de la Tierra.

Todo esto, si comparas, ya le ves la diferencia. Lo del hombre siempre es un cambio o una venta, o una renta, que si no es cumplida, el ingreso no te llega.

El Amor de Dios es algo que supera a todo lo que ves en la Tierra. Vas caminando cansado y el cansancio te da fuerzas. Vas dejando sus Palabras con alegría o tristeza. Alegría, donde ves que quieren que más les digas lo que en la Gloria te digan, o Dios, en espíritu, te ha hecho ver. Y tristeza, cuando buscas con ansiedad dónde ir para que cundan al mundo esta Verdad, sin que puedan desmentir esta Grandeza Divina que, a diario, lleva un espíritu de Aquí.

Desperté, oí:

Cuando cumples por Amor a Dios, es grande la diferencia a cumplir por ley que ponga el hombre.

El Amor no tiene cansancio.
El Amor no cambia ni exige.

El Amor, cuando a Dios Lo sientes,
tan sólo esto le pides:

“Señor, que no me llegue el cansancio.

Señor, que en mí no acampe el olvido
de que busque y ampare al afligido.

Si de Ti me retirara,
mándame, dándome castigo,
que, sin el Mando,
la vida yo despreciara”.
 

***

Libro 31 - Te Habla El Profeta - Tomo IV - C2

lunes, 20 de enero de 2020

El traje del espíritu

En Sueño Profético decían:

No puede tener disculpa el que haya conocido este Caso y haya podido ponerlo al alcance del mundo entero. El día que su cuerpo muera, dará cuentas al Rey del Cielo.

Esto no es para el cuerpo, esto es para que el cuerpo sepa que existe otra Vida, que jamás tendrá entierro. Que cuando al cuerpo lo vean muerto, será otro traje más que queda en la Tierra. Que este traje es el traje del espíritu. Que cualquier traje del cuerpo puedes conservarlo siglos y siglos. El traje del espíritu, por mucho que lo quieras, le das desprecio echándolo a la tierra.

Dijo uno:

Para que no olvides esto, son estos Escritos. Que primero son al espíritu, y después los pasa el espíritu al cuerpo.

Desperté, oí:
Si el mundo que el hombre tiene por único, enseñara de éste, Eterno, el malo no sería tan malo y el bueno sería más bueno.

Esta Enseñanza, si la estudias, ves que lo único que Dios quiere es que el hombre no pierda su Gloria.

Nombraban en el arrobo el cuerpo: traje del espíritu.

Al espíritu, mal trato; y al traje, buen cuido.

También hacían responsables a los que lo habían conocido y le habían puesto fronteras ocultándoselo al mundo.

Muchos, ya no se conocerían quienes eran si sus cuerpos los sacaran de lo sucio de la tierra.


***

Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C6

domingo, 19 de enero de 2020

Yo elijo al que viene a Mí y Me pide Mando

En Sueño Profético se oía a Dios Hijo con estas Palabras:

Yo elijo al que viene a Mí y Me pide Mando. El que no Me pide Mando, Yo, cuando tengo que mandarle, le mando, pero éste no es Elegido”.

“Yo elijo al que Me busca y Me pide Mando, al que Me busca con aceptación a mi Mando
”.

Quedó un grande silencio, como Mensaje terminado, y se oyó ya otra voz, aunque era el mismo Mando:

Cierto que Dios elige cuando tú presentas Amor y aceptación a sus Palabras. En su Vida Pública fueron pocos elegidos, porque pocos aceptaban su Mando con Amor y aceptación. Si no había Amor faltaba aceptación y ya no Le servían. Luego, a éstos les mandaba, pero no se les decía Elegidos. Ya, hacían Mando, no con buena cara, pero éstos ya no servían.

Desperté, oí:

¡Cómo explicar este Mensaje
si a Dios no quieres primero!

Sus Palabras dejaron silencio,
pero un silencio con habla.

Que al oírlas,
tú ya compones palabras.

Dios elige al que Lo busca
y secretos no Le guarda.

Pues si Le guardas secretos,
crees en un Dios de palabra.

Dios elige cuando ve
que tú siempre su Mando lo ves bien.

Si su Mando no ves bien,
Él te Manda,
pero ya Elegido no eres.

¡Es pena que el hombre le sirva a Dios
por fuerza, pero no por Amor!


***

Libro 28 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo V - C2

viernes, 17 de enero de 2020

El Mando

En Sueño Profético decían:

Procura que llegue a ti
el Amor que Dios reparte,
pero tienes que pedirlo
con la vida que tu haces,
olvidándote del mundo,
de aquello que Él no mande.

Este Mando se conoce
del mando que manda el hombre.

Este Mando, siendo mando,
no obliga, llegando al hombre.

Este Mando queda siempre esperando
hasta que tú Mando quieres,
pero una vez que lo aceptas,
por saber de donde viene,
si no te llegara Mando,
estás vivo y vives muerte.

Esto, para comprenderlo,
tienes que vivir pensando
que el nombre de vida es vida,
porque Dios te está esperando,
y ya no nombras la muerte,
si ves que te llega Mando.

Desperté, oí:
Este Mando, manda a pocos,
porque pocos piden Mando.

Este Mando, cuando llega,
tú ya tienes que llevarlo,
pero ya de otra manera.

Yo miraba al Cielo
y daba gracias
cuando pasaba el éxtasis,
y ya me quedaba el Mando.

Luego, me caían lágrimas,
cuando quería dejarlo
y mis oídos oían:
“Es que para amar a Dios,
tiene que, el sufrir,
no haber llegado”.

Yo seguía mi caminar,
y el Cielo me consolaba
cuando dentro de mi cuerpo
aquellas fuerzas me entraban,
y tenía que seguir
por un Mando que era Vida,
que yo me sentía muerta
cuando veía
que mi cuerpo era de carne,
pero actuaba de piedra.

Esto es lo que más me hacía
aborrecer a la Tierra.

TERESA DE ÁVILA


***

Libro 26 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo III - C3

jueves, 16 de enero de 2020

Son muchos los llamados y pocos los Elegidos

En Sueño Profético decían:

Jesús dijo a sus Discípulos: “Son muchos los llamados y pocos los Elegidos”.

Estas mismas Palabras repiten con el Mando de Dios en la Gloria:

“Son muchos los que saben de estos Arrobos, de los que nadie puede hoy decir: “a mí me pasa igual, aquí está el justificante”.

Pues de todos estos llamados, son pocos a los que el Elegido puede mandar. Tan pocos, que si tuviera que poner número, pondría un número sólo, por no tener de compañero otro número.

Al hombre lo retira de Dios lo que queda en la Tierra. El hombre se cansa del Mando de Dios y no se cansa de lo que le exige la Tierra. Dios Manda; la Tierra exige; lo de Dios viene contigo; de lo de la Tierra no eres dueño, y en tierra queda, que a veces, queda en sitio que tú no quisieras, pero la Tierra te engaña y tú lo aceptas.

Desperté, oí:

Lo aceptas en tu vivir,
que está pegado a la Tierra.

Te da trabajo el decir:
“Dios quiere que yo Lo quiera”.

¡Pero yo me porto bien!
¡Otros, de Dios no se acuerdan!

Dios llamaba a los hombres,
para que a Él Lo siguieran.

Fueron pocos los que vieron
que al Maestro Le sirvieran,
y despreciando la Tierra.

Vivían de sus Palabras.
Luego buscaban la Tierra.

Porque allí encontraban hombres
y querían ir cundiendo
las Palabras que Le oían
al Salvador de los Hombres.

El no daba preferencia
hasta que veía Seguirlo
sin cansancio y sin protestas.

Entonces les daba el nombre
de “Discípulo”.

Nunca llegaban cansados,
aunque el cuerpo lo dijera.

Temían oír decir:
¡Bueno... mañana otro irá!

El Maestro lo decía
para que ellos descansaran.

Pero ellos no querían
oírle estas Palabras.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C4

miércoles, 15 de enero de 2020

Recadero del Cielo

En Sueño Profético decían:

En la salud y los bienes materiales, si el hombre pensara quién era el dueño, se avergonzaría al pedirle a Dios en momentos de apuro, de los que ningún ser humano puede librarse, que son en la enfermedad del cuerpo –manifestaciones que hace la muerte antes de que entierren el cuerpo–.

Si esto el hombre lo pensara, estaría siempre de Dios sediento y no podría dominar la quietud de su cuerpo, exigiéndole ir al Sitio que Dios tenía de Recadero del Cielo.

Dijo uno:

Que este Recadero sufre por el desprecio que dan los que puede quitar este sufrimiento. Que sus Representantes son los que deberían cundir este Evangelio. Que esto sería para Dios y para el Elegido una gran alegría.

¿Cómo puede vivir tranquilo el que Esto conoce y el que lo sabe y no acude a conocerlo? Con el bien tan grande que harían sus Ministros acudiendo y, sin descanso, cundiendo que es Dios el que manda que quede escrito este Evangelio.

Desperté, oí:

Todavía habrá quien diga: “¡Bueno…, Dios perdona, aunque yo no acudí!

El Perdón de Dios, ya se ha repetido muchas veces, que no pisa el sitio del desprecio.

Ni el desprecio, ni el perseguir la Palabra de Dios, haciendo daño al que tenga dudas de la Existencia de Dios.

Y para el Lo ama, es un sufrimiento gigante el verle al Instrumento la vida que hace.

Representante de Dios, que repites “Éste es mi Cuerpo y mi Sangre”, ¿cómo puedes vivir sin aquí acercarte?

Dios permite, hasta que vean que donde da su Palabra, ningún Ministro de Él, ve nadie que llega.

El que ama y vive el Evangelio, ve y compara que fue lo que a Él, cuando vivió con Cuerpo, Le hicieron.

Si esto lo comparas, ves que si Dios otra vez bajara a la Tierra con Cuerpo, otra vez el hombre Lo mataría.

Porque aquí lo ves en el Instrumento.

Que ya no queda sufrimiento que le pongan delante para cortarle el camino, pero el Mando baja del Cielo.


***

Libro 27 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo II - C7

martes, 14 de enero de 2020

Allí Dios da sus Palabras

En Sueño Profético decían:

Si nombras mucho a Dios y tu acción es como Él manda, ya tienes sitio en la Gloria, porque la Gloria de Dios es Gloria para el que hace lo que Dios manda. Que Dios te manda muy poco, tan sólo, que su Voluntad por ti sea aceptada; que busques donde te digan: “Allí Dios da sus Palabras”.

Dijo uno:

Cuando Dios elige un sitio, es donde se ve el que ama o el que cree.

Si crees de verdad, sin decir “yo creo”, y no estás mintiendo, no puedes quedar como punto muerto.

Ahora, si piensas “yo amo y no acudo”, no dices verdad.

Vamos a poner Amor, y creer en cosas de Tierra:

¿Quién oiría llamada de algún superior, mirara hacia atrás, y andando siguiera, teniendo que ir luego a su presencia, donde esperarían leyes bien severas, que lo encarcelaran mientras ya viviera?

Esto es creer sin que Amor hubiera.

Ya llega el Amor, de un Amor limpio, que Dios aquí media: el hijo que aún su infancia lo lleva, que cae y se levanta y a la madre llama con ojos de pena. ¿Puede no acudir y decir “yo amo”?

Si esto lo piensas, tiene poco estudio en dar el resultado.

Desperté, oí:
Es atrevido creer y no acudir. Pero es imposible amar a Dios y pasar delante del Elegido, sin decir: “¿Qué dice Dios?”.

Esto, el que diga que ama, ya está creyendo engañar a Dios.

Si amas a Dios, sería castigo que te prohibieran ir al Elegido.

Que este castigo no lo soportabas por que al Elegido seguías y buscabas.

Tiene que cumplirse el tiempo, no por venganza, y sí por darle el hombre a Dios desprecio.


***

Libro 22 - Investigaciones a la Verdad - Tomo III - C2

lunes, 13 de enero de 2020

¿Cómo poder vivir sabiendo que esta Verdad es verdad?

En Sueño Profético decían:

Se van a decir Palabras para que las tengan en el archivo de la conciencia:

El que cree que cumple las Palabras de Dios, si su vida la vivió sin conocer un Lugar donde hablara Dios, su cumplir le sirve. Si lo conoce y no acude, no archiva para Dios, pues está en el sitio del Demonio, porque su comportamiento está desmintiendo esta Verdad en el sitio que Dios quiere hacer Presencia, como Dios que es y de la manera que Él quiera.

Puede estar más lejos de Dios el que puede quitar sufrimiento que el que sufrimiento dio. El que lo dio, pudo no verlo. El que lo quiere quitar, lo está viendo.

Dijo uno:

Si a Dios disgusta el seglar que no acude, que piensen sus Representantes en el día de la muerte de su cuerpo, cómo podrá Dios dar el Perdón sin tú quererlo. Que tú no lo quieres, por el desprecio tan grande que, cuando tuvo vida tu cuerpo, le diste a los Mensajes. Y al Lugar lo tuviste como olivo, vareando.

Desperté, oí:

Los que no dan para cundir este “Evangelio Diciendo”, darían para ponerle silencio.

Nombraban en la Gloria a los Ministros de Dios, culpables de este abandono a sus Palabras, y a seglares pudientes.

¿Cómo poder vivir sabiendo que esta Verdad es verdad?

¿Cómo ver sufrir donde Dios hace llamada para cundir que hay otro Mundo, donde la Vida no acaba?

Éntrate en el archivo de tu conciencia y verás como a Dios no amas.

Cuando veas todo en blanco y sucia tu conciencia.

Que la ensuciaste con el desprecio y con el engaño.


***

Libro 24 - Dios No Quiere, Permite - Tomo IV - C7

miércoles, 8 de enero de 2020

El árbol lo conoceréis por su fruto

En Sueño Profético decían:

¡Es más lástima el que te conoce, te oye y no te cree! Porque éste no tiene lástima. Reza el Padre Nuestro inconsciente de las palabras que está diciendo. “Venga a nosotros tu Reino”, lo dice y está mintiendo. Si tú esto lo ves imposible, no reces el Padre Nuestro.

Si con el último Apóstol se acabó la Revelación, no existe nada que sea verdad después de estas palabras, de Santos y Elegidos que por la Cabeza de la Iglesia son venerados. Y a esto tiene que seguirlo todo el que se llame cristiano.

Tampoco, el que esto no crea, puede creer las Palabras que Dios Hijo dejó en la Tierra: “Donde dos hablen de Mí, Yo allí estaré”.

Si tú esto lo crees como crees que el agua que bebes es agua, tú no lo desmientes.

Si Él vive y está entre el hombre, ¿qué imposible es que Dios le hable a quien quiera, a espíritu sólo o a espíritu y materia? Negar esto es negar su Existencia.

La parte que Dios le deja el hombre para investigar es la vida de materia.

Si el Amor al Prójimo siempre va delante, y la Paz la deja en el sufrimiento por su oración constante, ya, su buen consejo, hace que tú cambies en la rebeldía que tenías antes, en contra de Dios y siempre culpándole.

Si sientes apoyo como en la escalera con el pasamano, déjate la duda, que ésta puede que te lleve a pecado.

Desperté, oí:

Te lleve a pecado, porque esta duda ya no es al que oyes hablando, esta duda es al que lo ha mandado.  

Coge las Palabras que Dios Hombre dejó para que no fuéramos engañados, y que Aquí, en Gloria, mandan que se dicten:

El árbol lo conoceréis por su fruto”.

Dios puso estas Palabras para el culto y para el rudo.


***

Libro 19 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo III - C4

martes, 7 de enero de 2020

Valora la acción, luego las palabras

En Sueño Profético decían:

Valora la acción y luego valora las palabras.

La palabra está pronto dicha. La acción de Amor a Dios no la hace el que no ama.

El que ama hace acción y después pone palabras. Que estas palabras ya llevan una fuerza de Enseñanza. Por eso, al que Dios eliges es porque antes vivió una acción que sin hablar ya llevaba las palabras. Que esta acción pone silencio al que te ve practicarla.

Dijo uno:

Dios Hombre, cuando vivió entre los hombres, éstas eran sus primeras Palabras:

Si queréis que os conozcan como Discípulos míos, dejad las palabras en los hechos, y ya, el que os vea, Me nombrará y vendrá a buscarme.

No hay palabra mejor dicha que la que responde al bien que hagas.

El que no quiera a mi Padre y a Mí no Me crea, le costará trabajo reconocer que lo que vais haciendo no es de la Tierra
.

Desperté, oí:

Viviendo las Palabras de Dios y haciendo el bien por donde vayas, tienen que nombrar a Dios.

Dios Hombre quería que conocieran a sus Discípulos sin ellos decir: “Somos Discípulos del Maestro”.

Quería que la acción hablara y ya callara a los que iban en su contra.

Aunque muchos hacían su contra, no de palabras, porque vivían la hipocresía.

Éstos oyeron de su Boca:

Falsos, hipócritas, fariseos,
nido de víboras
”.

El que hacía lo que Él mandaba,
cerca de Él o a distancia,
veía caras contentas
o caras de rabia.

Era la acción,
que sin palabras hablaba,
y la entendían los dos.

Las dos caras te decían
lo que el espíritu hablaba.

Es mejor que te pregunten
por el bien que vean que hagas.

Ya el bien será una barrera
para aquel que a Dios no ama,
porque no hace la acción,
que sólo dice palabras.


***

Libro 23 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IV - C2

jueves, 2 de enero de 2020

¡Nunca se hicieron esclavos de las cosas de la Tierra!

En Sueño Profético decían:

El hombre que no ama a Dios, se hace esclavo en la vida, para bueno o para malo. Él pone gran preferencia a lo que Aquí nada llega. Ni para Aquí cuenta aquello que él le da preferencia.

El hombre se achica el día, o lo alarga en la esclavitud que tenga; se hace castillos o se amarga. Es rueda que va rodando en manos de niños, que al final, en un juego se ha quedado.

Todo es por no pensar que la vida material tiene su tiempo, su día y su hora, para que quede acabada.

Dijo uno:

Por eso la inteligencia del hombre, Aquí, es así valorada: preferencia a lo Eterno, paso a lo que ahí acaba, tener a Dios en tu mente para todo lo que hagas.

Esto es hombre inteligente: que la silla a ti te sirva, no que tú a la silla contemples. Esto no es que sea malo, pero no es hombre inteligente.

Desperté, oí:

¡Hazte hombre inteligente
y enseña a que más lo sean!

¡Pon preferencia al espíritu
y no te hagas esclavo
de lo que queda en la Tierra!

Todo lo que queda ahí,
míralo como servidor que tengas.

Sin maltratar,
pero sin que te hagas esclavo
por mucho que lo quisieras.

Si el hombre se apartara un poco
de las cosas de la Tierra,
la mitad no le harían falta
y le aumentaría la inteligencia.

Por eso hay hombres rudos
que cuando el cuerpo ahí dejan,
siguen enseñando,
por su gran inteligencia.

¡Nunca se hicieron esclavos
de las cosas de la Tierra!


***

Libro 21 - Te Habla el Profeta - Tomo III - C3