lunes, 22 de febrero de 2021

La Grandeza de Dios

En Sueño Profético hablaban de estos Escritos dictados en la Gloria de Dios, Reino que Dios tiene prometido para el hombre que su Reino quiera. Decían:

¿Cómo no comparará el hombre que estudios tenga, carrera o títulos, con esta Grandeza? ¿Cómo no verá que esto es imposible escribirlo ningún cuerpo, por cultura o inteligencia que tenga, 30 años a diario, escribir con esta rapidez y después ser firmados con la seguridad de que nadie puede tocarlos para reformarlos?

En la Tierra no hay académico ni escritor que diga: “Yo lo hago”.

Dijo uno que terminó el arrobo y que Dios le dio sus Palabras:

Es todavía más imposible que escriba estos temas quien no tiene el mínimo estudio de lo que el hombre exige para defenderse en la Tierra. Que tan sólo al hacerle un examen, no al Elegido, sino al hombre en su conciencia, ya se ve que el hombre es el que niega la Existencia de Dios y la Sabiduría, sin haber estudiado letras.

Desperté, oí:

Dios, al principio de estos arrobos, enseña al Elegido para cuando llegara el momento de la negación del hombre.

Es milagro, curación con medicina o con cirujano.

Pero si llega curación, sin haber llegado las manos del cirujano, ya se escandaliza el milagro.

Pues a pesar de esto dicho, puede llegar la duda. “no estaría tan malo”.

Pero aquí, los académicos, ven la Sabiduría que el Cielo está mandando.

¿Qué catedráticos o escritores pueden estar 29 años pasados, día a día, escribiendo estos Dictados? Que hoy se van a dictar los minutos que se ha tardado.

Empezó a las ocho de la mañana, y al cuarto de hora había terminado.

El espíritu hubiera corrido más, pero la materia tiene su paro para comprender el Dictado.

***

Libro 30 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IV - C6

2 comentarios:

  1. Este Mensaje que bien lo va a comprender mi Amiga!!
    Desde aquí le mando un abrazo grande,que esto mismo lo hemos estado comentando.
    Donde hay dos hablando de Dios ...

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  2. La Grandeza de estos Mensajes no tiene comparación,como tampoco tiene comparación Su Dueño que es Dios.

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