Los tiempos pueden cambiar, pero los Mandamientos no tiene tiempos

En Sueño Profético decían:

Si piensas, haciendo un pensar, verás que es Dios el que te manda alegrías cuando un sufrimiento llega. Sufrimiento de poder cundir estos Mensajes que ayudan a poder llevar esa vida. Que tú estos sufrimientos los escondes por no contentar a los que quisieran que aquí todos se portaran mal.

El Mensaje del “Cántaro y la Fuente” hace falta para que las grandes inteligencias vean que una Palabra de Dios deja mudas a las academias. Esto tiene que servir para que hembra y varón sepan guardar su sitio, con la Ley que Dios mandó. Los tiempos pueden cambiar el edificio o la decoración. Pero los Mandamientos, levantar al caído y acudir al Prójimo, esto no tiene tiempos. Esto es creer, amar y seguir al Mando de Dios.

Desperté, oí:

Dios te da fuerzas, que tú las coges con poder de la Tierra.

También te da alegrías, que falta te hacen cuando ya se van los días y vienen las noches. Que es cuando Dios trae Aquí tu espíritu sin verlo nadie.

Te dan tranquilidad los que están aquí cerca, por verlos unidos.

Que cada uno tiene su sitio.

Todo está cambiando, y el sufrir, Dios, te lo está achicando.    

Los pasos que se den, que queden bien dados. Que esto está haciendo falta para hundir a los que aquí están haciendo daño.       

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Libro 41 - Dios Habla al No Quiero del Hombre - Tomo III - C4