En Sueño Profético hablaban
de la Fe. Decían:
La Fe
contagia, y la falta de Fe hace que la oración pierda fuerza.
Dijo uno:
La oración,
dicha con Fe, tiene contestación de Aquí, del Cielo. Sin Fe no moverás nada,
todo quedará quieto hasta que el tiempo lo pudra o lo mueva el viento. Fe, esperanza
y caridad es lo que mueve a los cuerpos. La Fe es la que da la alegría, la
esperanza y el reposo, y ya haces caridad. Pues si falta la Fe se retira la
esperanza y ya caridad no haces.
Mucho
encargaba el Maestro:
“Procurad tener Fe, y cuando la tengáis, alimentarla
con mis Palabras, que son de Vida Eterna. Si os falta la Fe no podréis seguirme
porque os desviarán los espíritus del mal, que van en contra de lo que manda mi
Padre. Coged la Fe como la respiración, que sale de dentro del cuerpo como
Mando de mi Padre. Coged la Fe para todo lo que Yo dejo dicho, como Dios Hijo
que soy”.
Desperté, oí:
¡Qué Fe nos
daba la Fe cuando el espíritu del mal quería que Fe no tuviéramos!
¡Qué cierto
que con la falta Fe crece la intranquilidad y la esperanza se olvida!
Pues la
esperanza mantiene la alegría de la vida cuando en la Gloria piensas.
Y la caridad
la haces con Paz y más Fe seguro que te viene.
Con la Fe y
la esperanza levantas peso y lo mantienes.
Abraza fuerte
la Fe, y así más a Dios sientes y más lo quieres.
***
Libro 74 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IX - C5
Que más pueden pedir para ver la Grandeza de Dios en estos escritos?
ResponderEliminarSolo tiene dos letras la palabra Fe y Dios saca de ella una enciclopedia.