Dios le deja fuerza al Elegido

En Sueño Profético decía un espíritu de la Gloria:

Se van a decir unas palabras con Mando de Dios para el Elegido que está al servicio de Él. Éstas son las primeras:

Cuando te llegue un pensamiento con fuerza y con alegría, es porque va con Mando de Dios. Éste, que sea dicho sin temor y con fuerza, diciendo: “Me lo ha dicho Dios estando mi espíritu con cuerpo, pero antes me lo dijo en el arrobo”.

Al despertar es cuando se lo dice al cuerpo con su Mando, que es cuando dictan los Mensajes.

Dios le deja fuerza al Elegido para que diga lo que siente cuando algo no es de Dios, como despreciar las telas que tapan el cuerpo.

No tengas temor de decir que Dios manda que el que crea Esto, su presencia lo vaya diciendo sin palabras. Esto se puede comparar con el que es muy alto. Éste no tiene que decirlo con palabras, porque su presencia lo va diciendo. Pues más va diciendo y dando escándalo el cuerpo que telas va despreciando y poniéndole al hombre su pensamiento en el pecado.

Retira el miedo de decir lo que Dios manda para que sepan cómo tienen que ir las que vayan a tu lado, porque otros podrían pensar: “¿Cómo Dios le habla y consiente que a su lado vayan como van las que el nombre no se dice?”.  

Esto, para comprenderlo, tienes que creer que baja del Cielo.

Desperté, oí:

No tengas temor de decir lo que Dios dice en el arrobo.

Porque temor, diciéndolo Dios, es pensamiento que ponen los espíritus del mal.

Ya dicen palabras de gran alegría:

De la “Piel de cordero metida en la urna”, cómo sale agua, formando charquitos. Esto no puede estar oculto.

No puede mojarse por humedad que hubiera en la habitación, ya que la lumbre está cerca de la urna y la habitación pide fresco muchas veces.

Decían que casos como éste, del Poder de Dios, había muchos, pero para que ocurrieran había que creer y cumplir sus Palabras.

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Libro 60 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VII - C5