La enseñanza de los niños

En Sueño Profético decían, que deberían darle alegrías al Elegido para que su vida se destacara de los sufrimientos que la persiguen, ya que éstos quieren quitarle fuerzas y que al Prójimo no acuda pregonando que Dios le está hablando.

Dijo un espíritu de la Gloria:

Si Dios no pusiera su Poder en este espíritu, ya estaría hablando de lo que Dios dijo, pero no de lo que está diciendo, que es lo mismo, pero con más fuerza y más Saber de la Enseñanza de la Gloria cada día. Esta Enseñanza la trae al cuerpo el espíritu del Elegido con las Palabras que Dios le enseña en su Reino.

También decían que, los que creen y están aquí unidos, tienen que ver que lo que le dan al Elegido, Dios se lo dobla.

Éstos han quitado al Elegido de que vaya a los sitios donde teniendo de sobra, lo que daban no servía ni para un día de comida. Este tiempo, Dios le ilumina que lo emplee para que su presencia la vean los enfermos o familiares que tengan sufrimientos con jóvenes a los que les enseñan cómo tienen que vivir en estos tiempos de adelanto.

El que crea en este Elegido, su presencia le puede librar del pecado.

Debería ser esta Enseñanza obligatoria en colegios de niños un poquito mayores, porque los chicos tienen que vivir su primera enseñanza, que es la que les hace falta para que después de mayores sigan la que de párvulos aprendieron.

Desperté, oí:

La enseñanza de los niños 

tiene que ser 

como cuando siembras el trigo.

Que primero sale el tallo, 

y luego la espiga, 

que sirve para hacer

 el pan que da la vida.

El hombre quiere hacer 

que el adelanto, al niño, 

cuando llore en tus brazos, 

en vez de cantarle la nana,

le cantes de guerras, 

de drogas y de matanzas.

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Libro 60 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VII - C6