miércoles, 5 de noviembre de 2025

Cuida la carne que es tuya

En Sueño Profético vi cómo cortaban piernas por encima del pantalón, y sus caras estaban sin mueca de dolor. Llegaron a uno, después de tres o cuatro, y éste exponía sus razones para que la pierna no se la cortaran, y antes de llegar a la pierna rompió en llanto. Todos quedaron mirándose y dijo uno:

Esta es la reacción al no querer perder una pierna, ni un brazo, aunque estuviera enfermo, ni el dedo meñique de la mano que ocupa un segundo lugar. Todo lo que está en el tronco de tu cuerpo lo curas y pagas antes de perderlo. A pesar de que, a veces, un solo dedo te da noches de tormento, te hace perder días y perder horas, te cambia hasta de genio, pero mientras no perjudique a otro dedo lo defiendes con el derecho de que eso es de tu cuerpo, que si tú no lo cuidas nadie te cuida tu dedo. Si ya este dedo avanzara con peligro para infectar a los otros dedos pondrías la mano para cortarlo y los llantos para el Cielo, y siempre recordarías al dedo chico de tu mano.

Desperté, oí:

Dios ha hecho Visión con los miembros de unos cuerpos para dar Enseñanza.

A los que les cortan las piernas y no notas en sus caras sufrimiento es porque no tenían pierna, porque antes la perdieron.

Veías cortar la pierna, pero cortaban el relleno.

Igual quedaban sus caras, porque el sufrir iba por dentro.

Nunca la hubiera cortado, aunque trabajo al andar hubiera dado, ni por fea torcedura.

Era mejor tener la pierna que tener tan sólo una.

Cuida la carne que es tuya y no le des corte a la pierna mientras admita el cuido.

El que tenía dos piernas y querían cortarle una, pedía clemencia al Cielo porque tenía la esperanza mientras se viera su remo.

***

Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

martes, 4 de noviembre de 2025

Enséñale a tu carne que siga a tu espíritu

En Sueño Profético decían:

El espíritu mueve con facilidad a la carne para que actúe como él quiera, esto en lo que no es de la Gloria. En lo que es de la Gloria cuesta trabajo por la Libertad que Dios al espíritu le deja.

Dijo uno:

Al espíritu que está al servicio de Dios lo sigue la carne con un trabajo de ayuda, que el que lo ve no le llama trabajo. No le llama trabajo porque ve  su actuación sencilla. Es el espíritu el que guía al trabajo y le hace a la materia que viva felicidad, despreciando todo lo que hay en la Tierra que te obliga a que trabajes, a que el tiempo lo quemes sin que te sirva para lo Eterno.

El espíritu de Dios ni sufre ni tiene envidia por oposición mejor, pero sí sufre por querer servir a Dios cada día mejor, y le manda a la materia que primero es lo de Dios.

Estos son a los que ves con dominio de materia que, con todo el peso que tienen, con facilidad tiran de ella. Si piensas esto ves que el espíritu es el que tiene la fuerza. Cuando un cuerpo queda muerto se necesita una gran fuerza para moverlo, pero cuando lo mueve el espíritu es como recorte de seda.

Desperté, oí:

Enséñale a tu carne que siga a tu espíritu, siempre en lo que Dios mande.

Y si vives esta Enseñanza, verás lo de la Tierra con muy poca importancia, lo mismo en los valores que en los trabajos que te roban el trabajo que va a la Gloria.

La Enseñanza del espíritu debería ser la primera.

Y ya siempre iría el cuerpo donde el espíritu de Dios le dijera.

Por falta de esta Enseñanza peca el hombre en la Tierra.

Y siempre lleva su espíritu al mando de su materia.

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Libro 66 - Investigaciones a la Verdad - Tomo XI 

lunes, 3 de noviembre de 2025

Paciencia es Amor

En Sueño Profético hablaban de la Fuerza de Dios en el espíritu que vive aún con materia.

Dijo una mujer:

Si tú le entregas a Dios tu espíritu para que Dios mande en él, tú dominas a la carne; tú tendrás fuerza para dominar tu lengua, tus pies y tu vista. 

Dominando a estos tres personajes, 
ya dominas tu materia, 
y ya tendrás contacto con Dios,  
porque Dios deja que tú lo tengas. 

Las fuerzas vienen detrás, 
después de que vengan penas, 
que como sientas a Dios, 
Él ya te da la receta, 
y verás la curación 
de aquel mal que te atormenta. 

Esto, su palabra es: 
a enfado darle paciencia;
y a contrariedad,
que tú el arreglo no le veas,
llamar a Dios confiando,
y ya verás su respuesta.

Un poco voy a contar de mi vida, cuando viví con materia:

Tuve cuatro hijos, los cuatro con la misma enfermedad, que se les presentaba al crecer. El mayor tenía trece años, y el pequeño tenía cuatro. Mi marido, que era hombre de poca paciencia, por faltarle Amor a Dios, se fue a trabajar con otro amo fuera del pueblo, por no vivir aquel sufrimiento, porque él no estaba preparado, por dominarlo la materia; no podía encontrarse al paso de su camino algún pedazo de juguete que los chicos se hubieran dejado; ya salía de la casa mal encarado. Las vecinas me decían: “Parece que vive solo, no se oye ni a chiquillos ni a madre”. Este era mi contestar: “Es que yo les echo tarea en los capachos”. Ellas sabían que me llevaba a la casa, de un molino, esparto, y hacía cenachos, y lo que me encargaban, rápido se lo hacía, ya que mis hijos me ayudaban, porque de verme, ellos aprendieron, aprendieron a trabajar y a rogar a Dios lo mismo que yo rogaba.

Las cinco voces se unían, pidiéndole a Dios el favor: “Señor, que siga mi padre a mi madre en paciencia, que es Amor”. Yo hacía que ellos se lo pidieran en alta voz.

Desperté, oí:

Esta madre sabe,
que Dios oye sin que tú
le des voces al Cielo.

Esta madre lo que quiere
es unir a sus hijos al ruego,
al ruego que ella hacía,
que era ruego de consuelo.

Sabía que Dios oía,
antes a niños que a mayores.

Sabía que Dios veía
el sufrir de todos malos
y el tesón que ella tenía.

Si los ruegos de los niños
podían servirle al padre,
¡por qué no enseñarlos ella,
cumpliendo el deber de madre?

No cabe duda que fueron
los ruegos de madre e hijos,
cuando un día, al anochecer,
el padre llegó y le dijo:

Ya vengo para quedarme,
y además vengo contento,
porque a Dios se lo he pedido,
que no culpe nunca al mal,
si el mal Dios no lo ha querido.

Dios cuando te manda el mal,
es un mal por ti pedido.

Pero el vivir de la Tierra,
es vivir y no es sufrido.

Si siempre vives con Dios,
es sufrir, pero es olvido.

***

Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C3 

domingo, 2 de noviembre de 2025

Con el Poder de Dios

En Sueño Profético decían:

Se van a decir unas palabras para que el Elegido siempre las tenga presentes cuando le llegue el pensar para hacer un bien a un espíritu, acercándolo a Dios, o a un cuerpo enfermo, para que el Poder de Dios ponga sano al enfermo si tiene enfermedad que sin el Poder de Dios no se pueda curar.

Dijo un espíritu de la Gloria:

Con el Poder de Dios, aunque sus cuerpos mueran, el espíritu se lo lleva Dios a su Gloria. Pues de estos casos hay muchos que a la muerte les acompañaba la Fe, sabiendo que se iban con Dios a su Gloria. Este Elegido ha visto muchos Milagros en los enfermos, unos con el cuerpo curado y otros despidiendo el cuerpo con alegría, con las manos del Elegido y con cara sin sufrimiento y sin lágrimas.

Pues, con todos estos casos que han pasado, que tu presencia no falte donde crean y te llamen.

Desperté, oí:

Es alegría que en la Gloria den Mando para que el Elegido no falte en el enfermo.

Ya llegó el sueño sin poder dejar de pedir:

    – Señor, Te pido que pronto salgan más Libros con prólogos de Obispos.

Estos prólogos dan alegría al que cree y ama.

Al que no cree, aunque se nombre cristiano, le quitan el sueño y piensa en el Infierno, que es el sitio que ganó su cuerpo.

Todos los que conocen este Caso deberían pensar en el premio que Dios les ha dado.

Pues el que diera Aquí desprecio cuando le llegaran sufrimientos no podría pedirle a Dios que se los quitara, por haber tenido la Palabra de Dios, dicha con Mando en el Elegido de Dios, y darle cada día desprecio mayor.

***

Libro 71 - Te Habla El Profeta - Tomo IX 

viernes, 31 de octubre de 2025

El que más quiera a Dios, más lo comprende

En Sueño Profético decían espíritus con Mando de Dios estas palabras para este Elegido:

Cuando Esto coja el camino que Dios preparado le tiene, se verán a unos con alegría, viendo esta grande Verdad, y a otros diciendo: “Esto lo creían pocos, porque pensaban que cómo Dios le dejaba sitio al hombre, si el hombre no hacía su Mando”. Pues esto, el que más quiera a Dios, más lo comprende, porque Dios permite para dejar al descubierto al que sabe mucho de la Tierra, con un saber que para Dios no sirve.

Estando diciendo estas palabras dijo Dios Hijo:

 –Ya, deja en silencio al que quiera ocultar esta Grandeza que hoy nadie tiene. El que coja con creencia y Amor estas Palabras, verá que el Poder y el Mando no son del Elegido. 

–Pues Aquí se tiene que formar lo que en Belén formaron los pastores cuando vieron a Dios Hijo nacer.

Quedó silencio y se vio la Imagen de Dios Hijo de cintura para arriba, con su Manto. El movimiento era como andando.

Esta Visión da alegría, y grande sufrir cuando piensas que todo lo que Aquí se oye es dicho con el Mando de Dios.

Desperté, oí:

No se puede decir cómo se veía la Presencia de Dios.

Era como una nube. Pero la nube era clara, y a Dios le dejaba el sitio porque Dios el Mando le daba.

Los que más quieres siempre están en tu pensamiento, sin poder olvidarlos, como el día y la noche, que siempre estás recordando, y nombrándolos con alegría, porque al recordarlos nombras a Dios.

Lo mismo que recuerdas la noche que ha traído este día, donde sus Palabras y su Imagen, de tu espíritu no se retiraban.

Esto, para entenderlo, no sólo tienes que creer en Dios, tienes que oír todos los días el Mensaje con grande Amor.

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Libro 73 - La Palabra del Creador - Tomo VIII 

miércoles, 29 de octubre de 2025

Hay que publicar con fuerza

En Sueño Profético hablaban Domingo de Guzmán, Agustín de Mónica y Tomás de Aquino.

Decía Domingo:

Hay que publicar con fuerza; esta fuerza es la que le quita al hombre esta incertidumbre que el mismo hombre ha sembrado. Para hablar del Mensaje con palabras tibias, es mejor callar. Si callas, no has sentido la Llamada de Dios; pero si hablas del Mensaje tibiamente, quieres hacer ver que estás cumpliendo sus Palabras, pero sin amarlo. El que conoce al Portavoz y cree en esta Gloria, difícil le es el silencio, y más difícil, vivir ausente de este Instrumento utilizado por Dios.

Ella honró a la Orden; con el Rosario y sus rezos, movilizó a los espíritus que pertenecieron a la Orden.

Álvaro y los suyos son súplicas sin descanso.

Desperté, oí:

Yo, Agustín de Mónica, si mi Comunicación quisieran, yo a todos la diera.

Esta Filosofía con Gloria, santifica.

Y este santificar va beatificando y, al final, llenando esta Gloria.

Yo, Tomás de Aquino, te recuerdo a este Poderoso Dios, Dios de tanta Libertad y Grandioso en el Perdón.

El que Teología ame, si esto lee, ve aquí a Dios.

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Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C3 

domingo, 26 de octubre de 2025

Canción Divina

En Sueño Profético decían en la Gloria:

Las alegrías al espíritu no le faltaran. Esto es dicho en la Gloria para el Elegido que Dios Mando le da para que publique todo lo que ve y todas las Palabras que Dios le dice a su espíritu en el Arrobo, para que su cuerpo pregone que vive Tierra y Cielo, que es donde está la Gloria.

Dijo un espíritu con Mando de Dios:

Se van a decir unas palabras para que las practiquen y sirvan de Enseñanza. Estas palabras son para el que tenga retirado de Aquí su cuerpo, pero no su espíritu. A éste que no le digan palabras fuertes defendiendo este Caso, porque entonces pueden con él los espíritus malos. Hay que tener suavidad hablando del Elegido y, en todos los momentos, a Dios pedirle que se vea un cambio grande al ver cómo era y cómo es su espíritu, que estos son los casos que oyes y dices Milagro. Esto que no se olvide y que así sea el trato.

Ya se van a decir los momentos de alegría de los que están aquí unidos al hacer el mando del Elegido:

No es igual hacer servicio Aquí, en este Caso, con seriedad y protestas que hacerlo con alegría de espíritu, porque Dios da el Mando aunque sea sin palabras. Para estar al servicio de Dios no necesitas las palabras, porque antes de que a Dios el pedir le hagas, Él ya sabe tu pensar.

Desperté, oí:

Tu presencia que no falte cuando estén haciendo tu mando para que todo quede bien.

El que viva sin el contacto de Aquí, que es contacto de Dios, tiene vida fría y agranda los sufrimientos.

Este recuerdo de oír lo que Dios está hablando es un recuerdo que quisiera publicarlo.

Esta Canción Divina, que son todos los Mensajes, debería estar en la boca de los cantantes.

Esto para entenderlo tienes que amar a Dios antes que a todo.

Como el Elegido hizo antes de saber que sería elegido.

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Libro 71 - Te Habla El Profeta - Tomo IX 

sábado, 25 de octubre de 2025

Embustero

En Sueño Profético decían:

Dios, cuando elige, es porque antes a Él mucho Lo han amado. Este Amor ha superado todas las reglas del buen comportamiento. La paciencia es una de las bridas de este espíritu. Y el no acumular recuerdos del que el mal te hizo, es ofrecimiento que le haces a Dios, ofrecimiento para que viva en tu espíritu y tu espíritu sea mandado al Prójimo, y ya allí, otra vez, es vivir con Dios.

El que Dios le arroba su espíritu, éste vive con Dios y Dios Vive en Él.

La envidia es la separación de Dios. El que admite la envidia no puede vivir con Dios. La envidia te hace que te enfrentes con Dios, pidiéndole que te dé explicaciones de sus hechos. La envidia te hace que tú te veas superior a todos. La envidia hace que brote la calumnia, y la calumnia ofende a Dios. Todo el que Dios habló en él, fue calumniado de embustero.

Embustero: persona sin Amor a Dios.

Embuste: palabra dañina.

Embustero: persona que suplanta a otro. El que miente poniendo a Dios como Instrumento para dar a conocer prodigios. Éste ya está condenado. Persona diabólica con obras falsas. De aspecto inquieto, que en cualquier momento saca su ira. Inquietud que produce al que trata. Stop que encuentran las Obras de Dios.

Desperté, oí:

Embustero: persona que Dios no entra en su Círculo.

Embustero: portador de la mentira, pero no Mensajero de Dios.

Embustero: Desecho. Espíritu que sirve para hacer servicio a Luzbel.

El que Dios elige para que divulgue su Palabra, éste no puede hacerle servicio a la mentira.

Dios Hijo habla lo que el Padre habla en Él, y el Profeta habla lo que en él habla Dios Hijo.

Si crees que hay Dios, no digas que miente el Lugar que Dios eligió.

Mira sus obras ahí, y pide el Perdón Aquí.

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Libro 4 - Te Habla El Profeta - Tomo I - C5 

viernes, 24 de octubre de 2025

El hombre es cobarde cuando oye hablar de Dios

En Sueño Profético decían:

No hay quien piense en la muerte, y sea malo de espíritu.

No hay quien piense en la muerte, y no pida perdón a Dios.

De la muerte no habla el hombre, por miedo.

Dijo uno:

El hombre es cobarde cuando oye hablar de Dios.

Al hombre se le acaba la valentía cuando ve la hora final.

Otro dijo:

No hace falta ver que muere.  

Aquí te voy a contar de un gran pecador que yo conocí. Este hecho ocurrió a cien metros de donde yo vivía: era un hombre de una gran salud y de unos grandes ingresos, pero más grandes que estas dos cosas eran sus pecados. Tenía a la barriada del pueblo asustada. Este lugar era más bien  una ampliación del pueblo inmediato, que por las faenas campesinas fueron haciendo allí viviendas y abriendo algunas tiendecillas para que aquellas familias vivieran un poco más acomodadas dentro de su rudo trabajo. Pues a este hombre, de una salud envidiada –y él que hacía porque más se destacara del que tenía tenguerengue–, una mañana le llegó el paro forzoso a sus piernas y brazos; tan sólo podía mover la lengua, y cuando quería nombrar a Dios, no podía pronunciar estas letras en la Palabra “Dios”. Dios no podía decir su lengua, y cuando alguno iba a verlo y nombraba a Dios, él decía: 

   –No puedo decir ese Nombre; quiero pronunciarlo y no puedo; pedid que pueda decirlo, que le pida perdón; pedidle perdón por mí; pedidle que tenga compasión de mí, que yo pude ser más malo y no lo fui, que yo pude trataros peor por se dueño”. 

Y dirigiéndose a una mujer le dijo: 

   –A tu hija le pagué el pecado, que sí, era mi culpa, pero ya se lo pagué.

Desperté, oí:

Este hombre duró años,
no moría y cobardía le entró.

Se acostó aquella noche
con un saco de pecados,
su salud y su dinero.

Y a la mañana siguiente,
no pudo mover sus pies;
sus brazos, sin movimiento,
dejaban lágrimas caer.

Dios no oye su perdón,
por pedirlo con pecado.

Dios no quiere que su Nombre,
por él fuera usado.

Cuando alguno quería 
pedir el Perdón para él,
el Dios que habita en el Cielo,
labios no dejaba mover.

No era arrepentido 
de saber que hizo daño.

No era arrepentido 
de pensar: la muerte llega.

Era el arrepentido
que si las piernas moviera,
otra vez haría pecados,
aunque Dios no lo quisiera.

Dios le dejó el sufrimiento:
que su nombre no dijera.

Y no lo podía decir 
aquel que por él pidiera.

Esto no es arrepentimiento,
estas palabras lo cuentan:

“Pídele que tenga compasión de mí,
que yo pude ser más malo
y no lo fui”.

Aquí, sigue aún más pecando.

Le pide compasión,
y le dice que no fue más malo
por compasión a Dios.

Si éste piensa en la muerte,
hoy no está fuera de Dios.

Porque en la muerte pensada,
el pecado nunca entró.

***

Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria Que Enseñen - Tomo I - C4 

lunes, 20 de octubre de 2025

Mi Camino es mi Reino

En Sueño Profético decían:

Debería ser normal vivir siempre buscando al que Dios trae a su Gloria. Y debería avergonzarse el que desprecio le da y dice: “yo soy cristiano”.

Dijo uno:

Yo creo que la palabra cristiano la dice el hombre sin pensar que al decir cristiano, nombra a Cristo, que es Dios.

Yo creo que el que sabe lo que es cristiano, imita a Cristo en Amor, Lo imita y vive las reglas que Él mandó. Él mandó a sus Discípulos que Lo siguieran y fueran hablando lo que Él les decía. Al que sabía que eran Discípulos suyos y no los buscaba ni los seguía, Él los nombraba: “enemigos míos”. Él les decía a sus Discípulos, que éstos no merecían que Él los dejara que miraran al Cielo, ni que su Sol, rayos diera a la tierra donde ellos pisaban, por despreciar lo que su Padre en Él daba: la Salvación del espíritu y la Enseñanza para echar fuera a los espíritus que iban en su contra ofreciendo el bienestar de la carne.

Desperté, oí:

Era lo que más, Dios Hombre, les repetía a sus Discípulos:

Al que os conozca y no quiera conoceros, Yo nunca lo habré conocido cuando esté en mi Reino”.

“El que no quiere mis Palabras, es mi enemigo”.

“El que no lleva mi Camino, conociéndolo, nunca Me verá”.

“Porque mi Camino no es el del hombre”.

“Mi Camino es mi Reino, que está en Mí y mi Padre espera de donde Yo fui mandado”.

“Que todo es Dios: Padre, Hijo y Espíritu que lleva el Mando”·

“El que oye a mis Discípulos, Me oye a Mí, porque Yo a ellos les doy mi Mando”.

“A éstos, sí los conozco Allí, porque aquí ya son cristianos
”.

Este Dictado deberían leerlo los cristianos.

***

Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C7 

sábado, 18 de octubre de 2025

Tres formas de nombrar a Dios

En Sueño Profético decían:

Hay tres formas de nombrar a Dios. Primera: “Yo amo a Dios”; segunda: “Yo creo en Dios”; y tercera: “Yo no creo en Dios”.

La primera mide todo con la medida del Amor; tiene siempre deseos de saber de Dios, por que cree que amándolo tanto como Lo ama, si encuentra quien le diga “yo veo a Dios y me habla”, Lo va a amar más todavía. Éste está dispuesto a amar tanto como el que más ame.

Ahora viene el que cree en Dios: éste cree, y al creer, ya sabe el Poder de Dios. Como éste, la mayoría, no quiere saber de Dios; creen y saben que hay Dios, pero no precisan sus noticias. La noticia se busca cuando se ama, porque el Amor te empuja a saber de Tu Amado. Este “Tú” es de todo el que a Dios ame, porque este “Tú” es Dios. Este Único Dios, lo mismo ama al chico, al grande, al potentado, que al humilde.

Ya describimos al que no cree en Dios: éste, nunca buscará su Palabra. No puedes buscar donde sabes que no hay. Pero si puedes encontrar sin buscar, y ya no crees, ya amas. Amando, crees; y si crees, no amas. Hay más en esta Gloria que no creyeron y luego amaron, que creyeron sólo.

Desperté, oí:

Si tienes que poner a uno que te guarde la despensa, procura que éste nunca tenga apetito.

Si gran apetito tiene siempre, difícil será que no pruebe nada.

Si ama, busca. Si cree, no busca, porque con creer le basta.

El que no cree en Dios puede amar aunque nunca haya creído.

Únete con el que ama, retírate del que cree, y busca al que nunca creyó por culpa del que no ama.

Amar es el mejor caudal que puedes encontrar. Creer, ya no es caudal.

Y si no crees, puede que encuentres el caudal que no supiste ver.

Ama como Dios te manda, aunque sea por Amor a Él.

***

Libro 4 - Te Habla El Profeta - Tomo I - C5 

viernes, 17 de octubre de 2025

Ya lleva cada Dictado Saber sobrenatural

En Sueño Profético decían:

Ella está preparada para sostener con la Jerarquía de la Iglesia cualquier tema que le preguntaran. Ella acabaría las preguntas siguiendo contestando, aunque preguntas no hicieran. Dios ha querido teoría y practica en ella. Esto es Dios para que el hombre vea que antes de desmentir tiene que hacerle una entrevista a ella.

Las explicaciones que da de vivir sin materia, las empieza con una pausa y tranquilidad, cuando le hacen preguntas, que por bien dichas que sean las preguntas, ves unas respuestas aplastantes. En las respuestas ves que hay práctica, y ves que vive la otra Vida; ves que sus palabras no son estudiadas; ves que lo ha vivido y en este vivir se lo han enseñado. No hay quien tenga dudas cuando hagan preguntas a ella; contesta con tal limpieza, que si el que le pregunta no es espíritu de Dios, le hace pensar, porque en ella verá a Dios hablando.

Dios la enseña haciéndole que note la salida del espíritu de la materia, y viviendo Vida sin peso; Vida sin carne; Vida que ves, sientes y no puedes abrazar ni palpar porque no existe materia. Pues todo lo de esta Gloria puede preguntarle el hombre, que tiene sobradas respuestas.

Dijo uno:

El hombre, que deje aparte los arrobos que cuenta y que estudie estos Dictados, que como ame a este Dios, ya sobra el estudiarlos.

Por donde se abran las Libretas, ven que es dicho a ella, pero no por hombres de Tierra, son hombres que ahí vivieron, y dictan para que grandes teólogos sigan aprendiendo las Palabras de Dios, que Dios sigue diciendo.

Desperté, oí:

No se le puede dar nombre
al que no vaya en busca de ella.

Pero tiene aún peor nombre
aquél al que ella quiera ir
y el hombre no quiera.

Ella siempre te dirá cosas,
y no de la Tierra.

Pues si tú quieres saber,
por qué no buscas a ella,
que te puede responder 
de la Vida sin materia.

Todo lo que el hombre sabe
fue por carne que estuvo muerta,
y su espíritu vivió
luego bajando a la Tierra 
para dar la explicación.

Pues si lo que sabes es
de espíritus que vivieron
haciendo servicio a Dios,
busca y cierra ese libro,
que esto es continuación
de lo que ya hay escrito.

Coge una lupa y un lápiz,
y ponte a repasar,
y verás las cosas claras
sin poder el lápiz estrenar.

Ya lleva cada Dictado
Saber sobrenatural.

***

Libro 7 - Investigaciones a la Verdad - Tomo I - C9 

jueves, 16 de octubre de 2025

Él me manda, y aquí traigo sus escritos

 En Sueño Profético hablaban de la actuación del que Dios manda que hable de su Gloria, diciendo: “Dios me manda”.

Si esto lo pensara el hombre, la verdad lo justificaba.

Decían:

¿Quién se atrevería a decir, ahí en la Tierra, de un rey o un dictador: “él me manda, y aquí traigo sus escritos”?, y que no provocaban guerra, que sería ponerlos de humildes, y hacerlo público en naciones, donde hay mandos distintos.

Pues, ¿cómo Dios, no siendo verdad, va a dejar que digan: “Dios lleva mi espíritu a su Gloria, y me da Mando para que sea publicado todo lo que Él manda que sea escrito al dictado”?

Si esto no fuera verdad, no habría mayor fracaso que buscar el “no” a esta Verdad.

Se puede hablar de Dios sin que te llegue descanso, y llevar el Evangelio en tu vida practicando. Pero, ¿cómo hacer un Escrito al empezar el día, diciendo: “Dios me lo ha dictado, aquí están sus Palabras”?

Esto, por bueno que seas y a Dios quieras, no puedes inventarlo.

Desperté, oí:

Que las fuerzas no te falten
en presentar estos Escritos
al que más crea que sabe.

Fuerzas, por respeto
al que tú sabes que sabe,
pero no sabe del Cielo.

Puede saber de libros,
pero no de Dios, Instrumento.

Las fuerzas que Dios te manda
nunca pueden respetar
el silencio que el hombre manda.

***

Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C7 

miércoles, 15 de octubre de 2025

Dios permite al hombre

En Sueño Profético decían:

No hay pensamiento mejor, que pensar en Dios del Cielo.

Dijo una mujer:

Yo viví mi vida con un sufrimiento grande, y de no haber estado pensando siempre en Dios, no hubiera podido vivirla. Esta enseñanza era de mis padres, que a bien decir, mi padre fue el que llevo a mi madre al camino de Dios. Mi padre era un hombre tan justo, en amar y cumplir lo que Dios mandaba, que contagiaba al que lo oía. Su profesión era herrador. Todos lo conocían por Manuel, el que calza con amor a las bestias. Cuando llegaba alguno y entraba al animal pegándole, decía: 

   –¡Así no lo enseña! ¡Así aprende a esperar los palos! Yo, mi táctica es acariciarlos. Verá… –y le cogía las manos delanteras con un primor, que el animal le contestaba cabeceando.

Nunca le molestaba nada que le pidieran que fuera para favorecer a otro. Decía:

   –¡Si yo lo hago por Dios! ¡Si yo vivo pensando en Dios! Este pensar es el que me da la felicidad. ¿Tú has visto alegría mayor, que vivir siempre sintiendo su gran consuelo?

Esto era mi padre, y dicho por todo el pueblo.

Desperté, oí:

Grande Amor tiene a Dios 
el herrador que hoy cuentan.

Se lo contagiaba a “tos”. 
La hija en Gloria lo cuenta.

Ella tenía un gran sufrir, 
y como pensaba en Dios, 
del sufrir no echaba cuentas.

También le daban su fama 
cuando la veían llorar, 
y rápido se le oían estas palabras:

¡Es que Dios permite al hombre! 
¡El hombre es el que no ama!

Ya tengo a Dios presente. 
¿A que se ha “cambiao” mi cara?

No quiera Dios que lo culpe, 
mil veces muerta 
y despreciada por mis hijos, 
que sin ellos la vida, 
vivirla, no pudiera”.

Todo lo vives con Dios, 
porque de Él vienen las fuerzas.

***

Libro 6 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C4 

martes, 14 de octubre de 2025

No hay mayor Gloria a este Cielo, que Obediencia con Amor

En Sueño Profético decía Dios Hijo:

El que ahí no esté contigo, no estará después Aquí conmigo. Al que Yo le doy mis Palabras, ya es por Mí amado. Y el que las oye, Me oye a Mí. Si no las obedecen y no respetan el Lugar, van en mi contra, y mi Padre les cierra el Reino de los Cielos. Yo mando mis Palabras con los que ahí les dicen muertos. Mi Padre Me presentó a Mí, y Yo presentó al Instrumento, que ya tiene que ser respetado por llevar Gloria a ese suelo”.

Dijo uno:

Fue continuar Dios Hijo sus Palabras, y continuaron, varias veces, muchas voces: “Estas Palabras son alabanzas a Dios: el decir sí a sus Palabras”.

Dijo el mismo:

Dios, con su Voz y su Eco, Él hablaba sin mandar ningún espíritu. Los espíritus, mientras, son custodios de sus Palabras, son espíritus que se alimentan con Esencia Divina, son espíritus que esperan la orden del Creador.

Desperté, oí:

Dios Tres en Dios Uno, 
ha sido esta noche en Gloria, 
todo lo que Aquí se ha dictado.

Dios que da Eco a su Mando 
sin decir “Dios me lo ha dicho”.

Dios Padre que ha dado su Voz 
a Dios Hombre, que fue Hijo.

Este arrobo se termina 
con espíritus que esperan 
la orden del Creador.

No hay mayor Gloria a este Cielo, 
que Obediencia con Amor.

Pues si falta la Obediencia, 
estás viviendo sin Dios.

Es más fuerte la Obediencia, 
que estar siempre en oración.

***

Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - Preámbulo 

domingo, 12 de octubre de 2025

Las amigas

En Sueño Profético contaban un Hecho de la Vida de Jesús, el Salvador de los hombres. Decían:

Yendo un día el Maestro con todos sus Discípulos, se acercaron unas mujeres que descendían de Corinto, y Le hicieron esta pregunta:

   –¿Todos éstos aceptan con obediencia lo que Tú les mandas día por día, o Te siguen por seguirte?

Quedó el Maestro parado, y todos sus Discípulos, con ansías de oír a su Maestro, que después era Enseñanza para ellos. Ya son éstas sus Palabras:

   –Si mis Discípulos no Me aman, aunque supieran que Yo soy Dios del Cielo, no Me siguen. Ellos aman, y ya el Amor les hace comprender mis mandatos. Tú no sigues a tu marido ni lo obedeces porque no lo amas –a sabiendas de que es tu marido–, y vas buscando que te acompañe el pecado, porque tú, pecado vas buscando.

Se fueron las amigas llorando con paso más bien lento, porque lo que habían oído al Maestro era dicho para las cuatro, ya que todas tenían al marido como instrumento para engalanar al pecado. Los defectos, aumentados, ellas los ponían como sufrir sin remedio, con lágrimas de pecado. La que sola se quedó con el Maestro y sus Discípulos, siguió oyendo al Maestro, que le decía sentencias, y al final la retiró con su Mano. Otra vez dijo este Dios:

   –¡Vete, pecadora, pero de pecados graves, de pecados de que más pequen!

Y siguieron todos obedientes al Maestro, sin volver la cara. Y ella quedó relatando con súplica que el Maestro no escuchó.

Parece algo extraño que el Maestro no volviera cuando se oía llorar.

No era llanto arrepentido. Y Dios la quiso dejar hasta que fuera al sitio donde la esperaban ya las tres casadas que con ella iban antes de esto terminar.

Cuando fue al sitio pecador 
–esta casa de pecado–, 
ella sola se encontró.

Las tres contaron el relato, 
y la cita terminó 
en convertirse en seis santos.

Ella quedó en el desprecio, 
porque albergaba pecado.

Fue en busca de los Discípulos, 
que ya hacía días 
que los estaba buscando.

El Maestro lo sabía, 
y Él quería presentarlos.

Ninguno cruzó palabra, 
porque sentían pecado.

***

Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - C7 

sábado, 11 de octubre de 2025

Tienes que querer a Dios

En Sueño Profético decían:

Dios te premia si tú Lo amas. Que a este premio le da valor el que más ama. Dios hace lumbre en el agua y apaga la lumbre sin echar agua. Dios llama al hombre en varias llamadas. Si el hombre pone Amor a cambio, ya sabe cómo Dios llama.

Dios tiene en su Gloria a quien cumplió ahí sus Palabras. Pero también entra, y Aquí tiene, al que ahí se fue de su camino y un día a Dios llama ocultándose del hombre que no entiende esta llamada.

Este Dios, este Cielo y esta Gloria, es la Casa de Dios Padre en Espíritu, y de Dios Hijo con el mismo Cuerpo de Carne que el hombre rompe y destroza cuando baja a darle la Salvación al mismo hombre. Esto que pasó y que hoy lo recuerdan en la Gloria, lo pensará el hombre por fuera.

Tendría que querer a Dios, y ya pensar en todos sus actos: “Gloria: Casa de Dios, de donde sale la vida, de donde sale el Perdón. Gloria: Sitio que no conoce monedas, que no conoce títulos, que no cuenta vestimenta, que sólo viene el espíritu, pero sin traer el cuerpo”. Trae todo el bien que hizo. Que lo que tiene más precio es el bien que hizo a los espíritus, quitándoles la suciedad para no perder este Sitio.

Desperté, oí:

Si el que quiere venir a la Gloria
se ocupara del que no piensa en ella,
antes de él vendría
el que su cuerpo muriera,
y no la perdería.

Y después de él morir,
con la semilla que él echara,
no dejarían de venir.

Tienes que querer a Dios
queriendo que muchos quieran,
no para pedirle a Dios
mientras estés en la Tierra.

A Dios tienes que quererlo
antes de que tus palabras
junten las primeras letras.

***

Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C6 

jueves, 9 de octubre de 2025

Quiero

En Sueño Profético decían:

Hay tres formas de decir a Dios: “Señor, yo te quiero”. Se demuestra: deseando, buscando y adorando. Cuando así lo demuestras, ya obedeces y reverencias. A todo esto te lleva el Amor. A Dios no puedes decirle que amas, si no buscas. A Dios no puedes decirle que obedeces, cuando no cumples sus Palabras; y no puedes pedirle su Reino, porque Allí tienes que vivir Gloria, y Gloria es vivir sus Palabras.

Dijo la Voz de Dios en un espíritu de su Gloria:

Cuando a Dios Lo vieron los hombres de Hombre, esto se cundió, y el que sentía Amor Divino, Lo buscaba. Cuando Lo veía y oía, ya iba cundiendo su Presencia y sus Palabras, ya iba hablando del Maestro, como el hombre Le decía.

Dijo otro:

También Le decían el Hijo del Hombre. A veces se oía: Rabino. Mesías se oía menos; El Salvador de los Hombres, esto mucho. Pero su Firma era Maestro.

María, a la que conocían como Madre, era a la que le oían decirle: Jesús. Este Jesús se oía a veces con gozo, a veces con pena, según su pensar, y según las palabras oídas en boca del que no Lo quería. Pues a Este que era Dios, el que más Lo buscaba, más Lo quería.

Desperté, oí:

No hace falta pensar mucho,
que si no buscas no quieres.

No se puede dar razón,
donde la razón no lleven.

Si pones comparaciones,
verás que todo se busca,
porque tú aquello quieres.

Si no buscas, no deseas,
cuando sea este buscar 
para todo aquel que quiera.

Que quiera, de querer ir,
y que Quiera porque quiera.

Con este último querer,
no hay hombre que se detenga.

Y cuando llegue al Querer,
entonces da reverencia.

No puedes decir, yo Quiero,
sin querer ir a este Quiero.

Pues el Maestro sabía,
que el “Querer”, a Él Lo seguía.

Aprende estas tres formas,
y encabeza con el “Quiero”.

Porque no puedes querer 
el “Querer”, sin el queriendo.

***

Libro 2 - Meditaciones y Palabras Directas con el Padre Eterno - Tomo II - C5 

miércoles, 8 de octubre de 2025

No hay sufrir mayor que el que te golpee tu amigo

En Sueño Profético decían:

Por mucho castigo que Dios diera al que Lo persigue siempre sería poco, porque el que Lo persigue siempre busca a otro y siempre estará pensando que aún Lo persiguen pocos. Esta es la forma de actuar de los mismísimos Demonios.

Dijo uno:

El que persigue no es que no ama, es que no teme que Dios lo pare o lo juzgue, porque se cree fuerte en poder diabólico, porque siente la protección de la coraza de Satanás, hasta que Dios lo ancla en cieno y ya son los mismos Demonios los que se devoran. Los que antes eran compañeros luego viven Infierno, porque los Demonios, en el mismo Infierno, se están devorando el espíritu sin cuerpo. Que esto no es castigo para lo que merecieron.

Desperté, oí:

Qué castigo tiene el Infierno para aquél que a Dios persiguió clavándole los pinchos y clavándolo en el Madero.

No puede tener pago, ni en la Tierra ni en el abismo, para quedar compensado el mal tan grande que hizo.

Por eso, ellos mismos se devoran y ya aumentan el castigo.

Porque no hay sufrir mayor que el que te golpee tu amigo.

***

Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII  

martes, 7 de octubre de 2025

Da de comer al hambriento

En Sueño Profético hablaban de seguir al Elegido por Dios, de comprenderlo y de gozar al presenciar sus hechos.

Dijo uno:

Yo viví con un ventero que con Dios, de noche, tenía Sueños Divinos. Este hombre había llevado una vida de grande sufrimiento. Sus padres lo tuvieron pidiendo limosna hasta los 12 años, hasta que el dueño de la venta se lo llevó con él por darle lástima más que por hacerle falta. Al poco tiempo enfermó el ventero. El chiquillo le cogió también cariño a este matrimonio, y no quiso volver con los padres, pues allí sólo oía palabras que ofendían a Dios, y los tratos entre los padres siempre eran violentos, reverso del ventero que todo era unión: si él decía una palabra, la mujer la acentuaba; los dos trabajaban sin descanso; y todo el necesitado que allí llegara, encontraba refugio de palabras y comida. Pues allí se hizo hombre el pedigüeño y fue el dueño de la venta –que si fama tenía de gente buena, más creció siendo él el dueño–, que ya la heredó él en vida por querer el matrimonio premiarlo por su inigualable comportamiento. Éste, me contaba, que todas las noches, cuando subía del despacho, antes de acostarse, rezaba a Dios, y que éstas eran sus primeras palabras: “Señor, no puedo vivir años que pudiera darte gracias, tantas gracias como tengo que darte por tanto bien como me mandas del Cielo”. Pues este hombre me contaba que muchas noches veía a Dios y su túnica lo rozaba. Se despertaba muchas mañanas con la caricia de su Manga rozando su cara, y que miraba el reloj y siempre era la misma hora. Este hombre me contaba grandes frases y grandes Visiones, que las guardaba del que de él se reía. A los que en Dios creíamos y Lo amábamos, en el trato que nos daba cuando entrábamos en la venta, nos sellaba la verdad.

Desperté, oí:

Disfrutó del ventero el que a Dios amó y Lo siguió, y Dios hizo que Lo sintiera.    

A éstos no los despertaba el Brazo que acariciaba la cara del ventero.

Siempre tenía la olla
de un cocido bien hecho.

También su mujer e hijos,
siempre estaban contentos.

Sabía que él vivía
para dar gracias al Cielo.

Aquel que lo conocía
y le copiaba su vida,
sin duda vive en el Cielo.

Él fue dueño de la venta
para que fuera creciendo
lo que siempre Dios te dice:
Da de comer al hambriento”.

***

Libro 6 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C5 

sábado, 4 de octubre de 2025

En la Gloria de Dios entran los que no reformen

En Sueño Profético decían:

El mundo lo cambia el hombre para el mismo hombre, pero no para Dios. Para Dios no puede ser cambiado, por ser Dios o pecado. Ya Dios, al hacer el mundo, puso sus Leyes con el Sello de Dios: imborrable e inconfundible.

Dijo uno:

El que vive las Leyes de Dios, no puede aceptar las que pone el hombre, las que van en contra de Dios y en defensa de Satanás. El que hace lo que a Dios le agrada, se retira de Satanás. Y el que hace lo que él arrastra, se aparta de Dios. Los que viven con Dios o con Satanás, tienen que tener vidas diferentes. Éstos nunca pueden tener unión de espíritu.

El hombre quiere vestir con grandes galas al pecado, y entonces hace más pecado; entonces hace que más resalte el que está haciendo el pecado. Un pecado hecho por persona bien trajeada, hace que más se mire el pecado y más invita a seguirlo. El que andrajoso va vestido, peca él sólo, sin despertar apetito de pecar.

Desperté, oí:

¡Bien que te aclara este Escrito
que Aquí dictamos en Gloria!

¡Bien que te dice,
que jamás para el pecado
Dios puede tener reforma!  

El hombre, aún peca más,
cuando lo de Dios reforma.

Peca más, por la reforma
que hace nombrando a Dios.

Peca más, porque reviste,
para que lo admiren “tos”,
el pecado, engalanándolo,
con desafío a este Dios.

En el andrajoso, el pecado,
se queda en un rincón.

En cambio, en el poderoso,
es pecado relumbrón.

Es pecado reformado,
sin el Mandato de Dios.

El mundo es sin reforma,
por arreglo que dé el hombre.

El mundo lo hizo Dios
cuando no vivía el hombre.

No le quites el pecado
a lo que Dios le dio el nombre.

Porque en la Gloria de Dios 
entran los que no reformen.

***

Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C6 

viernes, 3 de octubre de 2025

Ser cristiano

En Sueño Profético decían:

Debería ser normal vivir siempre buscando al que Dios trae a su Gloria. Y debería avergonzarse el que desprecio le da y dice: “yo soy cristiano”.

Dijo uno:

Yo creo que la palabra cristiano la dice el hombre sin pensar que al decir cristiano, nombra a Cristo, que es Dios.

Yo creo que el que sabe lo que es cristiano, imita a Cristo en Amor, Lo imita y vive las reglas que Él mandó. Él mandó a sus Discípulos que Lo siguieran y fueran hablando lo que Él les decía. Al que sabía que eran Discípulos suyos y no los buscaba ni los seguía, Él los nombraba: “enemigos míos”. Él les decía a sus Discípulos, que éstos no merecían que Él los dejara que miraran al Cielo, ni que su Sol, rayos diera a la tierra donde ellos pisaban, por despreciar lo que su Padre en Él daba: la Salvación del espíritu y la Enseñanza para echar fuera a los espíritus que iban en su contra ofreciendo el bienestar de la carne.

Desperté, oí:

Era lo que más, Dios Hombre, les repetía a sus Discípulos:

Al que os conozca y no quiera conoceros, Yo nunca lo habré conocido cuando esté en mi Reino”.

“El que no quiere mis Palabras, es mi enemigo”.

“El que no lleva mi Camino, conociéndolo, nunca Me verá”.

“Porque mi Camino no es el del hombre”.

“Mi Camino es mi Reino, que está en Mí y mi Padre espera de donde Yo fui mandado”.

“Que todo es Dios: Padre, Hijo y Espíritu que lleva el Mando”·

“El que oye a mis Discípulos, Me oye a Mí, porque Yo a ellos les doy mi Mando”.

“A éstos, sí los conozco Allí, porque aquí ya son cristianos
”.

Este Dictado deberían leerlo los cristianos.

***

Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C7 

martes, 30 de septiembre de 2025

Dios elige y da Mando

En Sueño Profético decían:

Del que Dios elige para enseñar, pueden todos hacer y vivir su Enseñanza. Su Enseñanza es antes de ser Elegido. Si el Elegido supiera que iba a ser Elegido, ya tendría varias discordias; ya sería saber lo que Dios hace y manda en su Gloria; ya sería Libertad sujeta, servir a Dios por fuerza, preso que no se escapa por sujetarlo los cerrojos y las puertas, que aunque no hubiera nadie, sabe que tiene que cumplir condena.

Esto es en el hombre, en la Tierra. Pero Dios tiene el mismo Amor para todos los hombres, en espera del que se lo pida con su comportamiento, dando respuesta a lo que le llegue en su vida.

Que esta respuesta pocos la dan a Dios queriéndose más acercar a Él, buscándolo sin protestas, dejando en Él una gran confianza puesta.

Esto es lo que el Elegido enseña, lo que todos pueden hacer.

Desperté, oí:

El Elegido es más veces envidiado,
que copiar sus actuaciones.

Dios elige y da Mando
cuando tú quieres ser
por Él mandado.

Que este Mando es pedido
cumpliendo antes su Mando.

Que cumplir sin tener Mando,
no es cumplir lo que has querido.

Ha sido decir: “Señor, 
que yo esté siempre contigo.

Señor, contigo yo veo tu Luz;
sin Ti, oscuros caminos.

Si hoy tengo más peso,
más quiero estar contigo”.

Con este pensar que ejerzas,
ya quieres ser Elegido.

Ahora copia y ejerce
lo que vivió el Elegido.

Porque Dios, si tú no quieres,
no da el nombre de Elegido.

***

Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C6 

domingo, 28 de septiembre de 2025

Publícalo

En Sueño Profético decían:

Los Ministros y la Jerarquía de la Iglesia saben que ella da movimiento a la mano, pero que ella no escribe Esto. Pues ellos jamás lo harían durante un mes, variando cada día esta gran Teología, que aunque quisieran inventarla, el invento no les saldría. Pues quién mejor que ellos para saber la Verdad o la mentira.

Ella habla del espíritu, y de este Mundo sin suelo, normal, como cuando ahí hablan los espíritus con cuerpo. Ella sigue estabilizada y recibe Enseñanza sin necesitar al cuerpo, que esta es la Vida de Eternidad, la que el hombre nunca nombra por falta de seguridad de que existe Dios y todos los que componen la Gloria, los que nunca tuvieron cuerpo y los que lo tuvieron y otros se lo enterraron. Este es el sitio Eterno: final de un viaje que haces y te tienes que bajar porque allí ya muere el tren donde ibas viajando. 

La llave de las Puertas de la Gloria es el Amén, la humildad y siempre llevar selladas estas palabras: “Yo vivo la Caridad y hago el sacrificio para poder levantar al que más caído esté de espíritu y de cuerpo”.

Desperté, oí:

Tan solo al ver el hombre el amén que le pone el Elegido al sufrimiento, debería decir sí, y el no, darle miedo.

¡Cuántos sitios recorridos llevan estos 40 años!

Cuando en un año ya hubiera sido bastante, diciendo: “Si Esto es Dios ¿qué más querer que Dios hable?”

Al decir “publícalo”, ya se ve el Poder de Dios con el hombre enfrentándose.

Por eso dicen en la Gloria que un año era bastante.

Ya, con todos estos Temas y abundancia de Enseñanza, el desmentir da escándalo y a Dios ofenden y no alaban.

***

Libro 75 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo VIII - C5 

viernes, 26 de septiembre de 2025

Esta Verdad

En Sueño Profético decían:

Cuando tus oídos oigan el no al Mando, que tu voz no repita este Mando, porque el Mando es de Dios y puede que Dios conteste sin que le oigan su Voz.

A todos los pasos que dé el que Dios le da su Mando, nadie puede hacerles reforma, porque éste va pisando los pasos que Dios va dejando.

Dijo uno:

Este Caso es Nacimiento de Dios, al que cada día verán más imposible poner el no.

Esta Verdad va cubierta de Poder de Dios del Cielo.

Esta Verdad oirá llanto cuando vean que no tienen remedio.

Era para que al Lugar que Dios elige se presentaran todos ofreciéndose, ya que donde Dios da sus Palabras también está premiando al pueblo.

Si dijeran “yo conozco al Instrumento y puedo oír lo que Dios dice en su Reino”, esto sería amar a Dios y creer que después de muerto no te puedes ir con Él si cuando tuviste cuerpo no buscaste y despreciaste donde hablaba Él.

Desperté, oí:

Ya se ha enseñado la Lumbre con Llamas Divinas, que Dios con sus Palabras alimenta para que más escandalicen las Llamas.

Todo lo que puedas mandar a larga distancia, mándalo, porque allí la Lumbre la agrandan.

Porque ven que es Dios el que está en estas Palabras.

¡Gloria de Dios, en la que Dios da la entrada con el pase del Amor!

El Elegido cada día habla con más fuerza lo que Dios le manda.

Si esto lo pensara este pueblo, sería poco el salir todos en alta voz diciendo:

Señor, Te quiero. Dame el Perdón por el tiempo que te hemos tenido en desprecio.

Yo te pido el Perdón y te quito sufrimientos.

***

Libro 40 - Dios Manda en Su Gloria que  Enseñen - Tomo VI - C2 

lunes, 22 de septiembre de 2025

Sólo el creer en Dios, no te da la Salvación

En Sueño Profético decían:

Sólo el creer en Dios, no te da la Salvación. El creer te quita ignorancia, y ya eres responsable de los que crees, pero no te da la Salvación.

Dijo uno:

Ya fue dicho en un arrobo, para enseñanza del hombre, que creer en Dios Padre no es querer a Dios Padre. Queriéndolo, sobra el creo. Y creer sólo, era la palabra incompleta y no participaba el Amor de Dios. Si crees sin querer, Dios no te oye, porque la contestación de Dios sería para que muchos ya creyeran. Pero Dios quiere más Amor, con ceguera, y entregarse al Él como Dios, como Dios que fue primero Espíritu y después se hizo Materia, que de Aquí no faltó Espíritu, ni su Gloria quedó inquieta. Era el mismo Dios de Carne con Divinidad ya hecha. Tuvo que hacerse de Carne para enseñar a la materia a despreciar el pecado, a conocer Vida Eterna, que aunque a muchos ya había mandado, el hombre se resistía a abandonar el pecado. Tuvo Dios que hacerse Hombre, y continúan dudando, no de que exista este Dios, no, se resisten pero a amarlo, se resisten a no vivir sin pecado. Rezan con fuerza el “Creo en Dios Padre”, y no aprenden el “Te quiero”. En el Credo quedan libres de cumplir los Mandamientos. En el “Te quiero” afirmas que siempre Lo irás siguiendo, en la llanura o en el monte, en el trabajo o en el descanso, porque el Amor ya se encarga de quitarte los trabajos. Porque si por Él los haces, ¿quién duda que no es descanso?

Desperté, oí:

¡Qué Palabras con más fuerza
da el empiezo del Mensaje!:

“Sólo el creer en Dios,
no te da la Salvación”.

El creer te hace responsable
de lo que tienes que hacer.

Y el “quiero a Dios Padre,
quiero a Dios Hijo
y quiero al Espíritu de Dios”,
te salva y puedes salvar a muchos,
si vas enseñando este Amor.

Decir “Dios mío, Te quiero”,
es decir “Te creo todo”.

Lo visible y lo invisible,
lo que dicen tus Evangelios.

Los Elegidos que llevas 
a vivir Ahí sin cuerpo.

Para que luego escriban
continuidad de Evangelio.

Esto es amar a Dios,
y no decir: “yo en Dios creo”.

***

Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - Cierre del Libro 

domingo, 21 de septiembre de 2025

La oración

Quedé dormida muy tarde porque no podía dormirme.

En Sueño Profético decían:

No se podía dormir porque el sueño le quitaban. Y se quería dormir para que el Cielo le hablara.

Es la oración la que llega cuando de verdad tú amas.

A la oración dicha sin la actuación que Dios manda, no le digas oración.

La oración dicha con Fe puede mover la montaña.

Dijo uno:

Los espíritus del mal persiguen a la oración. Al mismo Dios persiguieron cuando estaba en el Huerto haciendo Oración al Padre para la Salvación del hombre y el Perdón al pecador.

Tanta fuerza tiene el pecado, que al hombre lo retira de Dios, con armamentos de guerra o con fiestas paganas que ensucian la vida y ya de Dios lo apartan.

La oración te da fuerza, y Dios te ayuda a llevar aquello que tú no puedes aunque intentas tirar de él.

Desperté, oí:

Hay ladrones para quitar el sueño,
pero siendo ladrones,
los hay malos y buenos.

Ladrones y guardianes,
son de la Gloria,
y también del Infierno.

Los de la Gloria
te roban el sueño
y te llevan alegría.

Los del Infierno
te traen a la memoria
todo lo sucio pasado,
y te enferman el espíritu,
y la oración te han robado.

Los guardianes de la Gloria,
antes de que pienses sufrir,
con la Paz se te presentan.

Y te llevan una Luz
que a Dios ya sientes de cerca.

Mandan que quede dictado
que el empiezo del Mensaje
es orden que el Cielo ha dado.

***

Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C6 

sábado, 20 de septiembre de 2025

Dios dicta y manda

En Sueño Profético hablaban del vivir que tiene el que en esta Gloria entra cuando el espíritu aún está dando servicio a la materia. Decían:

Qué alegría el escribir lo que Aquí, en el Cielo, dictan. Que cuentan vidas pasadas, que son las mismas que hoy están ocurriendo. Pero las cuentan personas que vivieron Amor del Cielo, personas que estaban seguras de que Dios no estaba muerto, personas que su sufrir lo mandaban para el Cielo si creían que del Cielo era el sufrir, y si creían que era sufrir que el hombre había puesto pronto les venía el pensar:

    – Más sufre Dios desde el Cielo. Que Dios les deja a los hombres que le den sufrir siendo Él de todo el Dueño.

Cuando lean estas vidas, dictadas Aquí y dichas muchas veces por los mismos a los que les ocurrieron, cogerán Enseñanza sabiendo que son dichas Aquí, en el Cielo. Porque lo dicho por el hombre, sea verdad o sea cuento, no tiene este Amor puro de Enseñanza ni respeto a la Sabiduría de Dios. Dios manda que se digan sus Palabras en prosa, en verso, en palabras sin orden que el hombre haya puesto, en Parábolas que Dios nos manda para que las dictemos, en hechos verídicos o en algún cuento que sirva de buen ejemplo.

Todo esto es Enseñanza, sin ajustarse a los métodos que el hombre ahí pone que, a veces, es para entenderse menos.

Esta Enseñanza es pura y ahí no admite arreglo.

Desperté, oí:

Qué fracaso tan resonante daría el que quisiera poner reforma al Dictado.

Antes de que reformara dos letras Dios ya lo había apartado.

Antes lo hubo y ya Dios lo apartó. Y lo apartará todas las veces por no consentir, este Dios, que el hombre Le enmiende.

Dios dicta y manda.

Dicta para la Salvación.

Y manda para el que quiera esconderle sus Palabras.

Si el hombre creyera esto: “es Dios el que sus Palabras manda”, leería pidiendo perdón.

***

Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

jueves, 18 de septiembre de 2025

Dios no puede someterse a lo que quiera el hombre

En Sueño Profético yo decía:

“Señor, ¿por qué dicen muchos, que hasta que yo no muera no se publicarán estos Mensajes tuyos?”.

Esto es dicho por el hombre, no por Dios. Que diga el hombre dónde está escrito por Dios, que cuando Él hablara al hombre, no se publicara hasta que esta materia muriera. Entonces, ¿qué sentido tiene que hable Dios? Dios actuaría sin que su Palabra llegara al hombre. 

¿Cómo va Dios a hablar y a enseñar a un espíritu, para que éste espíritu enseñe y hable de cuanto Dios le hace sentir en su Gloria, para que esto lo cuente otro? 

Esto no puede ser aceptado ni comprendido.

Desperté, oí:

Aceptado, no, porque Dios permite. Pero Dios no puede someterse a lo que quiera el hombre.

Y comprendido, no puede ser jamás por quien ama a Dios y quiere saber de Dios.

Esto será comprendido por quien “dice” que ama, pero no quiere saber cómo habla Dios.

Dios habla para que publiques y grites sus Palabras.

***

Libro 7 - Investigaciones a la Verdad - Tomo I - C8 

martes, 16 de septiembre de 2025

Que no pare el Escándalo

En Sueño Profético decían:

“Que no pare el Escándalo, que esto es obediencia a este Mando”.

Estos Mensajes han sido cantados con Amor a Dios y con respeto al hombre. Y el que los ha oído los cunde y el nombre de Esto nombra y hace que piensen que en Esto tiene que haber algo que de Dios llegue. Y, queriéndolo y no queriéndolo, no pueden callarse este gran milagro al oír su nombre.

Dijo uno:

Ya irá quitando Dios impedimentos que el hombre ponga para que queden en silencio estos Mensajes que tanta falta le hacen a la cultura del hombre.

El cundir estos Mensajes que no tenga descanso y para ello que todo sea hecho con la Ley de Dios y con Su Mando.

El que Dios trae Aquí hace el Mando con serenidad y confirmando que cree en la Palabra de Dios hoy hablando, y que está dispuesto a todo para hacer este Mando.

Desperté, oí:

Gran alegría es ver defender este Caso al que lo ha tenido despreciado años y años.

Ministros de Dios y seglares ya hace tiempo que debían no tener esto callado.

Y al que Dios trae Aquí, ya le achicarían sufrir

Los que no quieren este Escándalo Divino, para Dios quedan mudos.

Decían en la Gloria que estos Mensajes se oirían de boca en boca, a unos sabiendo cantar y a otros por a Dios Amar.

***

Libro 40 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C2 

domingo, 14 de septiembre de 2025

El saco

En Sueño Profético vi un hombre con un saco lleno de monedas. Al lado había otro hombre con otro saco, éste lo tenía lleno de papeles escritos y en todos se leía igual. Esto era lo escrito: “Esto lo hago por Ti, Señor”.

Dijo uno:

Los dos dueños de estos sacos tenían caminos distintos. Uno, cogió el camino material. Y el otro, el seguro, el de Dios, el Eterno.

El de las monedas, las cambiaba de un lado para otro. Había monedas que habían pasado por manos diferentes, todos habían sido dueños, y ninguno sin poder Aquí traerlas.

Trabajo, complicación de cuido, desvelo producido por el personaje “avaricia”. Este personaje pertenece a los muchos que hay en contra de Dios; personajes encargados de que dejen vacío el saco con estos Escritos.

“Esto lo hago por Ti, Señor”. Este saco es de un valor incomparable; lleno que tú haces con facilidad, cuando crees en este Dios y amas. Todo el que ama, antes de actuar, piensa en el equipaje que cogerá en su último viaje: viaje del mundo material al Eterno.

Desperté, oí:

Haz tu equipaje grande,
cuando éste sea para Dios.

Si la maleta es chica,
haz que el cofre sea mayor,
que por mucho que éste pese,
Dios te da el premio mayor.

Todo lo que tú hagas,
y digas: “Esto es por Dios”,
cánticos forma la Gloria,
dándole alabanza a Dios.

Cuando los ángeles ven
el equipaje asomar,
contentos abren las puertas
de esta Gloria Celestial.

Apunta y echa al saco,
pero echa sin dejar,
que el saco de las monedas,
Aquí no puede llegar.

***

Libro 2 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo II - C7 

sábado, 13 de septiembre de 2025

Y vendrá mi Espíritu

En Sueño Profético decían:

Si ama a Dios, no lo calles.
Si amas a Dios, no te ocultes
donde de Dios no se hable.

Si amas a Dios, lo irán diciendo
tus hechos, tus palabras
y todo aquel que te vio.

Y si no amas y crees,
¿no te da miedo este Dios?,
que puede soltar la llave
para el Sí o para el No,
que puede venirte algo
sin remedio ahí en la Tierra
y sin remedio para Dios.
Porque Dios ya te lo manda
cumpliendo tu petición,
y petición que Dios manda
es sepultura sin resurrección.

Si crees que Dios existe,
haz las cosas por temor,
reconoce, aunque no ames,
la Libertad que Él nos dio,
porque puedes hacer cosas
desafiando a este Dios,
y Él puede que te conteste
mandando tu petición.

Aquí tienes dos posturas,
pero falta la peor,
la que tiene aquel que dice:
“Yo amo a Dios,
yo cumplo todo lo que manda la Iglesia”,
pero éste, a veces o siempre,
no quiere saber de este Dios,
practica su Pasión y Muerte,
y por Muerto lo tiene,
no queriendo recordar estas Palabras:
Y vendrá mi Espíritu”.

Desperté, oí:

Aprende primero quién dijo estas Palabras: “Y vendrá mi Espíritu”.

Aprende qué es Espíritu.

Aprende quién da movimiento a la materia.

Y ya estudia los dos mundos:
el espiritual y el material.

Pero no olvides, si piensas,
que hay un Dios nada más.

Esto también Él Lo dijo,
y tú debes estudiar.

También dijo que era el Padre,
el que estaba Allí en su Reino.

Esto no cabe en cabeza
del que Lo tiene por Muerto.

¿Para qué lees tantas veces 
Palabras del Evangelio,
si no crees lo que Él dijo
y siempre lo estás leyendo?

Y ya termino el Dictado
escribiendo estas Palabras:

Yo soy el Padre, 
y mi Espíritu es el del Padre, 
que Todo es el mismo Dios
”.

Si el Hijo se fue al Padre 
y dejó dicho: “Vendrá mi Espíritu”, 
pide Perdón si has dudado.

Porque Dios, a aquel que duda, 
lo retira de cristiano.

***

Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C6 

viernes, 12 de septiembre de 2025

La Palabra de Dios es Evangelio

En Sueño Profético decían:

La prueba más grande de que existe Dios te la dan los Elegidos. Esto es para que el hombre lo piense y lo estudie. Si no hubiera Lugares donde  Dios se comunicara al hombre, el hombre perdería el contacto de esta Gloria, el hombre diría: “¿Quién ve a Dios? Dios vivió y ya nadie Lo ha visto después de su Ida a su Reino”. Esto no puede Dios permitir que así sea. Pensar que Dios todo lo dijo es tener un Dios racionado, un Dios al que el hombre le controla sus Palabras, su Mando y su Sabiduría. Quien esto piense, que no diga que en Dios cree, ni que su Poder sabe. Dios dejó dicho, cuando vivió de Hombre, lo mismo que hoy dice. Esto lo dijo a aquellos hombres, pero aquellos hombres duraron poco, como todo ser que nace, que muere pronto comparado con lo eterno. Pues si Dios no vuelve más a recordar Amor, Caridad y Perdón, ¿quién se salvaría? Dios no puede dejar a sus hijos en manos del pecado sin recordarles: “Empiezo ahí, Eternidad Aquí”. Si Dios no se ocupara del hombre, el hombre no se ocuparía de Dios; el hombre encarcelaría al que su Nombre pronunciara. Una vez que maltrata al que dice “Dios me habla”, ¿cómo quiere el hombre que Dios no se haga presente al hombre? Pese a todo ser que a Dios no ame, Dios hablará, y enseñara a que el hombre tenga Amor al humilde, al que el mismo hombre desprecia, al que maltrata porque en Él no cree; ni cree ni teme a su Poder.

Desperté, oí:

Dios se comunica porque, desde el comienzo del mundo, el hombre no obedece.

Dios vivió de Hombre para enseñar a amar.

El hombre aprendió a odiar y a matar, y dio testimonio matando a Dios.

Dios da Amor al hombre, y el hombre Muerte a Dios.

Si el hombre no viera a Dios, se haría y se vería normal el crimen.

Toda la Palabra de Dios es Evangelio.

Antes de su Venida, sus Palabras eran Evangelio.

Y después de su Venida, Dios justifica con su Carne.

Evangelio es Palabra que Dios ha dicho, dice y está diciendo.

No te extrañe que Dios hable, si Dios es Puro Evangelio.

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Libro 4 - Te Habla El Profeta - Tomo I - C3 

jueves, 11 de septiembre de 2025

Enseñanza es enseñar al que no sabe

En Sueño Profético contaban un Hecho de la Vida de Dios Hombre. 

Dijo uno:

Estando un día esperando al Maestro, yo y tres Discípulos más, tenían estas palabras. Dijo uno de los tres:

   –Gran trabajo cuesta el tener que decir: “eso no está bien hecho”. En el sitio que lo comprenden, ¡qué satisfacción te llevas! Pero donde se ponen en contra, ¡te entra una pena…!

Dijo el otro, de los dos que callados estaban:

   –Y a veces te entra ira, y ya ofendes al Maestro, porque ésa no es su Enseñanza.

Ya entró el silencio cuando vieron al Maestro con cuatro más, y al llegar, Él siguió hablando como continuación a las palabras que tenían:             

   –No olvidéis, que Enseñanza es enseñar al que no sabe. Donde digáis mi Doctrina, no tenéis que mirar quién la oye, ni albergar las palabras que los espíritus del mal escupen para robaros la Paz que mi Padre tanto me encarga que Yo deje en la Tierra. Si mi Padre no se hace Hombre, hoy no estoy delante del hombre. Lo que no sea del agrado de mi Padre, decidlo. Y si fueran rebeldes a la Gloria que ofrecéis, seguid vuestra Enseñanza, y que se conozcan los que de Mí aprendan. Yo he venido a salvar al pecador con mi Enseñanza; al que la desprecie, ya es mi Padre el que Allí en su Reino le responde, que luego será a Mí al que me oiga.

Y ya, mirando a todos, dijo:

   –A los que os vean ira, os pueden confundir con los hipócritas, por no ser ésa mi Enseñanza.

Desperté, oí:

Un Perdón pidieron todos, aunque palabras no se oyeron.

Cuando el Discípulo dijo lo de la ira, todos lo vieron bien.

Y en ellos se despertó como una justicia justa.

Ellos lo hacían por Amor, pero no lo comprendería el que los viera con ira.

Discípulo de Dios: el que enseñaba de Él, tenía que conocerse por enseñar y aprender.
    
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Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - C5 

miércoles, 10 de septiembre de 2025

Dios dice en el Cielo

 No podía dormirme pensando en cosas muy dispares unas de otras. Y en cada cosa que pensaba, decía: “Señor, no Te enfades, pero es que veo tanta indiferencia a lo que cuento tuyo, que no se con qué postura tengo que actuar”.

Quedé dormida y en Sueño Profético oía:

Todo el pensar del Elegido no está fuera del Amor a Dios. Todo este pensar tendrá su Mando en su momento.

Dios deja al hombre para que el hombre no diga que obliga a que a Él Lo quiera y Lo busque. Pero una vez que aparta porque tú no acudiste, dándote con el Elegido tantas llamadas, tienes que ver un cambio grande, como agua que pasó, que ya para atrás no pasa.

Dijo uno:

Es de miedo para el espíritu, y de vergüenza en la vida material, que 28 años esté el Elegido con las mismas Palabras que Dios le da, suplicando que las oigan y que no insulten con el desprecio.

Desperté, oí:

Si publicaras los nombres y los cargos de los que les has mandado Mensajes –a jerarquías de la Iglesia y a seglares con grandes cargos–, ¡qué pocos, por no decir ninguno, no han tenido conocimiento de este Caso hoy único!

No tiene explicación que el cristiano dude de lo que puede hacer Dios.

Sufrimiento por cundir lo que Dios dice en el Cielo, no hay sufrimiento mayor.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C5 

jueves, 4 de septiembre de 2025

Dios Hijo deja un Nuevo Testamento

En Sueño Profético hablaban de Dios Hombre, de Dios cuando todos vieron lo que tenían escrito por los Profetas que oían la Palabra de Dios Padre dicha desde el Cielo. Había Escritos, Palabras que luego los hechos las dejaron clavadas para siglos y siglos sin fin. Había Testamentos hechos de la Palabra del Padre, que luego Dios Hijo explicaba y nombraba a Dios del Cielo. Se nombraba como si fuera el Padre. Se nombraba como Hijo que el Padre manda. Refería todo lo que pasaría. Y ya, las preguntas que más Le hacían era estas que Aquí dicto: “Maestro, ¿Te veremos luego con Carne como ahora Te estamos viendo? ¿Podremos llamarte al Cielo y tu Voz oírse en Tierra? Esto queremos que Tú nos digas y nosotros dejarlo escrito como otro Testamento. Ya, Dios Hombre contestaba: 

Esto que Yo os digo y enseño, quedará con más fuerza escrito, por escribirlo al oír de mi Espíritu con Cuerpo todo lo que mi Padre mandó decir, que era Dios, pero sin verlo como Me estáis viendo  a Mí. Aunque con Cuerpo o sin Cuerpo, es siempre el Único Dios. Escribid mi Enseñanza para el que venga detrás de vosotros”.

Desperté, oí:

Dios Hijo deja un Nuevo Testamento 
con su vivir y su Amor.

Deja sellados sus Hechos 
con Libertad y el Perdón.

¡Cuántos que mucho pecaron, 
dejaron al conocerlo!

¡Y a cuántos pudo dejar, 
cuando Lo insultaron, muertos!

Tuvo que dejar sellado, 
cuando Lo vieron de Hombre, 
que el Amor y Libertad 
se lo dejaba a los hombres.

Él dejó su Testamento 
suplicándoles a los hombres 
que el Amor fuera primero.

El que viva sin vivir 
este Testamento Nuevo, 
que no hable de la Gloria, 
porque esto está primero.

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Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C4 

miércoles, 3 de septiembre de 2025

El Mando lo doy Yo

Quitaba el sueño el pensar en el Mensaje del día pasado. Ya llegó el Sueño Profético con estas palabras que están dictando:

¿Quién puede decir y dejar escritas la Palabras y Visión que Dios ha hecho, con Mando al Elegido, para que sean dichas y publicadas en Libros, como todo lo que dicen en la Gloria?

Dijo un espíritu de Dios:

Es grande la diferencia de ver cómo la Imagen de Dios la sacan en publico, clavado en la Cruz, y aplauden con gran alegría los que van a verlo. El sentir del Elegido es distinto, siempre Lo recuerda con un gran Amor. Cuando oye sus Palabras, las penas que le llegan las aparta. Y su camino es cundir, cada día más, que Dios le dice: “Que Me ves, publícalo. Y di que el Mando lo doy Yo”. Pues como verán, el Elegido hace este mandar.

Esto ya está cundiéndose cada día más, porque no es una Visión ni Aparición, es llegar el espíritu a la Vida Eterna, y sin cuerpo permanecer normal mientras está con el Mando de Dios donde no ve cuerpos, hasta que en la Enseñanza Dios hace que vea los cuerpos. Aunque Aquí, los que están, viven Vida Eterna sin cuerpo. Ésta es la Enseñanza que al adelanto le está haciendo falta: que muere el cuerpo, pero que el espíritu no tiene muerte.

Desperté, oí:

Se va a dejar dicho lo que decían en el arrobo para que quede de Enseñanza:

“El espíritu no tiene muerte. Si es de Dios, es para la Gloria”.

“Y si no es de Dios, tiene la vida sin muerte, para Satanás”.             

Esta Enseñanza, el que la aprenda, no puede callarla.

Muchos la aprenden cuando han visto peligros en su cuerpo que en la Tierra no tenían remedio.

Par quitar estos peligros han llamado a Dios y lo primero que le han dicho han sido estas palabras:

“Señor, mi vida la tengo cambiada. Te pido con Amor, si puedo ser perdonado. Ya sólo quiero tu Mando”.  

Estas frases, al que las dijo, le llegan dentro.

Y a Dios, ahora, le hace servicios, contento.

Estos arrobos me quitan sufrimiento, cuando a lo que no puedo nombrar pongo recuerdo.

Ya quiero seguir los Pasos de Dios, y ya, todo sufrir, chico quedó.

Estas palabras, para la Madre de Dios, Virgen, son.

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Libro 60 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VII - C4 

martes, 2 de septiembre de 2025

Vete mala tentación

En Sueño Profético decían:

El sufrimiento con Paz va enseñando al que sufrir tiene y vive alboroto o al que sufrir no tiene, para que cuando le llegue el llanto se acuerde de aquel sufrir que la Paz le iba dejando.

Dijo uno:

En el sufrimiento es donde más se ve la actuación del espíritu, si se acerca a Dios o si se retira. El sufrimiento te empuja a muchos caminos, ninguno de Dios. El espíritu del mal se presenta en tres actuaciones, que son éstas: en las alegrías mundanas, fiestas que el hombre autoriza diciendo “no es malo”; en el sufrimiento, que cuanto mayor es más te empuja; y en las vidas de los que viven tranquilos, rechazando las fiestas y siguiendo el Camino de la Paz, a los que les intenta quitar la Paz. El espíritu del mal formará polvareda o charcos si hiciera falta, pero si tú estás preparado con la Enseñanza de Dios lo rechazas con facilidad y dices:

“Vete mala tentación.
Vete consejo malo, 
vete a los Infiernos. 
Que es donde te echó 
el Mando del que manda en el Universo, 
del que manda en todo lo creado 
por ser único Dueño, 
que aunque son tres Nombres 
es uno y único: 
Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu”.

Desperté, oí:

Si te agarras a estos Nombres no podrán mandar las tentaciones en tu sufrir.

Qué cierto que en el sufrir intentan apartarte de Dios.

Y entonces es cuando viene el sufrir, porque nada te vendrá para llamar a la Gloria por si te pudieran ayudar.

Enseña a sufrir con Dios y también a vivir contentos sin que se vaya la Paz, y a conocer los espíritus que en contra de Dios están.

Que cuando ya son conocidos no pueden trabajar y la Paz contigo seguirá.

Entonces vas enseñando, dejando atrás los caminos.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

lunes, 1 de septiembre de 2025

Santos molineros

En Sueño Profético hablaban de Hechos que ocurrieron en la Vida Pública de Jesús, el Salvador de los hombres. De palabras dichas al “ve” que Él daba, de los encuentros con los pecadores, de las preguntas que Le hacían los sabios de la Tierra. De los que querían engañarlo pidiéndole un milagro. De los que decían que si era Dios, por qué dejaba esas casas de tanta grandeza y Él entrando de extraño, pidiendo que al pobre le dieran y pidiendo Caridad. Que al que Lo oía y la daba, Él le daba para dar.

Aquí referimos a unos molineros que pesaban el trigo antes de molerlo, esto delante de los dueños. A este matrimonio lo conocía el pueblo por los “Santos molineros”. No pasaba día que no los vieran en una ermita que había cerca del molino. Allí iban a pedir por las cosechas, y decían:

    —Señor, el que tenga muchas fanegas, que tenga buena cosecha. Y a la vez que crece la espiga, que crezca en Amor el que nada tenga. El que tenga unas faneguillas, que yo al moler le dé más peso en harina del que él me dio en trigo.

Esta petición fue cumplida y antes anunciada por uno de los Discípulos. El Maestro le dijo:

   —Ve y di que ellos tendrán siempre crecida la cosecha. En harina darán lo que antes hayan pesado, al que cantidad de fanegas tenga. Al que tenga palmos sembrados, ya le darán de lo que Yo les he dado.

Desperté, oí:

Este molinero pesaba el trigo y después de molerlo siempre le sobraba peso.

Llegaron hasta asustarse, y no sabían si venderlo, repartirlo o entregárselo al dueño.

Iban a la ermita y a Dios Padre Le pedían que siempre creciera el peso del que más pobre vivía.

Y si alguna vez conociesen al Maestro, le dirían que mandara al molino al que no quisiera creerlo.

Todo el que llevaba el trigo sabía que de un costal crecían bastantes kilos.

Los Discípulos llegaron con Mando de su Maestro para que ya se cundiera que el milagro estaba en el peso.

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Libro 74 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IX - C5 

domingo, 31 de agosto de 2025

Yo también soy Elegido

En Sueño Profético decían:

El Mando de Dios lo recibe primero el que Aquí trae Dios. Y una vez que el Mando llega a la Tierra, el que lo recibe tiene que tener discípulos que este Mando lo cojan con alegría, sabiendo que el Mando es de Dios. Esto lo pueden comprobar cuando el Elegido manda Mando, porque siempre sale bien.

Dijo uno:

Las palabras que hoy se han oído dichas por el discípulo que está a larga distancia y que no deja pasar hora del día sin hablar de estas Divinas Palabras dichas en Gloria, si tu mando no lo cogen, hoy no se oyen en público y para ti hubiera sido un gran disgusto.

Mañana que siga tu Mando, y el que no lo vea bien, aunque diga que te cree, miente. Porque creer es obedecer, y antes de que oigan el Mando deben decir “yo lo hago”, porque este Mando es Dios el que lo está mandando, unas veces con Palabras y otras con el sentir que, al espíritu, de Aquí le llega.

Desperté, oí:

Si tu Mando lo cogieran creyendo de donde viene, todo sería alegría, porque pensarían: “Yo también soy Elegido”.

Es gran descanso el dar Mando y ver que lo hacen contentos y cantando.

Esto es Amar y creer.

Jesús repetía a sus Discípulos: “Si Yo no hago el Mando de Mi Padre, no os Mando Yo”.

“Hacer Mi Mando es creer que Yo soy Dios Hijo”.

“El que no lo haga verá la diferencia que Mis Palabras tienen con el que Mi Mando haga”. 

Pues si Dios habló así al hombre, el Elegido tiene que seguir Su Enseñanza.

Pensamiento que te llegue para cundir estas Palabras, busca donde el Mando lo hagan.

El que Esto crea, no puede hacer lo que él quiera.

Todo lo que sea para escandalizar este Caso, hoy único, no dejes para nada el tiempo que aquí haga falta.

Dios da el ciento por uno a los que están contigo.

Que ha veces les hace pensar: “Esto, a mí, cómo me ha venido”.

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Libro 40 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C2 

miércoles, 27 de agosto de 2025

La constancia

En Sueño Profético decían:

La constancia alcanza más que las promesas. La constancia olvida las promesas. Las promesas esperan, cumplen, y mayoría de veces no sigue la constancia a la promesa cumplida.

Dijo uno:

La persona que es constante va aclarando misterios, va llevando la verdad y tienen que ir diciendo: “es que su constancia es sin igual”. Hay personas buenas que no las tienen por buenas porque constancia les falta. Esto, en las cosas de la Tierra. En lo Divino, es constancia con Amor, es deseo de vivir siempre el camino que dan las Reglas de Dios. La constancia, cuando es voluntaria, enseña y arrastra a que otros la vivan. La constancia es palabra que no va dicha en lo mal dicho. Mucho repetía Jesús a sus Discípulos:

Sed constantes en llevar mis Palabras y en dejar selladas las buenas obras, que sin constancia no hay Enseñanza. Cuando practiquéis la constancia, verán que sois mandados por Mí y os sellarán con el nombre de cristianos”. 

Desperté, oí:

Vuelve el espíritu a la materia con la palabra cristianos.

Fue Dios de Hombre quien dijo a sus Discípulos:

Sed constantes en llevar mis Palabras y en dejar selladas las buenas obras, que sin constancia no hay Enseñanza”.

Dijo tanto Dios de Hombre, 
que el hombre hoy no sabe 
que si hubiera que escribirlo 
no habría papel ni hombre.

Por eso a los Elegidos 
Dios los manda, 
para que quede y escriban 
algo que vivan, 
para que el hombre compruebe.

Algo que vivan sin cuerpo 
y sin el mandar del hombre.

Hoy ha sido la constancia 
la que se presenta al hombre.

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Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C8 

martes, 26 de agosto de 2025

El Permitir de Dios debería el hombre pensarlo

En Sueño Profético decían:

¿Cómo no verá el hombre dónde la Fuerza de Dios se encuentra?, que es su Mando, y que este Mando lo cumplan con alegría y sin protestas. Si existieran protestas, se presentaría la duda, pensando: “Esto es de la Tierra”.

No puede haber Mando de Dios, ni con protestas, ni con dudas, ni con tristeza.

El que Dios elige, siempre se guarda por dentro palabras que no las dice. Porque el decirlas sería contentar a los demonios que en contra de Dios actúan.

El que Dios elige para enseñar, antes de hablar, con su actuación y aceptación, ya va enseñando.     

Dijo uno con Mando de Dios:

Tu mando sea sin miedo y con más mando.

¿Quién mejor que el que Dios elige puede dar mando? Él verá cómo está el Cielo antes que llegue nublado. Nublado, no de las nubes. Nublado que nadie ve como Dios no le dé Mando.

Se va a poner comparación para que piensen si este Mando es del Cielo o de la Tierra:

El animal más manso, que su cría delante tuviera y se la quitaran poniéndole otra, ¿crees tú que le daría cariño y calor como a los hijos que le quitó el pastor? –suponiendo que fueran corderos–.

Pues si esto no fuera de Dios, el Instrumento no caminaría con Amor a Dios, contento y viendo, en el sitio de su cría, otra cría puesta.

Desperté, oí:

El Permitir de Dios debería el hombre pensarlo y estar en oración para el sufrimiento achicarlo.

Daban en Gloria más alta puntuación, a aceptar con alegría este Permitir de Dios.

Permitir que da Enseñanza, como la Virgen Madre, que todo lo de Dios Hijo aceptó.

Si te acercas un poco a Dios, ya podrás valorar este Permitir de Dios.

Este Mensaje sea dicho o prohibido donde el Instrumento quiera.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C8 

lunes, 25 de agosto de 2025

Él sabía que era pecado

En Sueño Profético hablaban de varias cosas diferentes, pero todas eran Enseñanza para saber lo que era pecado, lo que era más pecado y lo que era el mismo Satán.

Dijo uno:

De éste van los pecados y a éste le llegan, porque son por él mandados. 

Hay quien por disculparse dice: "Él sabía que era pecado", y hay quien tiene más fuerza y de Dios va alejando al que hace pecado. Pues en éste que lo aleja crece doble pecado. Pongamos una comparación con lo humano para entenderlo:

Si llegas a una botica pidiendo algo que mate y te declaras diciendo que es para ti, y el boticario te lo vende, seguro que va a la cárcel. Porque él tiene más culpa que el que quería envenenarse. Pues en el pecado tiene más condena el que ofrece el pecado para que más pequen, por ser éste un enlace de Satanás, que el que peca y no cumple, si no hace que pequen los demás.

Desperté, oí:

No quedas bien con Dios si dices "él sabía que era pecado" y lo dejas pecar.

Es boticario que vende veneno sabiendo que el comprador se va a envenenar.

Aquí no tiene disculpa aunque digas "él sabría por qué se quería matar".

Esto en las leyes del hombre.

En las de Dios tu deber es quitar de pecar.

Puede que uno vea la piedra y otro no vea el mural.

Puede que uno note que lo tientan y eche el paso hacia atrás, y otro no se dé cuenta hasta dejar de pecar.

Hay que estar preparados con la reserva de Amor.

Y puede que seas tentado y no llegues a pecar.

Pero el que vende el pecado o el que no quita de pecar que sepa que le está haciendo servicio a Satanás.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

viernes, 22 de agosto de 2025

El Santazo del pueblo

En Sueño Profético decían:

Ya tiene premio de Dios el que acepta lo que Dios dispone.

Si todo lo que va de Dios se aceptara convencido de que Dios lo quiere, se sentiría el consuelo de Él.

El hombre, mayoría de veces, quiere superar el Mando de Dios, y aquí le viene el fracaso.

A los Santos les llaman Santos, no porque tengan diferencia de otros hombres, los Santos es que viven la aceptación de esta Gloria: ya viven sin Libertad aún teniendo materia; por su Amor a Dios han aceptado todo lo que Dios ha mandado, sin replica y sin pedir cuentas a Dios; y lo que Dios ha permitido lo han aceptado sin violencia, y han pensado en el sufrimiento de Dios, y se han unido a su sufrimiento; han puesto todo en Manos de Dios y han enseñado este Evangelio. Esto es el vivir de los Santos que viven ya Santos ahí.

Dijo uno:

Esto que aquí refiero con el Mando de Dios, fue contado por mi padre, al que conocían como “El Santazo del pueblo”:

Decía que vio condenarse a uno por querer ir en contra del Poder de Dios; y que a otro, por aceptar la Voluntad de Dios, lo vio con grande fortuna. Eran dos que tenían unos terrenos sembrados, y que estaban preparándose para la siega cuando empezó un fuerte chaparrón en el que caía piedra. Este que se condenó ofendía a Dios a gritos. Y el que tenía la misma cosecha y en el mismo sitio dijo:

   –No siento la pérdida del trigo, siento el Sudor de Sangre de Dios Hijo, que con tus ofensas caerán sus gotas –y se tapó sus ojos para no verlo.         

Dicen que, cuando pasó la nube, fueron dos cuadrillas de hombres a ver dónde estaba el trigo para segarlo, y que fue tal la impresión, que allí manaban las conversiones. Las espigas del que aceptó la nube de piedra estaban derechas y secas; y las de la linde –las del amigo–, tumbadas, vacías las espigas y el terreno lleno de piedras, que jamás serviría para más siembra.

Desperté, oí:

No vio sólo este milagro
el que amaba a Dios del Cielo.

Fue todavía mayor:
en un poco de terreno
la Mano de Dios se vio.

Tenía una sementera
sin haber nadie sembrado.

¡Ni era el tiempo siquiera!

Lo hicieron los labradores
que labran desde la Gloria.

Lo hicieron sin el arado,
mientras la nube caía,
cambiando el trigo a otro lado.

Con dos hombres sólo basta
para que cojas ejemplo
de aceptar lo que Dios manda.

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Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C5 

jueves, 21 de agosto de 2025

El Infinito

En Sueño Profético hablaban del estudio que el hombre hace para llegar y saber del Infinito, y de lo sencillo que lo ve el que a Dios ama.

Comparemos al niño, al hombre de edad provechosa, y al que sus años se presentan con la palabra “anciano”:

El niño, nunca, por más que el hombre invente, podrá dejar de ser niño, hasta que Dios lo dé por hombre.

El que ya es hombre y está dando el provecho, por más que se esfuerce, pronto dejará de dar utilidad.

Y ya, la vejez, tienes que ponerla con el niño.

De las tres etapas del hombre, una es nada más de la que él dispone. Si piensas en las tres, ésta es una cortísima de tiempo en la vida de materia.

Pues si piensas en la edad provechosa, no merece la pena esa ansiedad que pone el hombre en querer investigar, pues para la Vida Eterna es andar camino adelante y después quedar atrás. Al infinito no llega el hombre por ser hombre. El Infinito es el sitio del Amor, un sitio que es para todos sin hacer investigación.

Desperté, oí:

Este Mensaje te hace
que pienses en la ansiedad
de querer ser en la vida, 
y que piense en el final.

¿Cómo Dios dejar al hombre
que camine por los sitios
sólo por investigar?

Si el hombre buscara a Dios,
todo podría alcanzar.

Pero tienen que enseñarle,
desde chico, el Amar. 

Y cuando ya sea hombre
de provecho, este Amar.

Y cuando llegue vejez,
se encontrará en un empiezo,
que el hombre llama final.

Esta es la investigación
que debe el hombre enseñar.

Y no que vive luchando,
una lucha sin final.

Que antes lucharon otros,
sin Infinito pisar.

Dedica siempre tu vida
al que la vida te da.

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Libro 4 - Te Habla El Profeta - Tomo I - C7 

lunes, 18 de agosto de 2025

Señor, que tu Amor me crezca

En Sueño Profético hablaban dos mujeres. Ya una subió la voz con estas palabras:

¡Que falta hace que mucho se hable del Amor a Dios! ¡Qué falta hace que el hombre ame!

Aquí refiero yo un hecho por si sirve de Enseñanza. Es el hecho de aquel día que juntas fuimos por agua:

Estando yo llenando el cántaro, tenía yo esta conversación:

   –¿Qué haría yo para que nunca se me quitara este Amor tan grande que siento por Dios? Hay veces que siento miedo; hay veces que digo no, no quiero lo que en la Tierra pudiera robarme tu Amor. Esto hay veces que me pone apenada, pero antes de quedar vacía mi imaginación, otra vez me viene: “¿Qué haría yo?”. Estando en este relato, fue cuando tú miraste para atrás y el Maestro estaba con los Discípulos a dos pasos. Esto se oyó de Él:

   –Mujer, con no querer de dejar de amar, ya no te dejará el querer. El querer es la Fuerza de mi Padre, que es el Dios que ahora ves. Cuando llegues a tu casa, suelta el cántaro y busca para enseñar a Amar. Todo el que beba de ese cántaro, no querrá dejar de amar, porque de Amor lo has llenado. ¡Anda mujer…, y enseña al hombre a que viva sin pecado! 

Despierta, oí:

Este arrobo es de Amor, 
y luego es de Enseñanza.

¡Qué Amor tiene esta mujer, 
que sufre por no perder 
el Amor que está aumentando!

Tan sólo con desear, 
ya Dios le manda su premio:

Que sirva su inteligencia 
para pensar en el Cielo.

Antes de ocupar el sitio 
las cosas de la materia, 
otra vez ella decía: 
“Señor, que tu Amor me crezca”.

Dios se presenta en la fuente 
y de Amor a ella la cubre.

La manda para que vaya 
hablándole a los hombres.

Hablándoles de Dios Hijo, 
hablándoles de Dios Padre.

Y el cántaro se lo llena 
de lo que no lo ve nadie.

Que luego ya lo verá 
el que quiera a Dios Padre.

Que allí veían al Maestro, 
y en el Cielo era el Padre.

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Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - C3

domingo, 17 de agosto de 2025

Fe y Bendición

En Sueño Profético decían:

Si la Fe vive contigo, no dejes que la Fe se vaya. Porque la Fe, si la cuidas, 
siempre te dará ganancias. 

La Fe siempre acerca a Dios. La Fe es una Palabra que debe de ir delante 
de la petición.

Pedir sin poner la Fe delante es petición a los hombres, que puede que no sea buena o que no puedas alcanzar aquello que tú deseas.

Dijo uno:

A Dios tienes siempre que pedirle con Fe y aceptación. La Fe te ayuda a vivir, y la aceptación más te acerca a Dios. Y ya te viene el pensar: “¡yo qué sé lo que es mejor!”.

Aceptar es devolver un Amor mayor a Dios. No digas yo tengo Fe, si no hay aceptación.

Desperté, oí:

Era la palabra Fe
la que llenaba la Gloria.

La Fe mueve la montaña.
Esto Dios Hombre aconseja.

¡Qué cierto que la palabra Fe
no va en lo que Dios no manda!

Fe y Bendición
no pueden ir a otro sitio
sin ser Camino de Dios.

Abraza la Bendición
como algo de tu cuerpo
que Dios del Cielo mandó.

Como la carne que une
sin ley de separación.

Ya la Fe te da la vida
y llega la aceptación.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C5 

martes, 12 de agosto de 2025

Esta Enseñanza es Luz Divina

En Sueño Profético contaban una Enseñanza que Dios Hombre les dio a su Discípulos y a otros que también Lo seguían:

Pecará menos, el que Me conozca y siga mi Amistad, y si Me sigue, no hará pecado, verá mal hecho todo lo que Yo digo que está mal hecho, y él no lo hará, por quitarme a Mí sufrimiento; contestará, sin pensarlo, cuando le digan que si me conoce: “¡Si, yo voy con Él para aprender lo que es de la Tierra y lo que vale en el Cielo!”; no podrá tener amistad con quien a Mí no Me conozca, porque tiene que oír hablar mal de mi Padre, que es hablar mal de Mí; o que no Me nombren, y ya acepta indiferencia, que es no creer que soy Dios. Sufrirán los que Me siguen por Amor, cuando oigan que no está bien dicho mi Mandato, e intentarán llevarse la cordera que anda perdida, a mi Rebaño”.

Ya nos puso a todos de pie para seguir andando y dijo:

Pensad, que lo mismo que vosotros estáis a un palmo de Mí, han podido estar otros. Aprended e ir enseñando a “los lejos”, que es mandato que mi Padre dice en Mí, y Yo Lo dije primero, antes de a la Tierra venir. Que no queden mis Palabras como siembra de la que no sale tallo, que entonces estaréis ya pecando. Esta Enseñanza es Luz Divina que alumbra al hombre que esta Luz quiere. El que la desprecia, verá con la luz de las tinieblas”.

Desperté, oí:

¿Qué se puede más decir, 
que este grandioso Evangelio?

Si leyéndolo, practicándolo y enseñándolo, 
dejas al pecado muerto.

Es sufrimiento de sangre, 
de sudor y de calvario, 
el ver cómo habla este Dios, 
y el hombre sin escucharlo.

¡Hombres que andan y ven, 
y le dan a Dios maltrato, 
por dejarlos Dios vivir 
por si fueran reformados del pecado!

El que esto lo pensara,
estudiaría este Evangelio,
y no permitiría pecados,
o él no haría nada mal hecho.

Haría frente a lo malo,
enseñando al buen ejemplo.

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Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C3 

domingo, 10 de agosto de 2025

Si no viviste Prójimo, no puedes venir Aquí

En Sueño Profético decían:

Para hablar de la lumbre, tienes que acercarte. Para hablar del agua, tienes que mojarte. Y para entender el Lenguaje de Dios, tienes que amarle.

Si lo entiendes y Lo amas, no puedes hacer lo que haces. No puedes vivir lejos de aquello que Dios te manda, y tú seguir andando, dando la espalda.

No puedes seguir a Dios y no darle la mano al que al suelo cayó, porque tu caída puede ser mayor el día que creas: “ya no necesito nada aquí en la tierra, ya tengo de todo, la suerte me da lo que yo no gasto”.

Dijo uno:

Es caída mayor, tener y creer que a nadie necesitas. Es caída mayor porque la caridad de ti la retiran y empiezan a numerar la vida que antes hacías, y vives la soledad.

Desperté, oí:

Vives la soledad de no sentir:
“yo hice esto en el Prójimo”.

Vives un interior
sin fuerzas para pedir
por la enfermedad de tu cuerpo.

Que esto te presenta desesperación,
trayéndote a tu memoria:

“Nunca me ocupé
de las Palabras de Dios.

En lo que yo me hacía dueño,
no daba participación.

Y ahora tengo que dejarlo,
y si con la vista pudiera,
todo lo convertiría en fango”.

Que esta agonía la tiene
el que no amó a Dios.

No levantó al caído
y al Prójimo no acudió.

¡Qué diferencia de agonía: 
vivir Prójimo porque está Dios!

Vive tu vida pensando que,
todo lo que ahí tienes,
tiene que quedar ahí.

Y si no viviste Prójimo,
no puedes venir Aquí.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C6 

jueves, 7 de agosto de 2025

Todas estas Palabras llevan Amor, Perdón y Esperanza

En Sueño Profético decían:

Dios acompaña a los que van pidiendo que el nombre de Dios suba por encima de la montaña, pase los mares y sean cundidos estos Mensajes. Sean cundidos, poniendo el nombre de Dios delante.

Dijo uno:

Cada día que de Esto no sale nada en público, más se juntan las miradas cuando pasa el Instrumento. Unas, por querer saber. Y otras, por Amor al Cielo.

Hoy han visto muchas actuaciones del que tiene Dios dando ejemplo de Amor a Él, de Paz y de abrazar los sufrimientos.

Hoy no hay quien pueda presentar esta abundancia de Palabras dichas en la Gloria y con el Mando de que sean dichas sin miedo, por ser Dios su Divino Pregonero. Pregón de Dios, que si tienes Amor, este Amor te quita el sueño.

Desperté, oí:

De estas Palabras, dichas en canción, como su ritmo lleve Amor, tienen que decir: “Señor, que se oigan en todo el mundo”.

Todas estas Palabras llevan Amor, Perdón y Esperanza.

Todas estas Palabras hacen que la duda se le vaya al que quiera creer y lo atormenten las dudas satánicas.

Decían en la Gloria, que poniendo Amor, ya todo sobraba.

Que este Dios de las Palabras, hacía Imagen, te daba Vida y ya nada te hacía falta.

¡Qué pena tiene que ser abandonar el Lugar y luego morir sin él!

Esto ya es trueno en tormenta, que si viste relámpago, el trueno suena.

Pues aquí han visto de todo para poder justificar que Dios arroba su espíritu y le da Palabras para que queden escritas como éstas.

Todos los pasos que el Elegido da, antes ya han sido dichos a ella.

Unas veces en el Sueño. Otras, despierta. Pero sin voz y sin letras.

Es un sentir en el cuerpo, sin que participe ni la vista ni el oído, y sin ver hechos.

Al Poder que lleva al cuerpo, puedes llamarle vida con contrato, sin saber en la fecha que cumple.

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Libro 40 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C3 

domingo, 3 de agosto de 2025

Creer en Dios no es amar a Dios

En Sueño Profético decían:

Creer en Dios no es amar a Dios. Amarlo es seguirlo, y creer en Dios es perseguirlo. El Amor a Dios lo nota el Prójimo, porque este Amor ama en silencio y va rogando a Dios en cada hecho. En cada hecho pone a Dios y así va Amor en su hecho.

Amor a Dios es perseguir al malo para hacerlo bueno. Amar a Dios es sufrir con el que tiene sufrimiento. Amar a Dios es creer lo que Él dijo y está diciendo, y querer que muchos amen, porque sabes que si está amando ya tiene que ser hombre bueno.

Dijo uno:

Hay quien cree que para ser hombre bueno no necesitas amar a Dios. Pues este es el fracaso del hombre. Si el hombre amara a Dios ese Mundo no sería un valle de lágrimas, nada más que para la enfermedad de la carne o para el dolor de la misma, porque al amar a Dios te hace vivir un Mundo de Paz y de Gloria, y te hace pensar: “Esto es lo seguro, lo que no es pecado, lo que Dios dijo”. En cambio, el que cree es íntimo amigo del que está pecando, que es el que está falto del Amor Divino.

Desperté, oí:

Si el hombre enseñara el Amor a Dios se acabarían las guerras de momento, porque el Amor a Dios llora antes de que el tiro suene.

Si el hombre amara a Dios respetaba la familia, porque Dios la quiere unida.

Si el hombre cree en Dios, lo poco que haga será por miedo, pero sin Amor.

Y reformará sus Palabras por ser las suyas mejores.

Y hará de ese Mundo de carne un Infierno, con el niño y el mayor.

Todo esto está pasando por la falta de este Amor.

No digas nunca “yo creo”, porque te falta el Amor.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII