domingo, 3 de agosto de 2025

Creer en Dios no es amar a Dios

En Sueño Profético decían:

Creer en Dios no es amar a Dios. Amarlo es seguirlo, y creer en Dios es perseguirlo. El Amor a Dios lo nota el Prójimo, porque este Amor ama en silencio y va rogando a Dios en cada hecho. En cada hecho pone a Dios y así va Amor en su hecho.

Amor a Dios es perseguir al malo para hacerlo bueno. Amar a Dios es sufrir con el que tiene sufrimiento. Amar a Dios es creer lo que Él dijo y está diciendo, y querer que muchos amen, porque sabes que si está amando ya tiene que ser hombre bueno.

Dijo uno:

Hay quien cree que para ser hombre bueno no necesitas amar a Dios. Pues este es el fracaso del hombre. Si el hombre amara a Dios ese Mundo no sería un valle de lágrimas, nada más que para la enfermedad de la carne o para el dolor de la misma, porque al amar a Dios te hace vivir un Mundo de Paz y de Gloria, y te hace pensar: “Esto es lo seguro, lo que no es pecado, lo que Dios dijo”. En cambio, el que cree es íntimo amigo del que está pecando, que es el que está falto del Amor Divino.

Desperté, oí:

Si el hombre enseñara el Amor a Dios se acabarían las guerras de momento, porque el Amor a Dios llora antes de que el tiro suene.

Si el hombre amara a Dios respetaba la familia, porque Dios la quiere unida.

Si el hombre cree en Dios, lo poco que haga será por miedo, pero sin Amor.

Y reformará sus Palabras por ser las suyas mejores.

Y hará de ese Mundo de carne un Infierno, con el niño y el mayor.

Todo esto está pasando por la falta de este Amor.

No digas nunca “yo creo”, porque te falta el Amor.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

viernes, 1 de agosto de 2025

Dios da el cien por uno

En Sueño Profético decían:

Dios da el cien por uno, cuando ve cómo has dado el uno sin pedirle el cien. Pero sí es seguro que Él está viendo cómo das el uno.

Dijo uno:

Cierto, que si tú das el uno, Dios te da el cien. Que hay veces, que llega sin moneda, pero en un valor que desvaloriza al cien en monedas. Este valor puede ser que, sin tú decir palabras, todos los hombres lo vean.

No hay inversión mayor que por Dios des las monedas. Que son las de más valor, aunque monedas no veas. La Paz, donde la dejes, ya estás dejando monedas. La Caridad tiene un precio, que te anula las monedas, si tu Caridad es de la Caridad que Dios quiere que tú tengas: consolar al afligido, dar de comer al hambriento, vestir al desnudo e ir achicando grandes sufrimientos.

El que tenga estas monedas, Dios le da el cien por uno.

Desperté, oí:

Dios da el cien por uno
en monedas o en valores
que superan a las monedas.

Si te quita algún defecto
que de la Gloria te aparte,
ya te dio el cien por uno,
pero un cien mayor.

Todos los defectos grandes
los alimenta el diablo,
que son: la soberbia, la ira 
y la desobediencia a su Mando.

Dios da el cien por uno,
siempre que tú el uno
lo hayas dado creyendo:
“Dios me está viendo,
con esto, ya estoy cobrando”.

Es difícil dar el uno,
y darlo por Amor
sólo a su Mando.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C7 

miércoles, 30 de julio de 2025

El que ama reconoce que no es la culpa del Cielo

En Sueño Profético decían:

Dios ama tanto, que te da sin medida. Y el hombre ama tan poco, que pocas veces a Dios Le da las gracias. El hombre siempre está agradecido al hombre y con desprecio a este Dios. El hombre más llama a Dios para insultarlo, que para decirle alabanzas.

Dijo uno:

Cuando falta Amor, no puedes comprender a otro que ame, esto en la vida de materia. En lo Divino eres cerillo detrás de muralla, que la grande muralla no deja el cerillo ver. En cambio, si hay Amor, verás la muralla correr. Cuando Dios oiga tu Amor, y sin poder comprender, Él te quitará la muralla o agrandará la luz para ver. Todo te lo hace este Dios cuando tú quieres saber. 

Este Amor de Dios, que sin poder comprender, como tú tengas Amor sin palabras y sin ver, ya estás unido con Dios y fácil es comprender. Pero donde no hay Amor, es pedir cuentas al Cielo y al hombre darle valor. Si el edificio se cae, siempre han de culpar a Dios.

Desperté, oí:

¡Qué pocas veces reconoce el hombre 
que él es culpable 
del sufrir que está sufriendo!

Si el edificio se cae, 
ya culpan a Dios del Cielo.

No se piensa en el hombre 
que nada hace bien hecho.

Éstos son la mayoría, 
que son los que van diciendo: 
¿dónde está el Amor de Dios?, 
¿dónde está el Dios del Cielo?

¿Cómo se ha podido caer, 
con lo bien que estaba hecho?

El que ama reconoce 
que no es la culpa del Cielo.

Que es algo en lo que falla el hombre 
de los primeros cimientos.

Éste que ama, 
aparta lo de ahí y lo del Cielo.

Y nunca culpará a Dios, 
porque todo lo bien hecho 
sale del Amor de Dios.

Lo que pasa es que Dios deja 
grande Libertad al hombre.

Pues si quieres ser cerilla, 
Él la muralla no corre.

Si Amor pides sin palabras, 
este Dios ya da Poder 
y tú corres la muralla.

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Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - C8 

martes, 29 de julio de 2025

Las alegrías de Dios te las pone el Amor

En Sueño Profético decían:

Tu oración llega al que te cree, porque Dios no puede dar Premio al que te trate mal por no creer esta Verdad.

Dijo uno:

Si pensaran que una palabra de desprecio que te dieran era a Dios al que se la mandaban, el arrepentimiento no les dejaría que les llegara el sueño.

Esto ya ha roto la verja que los espíritus del mal tenían para que al Elegido, el sufrir, lo detuviera arrinconándolo.

Dios manda que en el “Abrigo de piel de cordero” el agua brote.

Dios hace manantial donde el hombre sería imposible que hiciera brotar una gota nada más.

El ver esto, da Poder, Fuerza y hace que nada que venga de Dios veas imposible.

Esto hace pensar que lo que el hombre ve imposible, para Dios es actuación de una petición que con creer se pidió.

El propagar este Caso, que no tenga descanso y que sea a escala mundial el Escándalo, ya que no hay letra Divina dicha por Dios, para que no se calle, con esta abundancia.

Desperté, oí:

Creyendo y amando, verán como se forma gran Escándalo.

Todos los que te obedezcan, verán que les llega Premio que no es de la Tierra.

Si Esto lo cogen con avaricia y sin descanso, pueden en el mundo formar Escándalo.

Mañana se oirán alegrías que Dios quiere que se digan.

Las alegrías de Dios te las pone el Amor.

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Libro 40 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C3 

lunes, 28 de julio de 2025

El Mensaje y Dios hablando, no son silencio

En Sueño Profético yo decía:

“¡Qué Bueno es Dios!”. 

Y decían:

Si no destruye el mundo, no es porque no sea suyo, sino por ser Dios.

Nombraban muchos nombres y se dirigían a mí diciendo:

A ella pueden examinarla en lo espiritual. El examen siempre es, o debe ser, por quien sepa más, o sea, el examinante tiene que saber más que el que examina. Aquí no hay profesor por haber un Solo Dios. Todo lo que sepan de Aquí, es Dios quien permite que se sepa. Pero en ella no es que permite, es que actúa. Como la Palabra no es suya, ya se encarga Él, que es el que la dice, de la contestación que tiene que dar al que cree que son de ella las Palabras. El hombre cree que todo el mal se lo manda Dios, y todo el bien que recibe, es de su inteligencia.

Desperté, oí:

Dios no es que quiera al que a Él no Lo quiera. Pero si éste dice: “Quiero”, Dios le contesta: “Antes, Yo he querido”.

Dios no obliga a nada. Si obligara, Judas no hubiera sido Judas.

Todo lo que sea para comunicar, te será dictado en el momento de ejecutar la Escritura.

Dios habla, y el Mensaje y Dios hablando, no son silencio.

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Libro 7 - Investigaciones a la Verdad - Tomo I - C8 

miércoles, 23 de julio de 2025

Podéis hablarnos de Él

En Sueño Profético yo decía:

¡Qué alegría Señor! ¿Por qué me dará tanta alegría cuando buscan tus Escritos?

Yo, Señor, no mido el tiempo para hablar de lo que Tú me dices, pero cuando veo que lo pueden cundir, más alargo el tiempo y no sé si así debo de seguir –esto lo decía yo como si estuviera despierta–.

Ya sigue la Voz del Mando –aunque en mí estaba el Mando, por estar dormida–:

Los Discípulos, cuando más contentos los veías era cuando los paraban preguntándoles:

“¿Cuándo podemos oír al Maestro? Y si tiempo lleváis, decidnos algo que Él os haya dicho para enseñar cómo hay que ser para ser hombre de Dios, cómo desbaratar el daño que hicimos y cómo estar hablando siempre de Él. Porque nosotros, cuando nos hablan de Él, nos olvidamos de las faenas y del bienestar de la Tierra, hasta el aviso que nos dan de que ya está la mesa puesta”.

Cuando a los Discípulos los buscaban hombres que su cundir hacían, ellos tarde llegaban al sitio donde iban. Y a su regreso, al Maestro Le decían: “Eran hombres de mando y de voluntad grande. Nos preguntaron por Ti y no queríamos pararnos mucho, pero sabemos que harán “cundir” cuando te oigan. Maestro, aunque allí llegamos tarde, también hablamos de Ti.”

Desperté, oí:

Ya podían llevar prisa y el tiempo justo los Discípulos, que hacían parada al oír: “queremos oír al Maestro”.

“Podéis hablarnos de Él, que nosotros podemos ir cundiendo, pero nos falta el saber de lo que Él ya va diciendo”.

¿Quién no hacía aquí parada? ¡Si el Maestro sabía el sitio donde esperaban y Él mismo nos detenía!

Otros nos hacían preguntas y respuesta no se llevaban.

Ya el Maestro y su Poder, de lejos Mando nos daba, y el tiempo se escondía y corta era la parada.

Éstos no querían oír para cundir, ni al Maestro Lo buscaban.

Aquí los Discípulos pronto seguían su marcha.

Si quieres saber de Dios para cundir su Palabra, verás al tiempo quietud, una quietud que Dios manda.

Pues al vendedor que vende, mercancía no le falta.

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Libro 74 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo IX - C5 

martes, 22 de julio de 2025

Con esta Enseñanza, el mundo cambiaría

En Sueño Profético decían:

El Poder de Dios te achica los sufrimientos. El Poder de Dios hace la Fuerza en tu cuerpo.

Dijo uno:

Si no existiera Poder no guardarías sufrimientos. Los sufrimientos del que está al Mando de Dios no serían comprendidos por el que le falta Amor. Que esta falta abunda por no enseñar lo que Dios dice en su Gloria. Que lo que dice no es para el que lo lleva, es para el que espera cambiar de vida.

Esta Enseñanza evitaría que el hombre matara a otros hombres.

La Gloria aumenta los ruegos, pidiendo a Dios que el hombre pida a Dios Perdón por no ocuparse de estas Palabras que dan Vida Eterna. Si tú las buscas y las enseñas, vas cundiendo que Dios no vivió, que Dios vive y espera al que Lo quiere y Lo sigue.

Desperté, oí:

Con esta Enseñanza, el mundo cambiaría.

Pero la falta de Amor prohíbe que sea enseñada.

El espíritu del Elegido da consejo siempre de Paz y de Perdón, y se ofrece a hacer el bien en el nombre de Dios.

Recibe las ofensas y malos tratos, pensando: “Si a Dios desprecian, a mí de más me están dando”.

Los que su compaña no te falta, creen y esperan milagros que están pidiendo a Dios para que sirvan de Escándalo.

Estos piensan en tu vivir y quisieran este vivir cambiarlo.

Son espíritus de Dios y nunca te dan enfado.

Antes de oír palabras, el sí ya están preparando.

El que oye estas Palabras, no se cansa de hacer lo que el Elegido manda.

Gran lucha es querer que todos cojan estas Palabras como mandadas por Él.

Sin Amor no hay Obediencia, cuando la Obediencia es para Dios.

La obediencia del hombre no es obediencia, es temor.

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Libro 40 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C3 

lunes, 21 de julio de 2025

Son Palabras por Dios dichas

En Sueño Profético decían:

Se van a dictar frases que están dichas y que en este arrobo se han repetido:

“El que me mire, Te vea. Y el que Te vea, no Te olvide”.

“Quiero a Dios Padre, quiero a Dios Hijo y quiero a Dios Espíritu Santo”.

“A ti, Primer Sagrario de Dios y Reina de todas las madres, ruega por los pecadores”.

“Si Dios no fuera Dios, detrás del hombre no iría, y no haría de Pastor buscando ovejas perdidas”.

“Quiere a Dios por lo que Él te quiere, y no Lo quieras por lo que te da”.

“Si el bueno fuera bueno, el malo no sería tan malo”.

Estas son unas mínimas frases que, en 28 años, se han dicho al espíritu sin cuerpo, en el arrobo que Dios hace del Cielo a la Tierra.

Desperté, oí:

Si los teólogos y literatos
quisieran saber del Cielo,
Aquí tendrían para ver Verdad
sin darle silencio.

Son Palabras por Dios dichas,
sin que le lleguen
culturas ni talentos.

Son Enseñanzas Divinas
de un Dios Vivo
que está en su Gloria con Cuerpo.

Esto no admite la duda
y se puede comparar
con Palabras que Dios dijo
antes de su Nacimiento,
la noche de Navidad.

Y después de su Nacimiento,
la Enseñanza que Él deja,
sin ser copia,
hoy la ves igual.

No tiene disculpa el hombre
que, pudiendo,
 Aquí, espaldas le da.

Porque Dios da sus Palabras
a nivel de noche y de día,
sin que el hombre 
las pueda ocultar.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C7 

domingo, 20 de julio de 2025

Esto es de Dios

En Sueño Profético decían:

Si el sufrimiento dejara huellas, como los pies en el polvo o en el barro, el Elegido haría un museo y daría miedo no aceptarlo.

Estos sufrimientos vienen del hombre, porque de Dios no pueden ser. Vienen del hombre, persiguiendo a Dios, para esconder al Elegido con el grande sufrimiento que ya el hombre se propone darle con espíritus que no son de Dios. Esto es guerra de espíritus, triunfo de Dios, derrota del enemigo del hombre. Del enemigo del hombre que está en la línea de Dios, porque el que no está en su línea no es enemigo, éste es su amigo, pero amigo asesino, que es peor que ser enemigo.

Desperté, oí:

Qué falta hace que el hombre aprenda a conocer lo que viene de Dios o lo que va en su contra.

Qué falta hace que enseñen, como primera asignatura, a conocer lo que te lleva al Infierno o lo que te lleva a la Gloria para que, por presentación que te pongan, tú lo conozcas.

El espíritu del mal no dejará, ni de día ni de noche, de trabajar para que pierdas la Gloria.

Por eso el Elegido va enseñando: Esto es de Dios, y esto del enemigo.

Y a cuestas va llevando el sufrimiento por no ser bien comprendido, pero la fuerza que lleva derrota al enemigo.

Si el hombre aprendiera cuando le enseña el Elegido sabría conocer de lejos lo que es de Dios y lo que es del enemigo.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

viernes, 18 de julio de 2025

Yo soy cristiano

En Sueño Profético decían:

Este Mensaje es para que lo lean y lo piensen los cristianos.

Dijo uno:

El hombre, la mayoría, no sabe lo que es un cristiano. Si el hombre supiera que cristiano quiere decir: Cristo… Cristiano quiere decir: yo soy de Cristo, yo formo parte del Cuerpo de Cristo; yo soy de Dios, que esto es Cristo. 

“Yo soy cristiano”. Si el hombre supiera o pensara lo que quiere decir cristiano, empezaría vida nueva, haría un pensar hondo, sacando lo que en el fondo del pensar hubiera.

Dios buscaba a los pecadores, para que el que quisiera, se hiciera cristiano. Pero lo mismo que dejaba al que quisiera, el que decía “soy cristiano”, tenía que aceptar las Palabras suyas, tenía que creer que era Enviado del Padre, y no tenía que hacer lo que Él no mandara. Tenía que practicar la Paz, la caridad, y renunciar al pecado. Tenía que aceptar que el Espíritu suyo sería por Él mismo mandado, y que otra carne normal repetiría sus Palabras. El que no aceptara esto, no era cristiano para Cristo. El que no aceptara sus Palabras, no era suyo, porque cristiano es Cuerpo de Cristo y Espíritu de Gloria. Si el hombre estudiara esto, se haría cristiano o se quitaría el nombre de cristiano. 

Viviendo la Palabra de Dios, vives la Gloria. Y decirse cristiano sin vivir sus Palabras, es ser fariseo.

Bien dichas las Palabras que el mismo Dios tuvo que decir: “Manojo de víboras, hipócritas”. Estas Palabras quiso el hombre que Dios la dijera a los que se decían cristianos. Ellos mismo quisieron oír su nombre.

Desperté, oí:

Este Mensaje, al leerlo, 
te confiesas sin querer.

Te confiesas y te cambias 
el nombre si no eres de Él.

Si no tienes caridad, 
cristiano no puedes ser.

Si nunca llevas la Paz, 
cristiano no puedes ser.

Si persigues sus Palabras, 
cristiano no puedes ser.

Pues no obligues a este Dios 
a que tenga que decir 
las Palabras que dejó, 
que escritas tienes ahí.

Si te tienes por cristiano, 
no te va el perseguir, 
porque son Palabras dichas 
por el mismo que vivió ahí.

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Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C6 

jueves, 17 de julio de 2025

No es trabajo, cuando amas

En Sueño Profético hablaban del Amor a Dios. Decían:

Este Amor te hace 
que lo trabajoso sea descanso. 

Este Amor te quita peso 
del camino tan pesado. 

Este Amor para sentirlo 
tienes que Amor desearlo.

Dijo uno:

Yo vi un día a unas zagalas cogiendo flores en el campo y haciendo manojos grandes. Les pregunté:

   –¿Qué hacéis con tanto volver a agacharse? ¿No os duele la cintura? Y luego las flores son de poco durar para trabajo tan grande.

Este fue el contestar:

   –Son para la Virgen. Y cada vez que corto una, la veo sonreír. Y cómo me gusta verla, por eso tantas veces me agacho y no me canso. ¿Cree que esto es trabajo?

A lo largo de mi camino –porque para llegar al sitio que yo iba tenía que andar un camino largo–, al pasar por una finca que le decían “El Chaparro”, había un Cristo hecho, que dicen que fue un ofrecimiento de uno que bañándose estuvo cerca de matarse con una gran piedra que había en la orilla del río. Este hombre –contaba la leyenda–, no sabía trabajar nada que fuera de esta profesión. Él siempre fue aceitunero –que esto sí se le daba bastante bien–. Pues en aquel Divino Crucifijo –hecho por él– veías a Dios Vivo. Había unas mujeres que venían caminando del pueblo más inmediato para rezar al Cristo de cerca, con sus brazos puestos en cruz. Estaban contentas y esto lo hacían con mucha frecuencia. Yo me paré y me avergoncé. Sus caras estaban contentas y llenas de Luz. También les pregunté:

   –¿Y vienen de tan lejos como el manijero me ha dicho?

   –¡Ay!, eso no es lejos para lo que nos llevamos de aquí. Yo, hay veces que llamo a mi marido porque se aparece este Cristo en la pared de mi cocina cuando estoy encendiendo la lumbre, y muchas mañanas lo ve; otras, no. ¿A que ya no es lejos el venir?

Al día siguiente vi a un hombre enfermo en una casa, que más era vivienda de cerdos que de personas humanas. Oí lamentos, me paré, y había un hombre de buena posición lavando a este hombre, que de no ser por Dios, repugnancia daba. Quedé un poco parado queriendo ayudar, pero sin saber el manejo que este hombre, con tanto Amor, le daba.

   –¡Pase! –me dijo– Hace unos días pasé en el caballo y a sus fuertes gritos me paré; le auxilié en lo que quiso y me fui a contarlo a mi casa; desde ese día no se encuentra solo: viene un hermano mío o el cuadrero. He querido llevarlo al hospital, pero me ha llorado tanto que quiere morir donde sus padres… Le he traído médico, y dice que el remedio no está en el hospital; es caso sin solución, y su mejor medicamento es Amor del hombre que nada pide porque nada necesita, y yo me he encargado de ello.

Desperté, oí:

Con Amor a Dios, nada tendrá trabajo.

Con Amor a Dios, descanso te dará el quitar sufrir a otro.

No es trabajo, cuando amas, ni sufrir, cuando Dios llama.

Pues si sufres a Dios sirviendo, a Dios no Lo estás sintiendo.

En este hombre vi, que el Amor le podía al trabajo, por estar presente Dios.

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Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C4 

miércoles, 16 de julio de 2025

Dios habla en el hombre para la salvación del mismo hombre

En Sueño Profético decían:

Ella, mayoría de veces actúa sin su mando. Ella es mandada desde Aquí. Ella, hay veces que sin saber se retira, y hay veces que se hace ver con más frecuencia. Todo esto es obra de Dios. Dios actúa sin preguntarle al hombre. Dios actúa para que el hombre vea que es Dios. Todo lo que Dios hizo fue sin consultar con el hombre; el hombre lo vio cuando ya estaba hecho.

Yo, uno de sus Discípulos, 
nunca de Él me retiré.
Pero yo nada sabía
antes que lo hiciera Él.

Había veces que, 
estando ocurriendo el hecho,
no sabía lo que iba a suceder.

Para mí, siempre era sorpresa  
todo lo que hacía Él,
no porque no tuviera Poder
para destruir y hacer.

Digo que era sorpresa,
porque aunque mucho hablábamos,
nunca decía Palabras
que el Padre le hubiera dado
para realizar prodigios
en la ciudad o en el campo.

Siempre hacía cosa nueva,
esto, pero sin trabajo.

¡Cómo dio vista al ciego
y levantó al paralítico
y resucitó a la moza
que tanto habían llorado!

Todo esto Él lo hacía 
y ocurría a cada paso.
Pero ninguno sabíamos 
lo que íbamos a hacer, 
ni cuándo.

Él era Dios, 
y al hacerse Hombre,
ya por el Padre era mandado;
era mandado desde la Gloria
por el mismo que a la Tierra fue enviado.

Desperté, oí:

No te extrañe que Dios haga
lo que tú no puedas saber.

Si Dios habla en ese hombre,
para que tú Lo veas a Él,
no te enfades cuando diga:
“esto me lo ha dicho Él”.

Al que Dios le habla,
búscalo, recíbelo, síguelo,
pero no lo obligues.
Él hará que lo encuentres.
   
Recíbelo, 
para que Él te reciba en su Gloria.
Y síguelo, 
para que Él te eche delante.

Pero no lo obligues,
que Él te responde.

Dios habla en el hombre
para la salvación del mismo hombre.
Dios no habla en el hombre
para que tú te retires más de Dios.

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Libro 7 - Investigaciones a la Verdad - Tomo I - C9 

martes, 15 de julio de 2025

El espíritu siempre está vivo

En Sueño Profético decían:

De la Gloria de Dios no puede nadie saber nada como no haya estado Aquí. Los conocimientos que tiene el hombre de Aquí es por lo que hay escrito. Es de buen sentido poner más atención al que te cuenta lo que le está pasando, que leer lo que a éste le pasó. Al oír lo que le está pasando, tienes pregunta y respuesta. Leer lo que pasó es aceptar, pero sin pregunta, y por consiguiente, sin respuesta. Dios lo trae Aquí, a su Gloria, cuando el espíritu está unido a la materia, para que cuando vuelva a la materia, lleve ya Enseñanza directa del Padre, y el hombre viva con materia y espíritu, seguro de que la materia morirá, pero el espíritu continuará sin muerte y sin desaparecer. El espíritu siempre está vivo, con Dios o sin Dios. El “con Dios” está en su Gloria, y el “sin Dios” está donde él quiso, lugar que Dios permite.

Desperté, oí:

Luzbel no tiene sitio. Ese sitio está permitido por Dios.

Usando Dios el Dios, Luzbel no tendría sitio, pero Dios ya no sería Dios.

Oye al que Dios le arroba su espíritu, para que te enseñe a ti.

Si el suicida no muere, no tienen que hacerle la autopsia, porque él mismo te dirá de qué muere.

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Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C5 

sábado, 12 de julio de 2025

El pescador

En Sueño Profético hablaban de las mil formas que tiene el espíritu de Dios para comunicarse al hombre, y de lo poco que el hombre conocía estas Comunicaciones de Dios.

Apareció el mar y dijo uno:

De esta abundancia de agua salió la Voz de Dios hablando a un amigo mío que pescando estaba. Este amigo era familia para mis padres, ya que era de mis años y padre no tenía. Vivía con los abuelos por parte del padre, y éstos vivían de la pesca. Un día llegó a mi casa contento, llorando e impresionado porque vio a Dios Hijo, y cuando desapareció le hablaba su padre. A Dios, dice que lo vio en el mar, que venía hacia él como si anduviera por un camino, y la voz del padre se oía como si saliera de su mismo cuerpo. Ya nos dijo, que cuando se ponía delante del mar, se santiguaba y hacía una reverencia, ya que para él, aquella abundancia de agua era Dios. Al llegar al agua, reverenciaba y pedía el jornal preciso para su casa; y cuando hacía la pesca, siempre había más ganancia que en su casa necesitaban, y con estas palabras se despedía: “Gracias obediencia de Dios, que Dios manda que me des el sustento. Si Dios no manda, tú, mar, estarías parado y estarías muerto. Gracias a Dios por todo el que me ayude,  que esté rogando en su Reino”. Cuando oyó al padre, dice que tenía el mismo eco que cuando vivía con él. Justas dice que oyó estas palabras varias veces repetidas: “Siempre tendrás esta estampa aunque ya no la vuelvas a ver. Tú sigue siempre orando por lo que no es del hombre, y allí verás a Dios”.

Desperté, oí:

Esta aparición del mar,
bien pocos se la creyeron.

Si el mar es Mando de Dios,
¿por qué no ver a Dios de Hombre?

¡Si en esta familia  eran santos
las mujeres y los hombres!

14 años tenía cuando 
se quedó sin padre,
pero no tenía ni dos
cuando le falto la madre.

Nunca hubo maldición, 
ni mal mirar a este Cielo.

Él se quedó con su hijo,
sus padres y su recuerdo,
de aquella santa mujer
que rogaba desde el Cielo.

Para que nunca pecaran
los que a ella conocieron.

***

Libro 6 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C5 

miércoles, 9 de julio de 2025

Mirada al Cielo

En Sueño Profético decían:

Si miras al Cielo, oirás dentro de ti lo mal que el hombre recibe la Palabra de Dios. Si miras al Cielo, todo lo verás vano y la mayoría de las cosas que hiciste te traerán remordimiento. Si miras al Cielo, pidiéndole a Dios ayuda, ya verás y notarás que pesa menos el peso que te agachaba antes de mirar al Cielo. Pero el hombre mira más cuando mira para ofenderlo, cuando pregunta: “¿por qué tengo que tener yo este sufrimiento de espíritu o de dinero?”. Y este porqué los va retirando del Cielo, de la oración y de no poder comprender “el por qué me pasa a mí”; “el por qué, sin yo ofenderlo, tengo yo tan mal vivir”. Y ya te vienen recuerdos de gentes que viven bien y nunca miraron al Cielo para dar gracias a Dios por su vivir.

Éstos no son deseados por el que enseña a sufrir con Amor, a que le quiten altura a lo que el espíritu del mal quiere que suba para que ofendan a Dios, echando mirada al Cielo con los porqués del que sufre.

Desperté, oí:

¡Qué falta hace que el hombre aprenda que cuando llegue el sufrir el recibir él lo sepa!

Que a veces lo hace grande, según el recibir que tenga.

La llaga será mayor si el bálsamo se lo niegas.

Si el bálsamo es de Dios, piensa que cura la llaga.

Porque a Dios no se resiste sufrimiento que Él no manda.

Que es el pecado del hombre.

La enfermedad de la carne es distinto recibir.

Que también puede llevarte al pecado si la enseñanza es del hombre y no es de Aquí.

Al hombre le hace falta aprender a recibir el sufrir, como el portero, que sabe antes de decir que pasen lo que ya van a pedir.

Al sufrir que es diabólico, si no lo sabes recibir, irás dándole altura para que más grande lo vean y más demonios acudan.

Aprende a destrozar a los demonios que te acudan, que esto es derrotar a Satanás.

***

Libro 83 - Te Habla El Profeta - Tomo XI - C5 

lunes, 7 de julio de 2025

El Infierno Dios lo tiene por el mundo pecador

En Sueño Profético decían:

Si el mundo no tuviera pecados, Dios no dejaría el Infierno. Si el mundo hace pecados es porque a Dios no ama, y Dios le deja su sitio, que el mundo de pecado lo cuida, teniéndolo siempre lleno y agrandando el Infierno.

El pecado, por mucho que el hombre quiera disfrazarlo, es pecado. El pecado, pecado para Dios, es el mismo pecado, sin diferencia de pecador. Éste que hizo grave pecado, es el mismo pecador para Dios.

El hombre tiene el pecar en varias escalas, pero Dios, en una sola: pecador que peca a sabiendas, no ama a Dios y vive a las órdenes de Luzbel.

El desnudismo es fuerza de los espíritus que en contra de Dios van. Éste, es pecado de escándalo, que llena de ira al que pecar no quiere; pecado que hace que peque el que pecar no pudiera. Este pecado te puede llevar a que hagas muchos pecados. Hay quien emplea el desnudismo diciendo que no es pecado, y hasta se atreve a llamar a Dios cuando el mal se le presenta. Éste se aumenta el pecado por vivir el desnudismo y querer que Dios venga a su lado.

Yo vi a una a doncella que vivió en grito y llanto. Practicaba el desnudismo, y cuando algo le ocurría, a Dios invocaba y cruzaba hasta las manos. Se le pasaba el sufrir y volvía a su vida de pecado. Pues ya llegó la muerte, y fue un horror presenciarlo. Se daba puñetazos porque decía que veía al demonio a su lado. El suelo de su vivienda quedó con caras de endemoniados, que medio pueblo allí fue, y se quitaron pecados.

Desperté, oí:

Esta mujer, sus pecados, 
nunca los quiso quitar.

Llamaba a Dios del Cielo,
y entonces pecaba más.

El demonio la tenía
como joyero que tiene
gran joya en su mercancía.

Pero Dios con su Poder
hace que la mercancía
le haga servicio a Él.

Todo el pueblo que la vio,
se quitó de hacer pecados,
y en Infierno quedó.

El Infierno Dios lo tiene
por el mundo pecador.
Si ese mundo no pecara,
Infierno no tendría Dios.           

Porque el dueño del Infierno
es el permitirlo Dios.

El día que el hombre quiera,
Dios le da la destrucción.

***

Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados  en Gloria - Tomo I - C8 

domingo, 6 de julio de 2025

Si sientes a Dios

En Sueño Profético decían:

Sufrimientos del Elegido son alegrías para el que a Dios no ama.

Que si no viviera sufrimientos, no justificaría y no serviría de ejemplo para el que no tiene sufrimientos y sufrimientos les llama.

La confianza en Dios anula todas las trabas. Que esta confianza es la que quiere Dios que el que ama Le tenga.

Dijo uno:

Tiene que ser satisfacción para unos, y remordimiento para otros. El que pudo hacer y no hizo, ya le pasó el tiempo. Éste, aunque no quiera, tiene momentos de atormentarse. El que todo lo puso, éste sufre contento y nunca se ve apartado, porque a Dios sigue sirviendo en acción o en deseo. Nunca piensa: “yo hice el tiempo pasar para no servir al Cielo”.

Este pensar no le llega al que cumplió sin esfuerzos. Que este cumplir se hace cuando a Dios llevas dentro.

Desperté, oí:

Si sientes a Dios,
sin palabras lo vas publicando.

Si sientes a Dios,
no vives si no hay Mando.

Si sientes a Dios,
eres sediento en la montaña,
que subes y bajas el cerro
pensando sólo en el agua.

Este sentir no se cansa
y no dice: “yo no sigo 
donde Dios deje Palabras”.

El que se olvida del Mando,
no sabe lo que es sentir
esta alegría que hace
tan sólo el pensar Aquí.

Este Mando da descanso al trabajo
que cansancio te dio ahí.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C6 

sábado, 5 de julio de 2025

Se conocen por los hechos

En Sueño Profético decían:

Se enseña más a amar a Dios con tu ejemplo que con tus palabras. Si tu ejemplo hace que hablen de Dios, ya vas enseñando a que Lo busquen. Si tus palabras hablan de Dios y tu ejemplo llevas en contra, no Lo buscan, y al que se iba a acercar, lo retiran. 

Dijo Jesús en una de sus Enseñanzas:

El que diga que Me sigue y que Me ama, si no vive como Yo enseño, que no pronuncie mi Nombre, porque mi Padre, desde el Cielo, lo aparta. No puede decir que es mío el que ensucie mi Enseñanza, ni el que no siga mi Obediencia. Esta es la Enseñanza que descubrirá cuando otro quiera decir “yo soy Dios”, sin ser el Dios verdadero. El Amor da el ejemplo. Si no hay Amor, pesa hacer el bien. Si no hay Amor, no pueden seguir mis Pasos. Las palabras salen después de los hechos”.

Dicen que fue la mejor Enseñanza lo último, que fue el silencio.

Desperté, oí:

Son hechos y no palabras
lo que quería el Maestro.

Así podían decir:
“se conocen por los hechos”.

Luego, cuando más vinieran,
diciendo: “soy Dios del Cielo”,
se descubriría la mentira,
porque faltaban los hechos.

Él quería que aprendieran 
a nombrar a Dios del Cielo
con la medida tan justa,
que Amor sellará los hechos.

Si hablan de Amor de Dios
sin cumplir el Evangelio,
son fariseos que van
haciendo mal a este Cielo.

El que ama, hace el bien
en camino de silencio,
y Dios repica campanas,
y ya Lo van conociendo.

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Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C8 

viernes, 4 de julio de 2025

El que cree en Mí te busca a ti

En Sueño Profético decían:

El que quiere a Dios busca donde le hablen de Dios.

Dijo uno:

Ya lo dijo Dios, en Arrobo, al principio de esta Enseñanza:

    – El que cree en Mí te busca a ti. El que creyó en mi Padre me buscó a Mí.

Esto, si el hombre lo piensa, no admite contradicción: Buscar agua es tener sed y entonces no te importa lo que andes hasta el agua beber, pero si no la buscas o ves correr el agua en la fuente sin querer agua beber no digas que tienes sed.

Hay quien nombra a Dios del Cielo en su angustia o sufrir y se va buscando consuelo donde a Dios no lo nombran, ni en lo malo ni en lo bueno, donde tienen a este Dios como algo que recuerdan porque alguien les habló de su bajada a la Tierra, y celebran esa noche como otra noche cualquiera. Esto no es amar a Dios.

El Amor busca las Palabras donde Dios manda Amor, que tú sientes alimento de espíritu y razón, y notas cómo te guían hacia el Camino de Dios.

Dijo el mismo:

No puedes tener herida y despreciar bálsamo.

Desperté, oí:

Al creer en la Gloria te notas fuerzas y tu memoria te deja sitio vacío para que puedas perder la Gloria.

Al creer en la Gloria no dices muerto, dices “se ha ido con Dios al Cielo y tal vez esté rogando por los que Aquí nos ve vivos por si Allí ya estamos muertos”.

Al creer y amar buscas consuelo en lo que manda ahí el Cielo.

Que lo manda sin cobrarlo hasta que entierren tu cuerpo.

Si tienes algún sufrir busca las Palabras del Cielo y otro verá tu sufrir, y tú vivirás contento al oír este decir.

Un decir que lleva bálsamo y te achica tu sufrir.

Pero si en la Gloria no piensas te olvidas de este decir.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

miércoles, 2 de julio de 2025

Receta de Dios

En Sueño Profético hablaban hombres con el Mando de Dios, que ahí vivieron con la medicina y hoy están en la Gloria al servicio de Dios, que también cuando vivieron con materia practicaron sus Palabras, y las curaciones nunca creyeron que fueran hechas por ellos.

Dijo uno:

Yo nunca hice una receta sin llamar a Dios en mi mente, porque el mismo medicamento, en la misma enfermedad, respondía distinto. ¡Yo, qué sabía si Dios quería detener la materia o llevársela ya! ¡Yo, qué sabía si Dios quería que sirviera de ejemplo –que ya  era Dios premiarlo– o estaba de Él apartado, y allí estaba la materia, médico a médico esperando! Yo sabía de medicina por libros que había estudiado, que otros hombres hicieron; que si estaban iluminados, sirven sus medicamentos hasta que Dios los despida de que hagan efecto en un cuerpo que ya tiene llamada Arriba. Por eso, con Dios, sí sirve la medicina. Pero ¿qué es medicina sin Dios? Yo a muchos les decía: “Primero, haz oración, y después, cumple mi mando, que es receta que te doy”. Si el hombre, al que Dios Aquí trae, se entregara como se entrega a la medicina, ninguno perdería la Gloria, a ninguno se le pondría enfermo su espíritu, y el que enfermara, sería curación segura si vivía la receta del Elegido. Pero, ¿cuántos preguntan, qué debo hacer, al Elegido? Y ya les daría el mismo medicamento, hubiera nacido donde hubiese nacido, por haber tan sólo un Médico que su Nombre sea Dios y también su Apellido.

Desperté, oí:

No hay hombre que no se cure
con la receta de Dios.

Esta receta es un sí 
al sí que te diga Dios.

Pero no digas un sí
cuando Dios te diga no.

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Libro 14 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo II - C6 

martes, 1 de julio de 2025

Su presencia siempre te hace que en algo pienses

En Sueño Profético hablaban de mí. Decían:

Su presencia incansable te hace recordar el bien que puedes hacer o el mal que estás haciendo, te hace pensar en Dios o te da remordimiento al pensar: “Qué mal lo hice yo”. Te pone siempre delante el desafío al Amor de Dios, ves fácil lo que es difícil. Cuando escasea el Amor su presencia no la quiere aquel que no ama a Dios, aquel que quiere que crean que no es Instrumento de Dios.

Dijo uno:

Esto es una fuerza sucia que queda muy por el suelo y Dios con sus Obras manda pisarla. ¡Cuánto tienen que sufrir los que se sientan culpables de haber puesto en el camino vallas y muros para que el Comunicante no pase! Quedará la lengua sin palabras y los ojos sin ver, pero Dios dejará que los oídos oigan para mayor tormento. Todo aquel que la conoció y no le hizo reverencia se puso él solo castigo mientras el cuerpo le haga sombra.

Desperté, oí:

Su presencia siempre te hace que en algo pienses.

Te da alegría verla cuando tú seas de Dios o cuando digas:

    – Dios mío, quiero oír tu Perdón.

A los demonios los aleja como Jesús los alejó, porque el Instrumento lleva Palabras y fuerza de Dios.

Su presencia no da risa, pero sí deja en ridículo al que habló mal de ella.

Ya tiene gran penitencia el que quiso decir: “Esto no es de Dios”.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

jueves, 26 de junio de 2025

El Lugar es Templo vivo

En Sueño Profético decían:

¿Cómo le extrañará al hombre el Mando del Elegido? Que si pensaran en el Mando, verían que el Mando no es suyo.

Este Mando Dios lo manda a un espíritu suyo, y con Amor y fuerza de Dios hace el Mando el Elegido.

Dijo uno:

Si el hombre pensara en lo que es un Lugar que Dios elige para enseñar, lo que debería extrañarle es que no hiciera este Mando.

Ya se ha pasado el tiempo de que se pueda comprobar que estas Palabras Dios las pone en el Lugar.

El que tenga a Dios por Dios, sin haber otro Dios que pueda mandar, no puede mover un pie sin contar con el Lugar. Y cuando oiga respuesta, dirá: “Gracias, Señor, que así, de Ti yo jamás me puedo apartar”.

Desperté, oí:

Es sufrimiento grande
el tener Mando de Dios
y que tengas que callarte.

Que el callarte
es por no oír palabras
que son ofensas a Dios.

El que se crea del Cielo,
si no obedece al Lugar,
vive su mundo embustero.

Ha pasado ya su tiempo
de querer ocultar
y engañar al Instrumento.

El Cielo no admite mirada
del que engaña al Instrumento,
o del que reserva acción
para guardarle secreto.

El Lugar es Templo vivo,
que comunica a los cuerpos,
para que no pierdan el espíritu.

Que el Templo es la Palabra
que Dios, Aquí, 
le da al Espíritu.

Lo que Aquí llevas de Mando,
y en el papel queda escrito,
que ya salga de tu boca,
diciendo: “Dios me lo ha dicho”.

Así verán que este Mando
es del Cielo y no es tuyo.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C7 

miércoles, 25 de junio de 2025

Señor, sin Ti no quiero nada

En Sueño Profético hablaban de estos Mensajes. Decían:

Hay muchos Mensajes que dicen palabras que al decirlas te sirven como un gran rezo, y ya a Dios le pides porque Él espera al que Lo busca. Y en las palabras dices el Amor que por Él sientes, que Aquí se dictan:

    – Señor, sin Ti no quiero nada. Tú eres el Dueño de mi vida, de mi Fe y de mi esperanza.

Piensa que si Dios no fuera Dios detrás del hombre no iba y no hacía de pastor, buscando ovejas perdidas.

La vida del cuerpo sirve para pregonar lo que enseña el espíritu. Que si es espíritu de Dios va pregonando:

    – La Gloria no la pierdo yo, porque quiero a Dios Padre, a Dios Hijo y a Dios Espíritu Santo.

Esto que se va a decir es, también, un Amor que silencio no puede tener en la Gloria, porque los espíritus de Dios esto pregonan: Si el hombre creyera en el Poder de Dios no podía haber guerras, ni muertos de hambre.

Estas palabras son para la Madre de Dios Virgen:

   “A ti primer Sagrario de Dios
y Reina de todas las madres,
ruega por los pecadores
que quieren dejar de pecar 
y no pueden 
porque los espíritus del mal 
le hacen más pecar”.

Ya, cuando te llegue un mal pensar que de Dios te retire y te haga pensar palabras que le den sufrir a Dios, di estas palabras y ya tus fuerzas a todo le pueden. Éstas son las últimas palabras para que las digas cuando te llegue un pensar que te retire de Dios.

Desperté, oí:

Aquí se dicen las palabras que en el Sueño no han querido nombrar:

   “Vete tentador Demonio, 
que aquí quedas fracasado. 
Me pase lo que me pase, 
a Dios lo busco y lo amo. 

Si mis fuerzas te persiguen, 
vete donde no hagas daño”.

Diciendo estas palabras, con Amor de Dios, pisas el pecado.

El pedir del Elegido es que todos sientan el Poder de Dios, que Dios quiere que esta Verdad se cunda por toda la Tierra.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

martes, 24 de junio de 2025

El Amor te descubre donde Dios dice Palabras

En Sueño Profético decían:

¡Qué Verdad con más verdad 
es ver Verdad 
en el que Dios Aquí trae!

¡Qué falta de psicología 
para no ver la Verdad!

En Esto, aunque no ames, 
a Dios tienes que verlo.

Es fracaso vergonzoso 
no conocer el dueño de la fragua el hierro; 
cabrero que anda con cabras 
y no conoce el carnero; 
hombre universitario 
que no sabe escribir “pueblo”; 
arquitecto que edifica 
sin conocer los cimientos, 
ni saber lo que es arena, 
y asustarle oír cemento; 
cirujano que te opera 
el remo que estaba bueno, 
porque no supo cuál era 
cuando ya dejó durmiendo, 
confundiendo brazo izquierdo 
por el enfermo derecho; 
jardinero  y hortelano, 
hortelano, sin conocer 
la hoja de lo sembrado, 
hasta que escarbando ve 
que es patata lo enterrado, 
y al árbol ya lo conoce 
cuando peras ve colgando. 

¿Qué diría un visitante 
por un gran jardín pasando, 
si oyera al jardinero 
con cualquiera conversando: 
“No sé… si será rosal… 
o pudiera se geranio… 
¡Es tan difícil saber la flor 
hasta que no abre el tallo, 
que yo, hasta que no abra, 
no puedo asegurar si es rosa 
o puede que sean nardos!

Pues mucha más diferencia es, 
que estos Escritos no lo conozca 
el teólogo y el letrado. 

Uno, si olfatea bien, 
Gloria verá en los Dictados. 
Y el letrado que compare 
esta gran Literatura 
–ya 20 años dictando–, 
si él podría seguir 
imitando estos Mandatos.         

Desperté, oí:

Son estas comparaciones, 
justas, a la vista de cualquiera.

Esta gran Literatura 
hace que se pare el hombre.

El que diga que no es de Aquí, 
es falta de Amor al Cielo.

El literato que abra el Libro con sus manos, 
no puede decir que no.

Él tiene que contestarse, 
cerrando el Libro 
y mirando al Cielo, 
con un ¡Perdón!

Que este Perdón lo pide 
para el que dijo que no.

Los sabios de ahí de la Tierra 
tienen que creer en Dios 
cuando estos Libros tengan.

Y el que cree y ya ama, 
cuentas le pide al que dijo 
que esto Dios no lo dictaba.

¡Hace falta amar poco, 
si es de Amor lo que se habla!

Y hace falta no entender 
Literatura en Palabras.

Los Sabios de Aquí del Cielo, 
dicen que el hombre no ama.

Porque el Amor te descubre 
donde Dios dice Palabras.

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Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - Cierre de Libro 

lunes, 23 de junio de 2025

Señor, contigo puedo vivir, y sin Ti, yo ya no vivo

En Sueño Profético decían:

Cuando Dios manda con su “Ve”, el que ama a Dios ve si el “Ve” es de Dios o del hombre. El “Ve” de Dios no puedes detenerlo, y si quisiera el hombre ocultarlo, más saldría a la vista de muchos que este “Ve” no sabían que Dios lo estaba dando. 

Si estás al Mando de Dios, no puedes hacer otro mando.

El Elegido de Dios tiene gran diferencia con el elegido del hombre. Por gran talento que tenga, éste tiene sus momentos para hacer lo que él quiera. Al que Dios le dice “Ve”, ese “Ve” lleva tal fuerza, que te va abriendo puertas y dejando al descubierto al que te cerró las puertas.  

Dijo uno:

Si siguieras las actuaciones del que sigue este Mando, si no dijeras amen, a Dios estarías disgustando.

Todo le baja del Cielo, y para saber si es del Cielo, su mando deja anulado. Que esto queda de estudio para el que quiera estudiarlo.

Desperté, oí:

El arrobo de esta fecha,
este que se está dictando,
va a que el Instrumento se mueve
según Dios le manda Mando.

Y el que lo vea y lo estudie,
ve que esto no es mando de la Tierra.

La Tierra pone a la Tierra,
y después pone a Dios.

Y ya ves, si lo estudias,
que no lleva el “Ve” de Dios.    

Son pocos los Elegidos,
porque pocos dicen:
“Señor, contigo puedo vivir,
y sin Ti, yo ya no vivo”.

El que a Dios así se ofrezca,
sus actuaciones serán distintas
a las actuaciones de la Tierra.

¡Tierra que engaña al hombre,
y el hombre engaña a la Tierra!

Cielo que espera, 
busca y elige,
para mandar sus Palabras
a Ministros de la Iglesia
y a seglares.

El que más cerca de Dios esté,
más entiende este Lenguaje.

Él se entrega al Amor,
y se niega al que no ame.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C8 

viernes, 20 de junio de 2025

Fe, Esperanza y Caridad

En Sueño Profético hablaban de la Fe. Decían:

Sin Fe, no existe la Esperanza, y pocas veces llega la Caridad.

Sin Fe, es mejor que no nombres a Dios, ni que hables de su Gloria. Porque retiras al que pudiera sentir la Fe, al oír Palabras, con Fe, Divinas.

La Fe es algo que sientes, que tú mismo no te explicas. Pero te hace que llegues a aquello que a Dios Le pidas. Y te molesta el oír: “yo tengo las esperanzas perdidas en aquello que pedí”. Aquí se demuestra claro que, sin Fe, la Esperanza no puede existir.

Ya, la Caridad se retira de ti, y es trabajoso el vivir así.

Desperté, oí:

¡Qué palabra tan hermosa 
es la palabra Fe,
oírla, contenta, en tu boca,
y la palabra Esperanza!

Estas dos se juntan ya,
y Caridad amontonan.

Fe, Esperanza y Caridad,
es lo que al hombre del siglo
le falta que practique
para que reine la Paz.

La Fe es el primero documento
que te acredita, si dices
que a Dios amas de verdad.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C8 

jueves, 19 de junio de 2025

Tu Enseñanza sea con Amor

En Sueño Profético decían:

El Amor a Dios pone delante la Obediencia.

El Amor a Dios no consiente que tú hagas lo que quieras.

El Amor a Dios se hace ave y levanta el vuelo cuando ve que el hombre le da desprecio. Que el desprecio lo da el espíritu y ya lo publica el cuerpo. Y esto lo ve el que sigue al que Dios le da Palabras de Enseñanza.

Dijo uno:

La falta de Amor no coge consejo, y ya el Elegido lo tiene en desprecio. Si así no lo hiciera, estaría a favor del que las Palabras de Dios no obedeciera. Esto, cada día, dejará al descubierto al que no ama a Dios ni respeta al Instrumento.

Las alegrías cada día van creciendo porque el Amor a Dios es su alimento.

Hay quien busca Esto como el sediento el agua. Unos la beben ansiosos y otros la buscan para ensuciarla. A estos últimos, el agua es la que ensucia a ellos, porque el Poder de Dios es el que lo manda.

Desperté, oí:

¡Qué alegría dejan y qué alegría se llevan los que se acercan a este Caso y creen y aman a Dios!

La Obediencia sirve de Enseñanza para el que oye esta Palabras.

Tu Enseñanza sea con Amor y con desprecio.

Si el Mando lo das con fuerza, más a Dios contentas.

Decían en la Gloria, que el Amor a Dios no dejaba que tú hicieras lo que no querías.

Este Amor es de Dios, y a Dios llega todo lo que quiere Dios.

Busca el tiempo si el tiempo se esconde, y no dejes de buscar al que sus palabras más escándalo a estos Mensajes den.

Todo el tiempo que lo empleen para la publicación y que cada día la noticia sea mayor.

El que no obedezca, pasa de él, que Dios por uno te pondrá tres.

Dios rompe el silencio, porque Mando de Dios es todo Esto.

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Libro 40 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C2

domingo, 15 de junio de 2025

Caridad con enseñanza

En Sueño Profético decían:

Ella hace caridad con enseñanza. Ella tiene que hablar de cómo hace la caridad y de dónde da el salario.

La caridad, siendo cosa de Dios y buena, hay quien no la hace bien por falta de estar enseñado. Tienes que dar y que sea recibido como enviado de Dios. Hay quien hace caridad, y donde la va a entregar quisieran recibirla pero sin ver al visitante. Esto no lo quiere Dios. La caridad enseñada por Dios, es con las manos dando y los dos espíritus abrazándose: el que lleva y el que recibe. Debe humillarse el que entrega, puesto que se presenta donde está Dios.

Hacer caridad con la Escuela de Aquí, es uno de los servicios más completos que se le hacen a Dios. Al que aprenda de esta Escuela, se le tiene que notar donde su presencia esté.

Esta Enseñanza es el complemento de la enseñanza del espíritu. El que vaya al Prójimo pensando en Dios, allí ve a Dios. El que acuda al necesitado, por el hombre, es un trabajo más, trabajo que te cansa y terminas por abandonarlo. Cuando tú amas a Dios, olfateas dónde tú haces falta, y Dios te lleva por el rastro. Aquí te cansas cuando haces poco.

Desperté, oí:

No calles cuando hagas este servicio a Dios, que Dios quiere que lo publiques.

Dios quiere que lo publiques para despertarle la caridad al que nunca la ha hecho.

Y para que el que la haga, la haga por Él.

Y para que el que Lo ame, aprenda de Él.

Aprende del que te diga: “Dios me habla para que tú aprendas”.

Si lo que aprendes viene de Dios, no temas cuando Aquí vengas.

Si del que Dios Aquí trae, tú te tapas los oídos, cuando te habla de esta Gloria, no hagas uso de tu lengua para llamarlo con el lamento: “¡Dios mío, óyeme!”.

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Libro 7 - Investigaciones a la Verdad - Tomo I - C9 

sábado, 14 de junio de 2025

El granero

En Sueño Profético hablaban de ver con los ojos del espíritu o con los ojos de la carne. Decían:

Lo que ves con los ojos del espíritu, siempre tendrá el mismo color. Lo que ves con los ojos de la carne, puede que cambie el color o que ese color no fuera.

Dijo uno:

Yo conocí y viví cerca de uno que me contó que estuvo ciego de espíritu hasta los 35 años, pero los ojos de su mujer le quitaron la ceguera. Éste me contaba que en Dios no creía y que su mujer no hacía nada sin nombrar a Dios, y en todos sus actos decía:”Señor, que sea lo mejor para tu Gloria, que yo te puedo pedir lo que veo, pero puede que no sea lo mejor para mi espíritu. Señor, que yo vea lo que Tú quieras que vea; haz que mi marido vea tu Luz”. 

Decía, que un día, cuando entró en el granero, vio en un rincón un montón de trigo, y que cada grano tenía una luz tan grande como la que da una cerilla. Fue ver aquel movimiento de luz viva subiendo y bajando, como luz que da materia, y ponerse de rodillas a la vez que oyó: “Esta Visión la ves con los ojos del espíritu; llama al que buena vista tenga, y si no ve la luz, es porque tiene enfermos los ojos del espíritu, y por sanos que tenga los de la carne, no distinguirá los matices de esta Gloria”. Cuando pudo ponerse de pie, dice que salió, y metió en el granero a tantos como cabían. Había quien al entrar veía grupos de luces y señalaba el sitio; en cambio, otros decían: “¡Yo no veo nada! ¡Esto es negocio que quiere hacer del granero!”. 

Desperté, oí:

Allí vio la Luz Divina
el que su espíritu tenía Visión.

Entraron, y de varias formas
decían: “Yo creo en Dios”.

Pero el que más creía
fue el que más Luz veía.

Pues los ojos de la cara
muchas veces ven sin nada.

Sin nada de lo que ves,
que no puedes comprender.

En cambio, Dios se hace ver
por el que en Él no ha creído,
pero están en ruego por él.                     

Esta mujer sufría mucho
cuando de Dios discutían.

Él veía nada más:
ahora es noche, ahora es día.

Ahora escampa, ahora llueve.

Tengo sueño, tengo hambre,
¿quién ve a Dios?,
¿para qué se quiere?

Él vio luz como cerillas
en cada grano de trigo.

Luego pudo comprobar,
porque quedaron paredes
y puertas todas “ahumás”.

El granero se quedó
sólo para hablar de Dios.

En ermita convirtieron
lo que siempre fue granero.

Casi siempre alguien veía
del grano luz de cerilla.

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Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C5 

martes, 10 de junio de 2025

La Eternidad está en la Gloria

En Sueño Profético decían:

Para que no te falte el sentir en Dios tiene que ser porque tu Amor a Dios sea más grande, y al ser más grande ya tienes, en todos los momentos, el sentir para todo lo que haces. Que, a veces, tu pensar se cambia, pero para hacer el bien. Que este bien el Amor de Dios te lo manda.

Dijo un espíritu de la Gloria:

Si tu vida la vives con Amor de Dios ya, aquí, no digas muerte, porque el espíritu se va donde lo de la Tierra no sirve. El cuerpo Dios lo tiene para que dure hasta que sienta la llamada de Dios, para que entre en la Gloria o donde él tenía intimidad, porque la vida que hizo su cuerpo fue buscando el sitio de los espíritus de Satanás. El que ahí tenga su vivienda nunca sintió el Amor de Dios, porque su cuerpo iba pregonando el pecado y ya el Amor lo dejaba, y al dejarlo ya nada es malo.

Los que aman a Dios si cumplen lo que Dios tiene dicho, que son los Mandamientos, su cuerpo dura más tiempo, aunque el cuerpo muera joven. Pero su Eternidad está en la Gloria.

Estos Mensajes deberían estar en todos los sitios donde digan:

    – Yo quiero aprender de Dios, de la otra Vida, que es de la que no enseñan los hombres porque no siguen las Palabras de Dios, ni con la presencia de los cuerpos, ni respetando las Palabras que Dios dijo.

Desperté, oí:

Todo el Mensaje era hablando del pecado que el hombre hace.

El oír estas palabras al bueno le hace sufrir.

Pero piensa en este Elegido, y ya cambias el sufrir en alegrías.

Los que están aquí unidos están haciendo a Dios su servicio, que si no lo sintieran no lo harían con alegría, porque el mal pensar le pondrían para que se retiraran.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

sábado, 7 de junio de 2025

Debería ser el Lugar respetado

En Sueño Profético decían:

El que crea en esta Gloria, le da la Vida la publicación de la Palabra de Dios ahí.

De los que creen en esta Gloria, a unos les da alegría, y a otros pena o miedo el conocer el Lugar y no obedecer el mando que da.

Dijo uno:

Ya, viendo el sitio que el Elegido tiene en lo material, debería éste ser respetado y querer su amistad, y no atreverse a pensar que haga nada mal. Esto en lo material. Ahora piensa, Dios traer su espíritu a la Gloria y darle Palabras para que el hombre las oiga y las viva dando gracias a Dios por esta Enseñanza Divina.

Cuando vean estos Mensajes en el periódico (aunque algunos no quisieran verlos), al cogerlos en las manos, tienen que reconocer que como este Lugar no hay otro que pueda decir que a él le pasa igual, que Dios le hable día a día pudiéndolo justificar.

Para dar el Nihil Obstat también tuvieron que estudiar si era Palabra de Dios, para poder publicar el sí que la Iglesia da.

Desperté, oí:

Este arrobo ha querido decir que debería ser el Lugar respetado, aunque sólo fuera por los reconocimientos que tiene de la Tierra.

Y adorado, por ser Mensajero de Dios.

Son muchos los justificantes que tiene este Elegido para que lo busquen, ya que tiene méritos reconocidos.

Ni los que están lejos ni los que están cerca tienen disculpa.

Era para que al ver su presencia, hicieran reverencia, por el lugar que ocupa Aquí y por sus obras ahí en la Tierra.

Si conocen la obra, saben que es Dios el que actúa en su persona.

Si no hay obras, el Mando no es de la Gloria.

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Libro 40 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C2 

jueves, 5 de junio de 2025

Amor de Dios

En Sueño Profético hablaban del Amor que tu espíritu siente y tu cuerpo no puede tenerlo sin decirlo, por ser Amor de Dios. Decían:

El Amor de Dios te aparta de todo lo que no es de Dios. Este Amor tiene Fuerza para enfrentarse a todo lo que se le presente, diciendo siempre: “Yo, sin Dios, no quiero nada, quiero que no me falte su Amor en todo lo que yo le pida, para que mi cuerpo viva con alegría en el sufrir que me llega de la Tierra o en enfermedad del cuerpo, porque teniendo alegría, la enfermedad se cansa o se retira”.

Ya dijo un espíritu que cuando tuvo cuerpo los sufrimientos no le faltaron. Siempre pensaba con tristeza, porque tenía 3 hijos y sus vidas no las hacían buenas. Al padre le llegó muerte cuando el mayor tenía l5 años, y los dos más chicos, uno 13 y otro 11. La madre no tenía fuerzas para darles enseñanza de Amor de Dios, pero un d lame conoció a Teresa de Ávila y le contó lo que le pasaba.

Ya sigue Teresa diciendo estas palabras:

    – Si no pones Amor de Dios, cada día será el sufrimiento mayor, porque el Amor es el que cura los sufrimientos del espíritu, que son los que hacen al cuerpo retirarse de Dios.

Estando diciendo estas palabras, llegaron los hijos y dijeron los dos mayores:

    – Teresa, yo quisiera sentir sin enfado el Amor que vas enseñando y que mi madre nos dice. ¡Pero en el decir siempre está con enfado! ¿Dónde nos podemos ver, y mi madre que venga también?

Ya sigue Teresa:

    – Este Amor es para cogerlo y ponerlo donde más vean que tu Amor ya no puede estar en secreto. Yo, cuando llega la noche es cuando más grande el Amor siento. Mira si es grande, que cuando me acuesto, antes, siento una fuerza que me pone de rodillas y mi cuerpo queda en Éxtasis, y ya Dios arroba mi espíritu y lo lleva a su Gloria, y allí me da Palabras para que el cuerpo las diga y las vaya enseñando. Si tú quieres y tu hermano, yo os hablo del Amor de Dios. Esto es una gran alegría para tu padre, al que yo ahora estoy sintiendo como si dijera: “¡Que la madre esté con ellos, para que el sufrir lo cambie por Amor!”

Desperté, oí:

Todo el Sueño ha sido hablando del Amor de Dios que decía Teresa, que todavía el Amor lo está nombrando.

Mi Amor tenía tanta Fuerza, que mi abrazar, más grande ponía Fuerza.

Cuando los hijos oyeron el Amor que yo tenía y decía, ya dijeron ellos: “Teresa, sin oír tus palabras con mi madre, ya morir quisiera, e irme con mi padre”. Esto lo dijo el mayor.

Le Fuerza que Dios me daba en los Éxtasis, se cundió, lo mismo que el Amor que yo sentía, al que silencio no podía poner.

Ya se cundió el Amor que Dios entró en esta casa.

Era un Amor tan grande, que yo ponía mis rodillas en el suelo antes de acostarme y Dios me decía:

    – Teresa, ya tienen que nombrar tu nombre, cuando vean el cambio que tu Amor he dejado.

Yo, cuando oía estas Palabras, mi cuerpo parecía que despedía unas grandes Llamas.

Esto, yo lo sentía cuando mi Dios en Éxtasis me dejaba.

Era un Amor que el cuerpo no tiene fuerzas para decir el sentir.

¡Este Amor que tú sin él, la muerte a Dios pedías sin enfado!

TERESA DE ÁVILA

 
Estas son Enseñanzas con el nombre de “Amor de Dios”.

***

Libro 72 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo VII 

miércoles, 4 de junio de 2025

Señor, que mi cuerpo esté sano para seguir tus Pasos

En Sueño Profético decían:

Tu pensamiento, antes de dormirte, ya era hablando del Cielo. Y ésta es la contestación, en el arrobo, al pensamiento del Elegido:

Si el cuerpo se enferma, el arrobo es corto, y a veces no hay arrobo. Porque el cuerpo tiene que escribir y tiene que buscar para que el escándalo vaya creciendo, y tienes que estar dispuesta para las llamadas que vayan haciendo.

Si el cuerpo está enfermo, ¿cómo va a hacer lo que el espíritu le mande? Pero esto es corto.

Desperté, oí:

No temas en estas paradas por estar el cuerpo enfermo.

Pronto llegarán alegrías.

El Elegido sufre cuando está enfermo, porque tiene que abandonar la obra que está haciendo.

Que su pedir en estos momentos es: “Señor, que mi cuerpo esté sano para seguir tus Pasos”.

Decían en la Gloria, que cuando el cuerpo está enfermo, no puede durar mucho el arrobo.
  
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Libro 45 - Te Habla El Profeta - Tomo VI - C4 

martes, 3 de junio de 2025

No sabe más de Dios el que más sabe, sino el que más ama

En Sueño Profético decían:

“No sabe más de Dios el que más sabe, sino el que más ama”.

Estas Palabras fueron dichas por Dios Hombre en un Sermón, donde todos oyeron estas mismas Palabras:

No sabe más de mi Padre el que más saber tenga de Tierra, sino el que más ama. Puede que el rudo enseñe de mis Palabras al que sabio se crea en la Tierra. El que se cree que sabe y se retira de mi Enseñanza, ya ve el que ama, que no sabe. No hay saber sin conocer lo que dice en Mí mi Padre”.

Y señalando a uno de sus Discípulos, de los que el hombre tenía como gañanes, dijo:

Uno de vosotros puede enseñar al hombre que más sabe, pero que no conoce el vivir de mi Gloria”.

Y terminó el Sermón con estas Palabras:

El saber de la carne queda enterrado en tierra, el del espíritu es Sabiduría para enseñar a los sabios de la Tierra”.

Desperté, oí:

Es atrevido creerse que sabes, 
cuando tu saber sea corto.

Cuanto tú pienses y digas: 
de allí del Cielo, 
en verdad, todo lo ignoro.

Yo sé que Allí hay un Dios, 
lo sé porque lo dijeron.

Lo dijeron hombres buenos, 
que yo les pondría de apellido: 
“buenos, pero analfabetos”.

Esto es lo que piensa el hombre 
que se siente saber vano.

Éste es saber sin Dios, 
aunque a Dios quiera engañarlo.

Aquel día fue el Sermón 
dedicado a hombres sabios.

Y Dios quiso que a los rudos, 
los fuera el hombre buscando.

Y ya el sabio de la Tierra, 
que sea sabio, pero amando.

Si no pone lo primero, 
lo último Aquí dictado, 
que no pregone el saber, 
que ya está tierra esperando.

Del Saber de Aquí del Cielo, 
nadie te quita este Mando 
de Enseñanza de su Reino.

Por mucho que ahí te den, 
creyendo que tú más sabes, 
otro tuvo ese saber, 
y después habrá millares.

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Libro 10 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo I - C8 

lunes, 2 de junio de 2025

Dios hace las cosas

En Sueño Profético decían:

Dios hace las cosas a manera de Dios.
Dios hace las cosas que tú no ves.
Dios hace las cosas que tú estás viendo sin poderlas comprender.
Dios no hace nada mal hecho.
Dios todo lo hace bien.
Dios no puede tener un fallo, porque todo viene de Él.
Dios hay veces que confunde a aquél de mucho saber. En cambio, no se confunde aquel que pregunta de dónde viene, y si le dicen de Dios, un amén dará en respuesta del mucho Amor, que este Amor ya le dio la Confianza de Dios.

Dice uno:

Yo voy a contar un caso que a mi mismo me pasó estando yo con mi rebaño:

Me faltó un cordero un día y una noche; lo estuve buscando sin poderlo encontrar. Al día siguiente, me llevó el cordero un hombre muy sordo que pedía limosna y así vivía. Pues a pesar de la sordera tan tremenda que tenía, estaba enfermo para trabajar. Dice, que al pasar por el río, algo le hizo volver la cara, y que vio al borrego balando, y ya con poca vida. Miró al Cielo pidiendo remedio y pronto lo tuvo. Bajó de sus espaldas el macuto, que bien dicho era su vivienda, y a una cuerda que tenía le amarró una piedra; la echó al río con tan buena suerte, que enganchó las patas de la cordera; tiró y la sacó, secándola con su manta.

Desperté, oí:

Cuando el pastor quedó enterado de dónde estaba, trabajo le costó creerlo.

Una vez que por allí habían pasado varios con buen oído.

Este hombre estaba queriendo hacer un bien por el pastor, ya que muchos días el pastor partía su comida esperando al pordiosero.

Dios deja pasar al que oye, sin oír la balada, y hace que el sordo sienta la angustia del cordero.

¿Quién puede comprender esto, ni juzgarlo a favor del sordo?

Sin duda que Dios lo hizo porque los anteriores se llevarían el cordero y el sordo se lo entregaría a su dueño.

Es difícil comprender, 
si no nos explican esto.

¿Cómo se comprendería, 
pasar por allí hombres sanos, 
queriendo robar corderos 
y viviendo uno sin amo?

¿Cómo se comprendería, 
si no es Dios el que está mediando?

Las cosas de Dios se entienden 
poniendo todo en sus manos.

El sordo oye balada, 
por tener espíritu sano.

El pastor lloró al cordero, 
y Dios lo mandó al rebaño.

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Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C4 

domingo, 1 de junio de 2025

El Poder que Dios le da

En Sueño Profético hablaban espíritus que, cuando tenían cuerpo, conocían a este Elegido y este Elegido les cortó el sufrir estando a su lado y hablando de las Palabras que Dios en su Gloria le dice, que están en 72 Libros publicadas. Decían:

El que trate con este Elegido, si tiene enfermedad de cuerpo, se puede curar por el Poder que Dios le da. Esto es Milagro y es igual para el cuerpo enfermo y para los sufrimientos que la vida te da por no tener ni lo justo para vivir.

Esto son alegrías que primero las disfruta el Elegido porque está al servicio de Dios y Dios le manda. Que si ponen la confianza en el Elegido es porque creen en el Mundo que no cree el que no cumple los Mandamientos, que a éste le falta creer y amar.

El que aprenda del que Dios le da Mando para que enseñe de su Gloria no puede dejar de tener contacto con lo que Dios dice en su Gloria, para que no pierda la Vida Eterna.

Desperté, oí:

Cada día que pasa más alegrías Dios al Elegido le manda.

Se las manda porque sabe que su vida está entregada al Prójimo, que es donde Dios está.

Y es que el Amor de Dios tiene una fuerza que deja callado al que en Dios no crea.

El sueño, como siempre, tardaba y el pensar del Elegido decía:

    – Señor, yo no me enfado. Yo lo que quiero es tener fuerzas en mi cuerpo para cundir tus Palabras.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII 

viernes, 30 de mayo de 2025

Dios viene a mi lado

En Sueño Profético decían:

No hay quien vea a Dios sin haber pasado grandes sufrimientos.

Dijo uno:

Si el sufrimiento lo coges y lo escondes, ya estás a Dios defendiendo, y en este defender ya ves a Dios contigo. Y es que, si no has pasado sufrir, no te acuerdas del que está peor que tú. Y en este acordarte, ves a la Virgen cómo abrazó el sufrir que su Hijo permitió que el hombre Le hiciera. Sufrir, que no hay madre que mayor sufrir pasara ni pase. Esto no fue muerte, fue destrozar Su Carne.

Yo, cuando oía hablar de sufrimiento, nombraba a esta Madre Virgen, cómo aceptó y abrazó la Carne rota de Su Hijo. Por dejar Dios Su permitir al hombre, Ella fue elegida como Primer Sagrario de Dios. Si no pasa este sufrir, no puede enseñar en su pedir.

El que Dios elige tiene que enseñar a recibir sufrir. Que esta Enseñanza es acercarse y querer más a Dios con esta petición: “Señor, que yo sirva para achicar sufrir; que mis palabras sean tuyas, y serán medicamento, y ya el sufrir se achica y a Ti te buscan”.

Desperté, oí:
  
Cierto que amando mucho a Dios, enseñas a llevar sufrir y a decir: “otros hay mayores”.

Yo no me retiro de Ti, porque no sería vida no acercarme en mi sufrir.

Y puedo ir enseñando que para que te hable Dios tienes que sufrir haber pasado.

Sin pasar este camino, tu consejo es de enemigo de Dios.

Sufre mirando al Cielo y más a Dios queriendo.

Y en este pedir sin palabras, Dios el sufrir te lo aparta.

Sufrimiento aceptado en silencio y guardado, piensa: “Dios viene a mi lado.

Y me quitará sufrir cuando yo haya enseñado”.

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Libro 40 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C5 

jueves, 29 de mayo de 2025

Aquí puede ver Verdad todo el que quiera verla

En Sueño Profético hablaban de estas Palabras dichas por Dios en su Gloria. Hablaban de Elegidos que estaban en la Historia por todos reconocidos.

Ya se oye a uno con el Mando de Dios:

No tengas temor de hablar lo que Dios te está comunicando, ya pasados los 35 años, todos los días. Hoy nadie puede presentar estos Mensajes dichos por Dios o con su Mando. ¿Quién puede decir: “Yo he visto a Dios con Cuerpo, hablándome y dándome el Mando de que no calle, que diga cómo es su Imagen y cómo se presenta”? Que esto ya está en los Libros publicado, por ser el mismo Dios el que da su Mando. Esto, a más publicación, más obediencia a Dios demuestra el Lugar que manda con su Enseñanza.

Desperté, oí:

Todo lo que digas que has visto en la Gloria y has oído, dices poco.

Aquí puede ver Verdad todo el que quiera verla.

Dios, cuando dice con su Imagen que se publique, ya debería el hombre buscar el Lugar donde da esta Enseñanza.

Si Dios no fuera Dios, al hombre, castigo le mandaría.

No hay pecado mayor, que despreciar sus Palabras.

Que el desprecio lo da el que no cree ni ama.

Si el hombre creyera en esta Vida, Perdón llorando a Dios pediría.

Y Dios, al oír su llanto, Perdón daría.

Ya lleva premio el que busque estas Palabras y haga servicio al Cielo.

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Libro 45 - Te Habla El Profeta - Tomo VI - C2

miércoles, 28 de mayo de 2025

Ama y haz que amen

En Sueño Profético decían:

Ella siempre actuó queriendo no ofender a Dios ni disgustarlo pidiéndole cuentas del sufrir que en ella hubiera. Ella vivió, en ella, la Presencia de Dios. Vivía para lo que Dios mandara por su preparación, que en ella se hacía amando a Dios. Ocultaba el sufrir para que el que no amara no culpara a Dios de lo que Dios con Amor respondía. Que esto si no practicas su Amor no lo comprendes.

Dijo uno:

Para entender algunos sufrimientos tienes que ser amigo íntimo de Dios. Que si Él te deja que tú seas amigo es por el grande Amor que al hombre le tiene, y ya si tú Lo amas vive en ti.

Dios vive en el hombre en tres actuaciones: Entre el hombre, en el hombre y apartado del hombre. Entre el hombre porque Él lo ama, en el hombre cuando su comportamiento es justo a la medida de Dios y apartado del hombre cuando el hombre no cumple lo que Él manda, porque antes de hacer Dios de Dios se aparta del hombre. Éstas son las tres actuaciones de Dios, sencillas de aceptarlas sin quitar ni poner palabras que el hombre al leerlas quiera poner arreglo.

Desperté, oí:

¡Qué claridad te mandan en la Gloria para que aprendas si quieres!

¡Cómo te citan los sitios que Dios al hombre le pone!

Entre el hombre ves a este Dios si quieres.

Y cuando vive en el hombre, no es que Lo veas, es que Lo sientes si quieres querer, pero querer a Dios.

Ya tiene grande diferencia el que Dios de Él lo tiene apartado.

Pues no hacen falta preguntas si vives haciendo pecados o si vives vida buena diciendo: “Yo a Dios no amo”.

Antes de que tenga este pensar ya Dios lo tiene de Él apartado.

Ama y haz que amen muchos para que muera el pecado.

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Libro 69 - Dios No Quiere, Permite - Tomo VIII

sábado, 24 de mayo de 2025

Sufrir con Paz

En Sueño Profético hablaban del sufrimiento, de las muchas formas que el hombre busca para quitarlo. Decían:

El sufrir que no es buscado por el hombre, tiene el consuelo de esta Gloria. Esto es una Enseñanza que el hombre desconoce.

La persona que Dios Aquí enseña, es para que vaya enseñando a sufrir con Paz, a sufrir y enseñar con su ejemplo.

El sufrimiento que se busca el hombre, todo, es sufrimiento sin Paz, es sufrimiento del pecado, o sufrimiento buscado con desafío a Dios.

También hay sufrir de remordimiento, y el de la conciencia sucia. El sufrir del remordimiento puede llevar, este remordimiento, a pedir el Perdón a Dios. Pero el sufrir de conciencia sucia, no es inquieto al mal, es pecado que habita, y sufre por sus mismos pecados, que sus mismos espíritus malignos le atormentan, poniéndole cada vez un pecado mayor, y cada vez más contacto con Satán, sin sentir remordimiento. Éste es el peor sufrir.

Pero el sufrir del que tiene contacto Aquí en el Cielo, es sufrir pero con Paz.

Hay sufrimientos grandes que, el que no ama a Dios, los ve chicos por no comprender cómo son llevados.

Desperté, oí:

Muchos Mensajes se han dado con este tema de sufrir con Dios o sin Él.

¡Cómo te aparta el sufrir, el sucio, el que del remordimiento buscas a Dios para decir: “Señor, no quiero vivir pecando, dame el Perdón, aunque no lo merecí”!

Aunque no merezco el llanto,
que es el que me hace decir:
Señor, fuí culpa de mis pecados.        

El que su sufrir lo lleve,
y en Dios esté confiado,
llevará un sufrir con Paz,
sintiendo a Dios a su lado.

La Paz te ayuda a decir:
Esto tiene Dios mandado.

Siempre será lo mejor,
aunque yo lo crea cambiado.

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Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C5

miércoles, 21 de mayo de 2025

Creer y amar

En Sueño Profético ponían comparaciones de creer en Dios, de la manera que el hombre creía y practicaba las Palabras de Dios.

Decían y repetían muchas veces:

Creer sin Amor. Y al no haber Amor, no puede haber obediencia, por ser Dios; Dios, y no un dictador.

Si el hombre creyera en Dios nada más que como cree en el médico, antes de sentir el dolor, ya rezaría el Padre Nuestro. Por si le llegaba el dolor, no tener que decir palabras de arrepentimiento, y sentir dentro de él: “yo no tuve a Dios contento, y Le debo decir que me acepte el rezar el Padre Nuestro”.

Si el hombre creyera, amando, no pasaría por el sitio que Dios estuviera hablando, y poder dormir tranquilo, y el Padre Nuestro rezarlo.

Desperté, oí:

El hombre engaña al hombre, pero no engaña a Dios.

Creer y amar, no pueden tener estas dos palabras separación.

Para amar, tuvo antes que creer; y el amar, ya le pudo al creer.

Al creer sin amar, pídele a Dios que te quite el creer.

Si el hombre creyera en Dios, le daría miedo el rezar el Padre Nuestro, que no hay alabanza mayor.

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Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C8

martes, 20 de mayo de 2025

Los ángeles

En Sueño Profético hablaban de lo poco que el hombre nombra a Dios y a su Gloria. Y es que el hombre no cree en esta Eterna Vida donde Dios está en Presencia Divina.

Dijo uno:

El hombre no cree en esta Gloria porque de niño no lo enseñan a que Dios está en el Cielo y también está en la Tierra.

Aquí voy a decir unas frases que mi mujer a los hijos les decía y hacía que las aprendieran. Tres teníamos, y los tres, antes de decir padre o madre, aprendieron a decir “Dios”.

Éstas eran sus palabras:

“Enseña al niño a que a Dios
hay que quererlo primero,
porque Dios quiere a los niños
aunque no sean niños buenos.

Pero si no son buenos,
Dios sufre porque los ángeles
ya no bajan a jugar con ellos”.

Cuando los levantaba, mientras a uno vestía y a otro le daba la ropa, les decía: “Que en el día de hoy más habléis de Dios y miréis al Cielo con esta oración:

Señor,
quiero ser hombre
y quiero ser niño,
quiero quererte más,
pero dime cómo lo digo.

Quiero mirar al Cielo
y ver los angelitos.

Hoy, Señor, voy a ser bueno
y así estoy contigo”.

Desperté, oí:

A los chiquillos entretenía hablándoles del Cielo y a la vez les daba algún juguete nuevo.

Cuando lo tenían en las manos miraban al Cielo y esto les oías:

“Niño Jesús,
Te quiero mucho.
Te voy a querer más
para que los niños
te quieran y te canten
antes de la calle pisar.

Te canten esta canción:

Los niños, los corderitos
y los pajaritos
no le hacen daño a Dios.

Los niños son angelitos.
Los pajaritos, con su trino,
alegran la Gloria.
Y al cordero,
cuando Dios baja a las manos
del que Lo representa,
lo nombran”.

Si eres madre como Dios tiene mandado, enseña a tus hijos a que a Dios tienen que adorarlo.

¡Es pena que la cultura haya quitado esta asignatura!

Cuando debería ser, cuanto más cultura, más de Dios aprender.

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Libro 40 - Dios Manda En Su Gloria que Enseñen - Tomo VI - C4

lunes, 19 de mayo de 2025

Sin Amor grande, no puedes ser Elegido

En Sueño Profético decían:

Sin Amor grande, no puedes ser Elegido. Sin Amor grande de Dios, tu vida no se destaca cuando llega la alegría y cuando llega el sufrimiento grande. Aquí es cuando el Amor de Dios te hace que pienses, diciendo: “Yo guardo el sufrimiento, y Llama más grande se hace mi Amor”.

Dijo un espíritu de la Gloria:

Estas palabras que se han dictado, yo las aprendí de Teresa de Ávila, cuando a las horas que salía del convento yo la esperaba, y mi vida tanto cambió, que el que me conocía me preguntaba que quién, las palabras que decía, me enseñaba.

Ya sigue hablando Teresa:

    – Yo, no podía estar en el convento noche y día, sin salir a le calle. Yo no podía tener las Palabras en silencio, las que mi Dios en el Éxtasis me decía, con una Fuerza y un Amor tan grande, que ponerme de rodillas lo hacía deprisa, pero al ponerme de pie, mis rodillas quedaban pegadas al suelo hasta que mi Dios me decía:
    
    – Teresa, ponte ya de pie, que el Éxtasis y el Arrobo, mi Padre los ha ya despedido. Esto lo puedes contar en el convento, y al que ponga dudas, ya verás el cambio que en el sufrir tendrá.

    – Yo, cuando oía estas Palabras, no sabía qué hacer, pero mi Dios sí sabía mi pensar. Una noche, yo a Dios le pedí que me mandare la muerte, porque no podía aguantar el desprecio que en el convento a mis palabras les daban, sabiendo que no eran mías, porque cuando el Éxtasis se quitaba, mi cara, mi cuerpo y mis palabras, daban grande Luz del Cielo, porque diciendo yo lo que Dios me decía, la oscuridad de la celda, en Luz Divina con rayos quedaba, hasta que contaba lo que mi Dios me había dicho, con un sentir de Amor tan grande, que mi pensar, a Dios le quería pedir perdón, pero antes de pedirlo, mi Dios me decía:
    
    – Teresa, dices poco para el sentir que tu espíritu le da a tu cuerpo cuando oyes mis Palabras, que son dichas por mi Padre en Mí.

    – Yo quisiera que este Amor, todos lo sintieran. Yo quisiera que en el convento, todas quedaran en Éxtasis. Esto, para comprenderlo, tienes que sentir el Amor que Teresa de Ávila sentía.

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Libro 72 - Dios Comunica y Da Nombres - Tomo VII

domingo, 18 de mayo de 2025

En sitio que nada queda

En Sueño Profético hablaban de la fuerza de la Tierra. Decían:

¡Cuánto tira la Tierra!
¡A cuántos aparta de Dios,
sin que el hombre se dé cuenta,
con los cuatro garabatos
que el hombre llama materia !

El hombre se amarga y sufre
con las cosas de la Tierra,
que va siguiendo de esclavo
como el que arrastra una pena.

El hombre sufre y se amarga
con las cosas de la Tierra,
que antes otro le dijo:
¡Vive más la Vida Eterna!
y no le des tanto tiempo
a aquello que no se cuenta   
en el Sitio que está Dios,
que no existe la materia.

Esto, casi siempre lo dice
uno que mucho lo piensa:
¡Lo corta que es la vida,
cuando vives con materia!

Desde que el mundo empezó,
siempre fueron las mismas reglas:
Primero, amar a Dios,
y luego, ya, a la materia.

El hombre lo hace al revés,
el mundo te lo demuestra:
vivir, vivir en angustia
por seguir a la materia;
no estar nunca contento,
y no caer en la cuenta
de que la materia se queda
donde vive la materia,
que la palabra sería:
en sitio que nada queda.

Desperté, oí:

¡Qué bien dicha la palabra:
“En sitio que nada queda”!

Puede que el hombre al leer,
abandone a la materia,
por pensar y releer:
“En sitio que nada queda”.

El espíritu de Dios
te enseña a vivir tranquilo,
sin vivir preocupación.

El hombre vive liado,
sin ocuparse de Dios,
por falta de haber oído
al que le habló siempre Dios.

Los trabajos de la Tierra,
siempre te apartan de Dios.

Los trabajos que tú emprendes
“pa” retirarte de Dios.

Ama, sin dar preferencia.
Piensa, en la palabra bien dicha:
“En sitio que nada queda”.

Pues leyendo esto una vez.
te olvidas de la materia.

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Libro 2 - Meditaciones y Palabras Directas con El Padre Eterno - Tomo II - C7

sábado, 17 de mayo de 2025

Yo veo la Gloria de Dios

En Sueño Profético hablaban de mí. Decían:  

El que quiera ridiculizarla, mal lo pasará. A ella le llega a la inteligencia la Sabiduría, y la inteligencia le manda a las palabras. El hombre dice palabras, la mayoría de las veces, sin que pasen por la inteligencia. Al que Dios manda con su Palabra, la Palabra obedece a la inteligencia, y esta inteligencia acapara y se llena del Saber que Dios le manda. Luego va soltando, según la cabida de cada espíritu. Hay espíritus dulces que por falta de Enseñanza no son para enseñar de esta Gloria. Hay espíritus valientes, capaces de enfrentarse a los “sin razón”, pero no dando Enseñanza. Ella coloca el sombrero, justo en la cabeza que sombrero le falta. En esto ya ves a Dios sin que te digan palabras. La podrían examinar de preguntas y Palabras de los Escritos que Aquí dictamos, y ya verían una inteligencia no privilegiada, le verían lo que le vieron a aquellos que con el Salvador andaban: que por sus palabras y acciones los confundían con el Maestro. El que Dios trae Aquí, tiene que pisar el Camino que Dios le traza. Unas veces lo puede explicar el Comunicante. Y otras veces actúa normal, sin explicación, porque su inteligencia no manda palabras.

Desperté, oí:

Dios elige, prepara y premia
al que aprender quiera.

La inteligencia del hombre
tiene grande diferencia.

El hombre, para saber,
precisa que otro hombre lo enseñe.

El que Dios enseña,
es para enseñar al hombre.
       
Y esta Enseñanza ya deja
un sí y un no de quimera.

De quimera, para el que quisiera
que este Dios mudo estuviera.

Para el hombre vanidoso,
que mucho habla de Dios
y tampoco acepta que digan:
“Yo veo la Gloria de Dios”.

Siempre las quimeras son
del que desprecia y olvida
las Palabras de este Dios.

Pero el que viene, se lleva
Sabiduría de Dios.

Siempre que hagan preguntas,
verán reacción de Dios.

Aquí no es que aparece,
aquí es que oyes su Voz.

***

Libro 7 - Investigaciones a la Verdad - Tomo I - C9

viernes, 16 de mayo de 2025

Donde no hay Amor, no pidas, que no te entenderán

En Sueño Profético decían:

Hay más que desafían a la muerte, que evitan que ésta llegue.

Hay más que esperan los años para ser buenos, que sin muchos años sean buenos.

Dijo uno:

El trabajo del que no ama es pedirle que sea bueno.

Ciertas eran las palabras que mucho le oí a mi padre:

Donde no hay Amor, no pidas, porque no te entenderán.

Antes de pedir, enseña a que amen, y ya darán sin esfuerzo.

El Amor de Dios te hace ver las cosas como son, y tú ya vas cogiendo lo que a Dios agrada.

Hay quien es modelo a los 80 años, cuando ya nadie mira el modelo. Y hay quien a los 20, todo lo desprecia porque modelo se siente.

Otro dijo:

Este de los 20 se arropa con el Amor de Dios, con la Verdad de esta Vida Eterna. Este de 20, cuando llegue a los 80, no le extrañará nada, porque ya vivió con 20 una vida frenada, que no la frenaba él, que era el Amor el que frenaba.

Siempre que se oye al viejo, siempre son estas palabras: “Si otra vez yo viviera la vida, no haría cosas malas, no viviría aprisa. ¡Hoy todo me pesa en el alma! Vosotros, los zagalones, aprended de los 80, que los 20 pronto pasan. Y ya como final consejo, con su pañuelo arrugado, se va enjugando sus ojos, recordando lo pasado. Luego hará una pausa en la esquina, donde se quedará parado contemplando a unos niños, pero éstos sin pecado. Otra vez quedará triste por no haber a Dios amado.

Desperté, oí:

¡Qué ciertas son las Palabras
que dictan en esta Gloria!:
“Donde no hay Amor,
no pidas, que no te entenderán”.

¡Que ejemplo tan medido,
que siempre vuelve a pasar!

El joven vive corriendo,
para poder más pecar,
y el viejo sufre y espera
lo que no quiso pensar.

La muerte él la creía
para otro, no para él.

Y los 80 veía
lejos, tan lejos de él,
que nunca pensó en vejez
ni en llegar invalidez.

El de los 20 que ama,
cuando llega la vejez,
nunca sentirá deseo
de volver a la niñez.

A éste puedes pedirle,
porque sabe comprender.

Porque ya luce el modelo
sin que tenga la vejez.

Éstos son los que Dios manda
para enseñar a querer.

Para que no diga el hombre:
“Es bueno por la vejez”.

***

Libro 8 - Dios No Quiere, Permite - Tomo I - C7

jueves, 15 de mayo de 2025

Dios quiere

En Sueño Profético decían:

Pronto llegará el día que busquen a ella recordándole amistad que hace tiempo tuvieron, queriendo tener preferencia a amistades después de ésta. Aquí recordarán estas Palabras dichas por Dios Hijo:

Los últimos serán los primeros, por querer ser los primeros, los últimos”.   

Dijo uno:

Yo, Discípulo del Maestro, antes de que yo Lo conociera había muchos que sabían que era el Hijo del Hombre. Conocían a su familia y habían tenido con Él trato, pero no querían aceptarlo como Dios Hombre. Tuvieron que venir otros después, que Lo amaban, para a ellos hacerles que también amaran. Dios siempre actúa como Dios, y el hombre no reforma, no reforma en aceptar cuando Dios Padre manda a Dios Hijo a que viva en el hombre para librarlo de la condenación. Si Dios no hablara en el hombre, sería olvidado Dios. Dios trae espíritus a su Gloria para que la Libertad que deja sea más grandiosa.

Desperté, oí:

Dios trae al espíritu del hombre Aquí, para que el hombre sepa de esta Gloria.

Dios quiere que el espíritu sin materia viva esta Gloria.

Dios quiere que cuando el espíritu vuelva a la materia, pueda comparar vida espiritual con vida material.

Dios quiere que el hombre sea el que elija.

Dios quiere que el hombre Lo ame, aprenda de esta Gloria y enseñe.

Dios quiere que no se pierda ningún espíritu.

Dios quiere que no se pierda, porque el hombre no quiera perderse.

Uno de los Doce quiso perderse, y Dios se lo permitió.

Dios dejó que Judas no Lo amara.

Esto es Dios, y lo que hizo Judas es el hombre, el hombre cuando no ama.

***

Libro 13 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo II - C7

miércoles, 14 de mayo de 2025

La Misericordia de Dios

En Sueño Profético hablaban del Poder de Dios, de su Grandeza y del gran Amor que Dios le tiene al hombre. Unos marinos hablaban con unos que habían sido grandes pecadores, y los dos, tanto marinos como pecadores, te exponían casos que a ellos mismos les ocurrieron. Los marinos contaban hechos de ver a Dios en grandes tempestades. Y los pecadores decían que el Amor superaba a las grandes tempestades obedeciéndole a Dios. Esto que Aquí cuento y también dicto, fue en vida con materia. Estos hombres contaban la Misericordia de Dios en las tempestades y en el que mucho había pecado. Decían estos marinos:

“Hicimos una travesía de bastantes semanas, y en esta misma travesía vimos dos veces las olas coger el barco como hebra de hilo que le das soplo. Veías el mar levantarse, y tu vista ya no lo veía; tendido veías el mar llegar al cielo. Allí cada uno pedía con ganas para no ser ahogado por las olas. Pedían algunos la muerte antes de que la bravura del agua se la diera.

Ya dijo una mujer que de rodillas no dejaba de decir: “Señor, háblale a las olas, háblale a los mares y háblale a los hombres”:

“No pedid la muerte, que esa petición es falta de saber el Poder de Dios”.

Se puso esta mujer de pie, y quedó el agua como cuadro pintado, sin ningún movimiento. Esta mujer dice que vio una Mano que con el mar se enfrentaba, y varios aseguraban la misma Visión.

Ya dijeron los que mucho habían pecado:

“Pues más grande que su Fuerza es el Amor que le tiene al hombre”.

Dijo uno:

Yo estuve llorando días por creerme ya sin remedio de una perpetua condenación, y me habló un día Dios de este Cielo:

Que tus lágrimas te sirvan para enseñar mi Evangelio. Al pecador que le hables, también lo entro en mi Reino”.

Desperté, oí:

El que vivió y vivió
a Dios en la tempestad,
no pudo ver Poder más grande.

Pero el que mucho pecó,
defendía el Perdón
antes que las tempestades.

Decía que era mayor
el Amor, que parar mares.

Decía que a un pecador
no debía amarlo nadie.

¡Y que este Dios perdone
por quererte dar la Gloria…!

Es más grande en el Perdón.

Que cuando tú pecas, Él llora,
y cuando dices ¡Dios mío!,
Él tus pecados te borra.

Es mejor la tempestad
y la altura de las olas,
que no que hagas pecados
sabiendo que este Dios llora.

***

Libro 14 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo II - C7

martes, 13 de mayo de 2025

El alfarero

En Sueño Profético hablaban del que mucho habla de Dios y no Lo ama.

Decían:

Entonces es cuando tú ves que no Lo ama, ya te fijas en su actuación, que no es la que Dios manda. El que ama a Dios, más se sabe por la gente que por el mismo que ama.


Yo conocí a un alfarero que estaba ganando un jornal, y trabajaba más horas para ir luego a entregar al pobre que no tenía dinero para comprar el pan. Esto lo venía haciendo años y años atrás, porque decía: “Yo no puedo acostarme sin llevar algo a los hijos de los enfermos que se acuestan sin cenar, porque el padre sufre menos comiendo los hijos ya”.

Pues este mismo entró un día a un mesón a llevar unos cacharros que el dueño lo mandó entregar. Había allí uno que de Dios hablaba y tenía a unos cuantos oyéndole su romance. Estos que lo oían, continuaban fríos. Cuando vieron al alfarero, todos dijeron: “Éste es el que yo te refiero que ya tiempo lo veo por el camino del hambre (este era un terreno que vivían los que no tenían jornal ni vivienda y ellos se hacían su choza, le pusieron ese nombre porque aquel camino te llevaba a aquellas familias hambrientas) siempre iba con cestas llenas, y los chiquillos salían a su encuentro, y los gritos resonaban: “¡Ya viene el alfarero!”. Éste sin hablar con nadie, sabes lo que está haciendo; no hay quien repita el caso, si no está ya Aquí en el Cielo.

Desperté, oí:

Cuando a Dios ya Lo amas,
de ti la gente dirá
lo mismo que del alfarero,
aunque te quedes “callá”.

No creas que amar a Dios
es que de Dios te oigan hablar.

El Amor tú lo demuestras
yéndote a consolar
a aquel que con tus palabras
puede que viva con  Paz.

Y que tus oídos oigan:
¡Qué Dios te lo pague ya!,
que es el único que paga
aquí y en la Eternidad.

¡Qué alegría si todos hicieran
lo mismo que el alfarero
antes de que se durmieran!
 
Ya después habla de Dios,
que Dios quiere que se sepa.

***

Libro 6 - Dios Manda en Su Gloria que Enseñen - Tomo I - C4

lunes, 12 de mayo de 2025

Manantial de Palabras

En Sueño Profético repetían las palabras que yo, antes de dormirme, decía: “Señor, si me pongo mala, mi sufrir es mayor, de ver que no puedo escandalizar estas Palabras. Y me pongo contenta cuando en mi camino Tú me das fuerzas”.

Dijeron estas palabras y siguieron éstas:

Si el hombre creyera y a Dios amara, más por el Elegido miraba. Pero el trato que le da el hombre es de abandono, por no creer que Dios sabe el trato que cada uno le dé. Por eso hay que buscar quien pueda Esto escandalizar.

Dijo uno:

El cuerpo es normal que se canse y que se enferme. Pero el Poder de Dios es Medicamento que se ve que no es normal cómo actúa el cuerpo. Empezando por la noche, con las pocas horas de sueño. Y es que cuando piensas en este Grandeza, no sabes dónde ir; piensas en castigo a Dios pedir para el que puede quitar este sufrir. Que esta petición es justa, porque ya 36 años, día a día, no hay quien aguante este sufrir. Sufrir que te cansa el cuerpo, y ya no puedes seguir, porque el cuerpo es normal que se canse y que se enferme.

Aquí pueden ver que Dios, estando el Elegido ahí, le da fuerzas, como cuando al espíritu lo manda de su Gloria a la Tierra.

Desperté, oí:

Tienen de sobra documentos del Cielo y de la Tierra para que la vida del Elegido la valoraran y miraran más por ella.

Esto es manantial de Palabras, para que el que no crea, vea que Dios en su Gloria las manda.

Si Esto ya estuviera a escala internacional, te achicaban sufrir, y el cuerpo no estaría como está.

Por mucho que quieras retirar sufrimientos, tu cuerpo es normal, como todos los cuerpos.

Pero la Fuerza de Dios te tapa el dolor y los sufrimientos.

***

Libro 45 - Te Habla El Profeta - Tomo VI - C3