En Sueño Profético decían:
No quiere dormirse y no puede
vivir sin Sueño. Sueño que Aquí la trae, y el cuerpo queda ahí muerto. Sueño,
que nadie puede saber lo que trae el Sueño. Sueño que es Vida que Aquí te
enseña para que aprendan los cuerpos. Sueño que te hace imagen de lo cerca y de
lo lejos. Sueño que lleva Paz y Vida a otros cuerpos. Que esta Paz y esta Vida
la percibe el que cree en lo Eterno, el que sabe que esa vida te tiene por poco
tiempo.
Al que tiene este pensar, le
sirven estos Mensajes de Alimento para el espíritu, y de Paz para la carne, que
tiene nombre de cuerpo.
Al cuerpo le llega Sueño, y su
nombre es Profético, porque Dios hace arrobo, que nadie puede esto hacerlo.
Desperté, oí:
De no ser Aquí dictado,
descompondrías este Sueño.
Es Sueño, con un Poder que baja
de donde creen que están muertos.
Por eso, su nombre es
Sueño Profético.
Que este nombre
ya le viene del arrobo.
Arrobo que nadie puede hacerlo:
sacar la vida de un cuerpo,
invisible para el hombre,
aunque estuviera en este momento.
Arrobo que supera
todas las actuaciones
que bajan del Cielo.
Por mandar luego el Dictado
tal y como ocurrió en el momento
de estar espíritu solo.
Arrobo, que luego,
las Palabras que lleva al cuerpo
tienen que escandalizar
y jamás guardar silencio.
***
Libro 21 - Te Habla El Profeta - Tomo III - C6
No hay comentarios:
Publicar un comentario