En
Sueño Profético decían:
Si las
alegrías son con Amor de Dios, retiras los sufrimientos y ya agrandas el Amor.
Sigue
el Mensaje un espíritu de la Gloria, diciendo las Palabras que Dios le da para
que sean llevadas al Elegido:
El que
Aquí no vea el Poder de Dios, no siente ni entiende cómo es este Mundo, el Mundo
donde vienen los espíritus cuando entierran su cuerpo, y en el que tienen su
sitio, según lo hayan pedido en la Tierra. Que este pedir debe ser diciendo: “Señor,
soy tuyo, mándame lo que quieras, y si falta mi obediencia, yo Te pido castigo,
pero castigo que todos vean”.
Este
pedir lo acompaña el Amor. El que no cree, y el que cree y no ama, su petición
ya tiene encendidas las llamas por el mal y desprecio que dio a estas Palabras.
Éste tiene condena eterna.
Desperté,
oí:
Los
espíritus del mal quieren hacer aquí mucho daño.
Tienen
fuerza mala, porque se la dan los que quieren Esto desbaratar.
Cuando
Dios actúa, se ve lo imposible hacerse fácil.
Fue
día de alegría el día pasado.
El
sueño llegaba y se iba porque lo despedía la alegría.
Al Elegido
Dios lo trae a su Gloria para que enseñe de esta Vida, que no se acaba por ser
Eterna.
***
Libro 55 - Investigaciones a la Verdad - Tomo IX - C5
Es muyyy serio lo que este Mensaje proclama,no creer o creer sin amar, condena segura...
ResponderEliminarHabría que chequearse bien el alma, no sea que nos encontremos con una sorpresa gorda al terminar la "jornada"