En Sueño Profético decían:
A tu pensar no le hacen falta palabras,
porque es Dios el que el Mando te manda. Y no sólo le manda al Elegido, también
le manda a los que a éste están unidos, haciendo el Mando para que con este
Caso se forme gran Escándalo.
Dijo un Discípulo de Dios Hijo:
A nosotros, cuando íbamos pregonando las
Palabras que el Maestro nos decía que publicáramos, se acercaban y nos
preguntaban:
“¿Qué Palabras os dice Dios Hijo, que sin
hablar se ve la Fuerza de éstas y el creer que lleváis dentro?”.
Cuando oíamos estas palabras, les
decíamos:
Si lo que habéis dicho lo habéis hecho
con Amor y creencia, venid con nosotros, que al final de la montaña el Maestro
nos espera. Y que vengan también todos los que quieran, porque al salir del
mesón donde hoy estábamos, nos ha dicho el Maestro al despedirnos estas
Palabras:
“Yo os espero donde os he dicho. Y sé que
vuestras Palabras van a traer más a la montaña, porque hace falta que el
silencio lo rompan mis Palabras”.
Estos que se han nombrado, tanto querían
al Maestro que todo lo dejaron y ya los conocieron como Discípulos suyos.
Desperté, oí:
Se han dicho unas Palabras que el Maestro
les decía a sus Discípulos para que más se cundiera su Existencia.
Pues aquí manda Dios al Elegido que cada
día dé más Escándalo con Libros y prólogos de grandes cargos.
A este Mando, por ser de Dios, no han
podido ponerle silencio.
Dicen en la Gloria, que si se publicará
el mal que han hecho sus Representantes, público y oculto, no podrían delante
de nadie mirar al Cielo.
Que esto no está en secreto, porque el
Poder de Dios lo tiene al descubierto.
El que Dios elige y su espíritu arroba
para entrarlo en su Gloria y darle Poder y Enseñanza, sólo Dios sabe el sufrir
que éste está pasando.
¡Han cogido la Casa de Dios como
Infierno!
Esto se ve, porque en ella, sus mismos
Representantes, rompen los Mandamientos.
***
Libro 64 - Hechos de Jesús Perdidos, Hoy Dictados en Gloria - Tomo VIII - C4
No hay comentarios:
Publicar un comentario