jueves, 8 de septiembre de 2022

Alegría de Dios

En Sueño Profético decían:

¡Qué alegría es la alegría cuando es alegría de Dios! Que esta alegría se da cuanto sientes Amor de Dios. Es una alegría que en todo le buscas sitio, y a todo, sitio le quitas. Le buscas sitio en la tristeza, para que vivan la alegría. Y quitas la alegría donde alegrías quitan porque en Dios no confían.

Dijo uno: 

La alegría sin Dios yo siempre la conocía y no podía seguirla. Aunque sólo oyera risa, a mí me ponía triste. Era alegría sin Prójimo, y derrochando dinero, que era alegría de pecado, sin nombrar al hambriento. Era alegría de cara, sin sentimientos por dentro. Yo le llamaba alegría a estar siempre con Paz y que le sirviera al Prójimo. Y ya llegaba la noche recordando lo que había repartido en salario y en consejos.

Desperté, oí:

A muchos les hice pensar

lo que era la alegría.

Cuando al día siguiente

cada uno refería

cómo vivía la alegría.

Estos que aquí refiero

tenían algunas sobras de dinero.

Y me juntaba con ellos

por ver si podía cambiarlos.

Pensaba: el hierro,

siendo más duro,

lo dobla el herrero

en la fragua.

Pues yo voy a ser el martillo,

y con la ayuda de Dios

les voy a hacer que cambien

y que piensen como yo.

En el mesón que nos juntábamos

se fue cundiendo

cómo yo vivía la alegría.

Ellos seguían mi camino,

ayudando al que no tenía

para mal vivir

o a enfermos sin familia.  

Cuando éstos practicaron,

si vivieron alegría.

Siempre estaban contentos

y creían que poco hacían.

Hazte camino de fragua,

pero que Dios sea tu guía.

***

Libro 31 - Te Habla El Profeta - Tomo IV - C7

No hay comentarios:

Publicar un comentario