En Sueño Profético hablaban de los niños que son Ángeles todavía.
Dijo un espíritu de la Gloria con Mando de Dios:
Esto es para que los que traten a los niños vean que para Dios los niños son los primeros. Y que la inquietud que a veces tienen no es de ellos, y para Dios no tiene castigo, aunque sea castigo sin fuerza.
Ya se van a decir unas palabras para los mayores que los cuidan, o los acompañan. Estos tienen que nombrarles a Dios y a los Ángeles como amigos de la Gloria; y pisar la ira y la soberbia cuando se porten como niños que son. Si así esto hacen tienen premio para la educación que reciban.
Desperté, oí:
Aunque no se han nombrado a los que más quieres, el sueño lo despedía el pensar: “Señor, que donde vayan, si no es sitio de Dios, que las puertas vean cerradas.
Y que en los sitios donde los vean entrar sean sitios de grande respeto”.
Ya termina el ArroboDesprendimiento del espíritu por la Fuerza del Mando de Dios y obediencia en la carne esperando el retorno del Mando (L.76-Pag.73-74-75) nombrando a los que están aquí unidos.
Los ingresos no le faltarán al Elegido porque Dios da el ciento por uno.
Que esto no está oculto, que se ve grande cambio de vida a los que dan el uno.
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Si sintiéramos realmente la Paz de Dios, sabríamos descubrir su impronta en el niño.
ResponderEliminarEl niño es una esponja, si le enseñan a Amar a DIOS, Ama más que el mayor
ResponderEliminarPuedo dar Fe de que la vida nos cambió a mejor a muchos que conocimos y vivimos junto a Anita con entrega y amor.
ResponderEliminarY no sólo por dentro, sino también como los demás podían vernos.
Si, Anita cambio todo en nuestras vidas a mejor, y no nos bastará la vida entera para darle las gracias a Dios.
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