En Sueño Profético me hablaban de la Libertad de Dios y del Perdón. Decían:
La Justicia de Dios la toman con más importancia ahí que Aquí. El hombre, con frecuencia, dice esta frase: “¿Cómo Dios no hace justicia en esta injusticia?”, olvidando que Dios juzga Aquí.
Desperté, oí:
Dios deja tanta Libertad, que hay veces que dudan de su Poder.
La Libertad, el Amor y el Perdón, esto, Dios, a todos hace el mismo reparto.
Hay quien hace uso de mucha Libertad, y emplea poco Amor.
La mayoría quieren a Dios por su Gloria.
Y ya, los que Él elige, antes de ser elegidos, no sabían que había Gloria.
Dios arrobaArrobo: Desprendimiento del espíritu por la Fuerza del Mando de Dios y obediencia en la carne esperando el retorno del Mando (L.76-Pag.73-74-75) el espíritu que no ha pensado en su Gloria y sí Lo ha amado.
La Libertad que el hombre coge ahí, algún peso le hace Aquí.
Si Dios diera Libertad y tú justicia no vieras, tú dudabas de este Dios, por pecador que tú fueras.
Yo, Agustín de Mónica, si ahí no hubiera llorado, ya, Aquí, a mi Dios, no hubiera buscado.
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Amando, recurriremos poco al Perdón y nada a la Libertad.
ResponderEliminarLeyendo este mensaje es para ponerle al Profeta de Dios dos velas encendidas ,una a cada lado ,para que al mirar su imagen todos sepan que es Dios El que le ha hablado
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