En la sociedad que vivimos esta situación de España nos resulta, como poco, extraña, pero hay que ponerse en ese momento que estaba pasando España de hambre y pobreza, sólo pensar que repartía mantas y sacos de picón nos pone en situación de cómo estaban los pobres de ese momento en España. No sólo repartía comida, repartía calor, juguetes, pagaba alquileres, muebles,... te quedas sin palabras. ¡Ytodo esto por una sola persona que ha trabajado por el Prójimo! ¡¡ADMIRABLE!!
Cuánto bien ha repartido Ana a lo largo de su vida y qué mal pago le ha dado el hombre. Y todo por publicar lo que Dios le dijo: "Que Me ves Dilo, Publícalo" si no lo hubiera publicado, le hubieran dado premios como a tantas otras personas que han dedicado su vida a los pobres como por ejemplo Teresa de Calcuta. Ahí está la diferencia cuando es un Elegido de Dios.
Qué premio han tenido las personas que sus ojos han visto a un ser tan Santo como Ana, en la forma de hacer la Caridad ya se ve diferencia de como la hacen los demás.
Tuve el privilegio de conocer al Profeta y el periódico se queda corto al expresar la caridad con que Ana trataba al prójimo, porque aquí se nombra cómo acudía a las necesidades de los pobres, pero no se ha nombrado de la caridad al espíritu que daba, eso era lo más grande que han podido ver mis ojos, como ha dicho Chusa, por mucho que cuente siempre me quedo corto. Era digno de ver cómo compadecía al caído, cuántas veces oía insultos hacia personas que se encontraban caídas y qué fuerza tenían sus respuestas, cuánta enseñanza daba de cómo comportarse con el caído. Verdaderamente he sido un privilegiado al conocerla.
No podía ser de otra manera, cuando Dios se manifiesta como aquí Lo ha hecho en la figura de Ana, se tiene que dejar un ejemplo de entrega al prójimo al igual que lo hizo Jesús.
En la sociedad que vivimos esta situación de España nos resulta, como poco, extraña, pero hay que ponerse en ese momento que estaba pasando España de hambre y pobreza, sólo pensar que repartía mantas y sacos de picón nos pone en situación de cómo estaban los pobres de ese momento en España. No sólo repartía comida, repartía calor, juguetes, pagaba alquileres, muebles,... te quedas sin palabras. ¡Ytodo esto por una sola persona que ha trabajado por el Prójimo! ¡¡ADMIRABLE!!
ResponderEliminarEl periódico justifica lo que tanto Dios repetía: "Por sus obras veréis los que son Míos"
ResponderEliminarCuánto bien ha repartido Ana a lo largo de su vida y qué mal pago le ha dado el hombre. Y todo por publicar lo que Dios le dijo: "Que Me ves Dilo, Publícalo" si no lo hubiera publicado, le hubieran dado premios como a tantas otras personas que han dedicado su vida a los pobres como por ejemplo Teresa de Calcuta. Ahí está la diferencia cuando es un Elegido de Dios.
ResponderEliminarQué premio han tenido las personas que sus ojos han visto a un ser tan Santo como Ana, en la forma de hacer la Caridad ya se ve diferencia de como la hacen los demás.
ResponderEliminarTuve el privilegio de conocer al Profeta y el periódico se queda corto al expresar la caridad con que Ana trataba al prójimo, porque aquí se nombra cómo acudía a las necesidades de los pobres, pero no se ha nombrado de la caridad al espíritu que daba, eso era lo más grande que han podido ver mis ojos, como ha dicho Chusa, por mucho que cuente siempre me quedo corto.
ResponderEliminarEra digno de ver cómo compadecía al caído, cuántas veces oía insultos hacia personas que se encontraban caídas y qué fuerza tenían sus respuestas, cuánta enseñanza daba de cómo comportarse con el caído. Verdaderamente he sido un privilegiado al conocerla.
No podía ser de otra manera, cuando Dios se manifiesta como aquí Lo ha hecho en la figura de Ana, se tiene que dejar un ejemplo de entrega al prójimo al igual que lo hizo Jesús.
ResponderEliminar